La fiscal superior de Madrid: ¡°Entendemos que hay delito en el cartel electoral de Vox¡±
Almudena Lastra asegura que est¨¢n analizando ¡°caso a caso¡± las responsabilidades penales por la gesti¨®n de las residencias en la pandemia
Almudena Lastra (Madrid, 55 a?os) asumi¨® el cargo de fiscal superior de la Comunidad de Madrid hace apenas dos meses. Con 30 a?os de carrera a la espalda, es la primera mujer que lo ostenta. ¡°Ya es hora¡±, subraya, de que el alto porcentaje de mujeres en la justicia se refleje en puestos de responsabilidad. La instituci¨®n tiene numerosos retos por delante: como la persecuci¨®n de responsabilidades penales derivadas de la gesti¨®n de la pandemia y de los delitos de odio. Como sus predecesores, pide m¨¢s recursos y personal para una comunidad con una tasa de litigiosidad ¡°muy alta¡±.
Pregunta. ?C¨®mo se afronta la ¨¦poca post pandemia?
Respuesta. Hay que recuperar el tiempo perdido. La pandemia dej¨® sin efecto muchos se?alamientos judiciales y, una vez salimos del confinamiento, estos se distanciaron por medidas higi¨¦nicas. Hay que volver a conseguir la normalidad y eso va a suponer intentar llegar a acuerdos. La consigna para los fiscales en la jurisdicci¨®n penal, que es el grueso de nuestra Fiscal¨ªa, es intentar llegar al mayor n¨²mero de conformidades que eviten la celebraci¨®n de juicios con testigos para poder agilizar el trabajo. Adem¨¢s, lo presumible es que a partir de este momento tengamos un repunte de delincuencia que nos coloque en los par¨¢metros de 2019.
P. ?C¨®mo se trabaja en la persecuci¨®n penal en la gesti¨®n de las residencias? Hasta ahora se han distinguido dos planos: gestores y el ¨¢rea de toma de decisiones pol¨ªticas.
R. Se est¨¢ analizando caso por caso, porque hay que depurar responsabilidades. El ¨²ltimo escal¨®n es la responsabilidad pol¨ªtica y ha habido antes de eso muchas responsabilidades intermedias. Hasta ahora hay nueve denuncias y solo se ha archivado una. Se ha hecho un trabajo exhaustivo para determinar d¨®nde estaba el problema: unas veces ha reca¨ªdo en el responsable m¨¦dico, otras en el gerente¡ Si de cada caso deriva alg¨²n otro tipo de responsabilidad, ya se ver¨¢. Cada residencia es un mundo.
P. Sin una regulaci¨®n clara, muchas decisiones han acabado en los tribunales. ?Se ha dejado en manos de la justicia decisiones meramente pol¨ªticas?
R. Al final, todo termina en nosotros. Hacemos el control de la Administraci¨®n y, en el momento que afecta a derechos fundamentales, tiene que intervenir la justicia.
P. Se ven resoluciones en un sentido u otro que confunden a la ciudadan¨ªa.
R. Hemos hecho frente a una pandemia con una legislaci¨®n que no estaba pensada para ello. Hemos tomado decisiones pol¨ªticas y judiciales en funci¨®n de c¨®mo se desarrollaban los acontecimientos. Esto no es blanco ni negro. En justicia hay una gama de grises enorme y la interpretaci¨®n siempre da juego.
P. La intenci¨®n es legislar para que los fiscales instruyan los casos (ahora lo hacen los jueces). Una denuncia hist¨®rica es la falta de recursos y personal en la Fiscal¨ªa. ?C¨®mo se afronta esta transformaci¨®n, que previsiblemente aumentar¨¢ la carga de trabajo?
R. Es un cambio de modelo que no s¨¦ si llegar¨¢ porque requiere unos consensos que no s¨¦ si veremos. No podemos estar aislados en el entorno europeo, en el resto de pa¨ªses los fiscales s¨ª pueden instruir. Har¨¢n falta muchos medios. La plantilla en Espa?a es de 2.553 fiscales y ya, con las funciones actuales, es deficitaria. Nos faltan casi 400 fiscales.
P. ?Qu¨¦ otras necesidades tiene la Fiscal¨ªa de cara a este cambio?
R. Hay que hacer un cambio cultural dentro de la propia Fiscal¨ªa. Los fiscales tienen que aprender las t¨¦cnicas de investigaci¨®n m¨¢s ¨¢giles y eficaces. Madrid siempre es deficitario porque, en proporci¨®n a la poblaci¨®n de habitantes, tiene muchos ¨®rganos judiciales y la tasa de litigiosidad es muy alta. Madrid siempre va por detr¨¢s de las necesidades. Eso nos obliga a recurrir a fiscales interinos y eso no es deseable.
Hemos hecho frente a una pandemia con una legislaci¨®n que no estaba pensada para ello
P. La Audiencia Provincial archiv¨® el recurso de medidas cautelares contra el cartel electoral de Vox sobre los menores extranjeros. ?Qu¨¦ se puede hacer?
R. La Fiscal¨ªa entiende que hay delito y ese procedimiento est¨¢ abierto. La Audiencia ha resuelto solo sobre las medidas cautelares, que ped¨ªa que durante la campa?a se retiraran los carteles. Ahora queda todo el procedimiento para convencer al juez de instrucci¨®n y posteriormente al ¨®rgano de enjuiciamiento de que se ha cometido un delito.
P. ?C¨®mo valora las valoraciones del auto que rechaz¨® el recurso ¨Dcalificaba a los menores como un ¡°evidente problema pol¨ªtico y social¡±¨D?
R. Yo solo veo un auto que confirma la denegaci¨®n de una medida cautelar. Las valoraciones que han deslizado, se quedan ah¨ª. Eso no va a ning¨²n sitio. Donde tenemos que dar la batalla es en el seno del procedimiento. Ellos construyen un argumento que sit¨²an en el contexto electoral y entienden que, en ese momento, la libertad de expresi¨®n lo permite durante la campa?a. Que todo es discutible, pero nosotros no vamos m¨¢s all¨¢.
P. ?Han aumentado los delitos de odio?
R. El delito de odio permanec¨ªa oculto, como pas¨® en su d¨ªa con la violencia machista. A la hora de realizar los atestados no se clasificaba como delito de odio. Se ha hecho una labor importante para aflorar los datos. Pero, en una sociedad crispada como tenemos, hay m¨¢s delitos de odio .
P. Una de las dificultades es que es un delito muy abierto a interpretaciones
R. Es complicado porque no hay que acreditar el hecho objetivo ¡ªpor ejemplo, una lesi¨®n¡ª, sino el subjetivo, que es la intenci¨®n del que causa la lesi¨®n. Lo m¨¢s dif¨ªcil para probar es siempre la intencionalidad. Y en estos delitos es la clave. Ojal¨¢ que se vaya creando una conciencia social. Hace 25 a?os, la violencia sobre la mujer quedaba absolutamente soterrada, y se hizo aflorar. Estamos en ese mismo proceso.
El delito de odio ha permanecido oculto, como pas¨® en su d¨ªa con la violencia machista
P. El ministerio p¨²blico no recurri¨® el archivo de la causa por la falsificaci¨®n de documentos de la l¨ªder de Vox en Madrid, Roc¨ªo Monasterio ?C¨®mo explica el cambio de criterio?
R. La Fiscal¨ªa denunci¨® una falsedad ante el Tribunal Superior de Justicia (TSJ), y este entendi¨® que efectivamente se incorpor¨® documentaci¨®n manipulada a un expediente administrativo. Una vez m¨¢s, la explicaci¨®n es t¨¦cnica. Los hechos se hab¨ªan producido en tres periodos distintos: 2005, 2011 y 2016. La Sala reconoce una manipulaci¨®n, que no atribuye a nadie, que se produce en 2011, hechos que est¨¢n prescritos. Y la realidad es que en 2016, aparte de burda, [esa falsificaci¨®n] es inocua porque cambi¨® la normativa y no era necesario que esa documentaci¨®n se aportase. La jurisprudencia entiende que las alteraciones burdas o inocuas no constituyen el tipo penal.
P. Pero, pasaron de iniciar la acci¨®n a aceptar el criterio del TSJ.
R. Como pasa muchas veces. Donde hay que discutirlo es ah¨ª. La Fiscal¨ªa analiza unos hechos, presenta una denuncia o una querella ante el ¨®rgano de enjuiciamiento, que es el que tiene que hacer esa valoraci¨®n. El TSJ lo ha motivado y argumentado razonadamente, y nosotros poco m¨¢s tenemos que a?adir. Como tantas otras veces que asumimos la resoluci¨®n judicial siempre que es motivada y razonada.
P. ?Han recurrido al Supremo la absoluci¨®n de la expresidenta auton¨®mica Cristina Cifuentes por el caso M¨¢ster?
R. No, tambi¨¦n por una cuesti¨®n t¨¦cnica. Hemos construido una acusaci¨®n que ha sido vista dos veces, en instancia y se ha revisado en el TSJ. Hemos tenido nuestra oportunidad. Hemos intentado acreditar unos hechos, pero no lo ha visto el tribunal de instancia y el tribunal de apelaci¨®n ha entendido que no hab¨ªa ninguna irregularidad en la resoluci¨®n.
P. ?La Fiscal¨ªa se siente decepcionada por ese caso, que result¨® finalmente con penas m¨ªnimas solo para dos personas que no implican entrar en prisi¨®n?
R. La Fiscal¨ªa no se decepciona. La Fiscal¨ªa hace su trabajo. A veces tenemos el convencimiento de que unos hechos son constitutivos de delito y no podemos articular una acusaci¨®n porque no tenemos los medios de prueba. Son las reglas del juego.
P. Podemos, tras la petici¨®n de Fiscal¨ªa de dos imputaciones en el caso Ni?era, habl¨® de una ¡°judicatura patri¨®tica¡±. ?Se siente la Fiscal¨ªa se?alada?
R. No nos sentimos se?alados por nadie porque trabajamos ajenos a las interferencias exteriores. Este procedimiento est¨¢ en fase de instrucci¨®n y nuestra funci¨®n es recopilar el material probatorio haciendo abstracci¨®n de todo lo que se hace alrededor. Lo que hagan otros, a nosotros no debe afectarnos.
P. ?Se ha iniciado alguna investigaci¨®n por la brecha de seguridad en la vacunaci¨®n con la filtraci¨®n de datos del Rey incluido?
R. Se denunciaron los hechos en esta Fiscal¨ªa y se han remitido a la Fiscal¨ªa Provincial, que es la competente y es la que tendr¨¢ que investigar qu¨¦ es lo que ha ocurrido. No s¨¦ si es una brecha de seguridad. Ahora mismo estamos en la fase de investigaci¨®n. Veremos si hay detr¨¢s una conducta delictiva o no, porque puede ser simplemente una actualizaci¨®n que se carga y hay un fallo en la plataforma.
P. La Asociaci¨®n de Fiscales ha criticado los nombramientos de la fiscal general del Estado, Dolores Delgado, por primar a la Uni¨®n Progresista de Fiscales, ?se siente usted cuestionada?
R. Yo solicit¨¦ esta plaza y he recibido el respaldo un¨¢nime del Consejo Fiscal. A m¨ª me han apoyado expresamente los cinco vocales de la Asociaci¨®n de Fiscales. Por lo tanto, estoy absolutamente tranquila y satisfecha de que vengo con todo el respaldo del Consejo Fiscal. Pertenezco a la UPF, s¨ª; pero no creo que haya sido determinante en mi nombramiento.
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