Las primeras salidas de los ni?os y las ni?as: tipos de juego para aprovechar el tiempo
Son buenas aquellas actividades de car¨¢cter f¨ªsico que ayuden al desarrollo corporal, pero tambi¨¦n las realcionadas con la creatividad y la relaci¨®n con el entorno natural al aire libre
Despu¨¦s de un mes y medio sin pisar la calle, los ni?os y las ni?as pueden volver a hacerlo desde el domingo. Las condiciones para ello las supimos la semana pasada a trav¨¦s de una rueda de prensa ofrecida por el ministro de Sanidad, Salvador Illa, y por el vicepresidente del Gobierno, Pablo Iglesias; un momento que este ¨²ltimo aprovech¨® tambi¨¦n para dirigirse a los ni?os y ni?as: "Quiero daros las gracias. A veces podemos hacer mal las cosas, y por eso os pedimos perd¨®n". Los paseos, ya sabemos: pueden realizarse junto con un adulto una vez al d¨ªa, entre las 9 de la ma?ana y las 9 de la noche. El tiempo est¨¢ limitado a una hora diaria y a una distancia m¨¢xima de un kil¨®metro de sus hogares. Aunque el mismo domingo circularon las mismas cuatro fotos bajo el hashtag #irresponsables denunciando el incumplimiento de alguno de los puntos, lo cierto es que fue un d¨ªa feliz para la infancia que transcurri¨® sin que supi¨¦ramos de mayores incidentes. De hecho, como contrapeso a esas im¨¢genes, las m¨¢s de 700 que recogieron en 24 horas los hashtags #sabemoscuidar y #sabemoscuidarnos que animaron a usar desde Madres por el clima. La idea, seg¨²n informan desde el colectivo, era que las familias pudieran compartir fotos de sus hijos e hijas ¡°y celebrar que por fin se tiene en consideraci¨®n a la infancia¡±. Tambi¨¦n hacer visible que, en medio del ruido, habitaba, adem¨¢s, la responsabilidad de lo familiar para lo colectivo.
Partiendo de la idea de que el juego es un derecho fundamental para la infancia, y de que los ni?os necesitan moverse al aire libre, ?podemos aprovechar estas salidas para el juego? ?Qu¨¦ juegos pueden hacerse realmente? A la primera pregunta responde Andr¨¦s Paya, doctor en Pedagog¨ªa y profesor titular de la Universidad de Valencia, que estos momentos no solo se pueden aprovechar para el juego sino que ¡°se deben¡± aprovechar. ¡°Representar¨¢n esos momentos de libertad y relaci¨®n con el espacio p¨²blico, del que se les ha visto privados o vetados a tantos menores durante estas semanas de confinamiento¡±, dice. Me atiende durante su franja "laborable", ya que tiene un beb¨¦ de nueve meses y ¨¦l y su mujer se turnan para trabajar. ¡°Te hablo no solo como "experto" sino como sujeto "paciente" del confinamiento infantil¡±, bromea.
Sobre si se ha tenido en cuenta las necesidades de la infancia en esta crisis, y si se ha vulnerado el derecho al juego de la infancia, Paya considera que la emergencia sanitaria y la excepcionalidad de la situaci¨®n han priorizado la salud de la poblaci¨®n en general, ¡°pero han olvidado que parte de esa salud y de las necesidades esenciales de la infancia, pasan por un juego abundante, de calidad y al aire libre¡±. Recuerda tambi¨¦n que otros pa¨ªses han tomado medidas m¨¢s atentas a la infancia, consider¨¢ndolos como ciudadanos sujetos de derechos. ¡°Personalmente creo que se ha vulnerado el derecho al juego de la infancia, limitando las posibilidades que, ya de por si, estaban bastante restringidas¡±. ?Es m¨¢s importante a¨²n el juego en este periodo tan excepcional de confinamiento? ¡°Por supuesto, pues si el juego es esencial para la infancia (como el alimento, el descanso, el afecto...) todav¨ªa lo es m¨¢s cuando sus rutinas se han visto repentinamente alteradas. El juego les ayuda a sublimar, a imaginar otras realidades alternativas, a relacionarse con sus familiares, a expresar sentimientos... y en este per¨ªodo excepcional, el juego infantil ayuda a canalizar todas estas emociones y situaciones¡±, se?ala.
Le pregunto a Katia Hueso, bi¨®loga y fundadora de El saltamontes, la primera escuela de la naturaleza de Espa?a, y autora de Jugar al aire libre, si cree que son importantes estas salidas y si deber¨ªa haberse pensado m¨¢s en la infancia en este sentido. Dice que entiende que estas salidas han sido avaladas por los expertos en salud p¨²blica, y que se alegra mucho de que los ni?os y ni?as puedan estar al fin un rato al aire libre. ¡°?Sin duda fue un domingo muy especial para muchos!¡±, se?ala. La experta considera que especialmente para aquellos ni?os y ni?as que est¨¢n pasando el confinamiento en espacios peque?os ¡°es un alivio poder pasear, respirar un aire diferente, ver m¨¢s all¨¢ de las paredes, escuchar el sonido sosegado de las ciudades¡± y que, por supuesto, tambi¨¦n es un respiro para los propios adultos, pues cree que a ciertas edades ¡°es dif¨ªcil conseguir que los ni?os est¨¦n tranquilos en casa o acepten un cambio de rutina tan dr¨¢stico como el que nos ha tocado vivir¡±.
En cuanto a si deber¨ªa haberse pensado antes sobre este asunto, en opini¨®n de Katia Hueso ha sido un debate que se ha gestionado mal. ¡°Aunque respeto que se haya tardado en dar este paso, pues entiendo que hab¨ªa razones de peso para ello, opino que se deber¨ªa haber tenido una cierta consideraci¨®n por este colectivo y haberlo demostrado en las numerosas comparecencias oficiales. En otros pa¨ªses se han celebrado de forma habitual ruedas de prensa especiales para ni?os y j¨®venes, en las que se han explicado la situaci¨®n y las decisiones directamente a ellos, si bien es cierto que ya se hac¨ªa de forma habitual¡±, sostiene.
Juegos de car¨¢cter f¨ªsico y el disfrute del momento
Pasar¨¢ a¨²n mucho tiempo hasta que volvamos a recuperar cierta normalidad. De hecho, es complicado saber qu¨¦ entenderemos como ¡°normalidad¡± despu¨¦s de todo esto. Tambi¨¦n cabe plantearse si en aquella normalidad de un pasado que ya parece tan lejano, la infancia ten¨ªa tiempo para el juego o si, por el contrario, cada vez ten¨ªa menos, como denunciaba en una entrevista en este mismo medio Andr¨¦s Paya en 2018. As¨ª lo ve tambi¨¦n Katia Hueso quien apunta que, siendo honestos, ¡°los ni?os no pisaban mucho la calle, tan ocupados como estaban en ser llevados de una actividad a otra¡±. Hueso cree por esto que puede ser ¡°un buen momento para aprender a disfrutar de las peque?as cosas, agradecer lo que tenemos y reconstruir una sociedad menos acelerada, en la que los juegos en la calle recuperen el protagonismo que nunca deber¨ªan haber perdido¡±. Mientras tanto, se mantiene optimista, y prefiere pensar que las decisiones que se han tomado, han sido con el objetivo proteger no solo la salud de los ni?os y de sus familias, sino la de todos. ¡°Por mi formaci¨®n cient¨ªfica, s¨¦ que es importante ir dando los pasos de uno en uno, con cautela, para valorar si hay cambios en la situaci¨®n (tanto en positivo como en negativo), analizar a qu¨¦ pueden obedecer y actuar en consecuencia. Y as¨ª, poco a poco, podremos ir construyendo esa nueva normalidad en la que los ni?os pueblen los parques y jardines con sus juegos. De momento, tienen esa hora al aire libre para disfrutar, ya es un gran avance¡±, manifiesta.
?Qu¨¦ tipo de juegos pueden aprovechar para hacer al aire libre? Andr¨¦s Paya explica que se puede aprovechar para aquellos que el ¨¢mbito dom¨¦stico y los limitados espacios disponibles en casa no permit¨ªan. ¡°Fundamentalmente juegos de car¨¢cter f¨ªsico que ayuden al desarrollo corporal, pero tambi¨¦n otros de desarrollo de la creatividad y de relaci¨®n con el entorno natural al aire libre¡±. Se?ala que el distanciamiento social, que necesariamente habremos de respetar, no permitir¨¢ la interacci¨®n con otros ni?os y ni?as, impidiendo rencontrarse con iguales, relacionarse y desarrollar juegos simb¨®licos, de reglas u otros de ¨ªndole m¨¢s social junto a otros jugadores, pero cree que pese a ello, los ni?os y ni?as sabr¨¢n ¡°aprovechar a su manera esos paseos y juegos al aire libre que, aquellos con mayor conciencia y memoria, empezaban a a?orar y necesitar¡±.
Katia Hueso comparte tambi¨¦n la idea de que ni?os y ni?as preferir¨¢n el juego basado en movimiento, dado que han estado mucho tiempo en espacios cerrados. ¡°Tal vez sea el momento de desenterrar la comba, la goma, la rayuela. Juegos cuyo material cabe en el bolsillo y no requiere invadir espacios no autorizados ni se pierde de vista a la chavaler¨ªa. A otros quiz¨¢ les guste el simple hecho de caminar y observar unas calles con un aspecto muy diferente del acostumbrado. Es una buena oportunidad para recuperar las charlas anal¨®gicas y trascendentes en familia, las que solo se dan en esos momentos peripat¨¦ticos. O para observar c¨®mo la naturaleza ha invadido la ciudad. En el fondo pienso que es una suerte que este confinamiento nos haya pillado en plena explosi¨®n primaveral, porque la podemos disfrutar desde ventanas y balcones. Y ahora tambi¨¦n, al menos un ratito, en la calle¡±, concluye.
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