La Fiscal¨ªa pide a B¨¢rcenas m¨¢s datos del supuesto material sensible que guardaba del PP

El extesorero del PP Luis B¨¢rcenas y su esposa, Rosal¨ªa Iglesias, han vuelto este mi¨¦rcoles a la Audiencia Nacional para declarar como perjudicados por Kitchen, la operaci¨®n urdida en el Ministerio del Interior del Gobierno de Mariano Rajoy para espiar al extesorero popular con el presunto objetivo de arrebatarle documentos comprometedores para altos cargos del PP. La Fiscal¨ªa y el magistrado Manuel Garc¨ªa-Castell¨®n han interrogado al matrimonio sobre el material sensible que guardaba B¨¢rcenas y que, seg¨²n su versi¨®n, le arrebat¨® el grupo de comisarios que control¨® sus movimientos entre 2013 y 2015 sin ning¨²n tipo de autorizaci¨®n judicial.

Los investigadores, bastante convencidos de que la trama lleg¨® a robar documentos al extesorero, quieren profundizar en esta l¨ªnea de las pesquisas. Aunque, eso s¨ª, recelan de la palabra de B¨¢rcenas, que en los ¨²ltimos a?os ha ofrecido diferentes versiones sobre el contenido de aquellos papeles que se reservaba para utilizarlos como arma contra su antigua formaci¨®n. Seg¨²n fuentes jur¨ªdicas, este mi¨¦rcoles, el juez y el ministerio p¨²blico han preguntado por las cajas que se llev¨® del despacho que le hab¨ªan dejado en la sede nacional del PP hasta que lo echaron del partido. Tambi¨¦n, por el pendrive donde guardaba una copia de las supuestas grabaciones de las conversaciones con Mariano Rajoy y Javier Arenas, expresidente y ex secretario general del PP respectivamente, donde mencionaban la caja b de la formaci¨®n.

As¨ª, seg¨²n han a?adido las mismas fuentes, el expol¨ªtico ha asegurado que las cajas conten¨ªan documentaci¨®n sobre campa?as electorales, donaciones que no constan en los papeles de B¨¢rcenas y dos clasificadores con parte de la contabilidad de los populares gallegos que Pablo Crespo, ex secretario de Organizaci¨®n del partido en dicha comunidad y condenado por G¨¹rtel, entreg¨® a ?lvaro Lapuerta, que ocup¨® el puesto de tesorero del PP antes que ¨¦l.

B¨¢rcenas tambi¨¦n ha insistido en que orden¨® en 2014 destruir una de las copias de las grabaciones de Rajoy y Arenas. Para ello, contact¨® con otro recluso de la c¨¢rcel de Soto del Real, donde el extesorero se encontraba en prisi¨®n preventiva. Seg¨²n su versi¨®n, el expol¨ªtico pag¨® a este preso colombiano ¡ªa trav¨¦s de su ch¨®fer, Sergio R¨ªos, confidente de la trama Kitchen¡ª para que las borrara de la nube [sistema de almacenamiento inform¨¢tico].

Antes de B¨¢rcenas, ha declarado, tambi¨¦n como testigo, su esposa, Rosal¨ªa Iglesias, en prisi¨®n como ¨¦l por el caso G¨¹rtel. Iglesias ha defendido la versi¨®n de su marido sobre el supuesto robo de parte de la documentaci¨®n que este guardaba en el local en el que ella hac¨ªa trabajos de restauraci¨®n, aunque ha insistido en varias ocasiones que nunca supo realmente cu¨¢l era su contenido de la misma, seg¨²n detallas fuentes presentes en el interrogatorio.

La mujer de B¨¢rcenas, a la que tanto el juez como el fiscal han hecho ver en varias ocasiones que estaba dando versiones contradictorias, ha asegurado que ella ech¨® en falta varias cajas que hab¨ªa en un altillo y algunas carpetas que hab¨ªan guardado en un arc¨®n, pero ha dicho no haber visto el pendrive en el que estaban las supuestas grabaciones que B¨¢rcenas con Mariano Rajoy y Javier Arenas. La esposa de B¨¢rcenas ha admitido que sab¨ªa cu¨¢l era el contenido de ambos audios ¡ª¡±la [grabaci¨®n] de Rajoy me la ha contado muchas veces¡±¡ª, pero ha insistido que no conoci¨® en ning¨²n momento donde se guardaban. ¡°Nunca me dijo donde estaban porque nunca quiso ponerme en riesgo¡±, se ha justificado.

Durante su declaraci¨®n, Iglesias se ha desmarcado de la presunta contrataci¨®n de un preso colombiano para destruir estas grabaciones, aunque ha admitido conocer algunos detalles. As¨ª, ha afirmado no sab¨ªa qui¨¦n era el preso ni la cantidad de dinero que supuestamente se le entreg¨® ¡ªen sus declaraciones B¨¢rcenas ha hecho bailar la cifra entre los 2.500 y los 4.000 euros¡ª, aunque s¨ª ha dicho que supo que fue el ch¨®fer, Sergio R¨ªos, el encargado de entreg¨¢rselo. Sobre la procedencia de los fondos para hacer ese pago, que se realiz¨® cuando el matrimonio ya ten¨ªa las cuentas intervenidas por orden judicial, Iglesias ha dicho que ¡°hab¨ªa gente que nos ayudaba¡±. Finalmente, ha afirmado que fue su marido el que le dijo, sin entrar en detalles, que el recluso le hab¨ªa enga?ado.