La caja b que corrompi¨® 20 a?os al PP

Luis B¨¢rcenas ¡ªo ¡°esa persona¡±, como repiten el expresidente Mariano Rajoy y la exministra Mar¨ªa Dolores de Cospedal¡ª abri¨® en canal al PP hace ya casi ocho a?os.

¡ªLa primera pregunta es si usted est¨¢ en condiciones para prestar declaraci¨®n en el d¨ªa de hoy ¡ªle inquiri¨® el 15 de julio de 2013 el juez Pablo Ruz, que hab¨ªa iniciado en la Audiencia Nacional una investigaci¨®n sobre los papeles de B¨¢rcenas, publicados por EL PA?S el 31 de enero de ese a?o.

¡ªS¨ª, estoy en condiciones ¡ªcontest¨® contundente el ya para entonces extesorero popular.

Y tanto que lo estaba. A partir de ese momento, con su primera confesi¨®n sobre la caja b, B¨¢rcenas abri¨® las compuertas a un tsunami del que el PP, en pleno 2021, a¨²n trata de escapar. La ¨²ltima v¨ªctima la anunciaba Pablo Casado, actual l¨ªder del partido, el pasado 16 de febrero: abandonar¨¢n la sede de G¨¦nova 13, un edificio clave en el juicio sobre la contabilidad paralela que ha acabado esta semana. Una vista que se ha prolongado durante 27 sesiones a lo largo de m¨¢s de tres meses y que ¡°ha sido un verdadero regreso al pasado¡±, como admiti¨® el abogado de los populares, Jes¨²s Santos.

Desde el 8 de febrero, cuando comenz¨® el juicio, la direcci¨®n del PP ha tratado de obviar todo lo que ocurr¨ªa entre las paredes del edificio que la Audiencia Nacional tiene en un pol¨ªgono de San Fernando (Madrid). Pero resulta dif¨ªcil escapar de un escenario por donde desfilan (aunque sea por videoconferencia) los m¨¢s insignes exdirigentes del PP, incluido Rajoy y Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar; y donde las acusaciones intentan destripar una contabilidad opaca que anid¨® en la formaci¨®n 20 a?os, como ya dio por acreditada la sentencia de la trama principal de G¨¹rtel, conocida como ?poca I. ¡°Una estructura financiera y contable paralela a la oficial, existente al menos desde el 1989¡±, rubric¨® el tribunal en 2018.

Los contables. Los investigadores sit¨²an a dos hombres al frente de la caja b: al fallecido ?lvaro Lapuerta, tesorero durante 15 a?os (1993-2008); y a Luis B¨¢rcenas, que asumi¨® el carg¨® en 2008 tras ejercer como gerente desde 1990. En palabras del fiscal Antonio Romeral, ambos ¡°gestionaban¡±, ¡°administraban¡±, y eran ¡°responsables¡± de unos fondos que nunca se declararon a Hacienda. Los papeles de B¨¢rcenas eran el reflejo: ¡°Esos documentos son reales porque recogen, al menos en parte, informaci¨®n veraz de una realidad con trascendencia penal¡±, resumi¨® el ministerio p¨²blico en su alegato final.

El primer apunte se fecha en abril de 1990: una entrega de ocho millones de pesetas (48.000 euros) bajo el concepto ¡°Saldo inicial (entrega R. N.)¡±. Seg¨²n B¨¢rcenas, esa anotaci¨®n se corresponde con el momento en que heredan las cuentas del anterior tesorero, Rosendo Naseiro, que dej¨® el cargo asediado por la corrupci¨®n. En su declaraci¨®n ante el tribunal, B¨¢rcenas afirm¨® que fue Francisco ?lvarez Cascos, entonces secretario general, quien orden¨® sistematizar a trav¨¦s de esta contabilidad opaca las donaciones que recib¨ªa el partido y que, en muchas ocasiones, superaban los l¨ªmites legales permitidos. Cascos lo neg¨®, al igual que todos los componentes de las antiguas c¨²pulas del PP, a quienes apunt¨® el extesorero como conocedores de esta estructura.

De los casi 500 apuntes de los papeles de B¨¢rcenas, los investigadores dieron por acreditados m¨¢s de medio centenar: entre otros, entregas de dinero que reconocieron sus perceptores; cantidades extra¨ªdas para comprar acciones de Libertad Digital; y salidas de miles de euros que se ingresaron en las cuentas oficiales de la formaci¨®n. ¡°Los fondos que llegan en efectivo a la sede nacional se transforman en ingresos fraccionados en cuentas de donativos y de funcionamiento¡±, apunt¨® en la vista Manuel Morocho, inspector jefe de la Unidad de Delincuencia Econ¨®mica y Fiscal (UDEF) de la Polic¨ªa, que otorga una enorme veracidad a los documentos del extesorero y a lo que reflejan. Otras anotaciones, como los sobresueldos a la c¨²pula del PP, nunca se han conseguido probar.

Ante tal contexto, ninguna de las partes perdi¨® tiempo en el juicio en tratar de encontrar en la contabilidad oficial del PP los apuntes acreditados. Simplemente, no constan. Para la acusaci¨®n, ese extremo constituye otra prueba m¨¢s de la caja b. Sin embargo, el abogado de los populares, concentrado en circunscribir la responsabilidad de toda irregularidad en B¨¢rcenas, afirm¨® que si algunas ¡°transacciones leg¨ªtimas¡± nunca se declararon fue por la ¡°mala praxis¡± del extesorero, que ¡°eludi¨® los controles del partido y abus¨® de la confianza¡± que hab¨ªan depositado en ¨¦l.

Entregas probadas. Una cascada de testimonios representa el mayor golpe a la credibilidad del PP. Adem¨¢s de B¨¢rcenas, otros cuatro ex altos cargos han admitido los pagos recogidos en los papeles: el exgerente Crist¨®bal P¨¢ez, que se sienta en el banquillo y que confes¨® que B¨¢rcenas y Lapuerta le pagaron 12.000 euros en billetes que nunca reflejaron en su n¨®mina; el exsenador Luis Fraga, sobrino del fundador del partido Manuel Fraga; y los exdiputados Eugenio Nasarre y Jaime Ignacio del Burgo. El exconsejero navarro Calixto Ayesa tambi¨¦n lo reconoci¨® en su d¨ªa, pero muri¨® antes del juicio. Y a ellos se suma un empresario, Santiago Lago Bornstein, que relat¨® c¨®mo particip¨® en una aportaci¨®n de diez millones de pesetas. ¡°Frente a estos seis testigos, nos encontramos 34 que han negado las entregas y la existencia de una contabilidad opaca¡±, minimiz¨® el abogado del PP.

Porque antes, los peritos caligr¨¢ficos ya hab¨ªan reforzado la tesis de las acusaciones. Los expertos concluyeron que la letra de los papeles de B¨¢rcenas es del extesorero; que estos documentos no se elaboraron de una tirada, sino a lo largo del tiempo; y que se usaron varios ¨²tiles estilogr¨¢ficos para ello. Adem¨¢s, Jorge Tr¨ªas, tambi¨¦n exdiputado popular, incidi¨® ante el tribunal en que pudo ver esa contabilidad paralela antes de que saliera a la luz. Y el cajero del PP constat¨® que las hojas contables son ¡°las que ten¨ªa el partido¡±. ¡°B¨¢rcenas merece toda la credibilidad¡±, destac¨® a los jueces Luis Fraga, que ocup¨® un esca?o de senador durante 21 a?os: ¡°Eso lo hace muy bien Luis B¨¢rcenas... lo de hacer notas. ?l era una persona con mentalidad contable. Era muy met¨®dico. Esa es justo la palabra¡±.

El PP se lava las manos. Los presidentes y secretarios generales del PP de la ¨¦poca investigada, encargados de supervisar las cuentas y se?alados por el cobro de sobresueldos, siguen clavados en 2013, cuando Rajoy afirm¨®: ¡°Todo lo referido a m¨ª y mis compa?eros no es cierto, salvo alguna cosa¡±. Pese a la sentencia de ?poca I que ratific¨® la caja b, todos negaron ante el tribunal su existencia o saber de ella. ¡°La caja b no existe. No hay nadie, ni una sola persona en el partido, que hablara de la caja b¡±, dijo Rajoy. ¡°No he conocido ninguna contabilidad paralela en el PP. Solo he conocido la contabilidad oficial del PP que se remit¨ªa al Tribunal de Cuentas¡±, a?adi¨® Aznar.

Los exsecretarios generales no se movieron un ¨¢pice de esa l¨ªnea. ¡°El contenido de esos papeles, para m¨ª no tiene ninguna significaci¨®n¡±, dijo ?lvarez Cascos. ¡°Yo no recuerdo que el se?or B¨¢rcenas me hablara nunca de una caja b¡±, aleg¨® Javier Arenas. ¡°Yo no conozco la existencia de dinero b en el PP¡±, apostill¨® ?ngel Acebes. ¡°La contabilidad era de ¨¦l, no del PP¡±, remach¨® Dolores de Cospedal.

La resignaci¨®n de B¨¢rcenas. El extesorero mantuvo en el juicio el contenido de sus confesiones y acus¨® a los exdirigentes del PP de ¡°cobardes¡± por no reconocer que se ¡°financiaron irregularmente¡±. Tambi¨¦n a?adi¨® algunas novedades que cayeron en saco roto (al menos, hasta ahora). El abogado del extesorero, Gustavo Gal¨¢n, consigui¨® que el tribunal citara a declarar al periodista Francisco Mercado para que ratificara la existencia de un supuesto audio de Lapuerta donde confirmaba el pago de sobresueldos. El reportero, autor de la grabaci¨®n, rehus¨® pronunciarse sobre ello y se acogi¨® a su derecho profesional a no revelar las fuentes.

El extesorero repite que no puede aportar m¨¢s pruebas porque se enfrenta a un ¡°d¨¦ficit documental¡± fruto de la Operaci¨®n Kitchen, la trama que se puso en marcha en el Ministerio del Interior para espiarle tras estallar el caso y que pretend¨ªa presuntamente arrebatarle material sensible para los dirigentes del PP. Aun as¨ª, antes de su declaraci¨®n en este juicio, B¨¢rcenas asegur¨® que ¡°un amigo¡± le guardaba una caja de documentos in¨¦ditos sobre la contabilidad paralela que facilitar¨ªa al juez Santiago Pedraz, que mantiene abierta la investigaci¨®n sobre las donaciones de empresarios a cambio de obra p¨²blica. De momento, esa caja no ha llegado a la Audiencia.

Los empresarios. Santiago Lago ha sido el ¨²nico empresario que ha admitido en este juicio las entregas de dinero al PP. Pero en el juicio de G¨¹rtel de ?poca I, el constructor Alfonso Garc¨ªa Pozuelo ya confes¨® el pago de comisiones ilegales a la trama a cambio de que las Administraciones en manos de los populares le adjudicaran contratos. A ambos se a?ade Rafael Palencia, expresidente de la compa?¨ªa de aguas Degremont, a quien se escucha contar en una grabaci¨®n c¨®mo pagaba mordidas a Lapuerta y B¨¢rcenas. Ese audio, interceptado en la Operaci¨®n Lezo sobre la corrupci¨®n en torno al expresidente madrile?o Ignacio Gonz¨¢lez (PP), se encuentra incorporado a la investigaci¨®n de Pedraz.

La relaci¨®n entre el PP y los empresarios era intensa. Alberto Recarte, expresidente de Libertad Digital, s¨ª relat¨® en el juicio que acudi¨® al partido para que le ayudaran a buscar accionistas en su ampliaci¨®n de capital. Se lleg¨® a reunir con Aznar y Esperanza Aguirre en persona. B¨¢rcenas las compr¨® con dinero sacado de la caja b. Y Lapuerta tambi¨¦n.

La insinuaci¨®n. En su alegato final, el abogado del PP intent¨® vender la idea de que B¨¢rcenas desvel¨® en 2013 sus papeles para tapar el esc¨¢ndalo de su fortuna en el extranjero: ¡°Qu¨¦ casualidad que saliesen a la luz en el momento en que se tuvo conocimiento de la llegada a la Audiencia Nacional de las comisiones rogatorias de sus cuentas en Suiza¡±, dijo. Pero a?os antes ya se los hab¨ªa ense?ado a compa?eros de partido y a periodistas. El exdiputado del PP Jorge Tr¨ªas cont¨® que en 2011 le lleg¨® a dejar una copia.

Arquitectos con una fortuna oculta en el extranjero. Cinco personas se han sentado en el banquillo en el juicio de la caja b. Por parte del PP, el extesorero Luis B¨¢rcenas; y el exgerente Crist¨®bal P¨¢ez. Y por Unifica, la empresa de arquitectura que reform¨® la sede de G¨¦nova 13, sus dos socios (Gonzalo Urquijo y Bel¨¦n Garc¨ªa) y una empleada (Laura Montero, que saldr¨¢ indemne ya que se retiraron las imputaciones contra ella en la fase de conclusiones finales). El fiscal tambi¨¦n lleg¨® a presentar escrito de acusaci¨®n contra ?lvaro Lapuerta, pero falleci¨® en 2018.

Pese a los numerosos apuntes de los papeles de B¨¢rcenas, la vista oral se ha centrado en dos operaciones reflejadas en esos documentos que el juez instructor, la Fiscal¨ªa Anticorrupci¨®n, Hacienda y la UDEF consiguieron dar por acreditadas y que implicaban delitos a¨²n no prescritos: el uso de dinero negro de la caja b del PP para el pago de 1,5 millones de euros a Unifica y la compra de acciones de Libertad Digital. En la sentencia de ?poca I, el Supremo ya dio por probado que B¨¢rcenas adquiri¨® acciones de esta empresa de comunicaci¨®n y ahora, en este juicio, se aborda si cooper¨® con Lapuerta para que este hiciera lo mismo. Cosa que ha admitido.

En cambio, Urquijo y Garc¨ªa no han reconocido nada. Los dos arquitectos, que ocultaban una fortuna en el extranjero que regularizaron en 2012, se enfrentan a una bater¨ªa de indicios presentados en el juicio: seg¨²n el fiscal, certificaciones y presupuestos ¡°doblados¡±, facturas ¡°ficticias¡± y correos electr¨®nicos intervenidos donde se hablaba ¡°de generar dinero b¡±. Anticorrupci¨®n y la Abogac¨ªa del Estado recalcan que esta compa?¨ªa ten¨ªa tambi¨¦n su propia caja b y sol¨ªa funcionar en negro con otros clientes y proveedores.