Las el¨¦ctricas creen que el tope al gas quintuplicar¨¢ las exportaciones de luz a Francia

La llamada excepci¨®n ib¨¦rica, el mecanismo que faculta a Espa?a a imponer un l¨ªmite sobre el precio del gas natural que se utiliza para generar electricidad, multiplicar¨¢ por cinco las exportaciones de electricidad a Francia, seg¨²n los c¨¢lculos de la patronal de las empresas el¨¦ctricas (Aelec). Con una parte sustancial de la planta nuclear del pa¨ªs vecino parada y Espa?a generando energ¨ªa m¨¢s barata con el tope al gas, la demanda francesa de electricidad espa?ola crecer¨¢ exponencialmente: los cinco teravatios hora (TWh) que habr¨ªan cruzado los Pirineos en direcci¨®n norte este a?o sin el mecanismo se convertir¨¢n en 25, seg¨²n la organizaci¨®n. Esta cantidad equivale al 10% de la demanda anual espa?ola.

En un ejercicio al uso ¡ªeste mismo, por ejemplo, hasta la entrada en vigor del l¨ªmite sobre el precio del gas¡ª, el cable que une la pen¨ªnsula Ib¨¦rica con el resto del continente tiene un doble flujo: cuando hace viento y sol en Espa?a y la demanda es moderada, las exportaciones suelen ser predominantes; cuando el consumo se dispara y las renovables no aportan lo suficiente, la enorme potencia de tiro de las nucleares francesas dan la vuelta a ese saldo. Aunque la tendencia al alza de las exportaciones ven¨ªa de atr¨¢s, esta realidad ha saltado por los aires en los primeros d¨ªas de aplicaci¨®n del tope al gas: las importaciones de electricidad francesa han desaparecido y el flujo se reduce a exportaciones espa?olas. Un problema para los consumidores espa?oles: la mayor demanda exterior eleva tanto el precio interno como la compensaci¨®n aparejada al tope.

Electricidad generada con gas

La electricidad extra que se vender¨¢ a Francia proceder¨¢, casi ¨ªntegramente, de los ciclos combinados, las centrales t¨¦rmicas que queman gas natural para obtener electricidad. A diferencia del pa¨ªs vecino, Espa?a cuenta con una amplia capacidad ociosa de estas instalaciones, pensadas en su d¨ªa como una garant¨ªa clave de suministro en los momentos en los que la generaci¨®n renovable (mucho m¨¢s barata en condiciones normales y exponencialmente m¨¢s econ¨®mica desde el estallido de la crisis energ¨¦tica, en la que los precios del gas se han multiplicado por entre cuatro y cinco veces). ¡°Vamos a maximizar nuestra producci¨®n con gas hasta saturar la interconexi¨®n¡±, ha enfatizado Pedro Gonz¨¢lez, director de Regulaci¨®n de Aelec, en una conferencia de prensa celebrada este lunes en Madrid.

La interconexi¨®n entre Espa?a y Francia es muy baja en comparaci¨®n con la existente entre otros pa¨ªses europeos: apenas supone un 2,8% de la capacidad total del sistema ib¨¦rico. Ese fue el argumento esgrimido por Madrid y Lisboa para que Ursula von der Leyen y su equipo diesen su visto bueno al mecanismo y ese es, hoy, el mayor freno para que las exportaciones no crezcan a¨²n m¨¢s: de no ser por ese l¨ªmite f¨ªsico, el flujo subir¨ªa a una tasa a¨²n superior, dada la creciente brecha de precios entre ambos pa¨ªses. El nuevo cable submarino, que unir¨¢ ambos pa¨ªses a trav¨¦s del golfo de Bizkaia, deber¨ªa entrar en funcionamiento en 2027 tras a?os de retraso.

No de Bruselas a la doble subasta

Para tratar de evitar la venta de energ¨ªa subvencionada al pa¨ªs vecino, la propuesta inicial del Gobierno espa?ol a la Comisi¨®n Europea pasaba por una doble casaci¨®n que fijase dos precios diferenciados: uno para la Pen¨ªnsula y otro para los intercambios con Francia. Bruselas, sin embargo, lo rechaz¨®. Tras esa negativa del Ejecutivo comunitario, y con el fin de paliar el efecto negativo sobre el bolsillo de los consumidores nacionales, Madrid decidi¨® que una parte de las llamadas rentas de congesti¨®n ¡ªque capturan la diferencia de precio entre ambos mercados¡ª se destinaran a compensar a los hogares y empresas. El resultado de esa soluci¨®n a¨²n est¨¢ por ver.

M¨¢s all¨¢ de los Pirineos, Espa?a cuenta con otras dos interconexiones activas: con Portugal y con Marruecos. En ambas, Aelec prev¨¦ una variaci¨®n menor. En el primer caso, dado que el tope al gas se aplicar¨¢ en toda la Pen¨ªnsula, los saldos se mantendr¨¢n como hasta ahora: habr¨¢ d¨ªas de importaci¨®n y d¨ªas de exportaci¨®n en el mercado ib¨¦rico. En el segundo, el resultado neto tampoco variar¨¢ mucho: ¡°Hasta ahora ten¨ªamos un saldo netamente exportador, que aumentar¨¢. Lo que pasa es que la relevancia de los dos enlaces [con el pa¨ªs africano] no es tan grande como la francesa¡±, apunta Gonz¨¢lez.

Ahorro en aumento

La patronal el¨¦ctrica calcula que el tope al gas ha supuesto un ahorro ligeramente superior al 11% en los cuatro primeros d¨ªas desde su activaci¨®n. Los dos primeros d¨ªas ¡ªmi¨¦rcoles y jueves¡ª, en los que las altas temperaturas dispararon el consumo y las renovables estuvieron lejos de sus registros habituales ¡ªpoco viento, calima y mucho calor, que merma la eficiencia de los paneles solares¡ª, fueron los d¨ªas de menor ahorro: un 6%. El viernes y, sobre todo, el s¨¢bado, cuando estos condicionantes empezaron a desaparecer, la reducci¨®n propiciada por el l¨ªmite sobre el precio del gas subi¨® hasta el 11% y el 22%, respectivamente.

¡°Es dif¨ªcil de valorar el ahorro de los primeros d¨ªas: ha sido un periodo at¨ªpico, en el que ha coincidido una demanda muy alta y una alta compensaci¨®n. Deber¨ªamos empezar a ver un cierto incremento del ahorro esta semana, cuando las temperaturas se reducir¨¢n sustancialmente. ?Se llegar¨¢ al 30% [previsto por el Gobierno en el mercado mayorista]? Es dif¨ªcil de saber a¨²n¡±, ha zanjado Gonz¨¢lez.

Preguntado por si se cumplir¨¢n las expectativas de rebaja en la factura que maneja el Ejecutivo de Pedro S¨¢nchez (una ca¨ªda de entre el 15% y el 20% en la factura de los clientes del mercado regulado), el jefe de regulaci¨®n de Aelec ha preferido no pronunciarse: ¡°Depender¨¢ de las condiciones meteorol¨®gicas, de las renovables y del precio del gas. Los ahorros que hemos visto han sido menores de lo que cab¨ªa esperar, pero en los ¨²ltimos d¨ªas han subido y seguir¨¢n haci¨¦ndolo¡±.