La espiral alcista del gas amenaza con mantener cara la electricidad
La reactivaci¨®n econ¨®mica y los problemas de suministro tensionar¨¢n los precios hasta entrado 2022
Los precios del gas seguir¨¢n calentando la factura el¨¦ctrica. La escalada espectacular de su cotizaci¨®n en los ¨²ltimos meses es la principal responsable de los m¨¢ximos que est¨¢ marcando la luz en el mercado mayorista, que tras pulverizar varias veces sus r¨¦cord alcanz¨® el pasado jueves su mayor media diaria registrada hasta la fecha: 140,23 euros el megavatio hora (MWh). La mala noticia es que la presi¨®n no va a aflojar. Los mercados del gas amenazan con continuar tensionados por lo menos hasta la primavera de 2022, y junto con la espiral alcista en la que se han instalado los derechos de emisi¨®n de CO? vislumbran nuevas tormentas en lo que queda de a?o.
Parec¨ªa dif¨ªcil que en pleno verano se repitieran situaciones como la causada por la tormenta Filomena, que en enero dispar¨® los precios en el mercado mayorista de la electricidad. Pero desde entonces los vientos de borrasca se han multiplicado. Al r¨¢pido despertar de la demanda tras la pandemia, con el gigante chino a la cabeza, se ha sumado una carrera generalizada por llenar los dep¨®sitos de gas, que est¨¢n en sus niveles m¨¢s bajos en una d¨¦cada para estas fechas tras sortear un invierno muy duro sobre todo en Asia. A ello se a?aden otros factores, como la pelea internacional por la puesta en marcha del Nord Stream 2 desde Rusia ¨Del principal proveedor de gas de la UE, que a su vez no ha llenado sus reservas¨D, la reducci¨®n del suministro desde Noruega o el encarecimiento del gas natural licuado (GNL) de EE UU. Y, como tel¨®n de fondo, est¨¢n los cada vez m¨¢s ambiciosos objetivos clim¨¢ticos. Un c¨®ctel que genera tensiones inflacionistas y se est¨¢ convirtiendo en una losa cada vez m¨¢s pesada para familias, comercios e industria.
Esta tormenta perfecta ha llevado el precio medio del gas en el Mercado Ib¨¦rico (Mibgas) a situarse en los 44,21 euros por MWh en agosto, unas cinco veces m¨¢s que hace un a?o. Estas cotizaciones repercuten en los precios de la electricidad generada a trav¨¦s de las centrales de ciclo combinado, que en los ¨²ltimos d¨ªas y ante la escasa participaci¨®n de renovables han fijado varias veces el precio horario en el mercado mayorista. Para ponerlo en contexto, producir 1 MWh de electricidad con esta tecnolog¨ªa necesita 2 MWh de gas. ¡°Y eso es con un ciclo combinado de tecnolog¨ªa reciente. Si llegan a entrar los m¨¢s antiguos, menos eficientes, veremos precios punta a¨²n m¨¢s altos¡±, alerta Carlos Mart¨ªn, de la empresa de consultor¨ªa energ¨¦tica Enerjoin.
Espa?a no es un caso aislado. La electricidad est¨¢ en m¨¢ximos en las principales plazas europeas, sobre todo en los pa¨ªses con escasas interconexiones con el resto del continente: Espa?a y Portugal ¨Dque conforman el mercado ib¨¦rico¨D, junto a Italia y el Reino Unido, casi cada d¨ªa se disputan el pelda?o m¨¢s alto del podio de las grandes econom¨ªas europeas con la electricidad m¨¢s cara y reflejan las turbulencias en el sector gasista. El Title Transfer Facility (TTF), hub [centro de operaciones] de referencia del gas en Europa, estaba en 14 euros el MWh hace un a?o; este viernes roz¨® los 52 euros. Y los mercados de futuros marcan precios por encima de los 50 euros hasta el primer trimestre del 2022, cayendo hasta los 30 euros solo a partir de marzo.
¡°El Nord Stream 2 no arranca; Argelia y Marruecos han roto relaciones diplom¨¢ticas y es un problema para Espa?a, porque tiene que renovar el contrato del suministro que llega desde Argelia pasando por Marruecos; EE UU est¨¢ teniendo problemas con el GNL por las tormentas y los buques van donde les ofrecen m¨¢s¡±, enumera Mart¨ªn. ¡°Si el invierno es suave, puede que la demanda de gas se contenga. Si es duro, existe el riesgo de que no sea solo una cuesti¨®n de precios, sino que haya problemas de suministro. El almacenamiento total de gas en Espa?a est¨¢ ahora en el 72%, y en el 68% en la UE, cuando el a?o pasado por las mismas fechas estaban en el 91%, que es el nivel ideal de cara al oto?o¡±.
Objetivos clim¨¢ticos
Juan Ignacio Crespo, analista financiero, matiza que venimos de un 2020 con los precios del gas hundidos. ¡°Y no solo por la pandemia. Todas las materias primas en la ¨²ltima d¨¦cada han tenido una tendencia decreciente. Ahora la econom¨ªa est¨¢ teniendo una reacci¨®n expansiva y parece adem¨¢s que est¨¢ cambiando el ciclo: muchas materias primas ya est¨¢n en los niveles de 2011¡±, puntualiza. ¡°A ello se a?aden los problemas con Rusia, una demanda especialmente fuerte de China y los objetivos clim¨¢ticos para 2050¡å.
Europa ha decidido pisar el acelerador para que en 2030 las emisiones de carbono est¨¦n un 55% por debajo de las de 1990 y en 2050 se logre la neutralidad clim¨¢tica. La nueva Administraci¨®n de Joe Biden en EE UU tambi¨¦n ha vuelto a apostar por el clima y China, el principal emisor del mundo de gases de efecto invernadero, se ha marcado 2060 como fecha para alcanzar las emisiones cero. Pero mientras que las fuentes renovables no logren cubrir la demanda, se seguir¨¢ necesitando el gas que respalde el sistema. ¡°Produce menos emisiones que el petr¨®leo, pero nos mete en una contradicci¨®n: nadie quiere invertir en nuevos pozos cuando sabe que esta materia prima tiene una fecha de caducidad¡±, a?ade Crespo.
En este escenario se han disparado los precios de los derechos de emisi¨®n de CO? en el mercado europeo ¨Dunas especies de t¨ªtulos que dan el permiso para contaminar¨D, que ya han roto la barrera de los 60 euros, el doble que el a?o pasado, frente a la decisi¨®n de la UE de acelerar su retirada. Y la previsi¨®n es que sigan subiendo. De acuerdo con un reciente informe del Banco de Espa?a, cerca de la mitad del encarecimiento de la electricidad en Espa?a se explica por los elevados precios del gas, pero un 20% se debe al repunte de los derechos de emisi¨®n de CO?, que se traslada a los costes de generaci¨®n de energ¨ªa.
Natalia Fabra, catedr¨¢tica de econom¨ªa en la Universidad Carlos III, defiende que los precios de los derechos de emisi¨®n de CO? est¨¦n elevados para impulsar la descarbonizaci¨®n, pero reconoce que las tensiones en los mercados est¨¢n generando m¨²ltiples paradojas. Por ejemplo, que quemar carb¨®n sea m¨¢s barato, aunque m¨¢s contaminante, que emplear gas. ¡°El verdadero problema es que el coste de los derechos de emisi¨®n se incorpore a la retribuci¨®n de las tecnolog¨ªas de generaci¨®n el¨¦ctrica no emisoras¡±, apunta, ¡°y aunque no se habla de ello, las centrales de ciclo combinado tambi¨¦n est¨¢n ofertando a su coste de oportunidad. Tienen contratos de compra de gas a largo plazo a precios muy inferiores de los actuales, pero venden su electricidad como si lo compraran al precio spot [del mercado] actual, que es el que obtendr¨ªan si no quemaran el gas y lo ofertaran en el mercado de gas¡±.
Las reglas para fijar los precios de la electricidad en el mercado mayorista ¨Ddise?adas por la UE¨D prev¨¦n que todas las centrales se retribuyan al precio que marca la ¨²ltima tecnolog¨ªa que entra para cubrir la demanda, que es la m¨¢s cara. Esto genera los llamados beneficios ca¨ªdos del cielo para plantas amortizadas con bajos costes de producci¨®n, en particular la nuclear y la hidroel¨¦ctrica, que el Gobierno prev¨¦ mitigar con la aprobaci¨®n de un proyecto de ley para cuya entrada en vigor, sin embargo, habr¨¢ que esperar.
¡°Me cuesta pensar que los precios de la electricidad puedan seguir subiendo m¨¢s, pero creo que el invierno puede ser duro¡±, admite Fabra. ¡°El problema es que no nos podemos permitir un 2021 o un 2022 as¨ª. Es un tiempo hist¨®rico corto, pero un tiempo vital largu¨ªsimo¡±.
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