Un largo camino para tener un Tribunal Constitucional progresista que afronte las leyes ideol¨®gicas clave
El Gobierno se trag¨® el sapo de aceptar al pol¨¦mico Enrique Arnaldo en 2021 para lograr ahora este resultado y se dej¨® un gran desgaste en el recorrido
En noviembre de 2021 se desataron las cr¨ªticas internas en el Gobierno, dentro del PSOE y en especial en Unidas Podemos. ¡°?C¨®mo es posible que tengamos que tragar y votar a Enrique Arnaldo como magistrado del Tribunal Constitucional?¡±, repet¨ªan diputados e incluso ministros en los pasillos del Congreso. El esc¨¢ndalo era may¨²sculo. Algunos socialistas y miembros de UP amenazaban con romper la disciplina de voto. Od¨®n Elorza, que fue dur¨ªsimo con Arnaldo en la comisi¨®n del Congreso que deb¨ªa examinar su idoneidad, finalmente la rompi¨® y pag¨® 600 euros de multa. Otros no se atrevieron a tanto, pero las dudas eran muy fuertes. ¡°Esperemos que Bola?os tenga realmente pactada la renovaci¨®n del Constitucional en junio [de 2022] con el PP, porque si no esto es un fiasco descomunal¡±, se?alaba en ese momento un dirigente destacado. Bola?os, ministro de la Presidencia y gran negociador de Pedro S¨¢nchez, multiplicaba las llamadas para aplacar esa crisis interna. Y a todos les dec¨ªa lo mismo: ¡°confiad, con el tiempo ver¨¦is que este sapo vali¨® la pena. Est¨¢ en juego lo m¨¢s importante, la mayor¨ªa progresista del Constitucional durante nueve a?os¡±.
Toda esa larga jugada de ajedrez termin¨® este mi¨¦rcoles, despu¨¦s de muchos avatares inesperados, mucho m¨¢s tarde de lo previsto ¡ªten¨ªa que haber llegado en junio de 2022¡ª y con un fuerte desgaste del Ejecutivo en el camino, pero con un resultado incluso mejor del presumible para los intereses de la coalici¨®n progresista: un cambio de mayor¨ªa de conservadora a progresista (7-4) del tribunal clave de cualquier pa¨ªs, el que tiene que decidir sobre las leyes ideol¨®gicas y sociales m¨¢s importantes ¡ªaborto, eutanasia, educaci¨®n, reforma laboral¡ª y encima con la presidencia y la vicepresidencia para magistrados de izquierdas.
Un pleno progresista inesperado, que se produce como respuesta al intento de los conservadores liderados precisamente por Arnaldo, muy cercano al PP, de romper la mayor¨ªa. Si se hubiera pactado todo, como se intent¨® varias veces en estos meses, el Tribunal Constitucional tendr¨ªa un presidente progresista y un vicepresidente conservador, como es habitual. Pero el PP forz¨® la m¨¢quina para intentar evitar que C¨¢ndido Conde-Pumpido fuera presidente y la venganza de los progresistas por esa maniobra es que la vicepresidenta tambi¨¦n ser¨¢ de este sector.
En noviembre de 2021, cuando se vot¨® a Arnaldo, Bola?os llevaba por entonces ya dos acuerdos muy importantes con el PP que fueron cuestionados internamente. Pact¨® en febrero de 2021 con Teodoro Garc¨ªa Egea la nueva c¨²pula de RTVE, y en teor¨ªa en el paquete iba la renovaci¨®n del Consejo General del Poder Judicial. Los populares se echaron atr¨¢s en el ¨²ltimo momento de esta segunda parte con un veto al juez De Prada, pero s¨ª lograron el acuerdo en RTVE que buscaban. As¨ª que el PSOE se qued¨® colgado y hubo cr¨ªticas en sordina. Pasaron los meses y el PP no dio su brazo a torcer en el CGPJ, pero s¨ª acept¨® negociar en octubre la renovaci¨®n parcial del Constitucional. Les conven¨ªa, no cambiaba la mayor¨ªa conservadora y lograban incorporar a dos personas muy cercanas al PP y a la direcci¨®n de Pablo Casado, como Arnaldo y Concepci¨®n Espejel, en el tribunal de garant¨ªas. Y conservaban la presidencia en manos de Antonio Garc¨ªa-Trevijano, otra persona muy cercana al PP, que fue designado magistrado en el cupo del Gobierno cuando Mariano Rajoy estaba en La Moncloa.
Bola?os cre¨ªa tener todo bajo control. ?l y Garc¨ªa Egea hab¨ªan incluido en el acuerdo, que se cerr¨® el 21 de octubre de 2021, una cl¨¢usula secreta que dejaron por escrito. El PSOE se tragaba a Arnaldo sin rechistar, s¨ª, pero a cambio el PP le garantizaba que en junio de 2022 se renovar¨ªa el Constitucional de forma completa, lo que supon¨ªa un cambio de mayor¨ªa porque le tocaba elegir dos miembros al Gobierno. Las mayor¨ªas en el Constitucional, como sucede en muchas democracias occidentales, cambian cada nueve a?os cuando llega la renovaci¨®n del cupo de dos que le toca al Gobierno, como fija la Constituci¨®n. Ya se ha hecho varias veces en democracia sin ning¨²n dramatismo. Y el presidente pasa a ser tambi¨¦n del nuevo sector mayoritario, como sucedi¨® este mi¨¦rcoles. Nunca nadie habl¨® de asalto al Constitucional cuando Rajoy cambi¨® la mayor¨ªa de progresista a conservadora en 2013 gracias a los dos del cupo del Gobierno, entre los que estaba Enrique L¨®pez, muy cercano al PP, y el propio Trevijano. Entonces se vio normal, aunque el PSOE critic¨® el perfil de L¨®pez, tanto como el PP ha criticado ahora el del exministro de Justicia Juan Carlos Campo.
Bola?os y Garc¨ªa Egea firmaron ese documento que se?alaba que PSOE y PP presentar¨ªan una minirreforma para permitir al CGPJ que nombrara los dos miembros del Constitucional que le tocan. Pero Garc¨ªa Egea y Pablo Casado cayeron en febrero de 2022, y Alberto N¨²?ez Feij¨®o se desentendi¨® de ese pacto. El PP maniobr¨® todo lo que pudo para retrasar la renovaci¨®n del Constitucional. A partir de ah¨ª el Gobierno hizo de todo para intentar forzar esa renovaci¨®n. Primero cambi¨® la ley en julio, puso incluso un l¨ªmite temporal al CGPJ (el 13 de septiembre) para intentar forzar la renovaci¨®n. Pero fracas¨® una y otra vez porque el sector conservador se burlaba. Tan lejos lleg¨® la cosa que incluso un conservador muy cercano al PP como Carlos Lesmes dimiti¨® ante su fracaso al intentar al menos renovar el Constitucional, una obligaci¨®n del CGPJ.
Ah¨ª lleg¨® un ¨²ltimo intento negociador, en el que durante tres semanas, y con la renovaci¨®n del Constitucional y del CGPJ encima de la mesa, Bola?os y el nuevo negociador del PP, Esteban Gonz¨¢lez Pons, lograron pr¨¢cticamente cerrar el acuerdo. Pero una vez m¨¢s el PP dio marcha atr¨¢s, esta vez por la reforma de la sedici¨®n, y el Gobierno volvi¨® a mover sus piezas. Bola?os y su factor¨ªa de reformas hicieron un nuevo intento con dos cambios acelerados incorporados en la reforma del C¨®digo Penal para forzar al CGPJ a renovar el Constitucional y al propio tribunal a incorporar a los dos magistrados elegidos por el Gobierno.
Pero la maniobra sali¨® muy mal. El Constitucional, a¨²n controlado por los conservadores, en un movimiento inaudito, impidi¨® por primera vez en democracia una tramitaci¨®n parlamentaria en el Senado y fren¨® las dos reformas por una exigua mayor¨ªa de 6 a 5, exactamente el reparto ideol¨®gico del Constitucional. Parec¨ªa que el Gobierno ten¨ªa por delante m¨¢s meses de bloqueo, pero a¨²n se invent¨® una nueva maniobra inesperada. Los progresistas del CGPJ aceptaron por sorpresa los dos candidatos que propon¨ªan los conservadores, y todo se precipit¨®. Entonces, el PP cre¨ªa que a¨²n ten¨ªa una baza, al menos para impedir que C¨¢ndido Conde-Pumpido presidiera el Constitucional, uno de sus grandes objetivos en todos estos meses, hasta el punto de que lo han planteado varias veces en la mesa de negociaci¨®n.
Pero, contra pron¨®stico, Mar¨ªa Luisa Segoviano, la candidata progresista que hab¨ªan elegido los conservadores, confiando en que no votar¨ªa a Conde-Pumpido, sino a Mar¨ªa Luisa Balaguer, les fall¨® y vot¨® al candidato que quer¨ªa el Gobierno. As¨ª que con siete meses de retraso, despu¨¦s de un largu¨ªsimo periplo, con un desgaste evidente que detect¨® la encuesta publicada esta semana por EL PA?S, el Ejecutivo ha logrado con creces todos sus objetivos y ahora puede confiar en que un tribunal con una clara mayor¨ªa progresista se enfrentar¨¢ a decisiones clave no solo sobre las leyes m¨¢s conocidas, sino tambi¨¦n, por ejemplo, sobre el esca?o del diputado canario de Podemos Alberto Rodr¨ªguez, suspendido desde octubre de 2021 y nunca sustituido, lo que ha quitado un voto a la mayor¨ªa todo este tiempo.
Pero es que adem¨¢s de las grandes leyes, el PP y Vox han recurrido muchas m¨¢s cosas menos conocidas, pero muy relevantes, como la ampliaci¨®n del permiso de paternidad, ahora igualado al de maternidad, la ley ¡®rider¡¯, que afecta a miles de trabajadores, la subida del impuesto de patrimonio en los Presupuestos en 2021, la reforma del CGPJ para impedir que pueda seguir haciendo nombramientos en funciones y as¨ª tratar de forzar una renovaci¨®n, un decreto sobre vivienda de Catalu?a, el traspaso del ingreso m¨ªnimo vital al Pa¨ªs Vasco. Vox en solitario ha recurrido la ley de protecci¨®n a la infancia, el decreto antidesahucios, cuestiones de violencia de g¨¦nero relacionadas con la custodia y una ley trans en Canarias.
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