La escuela en la que se estudia el ¡®Tetris¡¯ o ¡®Sonic¡¯

Al malague?o ?lvaro Toledo, de 24 a?os, le apasionan los videojuegos. No ten¨ªa claro su futuro y pens¨® que ser¨ªa buena idea estudiar, precisamente, c¨®mo se construyen estos juegos. El a?o pasado se matricul¨® en el ciclo superior titulado T¨¦cnico experto en creaci¨®n de videojuegos, en la Escuela Superior de Videojuegos y Arte Digital (EVAD) ubicada en M¨¢laga. Acert¨®. ¡°Es una pasada: la experiencia es inmejorable¡±, subraya el joven. ¡°Aqu¨ª exprimen tu potencial al m¨¢ximo y sales al mercado laboral con muchas m¨¢s posibilidades¡±, destaca Toledo, uno de los casi 600 alumnos del centro. Tiene raz¨®n: m¨¢s de la mitad de las empresas del sector encuentra dificultades para encontrar perfiles profesionales con la formaci¨®n adecuada, seg¨²n el Libro blanco del desarrollo espa?ol de videojuegos en 2019, impulsado por la Asociaci¨®n Espa?ola de Empresas Productoras y Desarrolladoras de Videojuegos y Software de Entretenimiento (DEV).

Esta forma de ocio digital mueve en Espa?a casi 1.500 millones de euros, seg¨²n el ¨²ltimo informe de la Asociaci¨®n Espa?ola de Videojuegos (AEVI). El enorme volumen de negocio no va acompa?ado, sin embargo, de una industria potente. Apenas hay medio millar de estudios en todo el pa¨ªs, la mayor¨ªa indies por su baja facturaci¨®n; y encontrar nuevos profesionales donde cimentar el crecimiento es complejo, porque no los hay. El sector empresarial destaca, tambi¨¦n en el libro blanco, que la formaci¨®n existente es demasiado ¡°superficial y generalista¡±. Por tanto, no consiguen personas con ¡°competencias y habilidades m¨¢s espec¨ªficas¡±. Es m¨¢s, tienen problemas para contratar a programadores, dise?adores de juegos y profesionales del marketing especialistas en un sector de los videojuegos que emplea a unas 8.000 personas. A cambio, en todo el pa¨ªs hay m¨¢s de 15 millones de jugadores, que compraron casi nueve millones de juegos durante 2019.

La necesidad formativa es, precisamente, el punto de partida del EVAD, que forma parte de un Campus Tecnol¨®gico donde hay otros espacios relacionados con los videojuegos. En los m¨¢s de 6.500 metros cuadrados de que consta el centro hay una decena de aulas, grandes esculturas de personajes m¨ªticos y ordenadores por todas partes. Tambi¨¦n videoconsolas debido a la presencia de un centro Play Station Game Talent -programa que ayuda a la promoci¨®n de juegos independientes- y un ¨¢rea de emprendimiento asesorada por la Junta de Andaluc¨ªa. Igualmente, existe un peque?o restaurante y un centro deportivo. ¡°El sector siempre ha estado ligado al sedentarismo, as¨ª que tambi¨¦n trabajamos estilos de vida saludables, la importancia de la buena alimentaci¨®n y de hacer deporte de manera regular¡±, cuenta Javier Ramos, director de la escuela, que fund¨® junto a sus hermanos Miguel y Carlos. Los profesores, adem¨¢s, son desarrolladores en activo: trabajan para Kaiju Entertainment, estudio tambi¨¦n en manos de la familia Ramos que ha presentado recientemente los juegos educativos Edufinet para Unicaja Banco o eduZland, utilizado para mejorar el aprendizaje en colegios.

En EVAD hay cursos de aprendizaje para aficionados y, cada fin de semana, un amplio grupo de ni?os y ni?as de 10 a 18 a?os dan sus primeros pasos en industria gracias a talleres de iniciaci¨®n. Pero el centro est¨¢ enfocado principalmente a los ciclos formativos -medio y superior- que cursan m¨¢s de un centenar de alumnas y alumno, que pagan entre 100 y 300 euros mensuales por una completa formaci¨®n dirigida a aprender -con mucha pr¨¢ctica- todos los campos que intervienen en construir un videojuego: dise?o, narrativa, programaci¨®n, arte 2D y modelado 3D. Adem¨¢s, hay clases de marketing, comunicaci¨®n, impresi¨®n 3D o emprendimiento. Y cinco m¨¢steres de especializaci¨®n enfocados al desarrollo, la programaci¨®n o el dise?o, pero tambi¨¦n a la comunicaci¨®n.

¡°La idea es que salgan formados en todo lo que supone crear un videojuego¡±, insiste Gerard ?lvarez, director de marketing y comunicaci¨®n de EVAD. ¡°Y disponen de m¨¢s salidas que los propios videojuegos: la arquitectura, cualquier empresa que necesite programadores, firmas de tecnolog¨ªa digital¡­ hay muchas opciones¡±, insiste Javier Ramos. Incluso los e-sports. ¡°No es razonable preparar a un alumno solo para una industria, hay que dar los fundamentos para que luego puedan elegir y especializarse o desarrollar su carrera saltando de una a otra¡±, insiste en la misma l¨ªnea Rafael Conde, director del Grado en Artes Digitales de la Universidad Camilo Jos¨¦ Cela (UCJC) de Madrid. Uno de los espacios adscritos a esta instituci¨®n es otro de los referentes de formaci¨®n en el sector: el Centro Universitario de Tecnolog¨ªa y Arte Digital (U-Tad), nacido en 2011 y donde estudian cada a?o alrededor de un millar de personas.

Andaluc¨ªa, Catalu?a y Madrid son las comunidades que m¨¢s centros de formaci¨®n acumulan del centenar que hay actualmente en el pa¨ªs dedicadas a este sector, seg¨²n la AEVI, donde destacan que tambi¨¦n hay buenas propuestas formativas en ciudades como Bilbao, Zaragoza, Burgos o A Coru?a. Hay espacios privados, como EVAD, pero otros son parte de universidades como la de Barcelona, la Complutense de Madrid o la de M¨¢laga, cuyo m¨¢ster se imparte en el Polo Digital, espacio municipal que tambi¨¦n ofrece incubaci¨®n y acompa?amiento a empresas de videojuegos para fomentar su supervivencia.

Esa es otra de las claves, porque los peque?os estudios no solo son b¨¢sicos para crear industria, tambi¨¦n lo son para que puedan acoger a los nuevos profesionales y crecer juntos. ¡°El principal reto de la industria espa?ola es, adem¨¢s de seguir siendo uno de los principales pa¨ªses consumidores de videojuegos, pasar a convertirnos en una potencia de desarrollo¡±, dice Jos¨¦ Mar¨ªa Moreno, director general de AEVI, quien subraya como ¡°primordial¡± la retenci¨®n del talento nacional, ya que los profesionales de Espa?a ¡°est¨¢n altamente valorados internacionalmente¡±.

Puedes seguir a EL PA?S TECNOLOG?A RETINA en Facebook, Twitter, Instagram o suscribirte aqu¨ª a nuestra Newsletter.