Larry Bacow: ¡°Acept¨¦ presidir Harvard porque la educaci¨®n superior ha sido da?ada, tildada de elitista¡±
Los padres del gestor, emigrantes jud¨ªos, llegaron sin nada a Estados Unidos y ¨¦l siente la responsabilidad de luchar contra la pobreza en un pa¨ªs ¡°con la democracia amenazada¡±
El abogado y economista Larry Bacow (Detroit, 72 a?os) abandon¨® el pasado junio el puesto de rector de la Universidad de Harvard, l¨ªder de cualquier ranking universitario, en un momento de turbulencias. El mandato de Bacow (2018-2023), exrector de la Universidad de Tufts (2001-2011) y profesor del Instituto de Tecnolog¨ªa de Massachusetts (MIT) 24 a?os, ha estado repleto de obst¨¢culos: la gesti¨®n de la pandemia, el fin de la discriminaci¨®n racial positiva o la revelaci¨®n del esc¨¢ndalo de los sobornos en el proceso de matriculaci¨®n. Hijo de emigrantes jud¨ªos, evita pronunciarse sobre los bombardeos de Israel, pero con enorme emoci¨®n recuerda sus gestiones para lograr que volviese a tiempo un estudiante palestino deportado.
Bacow, experto en pol¨ªticas medioambientales, concedi¨® la pasada semana una entrevista a EL PA?S en el marco de un encuentro en Madrid de la de Talloires Network, una red de instituciones acad¨¦micas socialmente responsables que ¨¦l fund¨® y de la que es socia la Universidad Camilo Jos¨¦ Cela (UCJC), que actu¨® como anfitriona. Al terminar la entrevista, Bacow entrega su tarjeta de presentaci¨®n con tanta humildad que apabulla.
Pregunta. ?Por qu¨¦ fund¨® esta red que se re¨²ne ahora en Madrid?
Respuesta. En 2005, cuando era rector de Tufts, organic¨¦ en Tallories, los Alpes franceses, una conferencia de 28 rectores para habar sobre la responsabilidad social de las universidades. Acudieron algunas del antiguo bloque sovi¨¦tico, de pa¨ªses con democracias emergentes o de sitios extremadamente pobres que tienen en la educaci¨®n una baza para progresar. En la Declaraci¨®n de Tallories nos comprometimos a intercambiar buenas pr¨¢cticas. Ya somos 431. Se est¨¢n haciendo cosas realmente importantes en zonas donde las universidades son un faro de esperanza y oportunidad.
Hay muchas oportunidades de hacer cosas. Somos una naci¨®n muy rica, pero con mucha pobreza
P. Para muchos, la Ivy League (conferencia de ocho universidades del top en el nordeste del pa¨ªs) es una ¨¦lite alejada de la sociedad. ?Su contribuci¨®n en la pandemia¨Dlos laboratorios de Harvard participaron en las vacunas de Moderna y Johnson & Johnson¨D ha mejorado su imagen?
R. Nosotros contribuimos, pero como muchos otros. Adem¨¢s de las vacunas, hay que ayudar a las universidades de pa¨ªses sin recursos que tengan un impacto local. Harvard y el MIT han creado EDX, una plataforma con una gran cantidad de cursos online gratuitos. Permitimos, adem¨¢s, que las instituciones locales adapten los contenidos sin pagar. Hay muchas oportunidades de hacer cosas, pero tambi¨¦n a nivel interno. Estados Unidos es una naci¨®n muy rica, pero con mucha pobreza. Tenemos una larga tradici¨®n de democracia y ahora est¨¢ amenazada.
P. ?Realmente lo cree?
R. Absolutamente. Por primera vez en la historia se ha impugnado una elecci¨®n y el traspaso de poderes no fue fluido. Parece que la democracia est¨¢ bajo presi¨®n, vayas por donde vayas en el mundo. En nuestro patio trasero hay que ayudar a los sin techo, mejorar el acceso a los cuidados m¨¦dicos, a la educaci¨®n o la justicia. Y hay que inculcar el sentido de la responsabilidad c¨ªvica y social a los estudiantes que no van a trabajar en una ONG. Jamie Dimon, presidente de JP Morgan Chase Bank, graduado de Tufs y de la Business School de Harvard, ha invertido miles de millones de d¨®lares en barrios pobres de Estados Unidos, pero no solo porque es lo correcto para terminar con la desigualdad, sino porque es bueno para el negocio. Si progresan, utilizar¨¢n m¨¢s servicios bancarios. Necesitamos otros l¨ªderes como Dimon.
Tenemos que trabajar duro para asegurarnos que la pr¨®xima generaci¨®n va a disfrutar del sue?o americano
P. ?Cree que el sue?o americano persiste? ?Pervive la meritocracia?
R. S¨ª, existe a¨²n, pero tenemos que trabajar duro para asegurarnos de que la pr¨®xima generaci¨®n va a disfrutarlo. Yo tuve el privilegio de vivir el sue?o americano. Mis dos padres eran refugiados [bielorruso y alemana]. Es extraordinario que en una sola generaci¨®n uno pueda pasar de no tener nada a ser rector de Harvard. Eso me motiva. Todos los afortunados tenemos la responsabilidad de ayudar.
P. El Tribunal Supremo de Estados Unidos ha terminado con la discriminaci¨®n positiva por motivos raciales que las universidades aplicaban en sus procesos de admisi¨®n de personas negras o latinas tras una denuncia de la comunidad asi¨¢tica. ?Le preocupa?
R. Nosotros lo llamamos acci¨®n positiva. ?Que si tendr¨¢ consecuencias? Absolutamente. Un entorno de aprendizaje diverso mejora las posibilidades de aprender. Es una gran suerte que est¨¦n todos juntos, porque uno aprende de s¨ª mismo y de los otros. Hay que tener muchos factores en cuenta en la admisi¨®n, no se trata solo de n¨²meros, de test estandarizados.
Los alumnos de familias desfavorecidas tienen muchas, muchas, desventajas
P. Pero si uno es pobre, no puede pagar que alguien le haga la carta de motivaci¨®n para entrar en Harvard.
R. De acuerdo. Los alumnos de familias desfavorecidas tienen muchas, muchas desventajas. Los padres con dinero, que muchas veces han estudiado ya en los colleges, pueden asegurarse de mandar a sus hijos a los mejores colegios y de que tengan una experiencia que les hagan mejores solicitantes: pasant¨ªas, trabajar o estudiar en el extranjero... Cuando buscas contratar a alguien, no solo te fijas en su experiencia laboral, sino en otras referencias. Tiene que ser as¨ª el proceso de admisi¨®n.
P. Resulta muy simb¨®lica estos d¨ªas de guerra la historia de Ismail Ajjawi, casi desconocida en Espa?a.
R. Es un chico palestino que creci¨® en un campo de refugiados en el L¨ªbano. Fue admitido en 2019 en Harvard con una beca completa: viaje, estancia, ordenador, libros¡ En el control en Boston le revisaron las redes sociales del m¨®vil y concluyeron que sus amigos hab¨ªan escrito mensajes radicales. Le deportaron. Es algo que me indign¨®. Record¨¦ las historias que contaba mi madre de sus intentos de salir de Alemania por la frontera francesa [estuvo en un campo de concentraci¨®n tres a?os]. Le mandaron en el primer vuelo de vuelta al L¨ªbano y trabajamos duro para conseguir que volviese a tiempo del inicio de las clases. ?Lo logramos! Literalmente lleg¨® cinco minutos antes de que se hiciese la foto de su promoci¨®n. En su habitaci¨®n le esperaban unas golosinas libanesas. Quer¨ªamos que se sintiese bienvenido.
P. Treinta grupos de alumnos de Harvard han manifestado que toda la culpa de la guerra es de Israel. ?Cree que la universidad debe tomar partido?
R. Prefiero no hablar de ello. No quiero que parezca que doy un consejo a mi sucesora o ser cr¨ªtico.
P. Por fin, una segunda mujer en el cargo, Claudine Gay, que es adem¨¢s el primer rector de raza negra.
R. S¨ª, Hemos tenido 30 rectores desde 1636. Es la universidad m¨¢s antigua de Estados Unidos. Cuando la Declaraci¨®n de Independencia se firm¨®, Harvard ten¨ªa ya 140 a?os. Por cierto, siete de los firmantes eran alumni de Harvard.
P. ?Por qu¨¦ en 2018 termin¨® aceptando ser rector?
R. La educaci¨®n superior hab¨ªa sido da?ada, tildada de elitista. Eso no era solo equivocado, sino un peligro que pod¨ªa impedir que la gente tuviese la oportunidad de estudiar. Me preocuparon los esfuerzos para limitar la capacidad de voto de ciertos grupos, una amenaza para el proceso democr¨¢tico. A menudo se ve al rector de Harvard como la voz de la educaci¨®n superior y pens¨¦ que no era momento de estar en el banquillo, sino de hacer un servicio p¨²blico. Y acept¨¦. He dedicado mucho tiempo a trabajar para que alumnos de zonas de guerra o privaci¨®n pudiesen permanecer en Estados Unidos cuando nuestro Gobierno [Donald Trump] pretend¨ªa mandarles a casa. Y, adem¨¢s, pensaba que Harvard ten¨ªa que dedicar m¨¢s esfuerzos al cambio clim¨¢tico, la justicia social o el futuro de la democracia. Las instituciones tienen que contribuir a solventar los mayores retos de la humanidad: el futuro de las ciudades, las pandemias globales¡
P. Ustedes han creado un fondo de 100 millones de d¨®lares para investigar y reparar sus lazos con la esclavitud (algunos benefactores se aprovecharon).
R. Hemos rastreado mucho sobre el legado de la esclavitud en la desigualdad, la pobreza, el acceso a la sanidad, la educaci¨®n¡ Tras la Guerra Civil, surgieron los colleges y universidades para j¨®venes negros, porque los estados no les quer¨ªan en sus aulas. Sistem¨¢ticamente, han estado mal financiadas y nos esforzamos un grupo de instituciones en que mejoren. Queremos asegurarnos que estas minor¨ªas accedan a Harvard. Por eso luchamos duro en el Supremo. Terminar con el legado de la esclavitud es un reto enorme, pero por alg¨²n lado hay que empezar.
P. ?Es verdad que son ustedes la segunda instituci¨®n privada m¨¢s rica del mundo tras el Vaticano?
R. ?No lo s¨¦! Somos la universidad m¨¢s rica de Estados Unidos.
No le doy mucho cr¨¦dito a los ¡®rankings¡¯. Los alumnos pueden recibir una buena educaci¨®n en muchos sitios
P. Y son ustedes la mejor universidad, seg¨²n los ¡®rankings¡¯ internacionales.
R. No les doy mucho cr¨¦dito. Los alumnos pueden recibir una buena educaci¨®n en muchos sitios, tambi¨¦n en Espa?a. La gente presta demasiada atenci¨®n a las universidades de ¨¦lite y no suficiente a su patio trasero. En Harvard y la Ivy League solo formamos a un n¨²mero muy peque?o de estudiantes. Admitimos a 1.650 en grado y tenemos entre 40.000 y 60.000 solicitantes. Yo la licenciatura no la hice en Harvard, sino m¨¢s abajo de la calle, en el MIT, que es una estupenda universidad. Creo que ambas son muy buenas porque compiten y colaboran.
P. Las universidades europeas se centran en retos modestos y me sorprende que los retos de ustedes son siempre para salvar la humanidad. Otra dimensi¨®n.
R. Tenemos todo tipo de universidades ¨Dcentradas en la docencia, en la investigaci¨®n, religiosas, t¨¦cnicas, seculares¡¨D y creo que su calidad es muy buena porque compiten entre ellas y eso lleva a la innovaci¨®n.
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