El inter¨¦s por estudiar el grado en Videojuegos se dispara tras practicar en la pandemia
Los alumnos, que se han triplicado en siete a?os, aprenden a usar la tecnolog¨ªa no solo en el entretenimiento, sino en la educaci¨®n, la salud, la comunicaci¨®n, las aplicaciones m¨®viles o el metaverso
Un personaje que transita por un municipio despoblado para encontrar cobertura m¨®vil o uno que reparte ofrendas en una sede bajo tierra. Los nativos digitales aprovechan la oportunidad que les ofrecen las universidades espa?olas para convertir su afici¨®n en su trabajo. Los apasionados de los videojuegos desarrollan sus propias estrategias, personajes y entornos digitales en las aulas. El auge de esta industria y el aumento del tiempo invertido en esta actividad l¨²dica virtual han hecho que crezca la demanda en el grado de Dise?o y Desarrollo de Videojuegos. El n¨²mero de alumnos matriculados en esta carrera en Espa?a se ha triplicado en los ¨²ltimos siete a?os. En 2015 eran 669, ahora son m¨¢s de 1.760, seg¨²n datos del Sistema Universitario Espa?ol (SUE). ¡°Durante la pandemia han jugado mucho m¨¢s, pero ya hab¨ªa un fuerte inter¨¦s antes¡±, dice Dan Casas, coordinador del grado en la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid.
En Espa?a hay 13 carreras relacionadas con la creaci¨®n y el dise?o de videojuegos en cuatro comunidades aut¨®nomas. Catalu?a es el epicentro de esta formaci¨®n, la titulaci¨®n se imparte en cinco universidades. Le sigue Madrid con dos. Y a la cola se encuentran Galicia y la Comunidad Valenciana con un grado cada una. Las notas de corte subi¨® ligeramente el a?o pasado frente al anterior. En algunas hasta casi un punto, como en la Polit¨¦cnica de Catalu?a (7,16 en espa?ol y 7,88 en ingl¨¦s), o medio punto, como en la Jaume I de Castell¨®n (10,02).
Aumentan las notas de corte y otras universidades se suman a ofrecer el grado. ¡°Al haber m¨¢s oferta, las notas tendr¨ªan que bajar. Sin embargo, no paran de subir. Es una barbaridad¡±, explica Ra¨²l Montoliu, vicedirector del grado en la Universidad Jaume I de Castell¨®n, la primera en impartir estos estudios en Espa?a hace una d¨¦cada.
El consumo de juegos online aument¨® en un 75% durante la cuarentena en Espa?a, seg¨²n un estudio sobre eSports del grupo especializado AcuityAds. El universitario Alejandro Alonso, de 21 a?os, lo firma: ¡°Cuando est¨¢bamos todos encerrados, me pasaba todas las tardes con mis amigos conectado, jugando. Nos abrimos un servidor en un juego y no par¨¢bamos¡±. Dos a?os despu¨¦s, se prepara para la clase de animaci¨®n 3D en la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid. ¡°Los j¨®venes hemos dedicado m¨¢s horas a jugar videojuegos, por lo que ha aumentado el inter¨¦s en ellos¡±, asume Alejandro Asensio, de 20 a?os, que dice que los interesados tienen poco margen para elegir grados dedicados profesionalmente a ello.
En este centro de la URJC, los estudiantes prueban sus prototipos a trav¨¦s de gafas de realidad virtual que cuestan 400 euros por unidad. Las facultades tienen que hacer fuertes desembolsos econ¨®micos para actualizar las t¨¦cnicas de aprender en clase. ¡°Esta carrera es un poco m¨¢s art¨ªstica y creativa que una ingenier¨ªa inform¨¢tica¡±, asegura Alonso. Pero, su compa?ero, Juan Gradolph, de 20 a?os, se queja de la falta de modelos en las aulas: ¡°Yo leo muchas rese?as de c¨®mo se hace un videojuego para que sea bueno, pero aqu¨ª vemos poco de eso, porque es una carrera muy joven y casi no hay profesores que se hayan dedicado a la industria¡±.
Durante la clase, los alumnos aprenden a programar un c¨®digo para crear una herramienta que permite la movilidad de los objetos de un juego. Programan un c¨®digo y eligen los par¨¢metros para que el objeto se pueda deformar. Mientras ellos practican con los ordenadores, Miguel Otaduy, profesor e inform¨¢tico, explica: ¡°Crean herramientas a partir de la programaci¨®n para que luego el dise?ador o artista pueda utilizarlas para elaborar el videojuego¡±.
A pesar de que el grueso de la formaci¨®n de cuatro a?os suele ser la programaci¨®n inform¨¢tica, se establece una panor¨¢mica del proceso de creaci¨®n de videojuegos. Por una parte, el dise?o visual de los personajes y los entornos con asignaturas como dibujo o ilustraci¨®n. Por otra, la creaci¨®n de la mec¨¢nica y las reglas del juego a trav¨¦s de clases narrativas digitales. Se plantea como una adaptaci¨®n al grado de Ingenier¨ªa Inform¨¢tica, pero se centra en contenidos orientados a la creaci¨®n de videojuegos: inform¨¢tica, artes digitales y cultura visual. Matem¨¢ticas, dise?o 3D, t¨¦cnicas de animaci¨®n, rob¨®tica y composici¨®n son algunas de las asignaturas que se imparten.
Marta Fern¨¢ndez, coordinadora de grado en la Universidad Polit¨¦cnica de Catalu?a, atribuye tambi¨¦n el aumento de la demanda a que, seg¨²n ella, los videojuegos han experimentado una legitimaci¨®n progresiva: ¡°Aunque sigue estando un poco estigmatizado, porque en determinadas condiciones puede causar adicci¨®n o problemas con la violencia, este pensamiento se ha ido relativizando¡±. La profesora asegura que las herramientas que se les ense?a a los estudiantes no son solo para dise?ar videojuegos de entretenimiento, sino tambi¨¦n est¨¢n orientados a la educaci¨®n, la salud, la comunicaci¨®n, las aplicaciones m¨®viles o el metaverso.
M¨¢s competencia en el mundo laboral
Muchos de los estudiantes tienen una inclinaci¨®n muy fuerte por la cultura de los videojuegos y sus referentes. M¨¢s que inform¨¢ticos, muchos se consideran artistas. Como Ana Bolumar, de 25 a?os, que lleva varios meses buscando trabajo: ¡°Como programadora hay muchas m¨¢s ofertas para gente joven. Pero, en la rama art¨ªstica, las empresas buscan a personas con experiencia¡±. La valenciana comenta que ahora hay m¨¢s gente que estudia Videojuegos y, por lo tanto, m¨¢s competencia. Desde muy peque?a le apasiona dibujar y vio en Videojuegos la oportunidad de dedicarse al arte en un mundo laboral cada vez m¨¢s digital e interactivo que requiere competencias inform¨¢ticas. Pero, especializarse es un privilegio que no todos los j¨®venes se pueden permitir, puesto que la mayor¨ªa de los m¨¢steres son privados y costosos: ¡°Al terminar la carrera decid¨ª aprender ilustraci¨®n de videojuegos yo sola viendo v¨ªdeos y tutoriales en internet¡±.
Como creador en b¨²squeda de personal cualificado, David Rodr¨ªguez, de 31 a?os, explica que en su estudio est¨¢n recibiendo muchos curr¨ªculums de estudiantes que acaban de terminar sus estudios. El empresario, que pertenece a la primera promoci¨®n que se gradu¨® en Espa?a, coincide en que hay m¨¢s competencia que antes porque el sector est¨¢ creciendo. Durante su segundo a?o en la universidad, la idea de dise?ar un videojuego deriv¨® en la creaci¨®n de un estudio creativo junto a uno de sus compa?eros. ¡°Nos cost¨® arrancar, pero la carrera nos dio una base y, sobre todo, hicimos contactos con gente que nos pod¨ªa ayudar a desarrollarlo¡±, recuerda ocho a?os despu¨¦s. Y destaca que durante la pandemia han notado una subida exponencial de trabajo: ¡°Nos llegaron casi el doble de proyectos. Antes ¨¦ramos tres personas en la oficina y ahora 15¡±.
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