Pol¨¦mica en M¨¦xico por una boda de tem¨¢tica nazi

Fernando y Josefina se casaron el pasado 29 de abril en Tlaxcala, en el centro de M¨¦xico. Eligieron precisamente esa fecha porque ese d¨ªa celebraron su boda Adolf Hitler y Eva Braun. Ella llevaba un vestido blanco. ?l, un uniforme de las SS. La prensa local document¨® la ceremonia a detalle. La carroza nupcial, un viejo Volkswagen, iba decorada con camuflaje, una esv¨¢stica en el cap¨® y una cruz negra en la puerta del conductor, el emblema de la Luftwaffe y de varios veh¨ªculos militares alemanes durante la Segunda Guerra Mundial. En las im¨¢genes se aprecia que algunos invitados calzaron botas y sombreros mexicanos, y otros se disfrazaron de soldados. Los novios, adem¨¢s, recrearon varias fotos de sus ¡°¨ªdolos¡± que, por franca ignorancia o estupefacci¨®n, se hicieron virales en internet.

Los medios presentaron la boda nazi como una curiosidad surreal, casi inocente, con el novio defendiendo que Hitler fue ¡°amado por su gente¡±, que el nacionalsocialismo le ¡°ha ayudado¡± en su vida y que ha sufrido desde ni?o por sus ¡°ideales¡±. A la comunidad jud¨ªa y organizaciones internacionales para preservar la memoria del Holocausto no les ha hecho ninguna gracia.

¡°Nuestra instituci¨®n condena en¨¦rgicamente la distorsi¨®n y banalizaci¨®n de la memoria de seis millones de hermanos jud¨ªos asesinados en el Holocausto y el menosprecio por parte de los que niegan o tergiversan la historia, as¨ª como a todos los que se prestaron a esta deleznable falta de respeto¡±, ha afirmado en un comunicado Ariel Gelblung, director para Am¨¦rica Latina del Centro Sim¨®n Wiesenthal, una organizaci¨®n jud¨ªa de derechos humanos. La instituci¨®n ha exhortado a las autoridades mexicanas a reprobar la boda por promover un discurso de odio y racismo.

Tribuna Israelita, una instituci¨®n que funge como portavoz de la comunidad jud¨ªa en el pa¨ªs, se ha unido a la condena de ¡°toda acci¨®n que hace apolog¨ªa y enaltece al nazismo, ideolog¨ªa responsable del asesinato de millones de personas, incluyendo a seis millones de jud¨ªos, como lamentablemente sucedi¨® durante una boda en Tlaxcala¡±.

El Consejo Nacional para Prevenir la Discriminaci¨®n (Conapred) ha subrayado este mi¨¦rcoles que las leyes mexicanas proh¨ªben el antisemitismo y ha calificado el acto como una ¡°manifestaci¨®n de intolerancia¡±. ¡°A prop¨®sito de la boda tem¨¢tica y la difusi¨®n realizada por medios de comunicaci¨®n, desde el Conapred consideramos necesario recordar los terribles eventos que tuvieron lugar en el suelo europeo durante el Holocausto, un crimen sin paralelos en la historia de la humanidad¡±, ha se?alado.

La pareja no tuvo ning¨²n problema para celebrar la ceremonia religiosa en una parroquia de Tlaxcala ni en un juzgado civil hace un par de a?os, cuando el vestido de Josefina luc¨ªa una esv¨¢stica. Incluso, Fernando tampoco tuvo empacho en presentarse como ¡°funcionario p¨²blico¡±, aunque no se publicaron m¨¢s detalles. El matrimonio tiene dos hijos: Reinhard, en alusi¨®n al general de las SS Reinhard Heydrich y Hanna Gertrud, por la piloto nazi Hanna Reitsch y Gertrud Scholtz-Klink, presidenta de la Liga Nacionalsocialista de Mujeres. ¡°Yo s¨¦ que para mucha gente Hitler era un genocida, un s¨ªmbolo del racismo y de la violencia, pero la gente juzga sin tener informaci¨®n o por creer en la historia de los vencedores¡±, sostiene el novio en un reportaje publicado en el peri¨®dico Milenio.

En el art¨ªculo, firmado por la redacci¨®n y que incluye ocho fotograf¨ªas de la ceremonia, se confronta a varios de los asistentes sobre su apolog¨ªa del nazismo, pero sus argumentos se reproducen de forma ¨ªntegra y sin matices. ¡°Nos han hecho creer que Hitler era racista, pero se acerc¨® a saludar a Jesse Owens en las Olimpiadas de 1936¡å, asegura Fernando, por ejemplo. ¡°Una mentira descarada¡±, ha revirado el Centro Wiesenthal.

¡°Es ignorancia¡±, resume Jaime Romanowsky, un especialista jud¨ªo en temas de genocidio que achaca estas muestras discriminatorias al desconocimiento entre el grueso de la poblaci¨®n sobre su tradici¨®n religiosa y a un af¨¢n de ¡°saber m¨¢s¡± e ir ¡°en contra de lo que creen los dem¨¢s¡±. ¡°Negar el Holocausto es negar lo evidente, algo que los propios perpetradores han admitido¡±, agrega.

La discriminaci¨®n contra los jud¨ªos no es un asunto superado y los discursos de odio, en general, han vivido un nuevo auge mundial que desaf¨ªa las concepciones tradicionales de lo que es aceptable y lo que no, sobre todo a la luz de la era tecnol¨®gica. Pero no es un tema del mundo digital. La Liga Antidifamaci¨®n ha registrado m¨¢s de 2.700 incidentes antisemitas de asalto, acoso y vandalismo tan solo en Estados Unidos durante 2021, el m¨¢ximo hist¨®rico desde que empezaron las mediciones en 1979.

En M¨¦xico, donde viven casi 60.000 jud¨ªos seg¨²n el ¨²ltimo censo, no hay datos espec¨ªficos ni sistem¨¢ticos, pero la m¨¢s reciente encuesta nacional sobre discriminaci¨®n enlista las creencias religiosas como el segundo motivo m¨¢s com¨²n de las ofensas, solo despu¨¦s de la apariencia f¨ªsica. Varios miembros de la comunidad, sin embargo, no consideran que sea una tendencia generalizada. ¡°Afortunadamente no ha habido brotes masivos, son aislados, pero de todas formas no podemos permitir que esto suceda y hay que evitar que esto crezca¡±, comenta Romanowsky.

Un d¨ªa antes de la boda se celebr¨® el Yom HaSho¨¢, el d¨ªa en que se conmemora cada a?o a las v¨ªctimas del Holocausto, mientras que este mi¨¦rcoles se recuerda a los ca¨ªdos en las guerras como parte del Yom HaZikar¨®n. ¡°Muy probablemente los que se casaron no lo conoc¨ªan, pero esto se hace para no olvidar, para saber lo fr¨¢giles que somos y para evitar cualquier ataque indiscriminado contra minor¨ªas y gente inocente, sean o no jud¨ªos¡±, explica Romanowsky. ¡°Sobre todo, para evitar que la historia se repita¡±.

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