El plan de ampliaci¨®n del aeropuerto de El Prat peligra por los escollos ambientales
El impacto de una zona protegida bloquea una inversi¨®n de Aena de 1.700 millones para el aeropuerto
Al aeropuerto de Barcelona le aprietan las costuras. La instalaci¨®n cerr¨® el a?o 2019, el ¨²ltimo ejercicio antes del batacazo pand¨¦mico, sumando 52,6 millones de usuarios, al borde de su capacidad estimada en unos 55 millones de viajeros. Pero los planes de Aena, participada en un 51% por el Estado, para llevar a cabo una ambiciosa ampliaci¨®n que elevar¨ªa el techo hasta los 72 millones de pasajeros han topado con un frente opositor que esgrime razones medioambientales para evitar verter m¨¢s cemento en una zona especialmente sensible del Delta del Llobregat.
Aena plantea alargar 500 metros una de las pistas del aer¨®dromo para desahogar el campo de vuelo e impulsar las cifras de operaciones y de viajeros. Lo defiende como una operaci¨®n clave para consolidar Barcelona como un hub internacional, una base de operaciones para que las aerol¨ªneas operen sus vuelos entre Europa y, b¨¢sicamente, Asia y Am¨¦rica.
Pero el plan de Aena afecta a un espacio protegido. Se trata de la laguna La Ricarda, incluida en la Red Natura 2000. Cualquier actuaci¨®n sobre este espacio protegido obliga a contar con permisos de la Uni¨®n Europea. Adem¨¢s, pese a las compensaciones ofrecidas por los promotores, este es el principal argumento de peso para frenar una intervenci¨®n que lleva aparejada una inversi¨®n de 1.700 millones de euros y la previsible creaci¨®n de m¨¢s de 80.000 puestos de trabajo directos, seg¨²n un estudio encargado por Aena a investigadores de la Universidad de Barcelona (UB). La oposici¨®n de ecologistas y la indecisi¨®n del Govern amenaza con echar al traste la operaci¨®n, que deber¨ªa contar con la luz verde antes de septiembre de este a?o. Esa es la fecha l¨ªmite para que Aena presente su plan de inversiones quinquenal al Gobierno, que aprobar¨¢ el Consejo de Ministros tras el verano.
Llu¨ªs Sala fue durante m¨¢s de una d¨¦cada jefe de operaciones del aeropuerto de Barcelona y estuvo al frente de la puesta en marcha de la terminal T1. ¡°Lo primero que hay que tener claro es qu¨¦ aeropuerto se quiere¡±, advierte. ¡°Desde hace 25 a?os se est¨¢ pidiendo un aeropuerto con el mayor n¨²mero posible de conexiones, pues hay que tener capacidad para atraer a las compa?¨ªas que pueden ofrecer ese tr¨¢fico¡±. Sala manifiesta que ¡°si el aeropuerto quiere crecer y garantizar su futuro la ampliaci¨®n de la pista es necesaria¡±. Su dictamen no esconde que hay un conflicto con la protecci¨®n del entorno natural y que debe ser resuelto: ¡°Todos estamos concienciados con el cambio clim¨¢tico. Pero, ?por qu¨¦ hay que pensar que no pueda ser compatible con mejorar la infraestructura?¡±, se pregunta. Sonia Corrochano, directora del aeropuerto, reh¨²ye que exista una disyuntiva e indica que los beneficios econ¨®micos y el impacto en el medio ambiente ¡°deben ser compatibles en la ampliaci¨®n¡±.
El presidente de Aena, Maurici Lucena, insisti¨® la semana pasada en que es ¡°vital¡± que el nuevo Ejecutivo catal¨¢n respalde la ampliaci¨®n de la infraestructura catalana. ¡°Sin el benepl¨¢cito del Govern¡±, dijo, ¡°no puede haber ampliaci¨®n, ni de facto ni de iure¡±, advirti¨®. Lucena explic¨® que los permisos medioambientales para compensar los espacios naturales protegidos a los que afectar¨ªa la ampliaci¨®n son competencia de la Generalitat.
Llu¨ªs Sala a?ade que El Prat se halla en una encrucijada. ¡°Hay unas circunstancias objetivas, en 2019 nos acercamos al techo de capacidad de pasajeros y, si no fuera por la pandemia, ya estar¨ªamos ante un problema serio porque los porcentajes de crecimiento eran importantes¡±.
El frenazo que ha supuesto el coronavirus ha alterado las previsiones, pero la duda es hasta cuando se alargar¨¢ este alto en el camino. ¡°Que ahora estemos as¨ª no quiere decir que no tengamos que pensar en el futuro, hay que tener los deberes hechos¡±. Sonia Corrochano defiende la necesidad de la intervenci¨®n porque m¨¢s pronto que tarde ¡°los niveles de tr¨¢fico se van a recuperar¡±.
Las operaciones en el aeropuerto de Barcelona se hacen contra natura. Las dos pistas empleadas para despegues y aterrizajes se usan de manera contraria al dise?o aeron¨¢utico, para reducir el impacto ac¨²stico en las zonas residenciales cercanas.
La soluci¨®n est¨¢ en Bruselas
El Prat registra ahora 78 operaciones a la hora y Aena prev¨¦ poder llegar a las 90 con la ampliaci¨®n. Fuentes del sindicato USCA de controladores a¨¦reos avisan que el plan para darle m¨¢s longitud a la pista m¨¢s cercana al mar no supondr¨¢ tener acceso a una barra libre de capacidad de vuelos. La proximidad de las viviendas fuerza a los aviones a respetar un giro sobre el agua cuando toman altura, para evitar el ruido sobre los tejados. Trabajar con una sola ruta de salida obliga a los controladores a dejar un mayor margen de seguridad entre aviones, lo que ralentiza la operativa. ¡°El papel lo soporta todo, la realidad es otra cosa¡±, manifiestan fuentes del USCA.
La postura del Govern ser¨¢ determinante para la obra
El debate lleva meses incub¨¢ndose pero en la ¨²ltima semana ha centralizado la atenci¨®n medi¨¢tica en Catalu?a y ha generado tensiones en el Parlament. El presidente catal¨¢n, Pere Aragon¨¨s, tiene que hacer equilibrios para sortear las exigencias de sus aliados independentistas de la CUP, radicalmente opuestos a la obra, y salir al paso de la demanda de m¨¢s de 200 entidades econ¨®micas y empresariales que, en un acto p¨²blico en la escuela de negocios Esade, apremiaron al Govern a posicionarse para no dejar pasar la oportunidad de progreso que representa la ampliaci¨®n del aeropuerto. ¡°No podemos dejar escapar ese avi¨®n¡±, reclam¨® Josep S¨¢nchez Llibre, presidente de la patronal Fomento del Trabajo.
Aragon¨¨s anunci¨® la creaci¨®n de ¡°una mesa de trabajo institucional¡± para encontrar una soluci¨®n de consenso. Su vicepresidente, Jordi Puigner¨®, de Junts, se reuni¨® con los empresarios tras defender que Catalu?a ¡°no se puede permitir el lujo¡± de no tener ¡°un aeropuerto preparado para la econom¨ªa del siglo XXI¡±. Otro peso pesado del partido, Elsa Artadi, concejal en Barcelona, destac¨® ayer que la formaci¨®n estaba dispuesta a dar el visto bueno al proyecto en el caso de considerar que ¡°tiene sentido¡±.
Tras a?os demandando a Aena una inversi¨®n de calado, cuando el operador aeroportuario concret¨® su plan para construir una nueva terminal sat¨¦lite y agrandar las instalaciones, el Govern pas¨® a alinearse con los colectivos ecologistas y las entidades vecinales que reprueban la intervenci¨®n. Dami¨¤ Calvet, en una de sus ¨²ltimas acciones como consejero de Territorio y Sostenibilidad, argument¨® que los planes de Aena son una tapadera para poder ampliar Barajas ¡°sin cr¨ªticas de discriminaci¨®n¡±. El Ayuntamiento de Barcelona rechaza la ampliaci¨®n. La alcaldesa Ada Colau acusa a Aena de apoyarse en un ¡°planteamiento tramposo¡± basado en un ¡°modelo antiguo¡±.
El jefe de la oposici¨®n en Catalu?a, Salvador Illa, defendi¨® la ampliaci¨®n: ¡°Un aeropuerto con m¨¢s conexiones es una clara ventaja econ¨®mica y social, no podemos dejar pasar esta oportunidad y demorar el proyecto¡±.
La directora Sonia Corrochano insiste en la necesidad de alcanzar un acuerdo a nivel local para que la Comisi¨®n Europea, ¨²ltima instancia que deber¨ªa dar la luz verde a la afectaci¨®n medioambiental, no tenga motivos para tumbar la obra. ¡°Si alcanzamos un consenso, nada hace pensar que la Comisi¨®n Europea pudiera decir que no¡±, indica. Aena ya ha advertido que sin el visto bueno para alargar la pista no habr¨¢ inversi¨®n en El Prat.
Luis Gallego, consejero delegado de IAG, el grupo de aerol¨ªneas en el que est¨¢ integrado Iberia y Vueling, entre otras, remarc¨® su apuesta por El Prat en una entrevista en EL PA?S: ¡°Queremos apostar por Barcelona independientemente del contenido pol¨ªtico, porque es un mercado muy importante de desarrollo de largo radio y porque tenemos Vueling para alimentar por un lado y competir con el low cost, por otro¡±.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.