El bitcoin enciende las alarmas: pierde la mitad de su valor en menos de tres meses

El invierno del bitcoin est¨¢ dejando los ¨¢nimos de los inversores bajo cero. La criptomoneda empez¨® noviembre tocando unos m¨¢ximos hist¨®ricos cercanos a 70.000 d¨®lares, y termina enero con su precio a la mitad, lastrado por la mayor aversi¨®n al riesgo derivada de las pr¨®ximas subidas de tipos de inter¨¦s en Estados Unidos y, sobre todo, por los anuncios de nuevas restricciones al minado en Rusia, uno de los epicentros de esta actividad, imprescindible para mantener a flote el precio de la divisa digital.

La penosa evoluci¨®n de su cotizaci¨®n, muy por debajo del comportamiento de las Bolsas en estos ¨²ltimos tres meses, est¨¢ derribando algunos de los mitos que propagaron sus valedores: el bitcoin no est¨¢ siendo un activo refugio frente a la alta inflaci¨®n, ni su capacidad de resistir a las turbulencias se parece a la que cabr¨ªa esperar de un nuevo oro digital, como se le ha llegado a denominar.

Las correcciones en los parqu¨¦s ante el aumento de la tensi¨®n en Ucrania tampoco ayudan. ¡°Cuando la sensaci¨®n general en los mercados es negativa, lo primero que se suele vender son los activos de m¨¢s riesgo, y bitcoin todav¨ªa sigue siendo un activo de riesgo¡±, afirma Jorge Soriano, consejero delegado de la plataforma de compraventa de criptomonedas Criptan. Ra¨²l Marcos, CEO de carbono.com, coincide en achacarlo a un estado de ¨¢nimo negativo entre los inversores. ¡°?ltimamente se ve una correlaci¨®n m¨¢s alta con los mercados tradicionales. Cuantos m¨¢s inversores institucionales hay, m¨¢s sigue un mercado al otro. Esperaba turbulencias, pero no tan pronunciadas. El de las criptomonedas es un mercado muy emocional, los movimientos se magnifican tanto para arriba como para abajo¡±.

Detr¨¢s del desplome hay varias razones. Cada nueva pista de una aceleraci¨®n en el calendario de subidas de tipos por parte de la Reserva Federal estadounidense ha sido recibida con ca¨ªdas, igual que le est¨¢ sucediendo a las Bolsas. Y la semana pasada el banco central ruso propuso prohibir las transacciones y el minado de bitcoins, as¨ª como vetar la actividad de los exchanges e impedir a las instituciones financieras operar con criptomonedas. Considera que son una amenaza para su soberan¨ªa monetaria y la estabilidad financiera del pa¨ªs y de sus ciudadanos debido a su potencial para generar burbujas, y le preocupan sus efectos medioambientales adversos ¡ªel minado gasta una ingente cantidad de energ¨ªa¡ª. Quedar¨ªa libre del veto, en cambio, la posesi¨®n de criptomonedas.

Una decisi¨®n as¨ª por parte de Rusia no ser¨ªa inocua. Es el tercer pa¨ªs donde se lleva a cabo m¨¢s minado, solo por detr¨¢s de EE UU y Kazajist¨¢n. Y en este ¨²ltimo pa¨ªs las noticias tampoco son positivas: las protestas por el encarecimiento del combustible en este enorme Estado de Asia Central culminaron con el corte total de internet para evitar que los manifestantes pudieran transmitir la violenta represi¨®n desatada desde el Gobierno, lo que dej¨® a los mineros sin conexi¨®n, y, por tanto, sin apenas opciones de continuar su labor en una naci¨®n que hasta ahora era considerada un santuario para las criptomonedas por el bajo precio de la energ¨ªa.

La presi¨®n regulatoria est¨¢ arrinconando cada vez m¨¢s al bitcoin. En mayo, China vet¨® las transacciones con criptomonedas, y declar¨® ilegales el minado e incluso la publicidad de esas divisas. Kazajist¨¢n, por su cercan¨ªa geogr¨¢fica, ocup¨® entonces buena parte del vac¨ªo que dejaron las restricciones de Pek¨ªn, pero la convulsa situaci¨®n pol¨ªtica interna est¨¢ haci¨¦ndole perder atractivo, y Nayub Bukele, presidente de El Salvador ¡ªla primera naci¨®n del mundo en incorporar una criptodivisa como moneda legal¡ª ya fantasea con la idea de tomar su lugar y convertir a su pa¨ªs en el gran laboratorio mundial de las criptomonedas.

En Espa?a, las ¨²ltimas medidas se circunscriben al ¨¢mbito de las campa?as de difusi¨®n: la CNMV podr¨¢ vetar la publicidad masiva sobre criptomonedas, y obligar¨¢ a que todas las comunicaciones comerciales incluyan este mensaje de advertencia en un lugar visible: ¡°La inversi¨®n en criptoactivos no est¨¢ regulada, puede no ser adecuada para inversores minoristas y perderse la totalidad del importe invertido¡±.

Con el precio rondando los 33.000 d¨®lares frente a los 69.000 que lleg¨® a tocar, las im¨¢genes de osos ¡ªel animal que en los mercados representa una tendencia bajista¡ª pueblan los foros y grupos de WhatsApp de los peque?os inversores, que se debaten entre venderlo todo en medio de la tormenta o mantener su cartera a la espera de tiempos mejores. Los optimistas tiran de historia para encontrar precedentes a los que aferrarse. Entre abril y julio del a?o pasado el bitcoin tambi¨¦n perdi¨® la mitad de su valor en solo tres meses, y acab¨® recuper¨¢ndose. Pero nadie sabe d¨®nde estar¨¢ el suelo en esta ocasi¨®n, ni tampoco existe ninguna certidumbre de que el patr¨®n vaya a repetirse.

El ecosistema cripto va mucho m¨¢s all¨¢ del bitcoin. Las cotizaciones de casi 20.000 monedas digitales se mueven cada d¨ªa en un mercado que vale 1,5 billones de d¨®lares ¡ªel bitcoin representa el 42%, aproximadamente¡ª, el equivalente a la capitalizaci¨®n de Amazon. Aunque algunas de ellas han conseguido escapar de las turbulencias, las ca¨ªdas est¨¢n siendo generalizadas. Ethereum, la segunda m¨¢s importante, tambi¨¦n se ha dejado m¨¢s de un 50% de su valor. Y seg¨²n datos de CoinMarketCap, solo cinco de las mayores 200 no est¨¢n en n¨²meros rojos en el acumulado de los ¨²ltimos siete d¨ªas.

Los inversores institucionales, que se han ido sumando progresivamente a la fiebre por el bitcoin, tambi¨¦n se est¨¢n viendo penalizados: la firma de software estadounidense MicroStrategy, una de las que m¨¢s ha apostado por el bitcoin, pierde un 38% de su valor en Bolsa en el ¨²ltimo mes. El fabricante de autom¨®vles el¨¦ctricos Tesla, que dedic¨® parte de su efectivo sobrante a comprar bitcoins, e incluso coquetea con la idea de aceptarlo como medio de pago para adquirir sus veh¨ªculos, tampoco ha escapado a esa tendencia, aunque en su caso la exposici¨®n no es tan grande respecto a su tama?o: la compa?¨ªa de Elon Musk invirti¨® 1.250 millones de euros.