Blanco bueno posa con negro pobre por unos cuantos ¡®me gusta¡¯ en redes

Est¨¢s comiendo en tu casa en Espa?a con tu familia cuando, de repente, una persona que no has visto nunca invade el sal¨®n con una sonrisa de oreja a oreja y el m¨®vil en mano disparando fotos a tu hija peque?a mientras exclama: ¡°?Qu¨¦ monada, me la llevar¨ªa a casa y le dar¨ªa de todo!¡±.

Acto seguido, sin darte tiempo a responder, se posiciona en medio, rodeada de tus hijos y sus amigos, coge a la ni?a en brazos y posa con ella haci¨¦ndose un selfi. Luego lo sube a sus redes sociales con la siguiente frase: ¡°Los acabo de conocer y ya me han enamorado. Siempre est¨¢n sonriendo¡±.

?Qu¨¦ os parecer¨ªa?

O que os dijeran: ¡°Qu¨¦ ganas que tengo de irme a Noruega y hacerme fotos rodeado de ni?os. Son tan monos, tan blanquitos, con ese pelo tan liso que no puedo dejar de tocar...¡±.

Me estoy refiriendo al cada vez m¨¢s extendido volunturismo.

Volunturismo y cooperracismo

Arremangarte durante dos horas no es cooperaci¨®n. Pintar una pared durante una hora, cocinar media hora, cavar una zanja 20 minutos¡­ son tareas habituales en un tipo de viajes que se venden como cooperaci¨®n. Pero nada de eso lo es. Y estas acciones no ayudan; incluso perjudican. Todas pueden ser realizadas por poblaci¨®n local a la que est¨¢s menospreciando y quitando trabajo.

Arremangarte durante dos horas no es cooperaci¨®n. Tampoco pintar una pared durante una hora, cocinar media hora, cavar una zanja 20 minutos¡­

Puede parecer muy ex¨®tico estar un d¨ªa sin luz, sin agua, sin cobertura telef¨®nica, orinando en una letrina y comiendo arroz con las manos. Es f¨¢cil idealizar la pobreza sabiendo que la semana que viene, con total seguridad, vas a tomar tu avi¨®n de vuelta a la comodidad. Pero ellos no lo necesitan porque ¡°son felices as¨ª¡±, ¡°son felices sin nada¡±. Ahora bien, que luego se jueguen la vida cruzando desiertos y mares¡­ Eso es ya otra historia demasiado compleja para dos semanas.

En uno o dos meses no se ayuda. El volunturismo hace cooperracismo: imita una cooperaci¨®n, pero la pr¨¢ctica acaba siendo da?ina.

El volunturismo puede ser postureo si lo que se busca es hacerse fotos con negros pobres para ganar unos cuantos likes. O ignorancia, si alguien se cree que se puede cambiar el mundo en cuatro o cinco semanas, sin formaci¨®n ni experiencia. O prepotencia, si se ve como un salvador. O racismo, si se considera superior. Son hijos del colonialismo.

El volunturismo refuerza los estereotipos y prejuicios que elabora la mirada hija del colonialismo y racista, perpetuando la superioridad de una raza con el ya conocido s¨ªndrome del salvador blanco.

El perfil de quien practica el volunturismo es, en su mayor¨ªa, el de un joven estudiante con poca o ninguna experiencia que va a ¡°ayudar en lo que haga falta¡±. Pero no hay que ayudar en cualquier cosa, hay que ayudar en lo que sepas.

El volunturismo refuerza los estereotipos y prejuicios que elabora la mirada hija del colonialismo y racista, perpetuando la superioridad blanca bajo el ya conocido s¨ªndrome del salvador blanco

La cultura de la inmediatez

El perfil del que hace volunturismo corresponde tambi¨¦n a la urgencia e inmediatez que nos invaden. Tenemos prisa, mucho por hacer: retos, eventos, videos de distintas tem¨¢ticas. Me interesa ayudar y salvar el mundo, pero ahora y en dos d¨ªas, que al tercero tengo que pasar al siguiente tema de moda. En dos d¨ªas realmente puede cambiar tu vida, pero dif¨ªcilmente la de alguien m¨¢s.

Hace cuatro veranos, desde Etiop¨ªa, publicaba una serie de consejos que habr¨ªa agradecido antes de ¡°ir de cooperaci¨®n¡±. Porque la solidaridad mal entendida puede perjudicar m¨¢s que hacer bien. Tres a?os despu¨¦s, segu¨ªa viendo pasar voluntarios de corta estancia mes a mes. Los cooperantes cambian; quienes no lo hacen son las personas locales, que permanecen atrapadas en el tiempo.

Esta primavera publicaba, con iron¨ªa, c¨®mo realizar cooperaci¨®n sanitaria en ?frica y c¨®mo contarlo al volver. Y ahora, en pleno verano, las redes se llenan de j¨®venes influencers. El mensaje no llega. Est¨¢ ganando el racismo.

Cooperar es un privilegio

¡°Quiero ir a ayudar y me han dicho que no¡± es una de las frases que habitualmente me encuentro. La buena intenci¨®n es necesaria, pero no es suficiente. Ser cooperante es una profesi¨®n, exige una formaci¨®n y experiencia, disponer de unos conocimientos espec¨ªficos en campos profesionales. Tambi¨¦n es necesario un conocimiento previo del pa¨ªs que nos va a acoger, de su contexto cultural, social y econ¨®mico. Existen formaciones de m¨¢ster, posgrado, cursos y distintas entidades que pueden asesorar. Cooperar es un privilegio.

Cuando llegu¨¦ a Etiop¨ªa por primera vez, seg¨²n aterric¨¦ en el aeropuerto de Adis Abeba, me qued¨¦ impactado: lo primero que vi fue una autopista bien asfaltada y llena de coches, edificios de 20 y 30 pisos. Personas bien vestidas, algunas con traje y hablando con un tel¨¦fono m¨®vil de ¨²ltima generaci¨®n. ?Y sabes qu¨¦ pens¨¦, entonces? ¡°Ah, esto no parece ?frica¡±. No se correspond¨ªa con la imagen preconcebida y estereotipada que ten¨ªa en mente.

Al llegar al hospital, me present¨¦ diciendo: ¡°?Hola! Soy m¨¦dico, vengo de cooperaci¨®n a ayudar en lo que haga falta. Puedo visitar ni?os, adultos, mujeres embarazadas, atender partos, puedo ayudar a limpiar, a cocinar... ?Lo que sea!¡±. Imagino que no sorprende mi carta de presentaci¨®n, con la voluntad de ayudar, sin acreditar formaci¨®n; ya se sabe que en ?frica la buena voluntad es suficiente.

Pero ahora imagina que, en vez de llegar a Etiop¨ªa, llego a Noruega y me presento al director del hospital con las mismas palabras. De entrada, ni se me pasar¨ªa por la cabeza presentarme en un hospital n¨®rdico sin el t¨ªtulo homologado, pero pensamos que en Etiop¨ªa no es necesario. Adem¨¢s, tampoco me presentar¨ªa en el hospital europeo como ¡°cooperante¡±, sino como m¨¦dico. Entonces, me pregunto, ?por qu¨¦ si voy a un pa¨ªs como Etiop¨ªa soy cooperante? ?Quiere decir que estoy etiquetando y calificando de inferior al pa¨ªs?

Como espa?ol, en Etiop¨ªa me llaman ¡°cooperante¡± o ¡°expatriado¡±. En cambio, a un et¨ªope en Espa?a le tildamos de ¡°inmigrante¡±. Este es un lenguaje racista y colonial.

Durante estos a?os viviendo en Etiop¨ªa me encontr¨¦ con un pa¨ªs del que nunca hab¨ªa escuchado hablar: hospitales con tecnolog¨ªa puntera reci¨¦n inaugurados, excelentes m¨¦dicos y profesionales que se graduaban cada a?o en las m¨¢s emblem¨¢ticas y prestigiosas universidades et¨ªopes¡­

Invito a mirar a Etiop¨ªa no solo como un pa¨ªs vulnerable y receptor de ayuda, sino tambi¨¦n como un pa¨ªs del que aprender y compartir experiencias. La pobreza no est¨¢ en ?frica, sino en mi mirada hacia ella. Entend¨ª tambi¨¦n que los estereotipos nos separan y nos dividen. Vivimos en un mundo lleno de fronteras como una valla o un mar, pero la frontera m¨¢s peligrosa somos nosotros mismos, son nuestros prejuicios. Debemos trabajar sin paternalismos, con humildad, con respeto, profesionalidad y excelencia.

Gu¨ªa para trabajar en un pa¨ªs en desarrollo

1. Trata a todas las personas dignamente y con consideraci¨®n, respetando siempre sus derechos laborales. Evita toda discriminaci¨®n por raz¨®n de raza, sexo, nacionalidad o religi¨®n.
2. Act¨²a honesta y ejemplarmente. Ten en cuenta las consecuencias en terceros, especialmente los m¨¢s vulnerables, de sus acciones y decisiones. No hagas en otro pa¨ªs lo que no har¨ªas en el tuyo.
3. No te enga?es ni enga?es. La desigualdad existe. Para luchar contra la desigualdad lo primero es reconocerla. El cooperante parte de una posici¨®n de superioridad.
4. Reconoce los errores?cometidos, haz lo posible por solucionarlos y prevenir que se repitan.
5. No hagas cooperaci¨®n con visado de turista.
6. No realices una fotograf¨ªa sin antes pedir?consentimiento, a poder ser escrito. Evitar que el menor de edad pueda ser identificado. Evita cualquier tipo de im¨¢genes denigrantes. Evita, siempre que puedas, hacer fotos.
7. No seas el?salvador blanco. No vas a salvar el mundo. S¨¦ humilde. Promueve el empoderamiento de las personas y su autonom¨ªa e independencia. Establece una relaci¨®n de igualdad y huye de toda actitud de superioridad hacia los terceros con los que nos relacionamos.
8. Haz lo que sabes hacer. Si eres pediatra, lo mejor que sabr¨¢s hacer es pediatr¨ªa. No hagas en otro pa¨ªs lo que no har¨ªas en el tuyo. No vas a ¡°ayudar en lo que haga falta¡±, vas a trabajar con los conocimientos profesionales y la formaci¨®n para ello.
9. Trabaja siempre con dedicaci¨®n, entrega y compromiso buscando siempre la excelencia y la calidad, no te conformes con menos. La excelencia y la calidad no est¨¢n limitadas a los pa¨ªses ricos. Lo que exigimos en un pa¨ªs con elevados recursos debemos exigirlo tambi¨¦n en los de menos recursos.
10. No hagas postureo, no volunturismo, no influencers, no youtubers. O lo que es lo mismo, discreci¨®n.
11. Respeta?siempre. Puede que haya aspectos culturales?con los que no est¨¦s de acuerdo, no tienes que aceptar todo, pero s¨ª respetarlo.?Aprende, comprende y respeta?la cultura local, las tradiciones, idiomas,?historia, costumbres.
12. No impongas?tus pensamientos, opiniones.
13. No lleves medicamentos caducados. No lleves medicinas ni material sanitario que se pueda comprar en el pa¨ªs al que vas, ni lo introduzcas en el pa¨ªs sin los permisos adecuados.
14. No pienses que en un mes vas a cambiar el mundo. Ni en tres...

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