Los beneficios r¨¦cord de la banca inflaman el debate sobre las hipotecas y los impuestos
Santander, BBVA y CaixaBank suman ganancias conjuntas de 19.000 millones en plena escalada de los tipos de inter¨¦s, mientras encarecen los pr¨¦stamos y remuneran los dep¨®sitos por debajo de la media europea
El ambiente en las presentaciones de los resultados anuales de los bancos durante las ¨²ltimas dos semanas ha resultado algo peculiar. Donde anta?o se sacaba pecho por los buenos n¨²meros, ha reinado una modestia algo ins¨®lita para entidades que cotizan en Bolsa y requieren del benepl¨¢cito del mercado. Ins¨®lita, sobre todo, en un a?o de vino y rosas para los banqueros: beneficios r¨¦cord el Santander y BBVA y muy buenos ¡ªaunque sin tocar techo¡ª en CaixaBank; adem¨¢s de un reguero de dividendos para los accionistas que han superado el euf¨®rico 2007.
Se respiraba en esas citas la sensaci¨®n de que los n¨²meros no casan bien con los ¨²ltimos rifirrafes mantenidos con el Gobierno sobre las ayudas a los hipotecados y el nuevo impuesto al sector, se?alado por los bancos como un grave palo en las ruedas para su negocio. Sin embargo, las cifras son tozudas: los tres grandes grupos financieros han ganado de forma conjunta algo m¨¢s de 19.000 millones de euros netos, unas ganancias que inflaman el debate en un contexto de incertidumbre econ¨®mica y con el bolsillo de las familias sufriendo por la inflaci¨®n y el encarecimiento de las hipotecas.
Adem¨¢s, la Autoridad Bancaria Europea public¨® recientemente, con datos de 2021, que los banqueros en Espa?a est¨¢n entre los que m¨¢s ganan de Europa: ya hay 221 directivos que se embolsan m¨¢s de un mill¨®n en el pa¨ªs. La media de los que acumularon ganancias por encima de ese mill¨®n son 2,16 millones (la media a nivel europeo es de 1,8 millones). Y, de los seis altos ejecutivos que recibieron m¨¢s de 10 millones, tres estaban en Espa?a.
Este elevado nivel salarial se une a que, comparativamente con Europa, las entidades espa?olas est¨¢n siendo m¨¢s moderadas en la remuneraci¨®n de los dep¨®sitos. Una tormenta perfecta que ha vuelto a explotar y los bancos, que ya tuvieron problemas reputacionales ¡ªpor las cl¨¢usulas abusivas, las preferentes, la atenci¨®n a los mayores o los recortes masivos de empleo¡ª, han vuelto al centro de la diana pol¨ªtica.
Otro factor que sopla en contra es el ciclo electoral abierto en 2023. En mayo habr¨¢ elecciones municipales y auton¨®micas, y para final de a?o ser¨¢ el turno de las generales. Una situaci¨®n que llevar¨¢ al l¨ªmite este tipo de temas que sirven para fijar postura propia, lo que ocurre incluso en el seno del Gobierno de coalici¨®n, entre PSOE y Unidas Podemos. ¡°Toca congelar hipotecas y moderar los beneficios extremos de la gran banca¡±, reclam¨® esta semana la vicepresidenta segunda, Yolanda D¨ªaz, tras conocerse los resultados. Un asunto en el que la vicepresidenta primera, Nadia Calvi?o, marc¨® algo de distancia: ¡°No es una medida que se pueda poner en marcha de forma estructural¡±. Pero s¨ª volvi¨® a defender la conveniencia de la nueva tasa al sector financiero: ¡°Es un clamor general que [los bancos] tienen que arrimar el hombro¡±.
Hasta aqu¨ª se ha llegado tras una concatenaci¨®n de resultados extraordinarios desde final de enero. El primero fue Bankinter (gan¨® 560 millones, un 28% m¨¢s), le sigui¨® el Sabadell (859 millones de beneficios, un 62% por encima hasta quedarse cerca de su techo) y Unicaja (casi duplic¨® su resultado hasta los 260 millones de euros). Despu¨¦s llegaron los resultados de las tres principales entidades. El BBVA anunci¨® las mayores ganancias de su historia: 6.420 millones. El Santander registr¨® otro r¨¦cord: 9.605 millones. Por ¨²ltimo, fue el turno de CaixaBank, que no hizo m¨¢s que confirmar un 2022 estratosf¨¦rico: 3.145 millones de beneficios, por debajo del a?o anterior pero solo porque entonces hubo apuntes contables de la fusi¨®n con Bankia.
¡°El beneficio viene fundamentalmente de fuera, en Espa?a es moderado y se acerca a unos niveles sanos para ser rentables¡±, analiza ?ngel Berg¨¦s, vicepresidente y socio fundador de Analistas Financieros Internacionales (AFI). La nueva tasa al sector financiero se aplicar¨¢ solo sobre los ingresos en el mercado espa?ol. De los 9.605 millones que gan¨® el Santander, el negocio espa?ol supone 1.560 millones, solo una sexta parte del total, pero tambi¨¦n registr¨® un avance notable del 148% respecto al resultado para Espa?a de 2021 por la retirada de provisiones. En el caso del BBVA, el mercado nacional representa 1.678 millones (un 8,5% m¨¢s) del beneficio total de 6.420 millones. CaixaBank es la entidad en la que la actividad en Espa?a tiene m¨¢s peso de las tres: de los 3.145 millones de todo el grupo, 2.751 millones corresponden a Espa?a (ver gr¨¢fico).
Estas ganancias amasadas se van a devolver, en parte, a los accionistas a trav¨¦s de dividendos y recompra de t¨ªtulos propios con unas cifras globales que superar¨¢n en un 23% las de 2007. Es cierto que del dividendo tambi¨¦n se beneficiar¨¢n 5,6 millones de accionistas, entre ellos muchos peque?os ahorradores. Donde no participar¨¢n los minoristas ser¨¢ en los altos salarios de la c¨²pula. Jos¨¦ Carlos D¨ªez, director de la c¨¢tedra Orfin de la Universidad de Alcal¨¢, enlaza esto con lo explicado antes por Berg¨¦s: ¡°El problema es que tenemos dos bancos muy grandes que compiten en salarios con las mayores entidades del mundo¡±.
El reparto r¨¦cord de dividendos contrasta por otro lado con el hecho de que los bancos espa?oles son los que tienen la peor calidad de capital de la zona euro, seg¨²n los datos difundidos por el Banco Central Europeo en enero, aunque se han apuntado una mejor¨ªa. La proporci¨®n de capital CET1 fully loaded, el de m¨¢xima calidad, se situ¨® en la zona euro en el 14,74% en el tercer trimestre de 2022. Mientras Espa?a qued¨® a la cola, con un 12,48%.
Subida abrupta de tipos
El incendio se ven¨ªa larvando desde hace meses. Uno de los que lo han avivado ha sido el Banco Central Europeo (BCE). Se esperaba un cambio de la pol¨ªtica monetaria, con subidas graduales de tipos de inter¨¦s que acabasen con la era de tipos cero o negativo. Sin embargo, la presi¨®n de la inflaci¨®n ha trastocado sus planes: la respuesta han sido unas alzas muy abruptas, m¨¢s que nunca, para controlar los precios a toda costa aunque frene con ello la econom¨ªa m¨¢s de lo deseable.
Uno de los efectos de este nuevo precio del dinero es que la banca aumentar¨¢ los ingresos de su actividad principal, como se refleja en las cuentas del ¨²ltimo trimestre de 2022, aunque falta por ver cu¨¢nto de ese nuevo flujo va a ganancias netas al existir otros riesgos, como una menor actividad o m¨¢s mora. ¡°Los beneficios de la banca se est¨¢n normalizando. Lo anormal eran los tipos de inter¨¦s negativos y la rentabilidad de los bancos del pasado. Anormal y peligroso para la estabilidad de un sector que es fundamental para la econom¨ªa real¡±, asegur¨® Jos¨¦ Ignacio Goirigolzarri, presidente de CaixaBank, en los resultados de la entidad.
Sin embargo, para que esa normalizaci¨®n fuese completa, falta otra pata en la que por el momento todos las entidades arrastran los pies: siguen sin remunerar el ahorro de sus clientes al no necesitar m¨¢s liquidez en un mercado inundado. ¡°En oferta hipotecaria est¨¢n siendo competitivos, hay que reconocerlo, pero no con los dep¨®sitos¡±, critica Patricia Su¨¢rez, presidenta de Asufin. El inter¨¦s medio de los dep¨®sitos a plazo fijo hasta dos a?os es del 0,69% en Espa?a frente al 1,20% de media en la zona euro, seg¨²n los ¨²ltimos datos de Eurostat, de noviembre. Ante la baja remuneraci¨®n de los dep¨®sitos, y la Bolsa en terreno resbaladizo, no es de extra?ar que los peque?os ahorradores hagan cola ante el Banco de Espa?a, como est¨¢ sucediendo estos d¨ªas, para comprar letras del Tesoro, con rentabilidades de alrededor del 3%.
Familias sin margen
Al inicio del a?o pasado, lo que parec¨ªa una recuperaci¨®n econ¨®mica a toda velocidad tras la pandemia se trunc¨® por la guerra de Ucrania y una inflaci¨®n desbocada. Sonaron todas las alarmas ante un repunte s¨²bito de los costes de las familias. Primero en el precio de la energ¨ªa, luego en la cesta de la compra y, ahora, la puntilla la pone un incremento de la cuota hipotecaria para los hogares endeudados. Este sobrecoste se postula como la gota que colme el vaso de familias sin margen y amenaza con traer de vuelta aquellos fantasmas l¨²gubres de la Gran Recesi¨®n: un repunte de impagos en los pr¨¦stamos y la vuelta de los desahucios masivos.
Por este motivo, Gobierno y banca siguen muy de cerca la tasa de morosidad, aunque por el momento se sit¨²a en niveles hist¨®ricamente bajos. La econom¨ªa ha crecido un 5,5% en 2022 y el empleo, vital para contener los impagos, est¨¢ sorprendiendo para bien. Eso s¨ª, los riesgos se mantienen ante el frenazo de la actividad que se espera. De ah¨ª que el Ejecutivo apretase al sector financiero para pactar una ampliaci¨®n del C¨®digo de Buenas Pr¨¢cticas que sirviese de escudo para las familias m¨¢s vulnerables y aquellas en riesgo de serlo. Aunque parece que el debate se cerr¨® en falso, ya que solo dos meses despu¨¦s ha vuelto a la palestra.
Los presidentes y consejeros delegados de los grandes grupos financieros son conscientes de que el momento no es el oportuno. Les encantar¨ªa sacar m¨¢s pecho por unos n¨²meros estratosf¨¦ricos que les deben ayudar a recuperar el terreno perdido de la ¨²ltima d¨¦cada: en Bolsa (con unas cotizaciones por debajo de valor en libros), en solvencia y en rentabilidad (siguen sin cubrir el coste de capital en el pa¨ªs). Pero el contexto les exige presumir menos y hacer m¨¢s pedagog¨ªa. ¡°Hay un riesgo de que no se entiendan. Estas cifras hay que contextualizarlas. En CaixaBank, la cifra de beneficios es enorme, pero lo son todas las cifras: el volumen de cr¨¦ditos, la financiaci¨®n a particulares, los fondos propios¡¡±, relat¨® Goirigolzarri.
La mecha del impuesto
Este c¨®ctel, adem¨¢s, cuenta con otro ingrediente que ha enturbiado m¨¢s si cabe la situaci¨®n: la nueva tasa al sector financiero. El gravamen se aprob¨® con las compa?¨ªas en pie de guerra y con la amenaza de que dar¨¢n la batalla judicial. Hasta el momento, los bancos han dejado claro que no comparten la justificaci¨®n, aunque esta semana han mostrado un perfil bajo sobre su posible recurso. Todos se?alan que lo estudian, sin confirmar la decisi¨®n final, aunque en alg¨²n caso han pedido tambi¨¦n que no se les se?ale. ¡°No nos negamos a pagar impuestos, pero que paguen todos¡±, respond¨ªa de forma sucinta Ana Bot¨ªn, presidenta del Banco Santander, esta semana.
Nadia Calvi?o, el pasado viernes, les dio una de cal y otra de arena. Por un lado, ensalz¨® el acuerdo alcanzado con el sector en el C¨®digo de Buenas Pr¨¢cticas. Pero, por otro, les anim¨® a ir m¨¢s all¨¢ y defendi¨® que los resultados cosechados en 2022 ¡°confirman lo adecuado de haber impuesto un gravamen extraordinario¡±.
El sector, con la reapertura del debate alrededor de sus n¨²meros y la congelaci¨®n de hipotecas, ha advertido de los riesgos que tiene intervenir el mercado de forma dr¨¢stica. ¡°Tenemos que defender las ventajas de una econom¨ªa de mercado. Es esencial la colaboraci¨®n p¨²blico-privada y que cada uno est¨¦ en su papel¡±, esgrimi¨® Carlos Torres, presidente del BBVA. Mientras que la presidenta del Santander record¨® experiencias pasadas como la de M¨¦xico en los a?os noventa, que cercen¨® la concesi¨®n de pr¨¦stamos. ¡°No se pueden poner condiciones que expulsen del mercado hipotecario a los m¨¢s vulnerables, ser¨ªa un error¡±.
Fuera del barro pol¨ªtico, parece evidente que la reputaci¨®n de los bancos vuelve a estar en entredicho. En el pasado ya sufri¨® mucho, sobre todo con el shock que supusieron los desahucios y el rescate financiero. Una inyecci¨®n p¨²blica que, inciden las entidades, fue para salvar a las cajas de ahorros, pero que afecta a la reputaci¨®n del sector en conjunto. Adem¨¢s, mientras tienen beneficios r¨¦cord, se demoran en remunerar el ahorro, aunque los pr¨¦stamos s¨ª se encarecen a lomos de la subida de tipos. Otra curva m¨¢s en un 2023 endiablado para la banca.
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