Un r¨¦cord de empleo imposible sin trabajadores extranjeros

Espa?a nunca hab¨ªa logrado emplear a tantos trabajadores como ahora, 21,3 millones seg¨²n la ¨²ltima Encuesta de Poblaci¨®n Activa (EPA). Este hito tan positivo, que ayuda a fomentar el consumo, a dotar de fondos a los servicios p¨²blicos o a rebajar la presi¨®n en prestaciones sociales, es cada vez menos atribuible a la fuerza laboral nacida en Espa?a. Nunca antes hab¨ªa sido tan alta la proporci¨®n de trabajadores extranjeros (14,1%, tres millones) o con doble nacionalidad (4,7%, un mill¨®n). Hace un a?o sumaban el 17,1%; hace diez el 12,8% y hace dos d¨¦cadas, el 8,6%. Son los empleados que impulsan la ocupaci¨®n a niveles desconocidos. La principal raz¨®n de este fen¨®meno, explican las expertas consultadas por EL PA?S, es que la econom¨ªa espa?ola necesita mano de obra y la estructura poblacional de los nacionales no satisface esas necesidades. Lo que la baj¨ªsima natalidad y el intenso envejecimiento restan lo compensan los flujos migratorios. Sin ellos el sistema productivo gripar¨ªa.

Una de las cifras que mejor ilustra esta tendencia hace referencia al empleo atribuido a cada colectivo. En el ¨²ltimo a?o (del tercer trimestre de 2022 al mismo periodo de 2023), seg¨²n la EPA, se crearon 720.200 puestos de trabajo. Entre extranjeros y empleados con doble nacionalidad aportaron 482.300 trabajadores, m¨¢s que nunca. Del total solo un tercio (237.900) corresponde con trabajadores espa?oles, la segunda proporci¨®n m¨¢s baja en lo que llevamos de siglo. Solo fue inferior en el periodo 2018-2019.

Otro dato en la misma l¨ªnea: la creaci¨®n de empleo se impuls¨® en los ¨²ltimos 12 meses un 3,5% en Espa?a, el mayor alza desde la burbuja del ladrillo (y sin contar el rebote an¨®malo de la pandemia). Este impulso global coincide con el segundo menor incremento anual de la poblaci¨®n trabajadora espa?ola en un a?o de creaci¨®n de empleo. Casi toda la subida se debe al aceler¨®n de trabajadores con doble nacionalidad (13,4%) y extranjeros (13,8%). Fuentes del Ministerio de Inclusi¨®n, Seguridad Social y Migraciones hacen una interpretaci¨®n positiva de estos datos: ¡°Reflejan el gran dinamismo del mercado de trabajo espa?ol en los ¨²ltimos dos a?os como resultado conjunto de pol¨ªticas en el ¨¢mbito econ¨®mico, laboral y migratorio¡±. Adem¨¢s, desde el departamento de Elma Saiz destacan ¡°el fortalecimiento de las finanzas de la Seguridad Social y la mejora en la sostenibilidad del sistema de pensiones¡±.

Rosa Aparicio, experta en migraciones e investigadora del Instituto Universitario Ortega-Mara?on, cree que una de las principales explicaciones es demogr¨¢fica. ¡°La poblaci¨®n espa?ola es decreciente. No va a bastar con los hijos de los espa?oles para que la econom¨ªa se mantenga como ahora. Los inmigrantes son m¨¢s j¨®venes, la mayor¨ªa de ellos est¨¢n en edad de trabajar y tienen m¨¢s hijos. Sin ellos, ?qui¨¦n va a pagar las pensiones?¡±, indica esta experta. Coincide M¨®nica Mar¨ªa Mongu¨ª, doctora en Sociolog¨ªa e investigadora de la Universidad Complutense de Madrid: ¡°La llegada de inmigrantes en edad laboral y la incorporaci¨®n de j¨®venes con doble nacionalidad en la b¨²squeda de empleo han llevado a un incremento de la poblaci¨®n activa en estos colectivos¡±. Mongu¨ª cree que su mayor tasa de paro (16,5% entre extranjeros, 11% entre espa?oles), en un escenario de creaci¨®n de empleo como el actual, tambi¨¦n favorece que sean los principales protagonistas del incremento.

Las estad¨ªsticas de poblaci¨®n confirman estas impresiones: hay 6,37 millones de extranjeros, m¨¢s que nunca. Es un mill¨®n m¨¢s que en el anterior pico registrado, los 5,4 millones de 2010, un m¨¢ximo impulsado por la burbuja del ladrillo y que se fue desinflando con la Gran Recesi¨®n. Cay¨® hasta 4,38 millones en 2016 y desde entonces ha crecido en dos millones. Su edad media es de 37 a?os, ocho menos que los nacionales, y la tasa de natalidad es el doble que la de las espa?olas. Esto tambi¨¦n queda claro en las estad¨ªsticas de empleo: la proporci¨®n m¨¢s alta de trabajadores espa?oles se da entre los mayores de 55 a?os (89,2%) y la menor, de 25 a 34 a?os (76,3%). Si nos fijamos en los residentes en edad de jubilaci¨®n el desfase es a¨²n mayor, dado que muchos extranjeros vuelven a sus pa¨ªses: en global son el 15,2% de la poblaci¨®n, pero solo el 5,2% de los mayores de 65 a?os es extranjero.

El extraordinario incremento de empleados extranjeros cambia de ritmo en funci¨®n del sector econ¨®mico. El mayor salto absoluto se da en la hosteler¨ªa, una de las actividades con condiciones m¨¢s penosas (14,4% m¨¢s que el a?o pasado, 50.244 trabajadores). Tambi¨¦n destacan en otras profesiones con horarios dif¨ªciles, como el comercio (12,9% m¨¢s y 22.437 empleados), o de gran esfuerzo f¨ªsico, como la construcci¨®n (10,9% y 27.557). ¡°Creo que los sectores que m¨¢s sufrieron durante la pandemia, como el turismo y el comercio, han experimentado un aceler¨®n. Y son actividades donde los inmigrantes est¨¢n sobrerrepresentados, algunas que muchos espa?oles no quieren hacer, as¨ª que esto puede tener bastante que ver en el aumento general¡±, opina Myriam Gonz¨¢lez-Rabanal, profesora de Econom¨ªa Aplicada de la UNED.

Pero cabe destacar que el aceler¨®n no se limita a ese tipo de actividades. En el ¨²ltimo a?o los extranjeros tambi¨¦n han sido protagonistas en los aumentos en empleos relacionados con la informaci¨®n y las comunicaciones (13% y 8.548), en sanidad (12,7% y 11.887) o en actividades cient¨ªficas y t¨¦cnicas (12,6% y 9.693), todas ellas con retribuciones por encima de la media. La ¨²nica rama en la que el aumento de profesionales espa?oles ha sido proporcionalmente mayor que el de extranjeros ha sido educaci¨®n.

Este panorama espa?ol coincide con un mal momento para el empleo en los pa¨ªses con menos recursos, que sufren el golpe de la inflaci¨®n y de los altos tipos de inter¨¦s. Seg¨²n las estimaciones de la Organizaci¨®n Internacional del Trabajo (OIT), de 186 pa¨ªses con datos disponibles, la tasa de paro solo cae en 40 respecto a 2019 (la mayor¨ªa entre los m¨¢s ricos), se mantiene en nueve y crece en 136. ¡°El empeoramiento de la situaci¨®n econ¨®mica y pol¨ªtica en otros pa¨ªses, sobre todo en los de Latinoam¨¦rica, es un factor que aumenta la llegada de poblaci¨®n extranjera¡±, a?ade Aparicio. La evoluci¨®n positiva del empleo en Europa se debe, principalmente, a la pronunciada ca¨ªda del desempleo en los pa¨ªses que m¨¢s registraban hist¨®ricamente, como Espa?a.

Los cambios normativos tambi¨¦n juegan un papel clave. En los ¨²ltimos a?os el Gobierno ha fomentado la llegada de mano de obra extranjera. Esta posici¨®n parte del convencimiento del ministro de Migraciones durante la pasada legislatura, Jos¨¦ Luis Escriv¨¢, de que Espa?a sufre un problema de vacantes sin cubrir, falla que el Ministerio de Trabajo solo advierte en sectores muy espec¨ªficos. Con la tasa de paro m¨¢s alta de Europa, Yolanda D¨ªaz y los sindicatos siempre se han mostrado reticentes ante ese planteamiento de Escriv¨¢.

Pese a las diferencias, ha habido modificaciones clave. ¡°La actualizaci¨®n de las figuras de arraigo, la creaci¨®n de una tipolog¨ªa nueva (arraigo por formaci¨®n), la flexibilizaci¨®n de los requisitos para la reagrupaci¨®n familiar, la actualizaci¨®n del Cat¨¢logo de Ocupaciones de Dif¨ªcil Cobertura, una mayor estabilidad en los procesos de migraci¨®n circular o los cambios sustanciales para que los estudiantes compaginen trabajo y formaci¨®n, entre otros, est¨¢n detr¨¢s de estos datos¡±, resaltan en el ministerio. Estas pol¨ªticas han motivado un incremento en las autorizaciones de trabajo para extranjeros: en 2022 se aprobaron casi 200.000, el r¨¦cord desde la Gran Recesi¨®n. La previsi¨®n es que en 2023 sean a¨²n m¨¢s. Con todo, son cifras alejadas de las que se llegaron a registrar a principios de siglo, cuando la inmigraci¨®n tom¨® velocidad de la mano de la burbuja del ladrillo.

?Qui¨¦nes son?

La cifra de trabajadores extranjeros actual no es muy diferente de la que se registr¨® en la burbuja del ladrillo. En el primer trimestre de 2008 hab¨ªa 2,86 millones de empleados for¨¢neos, una cifra que se desplom¨® durante la Gran Recesi¨®n. Muchos volvieron a sus pa¨ªses y otros muchos dejaron de venir, hasta rebajar el total en m¨¢s de un mill¨®n en 2014. Entonces la tasa de paro era m¨¢s del doble que la actual, un 25,9%. A medida que mejor¨® la econom¨ªa volvieron estos trabajadores, hasta los casi tres millones de la ¨²ltima EPA (2.996.700). El elemento diferencial entre el escenario previo a la crisis inmobiliaria y el actual son los trabajadores con doble nacionalidad. Por primera vez son m¨¢s de un mill¨®n, cuando hace dos d¨¦cadas solo eran unos 70.000.

Por pa¨ªses, el que m¨¢s aporta al total de extranjeros espa?oles es Ruman¨ªa. Son 337.765, seg¨²n los datos de Seguridad Social de septiembre. Completan los cinco primeros puestos Marruecos (309.639), Italia (182.757), Colombia (171.982) y Venezuela (146.126). Es un reparto parecido al de 2012 (primer dato disponible), con la salvedad de que entonces Ecuador estaba en tercera posici¨®n y ahora est¨¢ en s¨¦ptima, mientras que China era quinta y ahora es sexta. Con una mirada m¨¢s amplia destaca el aceler¨®n de Am¨¦rica Latina en conjunto: en 2019 hab¨ªa 937.200 trabajadores procedentes de pa¨ªses de la Uni¨®n Europa, lo que les convert¨ªa en el grupo m¨¢s numeroso, seguido de los latinoamericanos con 738.700; solo cuatro a?os despu¨¦s hay 1,23 millones de latinoamericanos, frente a los 856.000 procedentes de la UE. ¡°La poblaci¨®n latinoamericana, al guardar parentescos culturales y de idioma con Espa?a, posibilita que su contingente est¨¦ en constante crecimiento y su inclusi¨®n en la sociedad espa?ola sea mucho m¨¢s acelerada¡±, analiza Mongu¨ª.

¡°Hay una diferencia importante respecto a la anterior gran llegada de inmigrantes, en los a?os 2000. Ahora vienen m¨¢s mujeres y es mayor la proporci¨®n de las que trabajan¡±, indica la investigadora Nicoleta Enache, autora de la tesis doctoral Relaciones laborales e impacto econ¨®mico de los trabajadores inmigrantes rumanos en Espa?a y profesora de la Universidad Valahia de Targoviste. Las estad¨ªsticas le dan la raz¨®n: hoy hay 100.000 trabajadores extranjeros menos que en el primer trimestre de 2008 (el anterior r¨¦cord de la ocupaci¨®n extranjera), pero 200.000 trabajadoras m¨¢s.

Peores condiciones laborales

Las mujeres inmigrantes son precisamente las que peores salarios reciben: ingresaron 13.401 euros brutos de media en 2022, seg¨²n los datos de la Agencia Tributaria. Son unos 2.000 euros anuales menos que el salario m¨ªnimo y 3.500 menos que la media que cobraron los trabajadores extranjeros, 16.950 euros. Los mejor retribuidos son los empleados espa?oles (26.488 euros), seguidos de las espa?olas (21.033 euros).

Los trabajadores extranjeros, que tambi¨¦n sufren m¨¢s temporalidad y parcialidad, cobran menos por varios motivos. El principal es que la mayor¨ªa trabaja en sectores en los que las retribuciones son bajas, normalmente los menos productivos y que exigen menos formaci¨®n. Destacan en el servicio dom¨¦stico, con un 45% de los afiliados medios en el r¨¦gimen general. Casi todas son mujeres que sufren salarios escasos, alta informalidad, gran esfuerzo f¨ªsico y mucha temporalidad. Son males parecidos a los del campo, con una porci¨®n de extranjeros del 33% en el sistema especial agrario. ¡°Los espa?oles no quieren esos trabajos y en algunos de ellos cada vez hay m¨¢s demanda, como en los cuidados de personas mayores. Los extranjeros se ven m¨¢s empujados a aceptarlos porque tienen menos red, menos posibilidad de acceder a ayudas y menos familiares o amigos que les puedan ayudar¡±, indica Aparicio.

Esta experta ha estudiado el sesgo en los procesos de selecci¨®n y comprob¨® que los candidatos espa?oles, con curr¨ªculums exactamente iguales, tienen un 35% m¨¢s de posibilidades de ser contratados que los extranjeros. ¡°Existen estudios que documentan un componente de discriminaci¨®n en el mercado laboral hacia personas racializadas, lo que llevar¨ªa a estas personas a una situaci¨®n de mayor dificultad de acceso a determinados puestos de trabajo, empuj¨¢ndolas por lo tanto a peores condiciones¡±, comenta Inmaculada Serrano, directora de la revista Migraciones, del Instituto Universitario de Estudios sobre Migraciones.

Tambi¨¦n destacan en la construcci¨®n, el sector que concentra m¨¢s accidentalidad laboral, con un 20% de los ocupados; y en la hosteler¨ªa, que a los bajos salarios suma horarios que impiden la conciliaci¨®n. Y, a la vez, apenas hay extranjeros en los sectores de mayores retribuciones, m¨¢s valor a?adido y mejor protecci¨®n sindical. Son solo en torno al 10% en la industria y en actividades tecnol¨®gicas. Aparicio apunta que la escasa presencia de inmigrantes en estos sectores conecta con un c¨ªrculo vicioso: como hay pocos extranjeros, es m¨¢s dif¨ªcil que conozcan a un familiar o amigo que les abra las puertas, de lo que s¨ª se benefician los espa?oles. ¡°Visto en perspectiva, hay una mayor entrada en estos sectores; sin embargo, es verdad que a¨²n no puede considerarse representativo debido a los obst¨¢culos administrativos como la homologaci¨®n de t¨ªtulos¡±, lamenta Mongu¨ª. Son a¨²n menos en la gran empresa con jornadas laborales m¨¢s cortas y m¨¢s garant¨ªas frente al despido: solo representan el 1% de los afiliados del sector p¨²blico.

M¨¢s all¨¢ de las muchas barreras que enfrentan los trabajadores extranjeros, se ven lastrados por su menor formaci¨®n. El 50,3% de los trabajadores espa?oles tiene estudios superiores, una proporci¨®n que cae al 35,2% entre aquellos con doble nacionalidad y al 27,6% entre extranjeros. El terrible reverso de este dato es que el 75% de los analfabetos que viven en Espa?a son extranjeros, as¨ª como el 59,8% que ha cursado Primaria pero no ha completado este nivel de estudios. Estas fallas estructurales alejan a extranjeros y empleados con doble nacionalidad de los mejores puestos en las empresas: son el 39,3% en las ocupaciones elementales y solo el 2,5% entre directores y gerentes.

?D¨®nde viven?

La comunidad aut¨®noma que se anota una menor tasa de paro, Baleares (5,7%), es la que m¨¢s trabajadores extranjeros concentr¨® en el tercer trimestre (26,4%). En el otro lado de la balanza, la segunda autonom¨ªa con m¨¢s desempleo, Extremadura (16,5%, la m¨¢s alta despu¨¦s de Andaluc¨ªa), es la comunidad con menos fuerza laboral for¨¢nea, un 5,6%. Este patr¨®n no se cumple con otros territorios: en Canarias el paro tambi¨¦n es muy alto (15,2%), pero se anota la segunda mayor proporci¨®n (18,4%) de trabajadores extranjeros. Y una de las autonom¨ªas con menos desempleo, Euskadi (8,3%), acoge una porci¨®n baja de empleados de diferente nacionalidad (7,1%).

Enache asegura que la actividad econ¨®mica explica parte de este reparto, pero que tambi¨¦n juegan un papel fundamental las comunidades ya asentadas: ¡°Los inmigrantes tienden a asentarse donde ya hay un familiar o un amigo. Por eso la mayor¨ªa de los rumanos de Alcal¨¢ de Henares son de una zona concreta, en torno a Transilvania, y en Castell¨®n son de mi provincia, D?mbovi?a¡±. Asimismo, Gonz¨¢lez-Rabanal destaca la mayor propensi¨®n de los inmigrantes a cambiar de autonom¨ªa en busca de trabajo como otro factor que impulsa su protagonismo en la extraordinaria creaci¨®n de empleo de los ¨²ltimos a?os.

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