Doble apuesta por el viento y el sol
Las grandes empresas e¨®licas y solares compiten por unas energ¨ªas a las que les cuesta ser rentables debido a la subida de tipos y el gran n¨²mero de operadores. Pero, a pesar de los desaf¨ªos, las compa?¨ªas espa?olas est¨¢n decididas a reforzar su compromiso con la producci¨®n sostenible y ya son un referente mundial del sector
El sol y el viento dialogan en los campos espa?oles. Uno con su brillo, otro con ese pasar de sus aspas. Zas, zas, zas, zas, zas, zas. Iberdrola es el mayor productor solar y e¨®lico del mundo. En el primer semestre alcanz¨® los 41.250 megavatios (MW) renovables operativos. Adem¨¢s, tiene 7.100 MW en construcci¨®n. Y la luz, durante las noches, parece sostenida por sus estrellas. El plan estrat¨¦gico de la compa?¨ªa ¡ªapuntan fuentes de la energ¨¦tica¡ª prev¨¦ la inversi¨®n en 2025 de 17.000 millones de euros en renovables. Han echado cuentas, al igual que aquellos escolares no tan lejanos que aprend¨ªan matem¨¢ticas en los cuadernos Rubio. La e¨®lica terrestre supondr¨¢, en esa fecha del calendario, 3.100 MW. Despu¨¦s llegar¨¢ el brillo fotovoltaico (6.300 MW) y, mar adentro, el mundo offshore (1.800 MW). Tras los n¨²meros, las palabras. ¡°Sus motores de crecimiento, por ahora, son Estados Unidos y el Reino Unido. Sin embargo, creemos que la compa?¨ªa tiene suficiente holgura financiera para acelerar las inversiones en Espa?a cuando mejoren las condiciones¡±, observa el equipo de la agencia de calificaci¨®n de riesgo S&P Global Ratings. ¡°Es una de las firmas con mayor calidad en la gesti¨®n de la cadena de valor de nuestro porfolio¡±, remata.
El sector ya ha dibujado, de punto a punto, su mapa de la electrificaci¨®n. En lo alto de un palacio blanco, la hija del rey, la chica dorada. Quiz¨¢ sea Endesa, que est¨¢ transformando su cadena de suministro para que la dependencia de pa¨ªses escasamente fiables resulte m¨ªnima. La Uni¨®n Europea camina, poco a poco, hacia la creaci¨®n de campeones nacionales. La el¨¦ctrica tambi¨¦n repasa su cuadernillo. Lee las primeras l¨ªneas. ¡°Para un proyecto [fotovoltaico] de 50 MW se emplean entre 250 y 300 personas¡±. O sea, los puestos de trabajo se quedan en el pa¨ªs. Y la mitad de las materias primas que se utilizan en la fabricaci¨®n de los componentes son nacionales. Aunque no todas las luces brillan sobre el cielo europeo. ¡°El panel solar es totalmente chino¡±, reconoce la compa?¨ªa. Todo ocurre al tiempo que algunos expertos crean su propio mapa geoenerg¨¦tico. ¡°El 90% de la inversi¨®n en Espa?a se dirige a la [energ¨ªa] e¨®lica y la mayor¨ªa de los proveedores trabajan en todo el planeta, y se han convertido en multinacionales gracias al efecto arrastre de Iberdrola¡±, reflexiona el economista Jos¨¦ Carlos D¨ªez. Por ejemplo, en Ferrol (A Coru?a) se montan los molinos marinos y en Avil¨¦s (Asturias) producen los anclajes. Esto permite industrializar zonas de baja renta y despobladas como Extremadura y Castilla-La Mancha. ¡°Acciona Energ¨ªa Renovables es una pyme al lado de Iberdrola¡±, compara, tajante, el analista.
Acciona va por rachas. Controlada por la familia Entrecanales, en julio el banco estadounidense JP Morgan le recortaba la valoraci¨®n un 25% porque ¡ªseg¨²n su criterio¡ª el precio regulado para las renovables este a?o le impedir¨¢ alcanzar su objetivo de beneficio bruto de explotaci¨®n (ebitda). Mientras, un competidor directo, Iberdrola, cerraba una alianza con el fondo soberano noruego Norges Bank. Compartir el riesgo es una opci¨®n dentro del contexto europeo. Tanto es as¨ª que negocia vender el 49% de su cartera de renovables en Portugal al organismo n¨®rdico.
Pues quiz¨¢ tenga poco sentido enzarzarse dentro de casa. Sin duda, lo que cuenta es avanzar. En Espa?a, el sol amanece con esperanza y el viento sopla al igual que si lo hiciera por primera vez en su historia. Hubo un d¨ªa decisivo. El 25 de diciembre de 2022. El Gobierno aprob¨® infinidad de declaraciones de impacto ambiental (DIA) poniendo fin ¡°a un profundo cuello de botella¡±, narra Eduardo Imedio, analista de renovables de la casa de Bolsa Renta 4. ¡°Porque a veces se tardaba hasta cuatro a?os en conseguir los permisos necesarios para montar una planta fotovoltaica o un parque e¨®lico¡±.
Fuera de juego la burocracia, la coyuntura, sobre todo la subida de los tipos de inter¨¦s, afecta a las operaciones, al igual, como veremos, que el aumento del precio de las turbinas. Esto explica el empe?o de traerlas de vuelta a casa. Sobre la mesa est¨¢ la rentabilidad. ¡°Sin embargo, compa?¨ªas como Iberdrola est¨¢n menos expuestas a las instalaciones marinas¡±, explica Manuel Fern¨¢ndez Losa, cogestor del fondo Pictet-Clean Energy Transition. Y a?ade: ¡°Ha reducido inversiones en renovables para incrementarlas en redes de distribuci¨®n, tanto en media y baja tensi¨®n, al igual que Endesa¡±.
Objetivos ambiciosos
A pesar de todo, la fotovoltaica resulta rentable ¡ªafirma Manuel Losa¡ª entre 40 y 45 euros el megavatio hora (MWh). ¡°De hecho, en los fines de semana y los festivos es tanta la oferta que entra en el sistema, que el precio de la electricidad llega, incluso, a cero¡±, avisa el economista de Renta 4. Aprovechando que la energ¨ªa fluye con fuerza, la propuesta de potencia instalada solar ha pasado de 39 MW que establec¨ªa el PNIEC (Plan Nacional Integrado de Energ¨ªa y Clima) de 2021 a 76 GW del Plan 2023. Casi el doble. El viento, tambi¨¦n, sopla fuerte. En 2030 deber¨ªa alcanzar unas rachas de 62 GW en vez de 50 GW. Al fondo, un empe?o. ¡°La contribuci¨®n espa?ola al objetivo global europeo ha sido m¨¢s ambiciosa que la media, de forma que el PNIEC estableci¨® un porcentaje [de renovables sobre la energ¨ªa final] del 42%, que en junio de este a?o se revis¨® hasta el 48%¡±, describe Carlos Sol¨¦, socio responsable de Energ¨ªa de KPMG Espa?a. Si lo recuerdan, el Pacto Verde fij¨® un objetivo b¨¢sico europeo de alcanzar el 40% de contribuci¨®n de las renovables durante 2030. Varios expertos advierten de la dificultad de cumplir con esa fecha y el porcentaje espa?ol. ¡°Son instalaciones privadas, t¨¦cnicamente dif¨ªciles, donde tienen que salir los n¨²meros, y no existe tiempo material para construirlas¡±, valora un analista que solicita el anonimato. ¡°El sector se ve, en la pr¨¢ctica, condicionado por factores externos, el apoyo pol¨ªtico, sin duda, es total, pero, aun as¨ª, los plazos resultan muy cortos porque desarrollar un parque e¨®lico en cinco a?os es complicad¨ªsimo¡±.
El desaf¨ªo de la conectividad
En este relato de energ¨ªa que enlaza nodos con nodos, Redeia es la caja de Pandora que custodia el sol y el viento. La encargada de las infraestructuras del sistema el¨¦ctrico, a final del ejercicio, habr¨¢ invertido m¨¢s de 700 millones de euros. Cerca de sus m¨¢ximos hist¨®ricos. El prop¨®sito es potenciar con esa trama la producci¨®n de renovables. Crear interconexiones. Si pudi¨¦ramos viajar en un sumergible contemplar¨ªamos el nuevo enlace Ibiza-Formentera (Baleares), la l¨ªnea Lanzarote-Fuerteventura (Canarias) o, ya bajo tierra, la de Cacicedo-Astillero, que cubre la demanda del arco de la bah¨ªa de Santander. Adem¨¢s, ya est¨¢ en marcha la interconexi¨®n entre Tenerife y La Gomera, que debe estrenarse durante 2025. Los puntos encajan, como en ese juego de chavales donde uniendo marcas surg¨ªa una figura. Desde 2015, estas energ¨ªas no reciben ninguna subvenci¨®n. Son autosuficientes. El reto radica en construir las bater¨ªas para almacenar ¡°la luz y el aire¡± los d¨ªas que se oculte el sol y pare el viento. La famosa intermitencia energ¨¦tica. Iberdrola, por ejemplo, quiere almacenar en esas tecnolog¨ªas de vanguardia unos 700 MW en dos a?os.
Da lo mismo, el sol se alza, un d¨ªa y otro, sobre un horizonte que augura un cambio de mentalidad. ¡°Hace a?os todos entraban buscando las subvenciones y la rentabilidad. Igual que si fuera un negocio financiero. Esto se acab¨®¡±, avisa a los oportunistas Daniel Galv¨¢n, director del banco de inversi¨®n GBS Finance.
Pero existe una paradoja reveladora, tal y como cuenta Fabrice de Sousa, responsable de porfolio del banco Indosuez. Varias renovables vieron, en pleno verano, c¨®mo ca¨ªa su cotizaci¨®n. Justo al contrario de lo que propone la l¨®gica. ?Por qu¨¦? Orsted y Siemens Energy ilustran bien la complejidad del sector. ¡°Son empresas j¨®venes y se enfrentan a una crisis de crecimiento marcada por unos niveles de exigencia [en t¨¦rminos t¨¦cnicos] que no han estado a la altura¡±, matiza el experto. La capitalizaci¨®n burs¨¢til de Siemens Energy se desplom¨® en 7.000 millones de euros a finales de junio, despu¨¦s de provisionar 1.300 millones en su divisi¨®n e¨®lica por la compra de Gamesa. ?El lastre? La calidad de unas 63.000 turbinas estaba en entredicho. ¡°Los fabricantes, por cierto, trabajan con m¨¢rgenes peque?os y no resultar¨ªa extra?a una subida de los precios¡±, aventura Daniel Rodr¨ªguez, analista s¨¦nior y responsable de los sectores de Infraestructuras, Renovables y Utilities para Espa?a y Portugal de Bestinver. La cadena de valor tiene ¡ªa veces¡ª sus anclajes sueltos. La celeridad del cambio de modelo energ¨¦tico induce a que los posibles errores sean m¨¢s frecuentes. Espa?a va deprisa. La Asociaci¨®n Empresarial E¨®lica (AEE) estima que a finales de septiembre ya hab¨ªa 1.360 parques e¨®licos que generan, acorde con Red El¨¦ctrica, 43,96 teravatios hora (TWh). Hace bastante poco, en 2021, el n¨²mero era 1.298 repartidos en m¨¢s de 850 municipios.
Sin embargo, ni todos los d¨ªas luce el sol ni sopla el viento. En agosto, el l¨ªder dan¨¦s de energ¨ªas renovables Orsted perdi¨® casi una cuarta parte de su valor en una sola jornada ¡ªrecuerda Indosuez¡ª debido a los continuos problemas de la cadena de suministro tras la pandemia, el aumento del coste de la deuda que ha tra¨ªdo la subida de los tipos de inter¨¦s, y la decepci¨®n de las ayudas p¨²blicas, que estuvieron por debajo de lo que esperaban los inversores. Menos dinero, m¨¢s caro. Hace un par de a?os, el precio del capital de un parque rondaba el 1%, ahora ha escalado al 5%. En la pr¨¢ctica supone cuestionar el modelo de negocio. Los n¨²meros fallan y algunos proyectos offshore se han suspendido.
Pese a todo, las firmas, sobre todo las m¨¢s peque?as, como Solaria o Grenergy (que ha consolidado su pol¨ªtica de expansi¨®n en Chile, Per¨², Argentina, Colombia, M¨¦xico y Europa, entre otros destinos) llevan tiempo bajo el foco de operadores y grandes petroleras, que quieren incorporar esa l¨ªnea verde al negocio. Adem¨¢s, con valoraciones muy altas. En septiembre, Grenergy vendi¨® la totalidad de un parque fotovoltaico en Belinch¨®n (Cuenca) de 150 MW por 173,7 millones de euros a un productor independiente de energ¨ªa (IPP, por sus siglas inglesas) europeo del que no han trascendido m¨¢s datos.
Sector fragmentado
Es una muestra en una placa de Petri. El sector de generaci¨®n el¨¦ctrica en Espa?a se ha fragmentado mucho en la ¨²ltima d¨¦cada sobre todo por la aparici¨®n de los IPP que se centraron en desarrollar porfolios de renovables. Ayudaron, claro, a la financiaci¨®n los bajos tipos de inter¨¦s. ¡°Para el futuro, habr¨¢ una presi¨®n en el mercado que favorecer¨¢ una ligera concentraci¨®n, pero sin que vuelva [frente a otras visiones] la din¨¢mica de campeones nacionales. Las grandes compa?¨ªas con balances s¨®lidos estar¨¢n mejor situadas para financiarse a un coste atractivo. Y tambi¨¦n para afrontar las dificultades de la cadena de suministro derivadas del auge de la instalaci¨®n de renovables en todo el mundo¡±, prev¨¦ Gonzalo Cantabrana, senior director y sector lead para Infrastructure y Project Finance de S&P Global Ratings. ¡°El sector se enfrenta a perspectivas de precios futuros m¨¢s ajustados debido a la canibalizaci¨®n entre renovables, sobre todo a medida que nos acercamos a 2030¡å, concede. Por lo tanto, una de las claves estar¨¢ en optimizar los costes tanto de operaci¨®n como de mantenimiento.
Tampoco hay que olvidar las simbiosis. Para optimizar la producci¨®n de hidr¨®geno verde resulta necesario la energ¨ªa solar y e¨®lica. Cepsa e Iberdrola Renovables cerraron un acuerdo que permitir¨¢ a la primera ¡°respaldar el suministro el¨¦ctrico renovable a largo plazo con vistas a sus plantas de generaci¨®n de este hidr¨®geno, ubicadas en los Energy Parks de la compa?¨ªa en Andaluc¨ªa, as¨ª como su red de estaciones de servicio¡±, desgranan fuentes de Cepsa.
Est¨¢ escrito desde hace siglos en los textos sagrados. ¡°Hay un tiempo para plantar y un tiempo para cosechar, un tiempo para llover y un tiempo para re¨ªr, y sale el sol y se pone el sol, con el deseo de regresar a su lugar donde vuelve a nacer¡±. Eclesiast¨¦s.
Grenergy: las bater¨ªas como futuro de la luz
De repente, el ciudadano normal ha levantado la vista y mirado al sol con una esperanza antaño “reservada” para los hombres y mujeres del campo. Ahora ya no. Grenergy es una de esas empresas que reflejan una nueva ilusión. Ha tenido mejores momentos y más complicados, pero está sabiendo, por ejemplo, reducir su deuda. Ha pasado en 2015 por el MAB (el antiguo mercado alternativo bursátil) y cuatro años después debutaba en el mercado continuo. Fue la única salida al parqué de aquel ejercicio. La estrategia de su modelo de negocio es nítida. “Abarca todas las fases del proyecto. Construcción, estructuración financiera, operación y mantenimiento de las plantas”, desgranan fuentes de la firma. Y su propuesta de ingresos también viaja. Desde la venta de energía como productor independiente (IPP, por sus siglas inglesas) hasta el traspaso de parques a terceros junto —como hemos visto— con la operación y mantenimiento de las plantas. Trabajan en fotovoltaica y eólica, aunque su último movimiento ha sido la entrada en proyectos de baterías. El futuro del almacenamiento de la energía de la luz y el viento.
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