Noah Alef, modelo: ¡°Me dijeron que si quer¨ªa trabajar me tendr¨ªa que quitar mi ¡®peinado de indio¡±

Sucedi¨® hace m¨¢s o menos una d¨¦cada: los estudiantes del instituto Mary Rabello, de Jequi¨¦, una peque?a ciudad en el estado de Bah¨ªa, en Brasil, se preparan para hacer un desfile de moda. En las perchas cuelgan prendas cedidas por las tiendas locales. El equipo de maquillaje corrige aqu¨ª y all¨¢ alguna espinilla en los rostros de los alumnos. Uno se molesta porque intentan que su pelo, liso y con un corte y un color negro ¨²nicos, se asemeje al de los dem¨¢s. Su nombre es Noah Alef, es un ind¨ªgena brasile?o y siente por primera vez la ansiedad que conlleva ser el centro de atenci¨®n. Cuando finalmente pisa la pasarela, se libera todos los miedos. Noah acaba de decidir que quiere ser modelo.

Hoy, con 24 a?os reci¨¦n cumplidos, se consolida poco a poco en la moda participando en desfiles para marcas de primera l¨ªnea como Armani y DSquared2, o de vanguardia como Ximonlee. Alef es uno de los escasos representantes de los pueblos nativos brasile?os en la industria y el modelo apuesta por destacar los rasgos f¨ªsicos que durante mucho tiempo intentaron que disfrazara. ¡°Cuando entr¨¦ en la moda sent¨ª que ten¨ªa el derecho de mostrar mi identidad¡±, afirma, luciendo el corte de pelo tradicional de su etnia. Durante la entrevista, reivindica el t¨¦rmino originario para definir a su pueblo y bromea: ¡°El brasile?o tiene fama de ser guapo, pero nosotros somos los brasile?os originales¡±.

Alef siempre conoci¨® sus or¨ªgenes, pero no tuvo contacto con su propia cultura durante su infancia. ¡°Es muy com¨²n que los ind¨ªgenas no hablen de su identidad por miedo a la persecuci¨®n¡±, explica. Su abuelo pertenec¨ªa a la etnia Patax¨®, y su abuela a los Kariri-Sapuy¨¢. Alef cree que su bisabuelo fue el primero de su familia que fue obligado a abandonar sus tierras y se estableci¨® en Jequi¨¦. ¡°Los patax¨®s son n¨®madas, solo se establecen en un lugar si est¨¢n obligados¡±, explica. El fallecimiento de su bisabuelo antes de que ¨¦l naciera y la situaci¨®n econ¨®mica de su familia complicaron sus intentos de investigar sus ancestros. ¡°No ten¨ªa ni las condiciones ni la madurez para entender todo lo que significaba. Solo logr¨¦ reconectar con todo ello cuando me convert¨ª en modelo¡±, explica.

Sus inicios en la moda no fueron f¨¢ciles. Tras reunir dinero trabajando en diversos empleos en su ciudad natal, se fue a probar su suerte en S?o Paulo, el epicentro de esta industria en Brasil. A pesar de la escasez de ofertas, persever¨®. ¡°Tuve que aceptar muchos trabajos para sobrevivir, incluso pas¨¦ hambre¡±, recuerda. Pas¨® por la construcci¨®n civil, vendi¨® boletos para rifas e incluso se disfraz¨® de oso de Coca-Cola hasta lograr un empleo de barman, en el que fue v¨ªctima de comportamientos racistas: ¡°En las fotos para la web, yo era el ¨²nico al que se le exig¨ªa que se cortara y cambiara el pelo. Una vez se me olvid¨® y me rega?aron. Dijeron que si quer¨ªa trabajar en S?o Paulo, me tendr¨ªa que quitar mi ¡®peinado de indio¡±.

Aunque otros modelos le animaban por su perfil ¨²nico, Noah siente que la industria todav¨ªa estaba en un momento ¡°antiguo¡±: ¡°Entonces no se buscaba tanto la diversidad, a¨²n no le daban tanto valor¡±. La escasez de proyectos se acentu¨® con la llegada de la pandemia, y le llev¨® de regreso a su ciudad natal. Sin embargo, lo que parec¨ªa el fin de su carrera se transform¨® en una oportunidad: empez¨® a publicar en TikTok y all¨ª fue descubierto. La red social, donde hoy tiene m¨¢s de 1,6 millones de seguidores, le proporcion¨® el contacto de Vivaldo Marques, un scout especializado en diversidad.

El modelo encuentra hoy cada vez m¨¢s espacio en las pasarelas. Insiste en mantener su peinado tradicional y siempre intenta incluir un pendiente de plumas o un collar de cuentas, elementos que demuestran que lucir sus ra¨ªces va mucho m¨¢s all¨¢ de la belleza: ¡°Quiero romper con el estereotipo del indio, de como piensan que es mi pueblo hoy. Todav¨ªa se cree que vivimos como hace 500 a?os¡±, se?ala. Noah tambi¨¦n quiere inspirar a otros ind¨ªgenas: ¡°Mi representaci¨®n es parte de un proceso de redescubrimiento de la cultura¡±, explica. ¡°Quiero que el orgullo que tengo hoy tambi¨¦n lo sientan otros ind¨ªgenas que quieran ser modelos¡±.

Alef celebra la visibilidad que le ha dado su trabajo, pero se?ala que ¡°hay mucho camino por recorrer¡±. ¡°Todav¨ªa no veo un ambiente diverso de verdad, los castings tienen poca gente diferente. A veces parece que est¨¢n cumpliendo una cuota¡±. Mientras reconoce que la industria ya busca la diversidad, no cree que lo haga ¡°de la manera m¨¢s correcta¡±. ¡°La b¨²squeda no es por un perfil diverso, sino por un estereotipo. No basta solo tener modelos que representen una diversidad, hay que ser realmente diverso en sus creaciones y representaciones¡±, destaca. Para ¨¦l, las evidencias son claras: ¡°No veo mucha gente diversa estampando tiendas con su cara¡±, cuestiona.

Aunque haya ocurrido tarde, el modelo se alegra de haber podido reconectar con sus or¨ªgenes. ¡°Al fin cre¨¦ otra familia con mi pueblo, amo a todos. Ellos me apoyan y creen que hago lo correcto, que les traigo algo positivo¡±, afirma. ¡°Me emociono casi todas las veces que voy all¨ª y siento la energ¨ªa del lugar, escucho las historias, me siento libre, en casa. Suelo ir a la Reserva da Jaqueira, donde viven muchos patax¨®s. Tengo mucho cari?o por el Cacique Syrat?¡±. Preguntado por qu¨¦ se identifica con el pueblo de su abuelo, y no el Kariri-Sapuy¨¢ de su abuela, Alef explica: ¡°Son muy pocos, virtualmente desaparecieron, fueron asesinados por granjeros o abandonaron por la fuerza su territorio. Aquellos que no quisieron irse, murieron¡±.

La colonizaci¨®n y los conflictos por tierras han provocado la continua exterminaci¨®n de los pueblos ind¨ªgenas en Brasil desde la llegada de los portugueses. Aunque iniciativas desde los a?os ochenta invirtieron la tendencia de ca¨ªda de poblaci¨®n, los pueblos originarios brasile?os a¨²n sufren violencia y ocupaci¨®n territorial y forman tan solo un 0,83% de la poblaci¨®n actual. Brasil ha experimentado un aumento de muertes en las ¨²ltimas dos d¨¦cadas, con un 10% de los ind¨ªgenas fallecidos en los ¨²ltimos 20 a?os y un 40% en los ¨²ltimos cuatro. La regi¨®n de Alef es conocida por conflictos territoriales debido a la riqueza de su suelo.

Actualmente, las comunidades ind¨ªgenas enfrentan la propuesta de ley del ¡°marco temporal¡±, que limita las tierras ind¨ªgenas a los territorios definidos en 1988, en la fecha de publicaci¨®n de la constituci¨®n brasile?a. En caso de su aprobaci¨®n, todos los territorios definidos despu¨¦s de esta fecha ser¨ªan arrebatados a los pueblos ind¨ªgenas que los ocupan hoy. Los ruralistas siguen presionando por su aprobaci¨®n, aunque el Tribunal Supremo la haya definido como inconstitucional y el presidente Lula haya vetado muchos puntos de su texto. Noah particip¨® en protestas en contra de esta ley.

Alef lamenta que a¨²n sufra discriminaci¨®n en un pa¨ªs mundialmente reconocido por su diversidad. ¡°Es muy com¨²n que la gente me vea por la calle y me haga ruidos como los ind¨ªgenas de las pel¨ªculas western¡±, cuenta. Denuncia que a¨²n hay regiones en Brasil donde se mata a los ind¨ªgenas, y opina que la colonizaci¨®n intent¨® borrar su cultura por motivos pr¨¢cticos: ¡°Nosotros somos un obst¨¢culo para quien quiere explotar la tierra, somos defensores de la tierra¡±, explica el modelo. ¡°Cuando era joven no lo entend¨ªa, pero hoy reconozco la lucha de mi pueblo y estoy orgulloso de ella¡±.

El modelo destaca que muchas marcas ya usan est¨¦ticas, colores y motivos ind¨ªgenas. Un ejemplo reciente incluye la casa francesa Dior, que colabor¨® con nativos mixtecas para su colecci¨®n Crucero 2024: ¡°Me encanta el trabajo de Dandara Queiroz y Emily Nunes por ejemplo, que tambi¨¦n son ind¨ªgenas y brasile?as¡±. Sin embargo, sostiene que la mayor contribuci¨®n ind¨ªgena es ¡°la vida¡±: ¡°Luchamos constantemente por el derecho a vivir, no solo el nuestro sino de todos. Eso se aplica a toda la naturaleza. Tenemos una visi¨®n muy sostenible de c¨®mo se deben hacer las cosas, y creo que todo el mundo podr¨ªa beneficiarse de eso¡±.

Alef planea seguir desfilando y representando a su cultura en todas las pasarelas posibles: ¡°Quiero que, gracias a m¨ª, otros puedan llegar. Cuando empec¨¦ en la moda no hab¨ªa nadie con quien pudiera identificarme¡±. Adem¨¢s, desea que su influencia no se limite solo a los ind¨ªgenas: ¡°Soy de una familia que no tiene mucho dinero, soy de barrio. Quiero que los j¨®venes vean que hay m¨¢s opciones que la delincuencia¡±.

Puedes seguir ICON en Facebook, X, Instagram, o suscribirte aqu¨ª a la Newsletter.