La OMC asegura que Europa ¡°act¨²a como un lastre¡± para la recuperaci¨®n del comercio global

¡°Europa est¨¢ actuando como un lastre¡± para la recuperaci¨®n global del intercambio de bienes. Esta es una de las afirmaciones que resuena en el ¨²ltimo informe publicado este mi¨¦rcoles por la Organizaci¨®n Mundial del Comercio, en el que se dibuja a un continente atrapado en una espiral de bajo crecimiento, altos costos energ¨¦ticos y una demanda interna deprimida. Dos de los sectores m¨¢s emblem¨¢ticos de la econom¨ªa europea, como los productos qu¨ªmicos y la industria automotriz, han experimentado una contracci¨®n significativa. En el primer caso, se trata de algo esperado, pues se han dejado atr¨¢s los a?os de pandemia en los que se demandaba una gran cantidad de estas sustancias, claves en la elaboraci¨®n de medicamentos y, por ende, en la vacuna para combatir la covid-19. El par¨®n de la automoci¨®n, sin embargo, ¡°plantea m¨¢s preocupaciones debido a los posibles efectos domin¨® en las cadenas de valor¡±, seg¨²n destaca el documento.

El organismo cree que la debilidad europea, que afecta tanto a sus exportaciones como a sus importaciones, no es un problema meramente local. Por el contrario, est¨¢ afectando negativamente al mercado internacional e impide un mayor crecimiento. Las previsiones para 2024 se han revisado ligeramente al alza, con un repunte de los flujos internacionales de mercanc¨ªas del 2,7% (una d¨¦cima m¨¢s que lo estimado en abril), pero se debe a Asia, que es con diferencia la regi¨®n que mejores niveles tendr¨¢ en materia de exportaciones (un 7,4%) y que es, de facto, la que sostendr¨¢ globalmente la recuperaci¨®n de este a?o, con un aumento del Producto Interior Bruto (PIB) del 4%.

En cambio, Europa ser¨¢ la ¨²nica regi¨®n que este a?o tendr¨¢ una tasa negativa en la venta de mercanc¨ªas, con un retroceso interanual del 1,4%, y la que tendr¨¢ el crecimiento econ¨®mico m¨¢s d¨¦bil: del 1,1%, seg¨²n la OMC. Adem¨¢s, el informe cifra el impacto negativo del Viejo Continente: restar¨¢ 0,8 puntos porcentuales al crecimiento de las importaciones mundiales, y un 0,5% a las exportaciones de este a?o.

El panorama de las importaciones europeas no es mucho m¨¢s alentador. En este a?o se ha registrado una fuerte contracci¨®n en la adquisici¨®n de maquinaria, especialmente en la procedente de China. La tensi¨®n comercial, que crece d¨ªa a d¨ªa entre ambas partes, ha jugado un papel en este retroceso. Pero las represalias arancelarias no son la ¨²nica explicaci¨®n. De hecho, econom¨ªas alineadas geopol¨ªticamente con Europa, como Corea del Sur, Jap¨®n e incluso Estados Unidos, est¨¢n experimentando tendencias similares, lo que sugiere que la debilidad en las importaciones de maquinaria responde a un problema m¨¢s amplio de falta de demanda y competitividad en la regi¨®n.

En cualquier caso, la pugna comercial entre Bruselas y Pek¨ªn s¨ª ha alterado las din¨¢micas comerciales europeas, aumentando las importaciones de otros pa¨ªses asi¨¢ticos como Vietnam o India. Para la OMC, esto podr¨ªa ser una se?al del papel emergente de estos pa¨ªses como ¡°econom¨ªas de conectividad¡±, que est¨¢n ganando protagonismo al insertarse en las redes de suministro globales, particularmente en un contexto de creciente diversificaci¨®n y b¨²squeda de alternativas a China como el gran proveedor mundial de productos manufacturados. Jap¨®n es el ¨²nico miembro asi¨¢tico que est¨¢ estancado en 2024, despu¨¦s de que el a?o pasado registrara una contracci¨®n en sus exportaciones.

El caso m¨¢s preocupante, sin duda, es Alemania. Su PIB cay¨® un 0,3% en el segundo trimestre de 2024, y el propio Gobierno estima un retroceso al cierre de a?o del 0,2%. La industria automotriz alemana se enfrenta a una doble amenaza: una ca¨ªda en la demanda global y la creciente competencia de los fabricantes asi¨¢ticos. Esta contracci¨®n no solo afecta a los trabajadores nacionales, sino a toda una red de proveedores y exportadores en el extranjero que dependen de estos productores. Francia tampoco est¨¢ mejor. Sus exportaciones han ca¨ªdo un 3% en la primera mitad del a?o y las importaciones un 7%.

Europa est¨¢ fallando donde otros logran avances. Mientras que la pol¨ªtica monetaria expansiva en pa¨ªses como Estados Unidos y China est¨¢ ayudando a revitalizar la demanda interna y a estabilizar las cadenas de suministro, Europa parece estar atrapada en un ciclo de bajo crecimiento y falta de inversi¨®n. La regi¨®n no solo tiene que lidiar con los efectos persistentes de la crisis energ¨¦tica derivada de la invasi¨®n de Ucrania en 2022, sino tambi¨¦n con la rigidez de sus mercados laborales y la lentitud de las reformas estructurales necesarias para competir en un entorno global que est¨¢ cambiando r¨¢pidamente.

El organismo con sede en Ginebra admite que en los ¨²ltimos tres a?os, las cadenas de suministro globales se han ido reconfigurando de manera cada vez m¨¢s regional. El comercio entre bloques geopol¨ªticos se est¨¢ intensificando, y Europa, que sol¨ªa ser un centro neur¨¢lgico de estas redes comerciales, est¨¢ perdiendo influencia. Los pa¨ªses que sol¨ªan depender de las exportaciones europeas ahora est¨¢n buscando alternativas en Asia y Am¨¦rica Latina. El surgimiento de Vietnam y M¨¦xico como proveedores clave para Estados Unidos y China es una prueba de esa menor interdependencia centrada en Europa.

Los 27 han sido hist¨®ricamente vulnerables a las fluctuaciones en los precios de la energ¨ªa, y aunque los costos del gas han ca¨ªdo desde los niveles alcanzados durante los primeros meses de la guerra en Ucrania, siguen siendo significativamente m¨¢s altos que en otras regiones, como Estados Unidos. Esta diferencia afecta la competitividad de las industrias europeas y limita su capacidad para responder a futuros problemas, seg¨²n el organismo. A pesar de este panorama complicado, hay margen para que se revierta esta tendencia. El reciente descenso en la inflaci¨®n podr¨ªa permitir a los bancos centrales europeos aplicar pol¨ªticas monetarias m¨¢s flexibles, lo que ayudar¨ªa a estimular la inversi¨®n y el consumo.