Matrimonio de conveniencia en Siria
Rusia e Ir¨¢n se imponen como vencedores en la contienda del pa¨ªs ¨¢rabe, donde su alianza pol¨ªtico-militar alterna con la competici¨®n econ¨®mica
Aliados de los Asad desde hace m¨¢s de tres d¨¦cadas, Ir¨¢n y Rusia se imponen como vencedores en la contienda siria frente a sus respectivos enemigos. Ambos actores desempe?an un rol complementario en su apoyo a Bachar El Asad basado en objetivos comunes, pero con metodolog¨ªas divergentes. Ir¨¢n salv¨® al r¨¦gimen en 2012 poniendo las botas en el terreno. Rusia lo hizo en 2015 extendiendo sus alas. El presidente sirio es hoy deudor de ambos valedores. A corto plazo, preservar sus respectivos intereses pasa por proteger la unidad territorial en Siria y por ende al r¨¦gimen. Es en la estrategia a largo plazo y en el plano econ¨®mico donde Mosc¨² y Teher¨¢n pueden pasar de aliados a competidores.?
Unidos por Damasco, la alianza ruso-iran¨ª ha sido crucial para la supervivencia del r¨¦gimen sirio tras siete largos a?os de guerra. Los c¨¢rteles en las autopistas que van hacia las regiones hoy bajo control del Ej¨¦rcito sirio dan fe de ello. Los p¨®steres que en la Siria de preguerra presid¨ªan los rostros de Bachar el Asad junto a los del l¨ªder de la milicia chi¨ª libanesa Hezbol¨¢, Has¨¢n Nasral¨¢, y del l¨ªder supremo iran¨ª, Al¨ª Jamenei, han sido agrandados para hacer hueco a los del presidente ruso, Vladimir Putin, y los de generales de la Guardia Revolucionaria Iran¨ª (GRI) como Qasem Soleimani.
¡°Todos sabemos quienes estar¨ªan gobernando hoy Damasco [en alusi¨®n a los grupos yihadistas e islamistas armados] si Ir¨¢n no hubiera intervenido en Siria¡±, dice en una conversaci¨®n telef¨®nica el profesor Mohammad Marandi, de la Universidad de Teher¨¢n. La GRI fue la primera en acudir al rescate de Damasco en 2012, cuando los insurrectos acechaban el coraz¨®n del pa¨ªs. Los milicianos de Hezbol¨¢ llegaron como refuerzo en 2013, y ellos tambi¨¦n se suman a la lista de adeudados de El Asad. ¡°Siria respald¨® a Ir¨¢n cuando Sadam Husein gase¨® a iran¨ªes con armas provistas por Occidente. Es natural que hoy les devolvamos el apoyo en su lucha contra los extremistas¡±, acota Marandi.
Invisibles en el terreno y herm¨¦ticos en sus comunicaciones incluso con los generales sirios, Ir¨¢n ha sabido colocar a sus peones durante la guerra. ¡°Teher¨¢n es mucho m¨¢s ambiciosa en Siria que Mosc¨² por su af¨¢n de expansionismo¡±, valora al tel¨¦fono el experto sirio Hassan Hassan del centro de Estudios Tahrir para Oriente Medio. Ir¨¢n se anota en Siria un tanto contra Arabia Saud¨ª, su archienemigo sun¨ª en la regi¨®n. Y contra EE UU, enemigo que comparte con Rusia. ?xito que hay que sumar a los logrados en Yemen y, m¨¢s recientemente en L¨ªbano, donde la coalici¨®n liderada por Hezbol¨¢ ha salido reforzada por las urnas.
Expansi¨®n militar y competici¨®n por los recursos de hidrocarburos
¡°Ir¨¢n ha pasado de tener cero bases militares en Siria antes de la guerra a establecer 10 propias, otras nueve afiliadas y 13 para Hezbol¨¢¡±, es el balance que hace el experto Nawar Oliver del Centro de estudios Omran de Estambul. El reparto de zonas ha quedado patente conforme los oficiales de la GRI a cargo de entre 30.000 a 50.000 milicianos (paquistan¨ªes, iraqu¨ªes, afganos y libaneses) han afianzado sus posiciones en el corredor que se extiende desde la frontera occidental con L¨ªbano, en Quseir, a la oriental con Irak, en Abu Kamal, pasando por el centro en Palmira. Una ruta que se solapa con la proyectada por el gasoducto chi¨ª propuesto por Ir¨¢n para contrarrestar una iniciativa catar¨ª, y que Damasco firm¨® pocas semanas antes de que estallaran las revueltas populares sirias en marzo de 2011. Esta ruta tambi¨¦n? permite mantener la continuidad territorial de Ir¨¢n a L¨ªbano para seguir aprovisionando a Hezbol¨¢ con armas, sueldos y un campo de entrenamiento.?
La invisibilidad de los iran¨ªes contrasta con la visible presencia de uniformados rusos quienes pululan abiertamente en Alepo, Palmira o Abu Kamal. En Damasco se les puede ver reunidos con los Cazadores del ISIS, un grupo paramilitar sirio que cuenta con unos 300 efectivos entrenados por las fuerzas especiales rusas y estrat¨¦gicamente apostado para defender las zonas petrol¨ªferas. El pasado mes de enero, Rusia y Siria firmaron un acuerdo por el que Damasco ced¨ªa a Mosc¨² derechos exclusivos para la producci¨®n de gas y petr¨®leo en el pa¨ªs. Es en la competici¨®n por la futura explotaci¨®n y transporte de los recursos de hidrocarburos (Siria dispon¨ªa en 2011 de unas reservas de 2.500 millones de barriles de crudo y de 0,3 trillones de metros c¨²bicos de gas ) donde los expertos prev¨¦n se acent¨²en las divergencias ruso-iran¨ªes en la era post-ISIS.
El segundo salvavidas de Damasco lo lanz¨® Rusia en septiembre de 2015 ampliando las alas del Ej¨¦rcito sirio, y con ello revirtiendo la balanza a favor de El Asad en el terreno. ¡°Proteger nuestro ¨²nico acceso al Mediterr¨¢neo [en referencia a la base mar¨ªtima de Tart¨²s], la integridad territorial del pa¨ªs y prevenir la expansi¨®n del yihadismo antes de que pueda reverberar en territorio ruso¡±. As¨ª resume los intereses moscovitas en Siria una fuente cercana a la Embajada rusa en Beirut. ¡°Especialmente despu¨¦s de ver lo que el derrocamiento de Sadam [Husein en 2003] y [Muamar] Gadafi [en 2011] ha tra¨ªdo en Irak y Libia¡±, se apresura a apostillar. Putin ha refrendado cuatro d¨¦cadas de luna de miel con los Asad y regresado a la palestra internacional como actor de peso frente a EE UU.
Mosc¨² asegura que hasta 48.000 soldados rusos han rotado por sus bases militares en Siria, que, al igual que las iran¨ªes, se han visto ampliadas con la construcci¨®n de una nueva base naval y varias a¨¦reas como la de Jmeimim (cerca de la costera ciudad de Latakia) batida como centro de operaciones. El reparto de roles se produce con Ir¨¢n a cargo del sistema de milicias que ha exportado a Siria como punta de lanza en las ofensivas terrestres y Rusia a cargo de los bombardeos internos y del sistema defensivo externo, sin que se haya producido una transferencia de las modernas bater¨ªas de defensa antia¨¦reas S-400 que manejan exclusivamente soldados rusos.
Connivencia pol¨ªtica, divergencia estrat¨¦gico-ideol¨®gica
Tras la internacionalizaci¨®n de la contienda siria con la entrada de las tropas estadounidenses (2014), rusas (2015) y turcas (2016), Putin ha sabido aprovechar la errante estrategia de Trump para presentarse como mediador imprescindible. De esta forma, ha competido con el proceso de negociaciones de paz auspiciado por la ONU en Ginebra con el de Astan¨¢ y revalorizando los intereses de Ir¨¢n en un acercamiento con Turqu¨ªa. Mosc¨² ha instalado cuatro tel¨¦fonos rojos en su base de Jmeimim?con l¨ªnea directa a la Coalici¨®n internacional, Turqu¨ªa, Ir¨¢n e Israel. Autoproclamado ¨¢rbitro del concurrido cielo sirio, todos los caminos en Siria llevan a Mosc¨². Rusia media hoy entre Ankara y Damasco, Ir¨¢n e Israel, oposici¨®n/kurdos y r¨¦gimen, restando con ello peso a la influencia pol¨ªtica iran¨ª en Siria y rebajando, conforme se apaciguan los frentes, su dependencia militar hacia los combatientes proiran¨ªes en el terreno. Combatientes de los que podr¨ªa prescindir una vez reforzado el Ej¨¦rcito regular sirio con la absorci¨®n de parte de los milicianos locales.
El frente Damasco-Teher¨¢n-Mosc¨² ha reiterado su alianza una vez proclamada la derrota del ISIS, uni¨®n que no ha estado exenta de escollos. ¡°Los iran¨ªes son herm¨¦ticos, testarudos y desconf¨ªan de los rusos. Poniendo los muertos en el terreno han tenido que ceder a los acuerdos con los armados dictados por Putin en clave internacional y aceptar que Mosc¨² haga la vista gorda o les frene ante los repetidos ataques israel¨ªes¡±, admite un alto cargo del Ej¨¦rcito sirio en Damasco. Previendo una futura fase de reconstrucci¨®n, Ir¨¢n ya se ha posicionado con ONG como Yihad el Binaa para empezar a construir mezquitas, hospitales y universidades en la provincia de Alepo. Tanto Rusia como Ir¨¢n han distribuido alimentos y ayuda humanitaria en Siria.
Varios oficiales sirios se?alan que, a diferencia de la relativa laxitud rusa, Ir¨¢n act¨²a movida por un fuerte componente ideol¨®gico-religioso chi¨ª. Uno que, seg¨²n estos militares y a pesar de la tendencia a confundir ambas confesiones en una sola, choca con el marcado secularismo alau¨ª (12% de la poblaci¨®n siria) aprensivo ante una posible chiizaci¨®n de Siria. En las barracas militares de la retaguardia, los soldados alau¨ªes ocultan las botellas de arak (una suerte de an¨ªs) cuando los ¡°camaradas chi¨ªes¡± les visitan. En Damasco, los m¨¢s pragm¨¢ticos generales rusos han sabido ganarse a gran parte de la inteligencia militar siria, en cuyas oficinas resuena cada m¨¢s el ruso frente al ancestral persa. Compartir un mismo aliado en Siria y enemigo en Washington alimenta el matrimonio de conveniencia, uno que habr¨¢ de ser renegociado en la fase de reconstrucci¨®n de Siria.
Israel, nuevo escollo en la alianza
Ante la f¨¦rrea oposici¨®n sirio-iran¨ª frente a toda presencia de las tropas invasoras turcas en el norte del pa¨ªs, Rusia ha tirado de calculadora para ceder el cant¨®n kurdo de Afr¨ªn a Ankara a cambio de que las tropas sirias prosigan su avance contra el basti¨®n insurrecto de Idlib, en el noroeste del pa¨ªs, fronterizo con Turqu¨ªa. Tras salvar numerosos escollos en el terreno, es Israel el que pone de nuevo a prueba la alianza ruso-iran¨ª y, de paso, en un aprieto a El Asad. "Solo el Ej¨¦rcito sirio deber¨ªa estar en la frontera sur de Siria", declar¨® el ministro ruso de Exteriores Sergu¨¦i Lavrov este lunes. Palabras que Tel Aviv ha interpretado como un gui?o. De nuevo, es en Mosc¨² donde yace la llave para pacificar la reciente y mayor escalada b¨¦lica de las ¨²ltimas cuatro d¨¦cadas protagonizada en suelo sirio por dos de sus aliados: Ir¨¢n e Israel.
Parad¨®jicamente, tanto oficiales sirios como iran¨ªes aseguran estar en consonancia con Mosc¨². "En nuestro territorio no hay tropas iran¨ªes, solo asesores, de ah¨ª que no haya ni un solo iran¨ª muerto en el ¨²ltimo ataque", defend¨ªa este jueves el presidente sirio en una entrevista concedida a la cadena de televisi¨®n RT. S¨ª que los hubo en el bombardeo que lanz¨® Israel el pasado 9 de abril sobre el aer¨®dromo militar T4 en el centro de Siria. "Llegado el momento Ir¨¢n vengar¨¢ la muerte de sus hombres", dan por respuesta miembros de Hezbol¨¢ en Beirut.
El analista Nawar Oliver hace una lectura m¨¢s positiva de la nueva entente supuestamente alcanzada entre Ir¨¢n y Rusia tras las conversaciones mantenidas por esta ¨²ltima con Israel. "Ir¨¢n ha sido muy inteligente y ha optado por infiltrar progresivamente tanto las instituciones de seguridad sirias como insertar a los milicianos locales entrenados por Ir¨¢n en el Ej¨¦rcito sirio y as¨ª asegurarse su influencia en el futuro, cuando le toque retirar a los combatientes extranjeros". De esta forma, Israel gana al mantener su zona tap¨®n en su frontera norte con Siria e Ir¨¢n no pierde influencia en Siria. ?Qu¨¦ gana Ir¨¢n en su repliegue frente a Israel? "Unas garant¨ªas de tr¨¢nsito para expandir sus proyectos econ¨®micos con el control del estrat¨¦gico paso fronterizo con Irak al este del pa¨ªs", opina Oliver.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.