Las empresas evaluar¨¢n a los alumnos en la nueva Formaci¨®n Profesional
La norma que prepara la ministra Cela¨¢, y que ser¨¢ presentada el martes al Consejo de Ministros, otorga m¨¢s competencias a las compa?¨ªas
La empresa ser¨¢ la piedra angular de la futura ley de Formaci¨®n Profesional que ha desarrollado el Gobierno y que pretende aprobar a finales de a?o. La norma, que la ministra de Educaci¨®n, Isabel Cela¨¢, llevar¨¢ este martes al Consejo de Ministros en primera lectura ¡ªy a partir de ah¨ª se dar¨¢ a conocer a los distintos sectores productivos y se abrir¨¢ el turno para recibir aportaciones¡ª, contar¨¢ con una inyecci¨®n de fondos de m¨¢s de 5.000 millones de euros, unos 2.000 de ellos procedentes del Fondo de Recuperaci¨®n y Resiliencia. Y concede m¨¢s competencias al entorno empresarial tanto en materia de dise?o de los cursos como en la evaluaci¨®n de los alumnos, seg¨²n el texto al que ha tenido acceso EL PA?S.
Espa?a tiene muchos trabajadores con estudios universitarios, a menudo sobrecualificados, y muchos empleos de baja cualificaci¨®n, pero flojea en perfiles con cualificaciones intermedias: las empresas tienen dificultades para cubrir uno de cada dos puestos de esas caracter¨ªsticas, algo parad¨®jico en un mercado laboral que duplica la media de paro europea. Para tratar de resolver ese cuello de botella y potenciar la relaci¨®n entre el mercado de trabajo y la empresa se potencia el sistema de Formaci¨®n Profesional Dual ¡ªuna vieja demanda de la patronal¡ª en el que la parte formativa que los alumnos recibir¨¢n desde la empresa crece sustancialmente con respecto a los baremos actuales. Podr¨¢ llegar hasta el 50%, y siempre con un contrato de trabajo de por medio.
Con este nuevo sistema se busca satisfacer la carencia de perfiles t¨¦cnicos que vienen demandando las empresas, y ofrecer una nueva dimensi¨®n a la FP con la que combatir la alta tasa de paro juvenil. El desempleo entre los menores de 25 a?os asciende al 37,7%, m¨¢s del doble que la media de la eurozona y una cifra sin comparaci¨®n en el mundo desarrollado. La nueva ley, adem¨¢s, prev¨¦ incorporar ¡°a los interlocutores sociales a la gobernanza del sistema¡±, seg¨²n el anteproyecto, con la creaci¨®n del Consejo general de la Formaci¨®n Profesional.
¡°La formaci¨®n no puede ser profesional si no est¨¢ vinculada al mundo de la empresa¡±, asegura Juan Carlos Tejeda, director del departamento de Educaci¨®n y Formaci¨®n de la Confederaci¨®n Espa?ola de Organizaciones Empresariales (CEOE). Aunque no ser¨¢ hasta el mi¨¦rcoles cuando la patronal de los empresarios conozca de manos del Ministerio de Educaci¨®n las l¨ªneas maestras del anteproyecto de ley, desde CEOE aseguran que lo que se les ha transmitido hasta el momento satisface esa demanda de una mayor vehiculaci¨®n entre los centros formativos y las empresas.
Dos figuras ser¨¢n claves en la supervisi¨®n del desarrollo de los alumnos: el tutor del centro y el tutor de la empresa. ¡°Para que la empresa tenga un car¨¢cter marcadamente formador creemos que esta figura es muy necesaria¡±, indica Guillem Salvans, Project Manager de la Fundaci¨®n Bertelsmann y responsable de la Alianza para la FP Dual. ¡°Este tutor de empresa deber¨ªa estar formado y acreditado, como sucede en otros pa¨ªses como Alemania¡±, a?ade Salvans. De hecho, para que estas figuras tambi¨¦n mantengan una vinculaci¨®n entre ellas se establecer¨¢ un mecanismo de integraci¨®n de los profesores de los centros dentro de las empresas que permita una actualizaci¨®n de los conocimientos y una mayor percepci¨®n de la realidad empresarial. El ¨®rgano encargado de la supervisi¨®n de toda esta estructura ser¨¢ el Consejo General de Formaci¨®n Profesional, aunque seg¨²n trasladan desde Educaci¨®n, ¡°la ley apunta hacia c¨®mo ajustarlo para mejorar su participaci¨®n en el dise?o del sistema¡±.
Corresponsabilidad
¡°Los agentes sociales fuera de Espa?a, como pueden ser las C¨¢maras de Comercio, sindicatos y asociaciones empresariales, tienen roles operativos dentro de la FP Dual, no est¨¢ solo en la gobernanza. En Dinamarca, por ejemplo, se acreditan las empresas que pueden formar. En Alemania, es la C¨¢mara de Comercio la gestora del programa, y quien controla y organiza el examen final. Tienen un rol muy pr¨¢ctico¡±, explican desde Educaci¨®n.
El t¨¦rmino que emplean desde el departamento que dirige la ministra Cela¨¢ para dar m¨¢s protagonismo a la empresa es el de ¡°corresponsabilidad¡±. Diseminando en funciones su significado, tiene que ver con la integraci¨®n de los interlocutores sociales tanto en la gobernanza del sistema, como en el dise?o de las necesidades estrat¨¦gicas que han de cumplir los cursos.
Pero hay m¨¢s. Espa?a presenta un alto n¨²mero de trabajadores ¡ªm¨¢s de 11 millones seg¨²n estimaciones empresariales¡ª sin ning¨²n t¨ªtulo que acredite sus competencias, y con un alto grado de experiencia desarrollando funciones concretas. Es aqu¨ª donde la nueva ley de FP introduce un nuevo factor: el reconocimiento. Un ¡°proceso de acreditaci¨®n de competencias¡± en el que tambi¨¦n intervendr¨¢n las empresas y con el que se permitir¨¢ recualificar a los trabajadores incrementando el capital humano.
Seg¨²n un estudio de Adecco, ocho de cada diez directores de recursos humanos reconoce tener problemas a la hora de reclutar talento para su compa?¨ªa. Un porcentaje que se ha disparado 30 puntos en los ¨²ltimos cinco a?os, seg¨²n la compa?¨ªa. Adem¨¢s, los puestos m¨¢s demandados (y al mismo tiempo m¨¢s dif¨ªciles de cubrir) siguen siendo los perfiles t¨¦cnicos y/o con titulaci¨®n de FP asociados al desarrollo de la industria.
La elevada cualificaci¨®n de muchos trabajadores y la imposibilidad de absorci¨®n del mercado de trabajo ¡ªcastigado por dos crisis en apenas dos d¨¦cadas¡ª ha sido otro de los condicionantes para que la bolsa de empleo espa?ola tenga forma de reloj de arena (entendiendo el punto m¨¢s estrecho como la parte correspondiente a la formaci¨®n media), y no de barril (m¨¢s achatada por la zona de los perfiles m¨¢s elevados y m¨¢s bajos), como sucede en otros pa¨ªses del entorno.
Para explicar el desarrollo del proceso formativo desde el Gobierno emplean otra met¨¢fora: la de la mu?eca rusa. Consiste en trocear el proceso de formaci¨®n y que cada trabajador entre en el momento formativo necesario.
Incentivos indirectos para fomentar la participaci¨®n
Dado el crecimiento en la presencia de las empresas en el desarrollo formador de los alumnos de la FP que pretende implementar el Gobierno, algunas voces apuntan hacia una estimulaci¨®n adicional para que la mayor parte de ellas, especialmente las pymes ¡ªque son las que conforman fundamentalmente el tejido productivo¡ª se apunten a este proceso. ¡°Nosotros somos partidarios de que se les reporten unos incentivos indirectos¡±, se?ala Guillem Salvans, de la Fundaci¨®n Bertelsmann. ¡°No apostamos por subvencionar el coste salarial de los chicos, sino que lo hacemos en favor de ayudar a estas empresas para que den un salto de calidad¡±, indica. Para ello, han propuesto la implementaci¨®n de nuevas figuras que las orienten y gu¨ªen durante todo el proceso formador. ¡°En el caso de las micropymes ¡ªaquellas que cuentan con una plantilla inferior a 10 trabajadores y cuyo volumen de negocio y balance no llega a los dos millones de euros¡ª hemos propuesto la creaci¨®n de la figura del tutor externo de micropymes. Se encargar¨ªa de gestionar la relaci¨®n con el centro formativo, dar de alta al estudiante en la Seguridad Social, rellenar los partes de desempe?o del aprendiz en la empresa... En resumen, liberarlo de todas estas tareas y dejar a la micropyme con la ¨²nica funci¨®n de formar¡±, ampl¨ªa Salvans.
Desde el gabinete de la ministra de Educaci¨®n, Isabel Cela¨¢, valoran f¨®rmulas que permitan a las peque?as y medianas empresas recurrir a estos alumnos tambi¨¦n a la hora de dar un salto en innovaci¨®n en sus procesos productivos. Que gracias al dise?o actualizado de los cursos puedan encontrar en ellos una v¨ªa para modernizarse y adaptarse a las necesidades del mercado.
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