Los espa?oles recuperan nueve a?os despu¨¦s el nivel de ingresos previo a la crisis aunque siguen en apuros
Los niveles de pobreza y desigualdad bajan pero una de cada tres familias todav¨ªa no pueden permitirse unas vacaciones o un gasto imprevisto
Los espa?oles tardaron nueve a?os en recuperar el nivel de ingresos previo a la crisis econ¨®mica. Seg¨²n la encuesta de condiciones de vida, publicada este jueves por el instituto nacional de estad¨ªstica, el ingreso medio por persona se elev¨® en 2017 a 11.412 euros, un 3,1% m¨¢s que en el a?o anterior. La cifra absoluta supera por primera vez la de 2008, el a?o en que estall¨® la crisis econ¨®mica (entonces el ingreso medio fue de 11.318 euros), y el punto de inflexi¨®n en el que los hogares comenzaron a tener graves dificultades. Precisamente, al analizar la renta media por hogar, esta todav¨ªa no ha recuperado sus niveles m¨¢ximos. En 2017 se situ¨® en 28.417 euros, cuando en 2008 superaba los 30.000. Supone un avance, eso s¨ª, respecto a los 27.558 euros de 2016. En cualquier caso, la equiparaci¨®n de ingresos con 2008 no significa recuperar el mismo poder adquisitivo, puesto que desde ese a?o hasta 2017 la inflaci¨®n hizo subir el coste de la vida un 11,4%.
Adem¨¢s, la sociedad espa?ola contin¨²a siendo m¨¢s desigual que antes de la crisis. Pese a que los indicadores mostraron un avance importante hacia mayor igualdad el a?o pasado, todav¨ªa superan los niveles de 2008. As¨ª lo refleja la encuesta en el ratio S80/S20. Este indicador compara los ingresos del 20% m¨¢s rico de la poblaci¨®n con los del 20% m¨¢s pobre. Aunque mejor¨® seis d¨¦cimas el a?o pasado (del 6,6 al 6,0) todav¨ªa es mayor que en 2008 (5,9), lo que quiere decir que la diferencia entre lo que ganan los m¨¢s ricos y los m¨¢s pobres es todav¨ªa m¨¢s grande que hace una d¨¦cada. Lo mismo sucede con el ¨ªndice de Gini, un indicador que da un valor num¨¦rico entre 0 (igualdad absoluta) y 100 (desigualdad absoluta). Seg¨²n el INE, Espa?a marc¨® en 2017 en 33,2 puntos. Es casi un punto menos que los 34,1 registrados un a?o antes, pero a¨²n est¨¢ 0,3 puntos por encima de 2008.
El Instituto Nacional de Estad¨ªstica recoge tambi¨¦n las cifras de hogares en riesgo de pobreza. La poblaci¨®n en riesgo de pobreza es un indicador relativo que tambi¨¦n expresa desigualdad. Seg¨²n explica el INE, no mide pobreza absoluta, sino cu¨¢ntas personas tienen ingresos bajos en relaci¨®n al conjunto de la poblaci¨®n. En 2018 (teniendo en cuenta los ingresos de 2017) el porcentaje de poblaci¨®n por debajo del umbral de riesgo de pobreza (la llamada tasa de riesgo de pobreza) se situ¨® en el 21,5% de la poblaci¨®n residente en Espa?a, frente al 21,6% del a?o anterior.
Las mujeres j¨®venes, las m¨¢s vulnerables
Por grupo de edad, la tasa de riesgo de pobreza se redujo 1,9 puntos para los menores de 16 a?os. Por el contrario, aument¨® 0,2 puntos para el grupo de edad de 16 a 64 a?os y 0,8 puntos para los mayores de 65 a?os. Adem¨¢s, el riesgo de pobreza es mayor para mujeres que para hombres. La tasa para ellas es del 22,2%, frente a un 20,9% para ellos. Al combinar sexo y grupo de edad, el grupo de mujeres entre 16 y 29 a?os aparece como el m¨¢s vulnerable: el riesgo de pobreza se dispara al 31,2%. Por el contrario, entre los hombres mayores de 65 a?os es solo del 14,7%.
En cifras absolutas, el umbral de riesgo de pobreza, que se calcula en el 60% de la mediana de los ingresos por unidad de consumo y por tanto crece cuando crecen los ingresos, se situ¨® el a?o pasado en 8.871 euros para los hogares unipersonales. Es decir, que por debajo de ese ingreso se considera que una persona est¨¢ en riesgo de pobreza. Para los hogares de dos adultos con dos ni?os, el umbral se establece en 18.629 euros. El c¨¢lculo tiene en cuenta el valor de la vivienda en la que se reside, cuando esta se tiene en propiedad o cedida gratuitamente, y eso hace que baje el umbral puesto que en Espa?a hay un gran porcentaje de personas con vivienda propia. Al considerar el alquiler imputado, es decir, si esos mismos hogares tuvieran que pagar una renta por la vivienda en la que residen, el umbral se eleva a 10.371 euros para hogares unipersonales y a 21.779 euros para parejas con dos hijos.
Ni vacaciones ni imprevistos
Pese a la mejora de varios indicadores, las familias en dificultades siguen siendo muchas. Seg¨²n la estad¨ªstica oficial, 10,4% de los hogares espa?oles manifest¨® llegar a fin de mes con "mucha dificultad" en 2018. Este porcentaje fue 1,1 puntos superior al registrado el a?o anterior. Por su parte, el 36% de los hogares no tuvo capacidad para afrontar gastos imprevistos, frente al 37,3% del a?o 2017. El 34,2% de los hogares no se pudo permitir ir de vacaciones fuera de casa al menos una semana al a?o. Este porcentaje fue 0,2 puntos inferior al registrado en 2017.
El 7,3% de los hogares tuvo retrasos en los pagos a la hora de abonar gastos relacionados con la vivienda principal (hipoteca o alquiler, recibos de gas, electricidad, comunidad...) en los 12 meses anteriores al de la entrevista. Este porcentaje se situ¨® un 0,1 por debajo del registrado el a?o anterior. Pese al descenso en la mayor¨ªa de indicadores, la pobreza energ¨¦tica creci¨® ya que un 9,6% de hogares no pudieron mantener la vivienda a una temperatura adecuada, frente a un 8,3% en 2017. Tambi¨¦n aumentaron quienes no pod¨ªan permitirse tener un coche (5,4%, frente a un 5,1% el a?o previo) o de un ordenador personal (5,1% frente al 4,9%). Para un 3,6% (0,1 puntos menos que en 2017) no fue posible comer carne, pollo o pescado al menos cada dos d¨ªas.
La encuesta refleja un repunte de la carencia material severa. Esta afect¨® al 5,4% de la poblaci¨®n, frente a un 5,1% en el a?o anterior. Este indicador toma en cuenta a las personas que no pueden permitirse al menos cuatro de los nueve conceptos de carencia (ir de vacaciones al menos una semana al a?o; comer carne, pollo o pescado al menos cada dos d¨ªas; mantener la vivienda con la temperatura adecuada; afrontar gastos imprevistos, se ha retrasado en los ¨²ltimos doce meses en pagos relacionado con la vivienda principal o en compras a plazos; tener un coche; tener un tel¨¦fono, tener una tele en color; o tener una lavadora).
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