El riesgo de la fragmentaci¨®n europea
La econom¨ªa espa?ola se enfrenta a un entorno continental debilitado y con visiones heterog¨¦neas
El diagn¨®stico compartido de los informes elaborados por Enrico Letta y Mario Draghi para prevenir el riesgo de declive econ¨®mico europeo frente a las grandes potencias hab¨ªa despertado una cierta esperanza. La realidad, de momento, apunta a una fragmentaci¨®n persistente. Para empezar, el declive cuasi general es ya patente ¡ªEspa?a est¨¢ siendo de momento una excepci¨®n¡ª, condicionando el margen de acci¨®n comunitaria.
La recuperaci¨®n que se anticipaba para este a?o no se ha producido, ni se la espera en el corto plazo: la zona euro crecer¨¢ menos del 1% en 2024, y todo apunta a que las grandes potencias industriales del centro de Europa adolecen de un mal estructural, no de una gripe pasajera. Esta es al menos la advertencia del siempre influyente presidente del Bundesbank. Su giro discursivo, reflejo de la preocupaci¨®n, aboga por una relajaci¨®n de los objetivos fiscales en su pa¨ªs para dejar espacio a la inversi¨®n p¨²blica y as¨ª potenciar el ajuste.
De manera similar, el instituto estad¨ªstico de Italia reconoce que, finalmente, la econom¨ªa transalpina crecer¨¢ apenas medio punto este a?o, la mitad de lo vaticinado hace solo unos meses, complicando tambi¨¦n la senda presupuestaria. Francia se enfrenta al reto de tener que ajustar sus cuentas p¨²blicas en una econom¨ªa renqueante y sin consenso pol¨ªtico. Algunas se?ales de moderaci¨®n del crecimiento han aparecido en Espa?a a tenor de los datos de afiliaci¨®n a la Seguridad Social y de diversos indicadores coyunturales ¡ªel indicador adelantado PMI se orienta a la baja, si bien se sit¨²a todav¨ªa en terreno expansivo¡ª.
El mercado laboral sigue resistiendo, pero este dique de contenci¨®n empieza a ceder en algunos sectores como el del autom¨®vil. Prueba de ello, la reducci¨®n de la demanda: la proporci¨®n de empleos que se encuentran vacantes se ha reducido un 27% en Alemania y un 15% en el conjunto de la Uni¨®n Europea. En Espa?a, el indicador, con escasa representatividad, apenas registra variaciones. Todo ello dibuja un panorama poco alentador al menos para los pr¨®ximos dos a?os. En Alemania, el esfuerzo de ajuste realizado a principios de siglo tard¨® cinco a?os en dar frutos. Adem¨¢s, la recuperaci¨®n fue posible en buena parte gracias a la bonanza de los mercados de exportaci¨®n, bal¨®n de ox¨ªgeno para la locomotora industrial alemana. La tendencia actual es la inversa, por la proliferaci¨®n de medidas de corte proteccionista y con los excedentes europeos en el punto de mira de la agenda comercial de Trump.
Frente al esfuerzo colectivo de inversi¨®n reclamado en el informe Draghi, los Estados miembros van a considerar que la prioridad pasa por una acci¨®n centrada en resolver sus propios desequilibrios. La excepci¨®n podr¨ªa ser la defensa, seg¨²n el reci¨¦n anunciado programa de inversiones de hasta 500.000 millones de euros, ampliado al Reino Unido. Espa?a, por tanto, tendr¨¢ que contentarse con el remanente de fondos europeos que queda por ejecutar hasta 2026 (el plazo sigue siendo m¨¢s largo para los pr¨¦stamos). Por otra parte, los beneficios de reformas regulatorias destinadas a profundizar el mercado ¨²nico ser¨ªan considerables para una econom¨ªa competitiva como la espa?ola que acumula los super¨¢vits en sus intercambios con el resto de los socios comunitarios. Esta v¨ªa, en la que ahonda el informe Letta, supone cesiones de soberan¨ªa nacional pero no requiere de fondos p¨²blicos, de modo que podr¨ªa ser m¨¢s asumible para algunos pa¨ªses. El fortalecimiento de la uni¨®n econ¨®mica y financiera ser¨ªa tambi¨¦n una manera eficaz de contrarrestar las amenazas proteccionistas. En todo caso, tales reformas llevar¨¢n tiempo.
Entre tanto, nos enfrentamos a un entorno europeo d¨¦bil, con una capacidad fiscal casi nula en Europa y desigual entre los Estados. Todo ello restar¨¢ fuelle al impulso exterior de la econom¨ªa espa?ola. El contexto es propicio a un descenso adicional de los tipos de inter¨¦s por parte del BCE, pero har¨¢ falta una acci¨®n m¨¢s contundente y avanzar en la integraci¨®n europea para despejar las incertidumbres que lastran la inversi¨®n.
Empleo
Estos últimos años, el mercado laboral en España ha tenido un comportamiento favorable ante la sucesión de crisis, jugando un papel de estabilizador automático. Sin embargo, la tendencia en el mercado de trabajo podría estar cambiando: según los datos de Eurostat para la eurozona, el empleo apenas creció un 0,1% en total en el segundo y tercer trimestre de este año, medio punto menos que el PIB, frente al 0,6% de los dos trimestres anteriores, el doble que el PIB. En España el empleo también se modera, pero en un entorno económico más dinámico que facilita el descenso del paro.
Raymond Torres es director de Coyuntura de Funcas. En X: @RaymondTorres_
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.