Amigos que no lo son tanto: c¨®mo una pandemia ha seleccionado tus mejores relaciones
Son tiempos de priorizar
El estado de alarma sorprendi¨® a Alejandro en Honduras, y el confinamiento, un oc¨¦ano de por medio, vuelos cancelados, fronteras cerradas y una diferencia de ocho horas con el huso espa?ol dificultan (y mucho) relacionarse. Lo not¨® bien. ¡°No era posible mantener el contacto continuamente. La gente estaba cada vez m¨¢s ap¨¢tica, sin inter¨¦s ni tema de conversaci¨®n¡±, cuenta. Pero no hace falta estar en otro continente para que se note la mella que ha hecho la pandemia. Incluso en la misma ciudad, las restricciones nos obligan a seleccionar a quienes queremos ver y a dejar de lado a otros. Una decisi¨®n dif¨ªcil, pero que puede tener su lado positivo: hacer limpia de aquellas amistades que ya no aportan.
Esta criba es, de hecho, buena. ¡°Est¨¢ estudiado que la calidad de la relaci¨®n est¨¢ limitada a un n¨²mero concreto de las mismas. Y en el contexto actual, no podemos esperar que esa cantidad de amigos que mantenemos sea la misma que antes¡±, aclara David Blanco, psic¨®logo sanitario de Cenit Psic¨®logos. ¡°Nos est¨¢ ense?ando a priorizar y cuidar realmente a las personas que valoramos como importantes. Esa mejora compensa la posible p¨¦rdida", a?ade el psic¨®logo.
Pero, ?c¨®mo elegir? La respuesta no es tan dif¨ªcil. Si nos paramos a pensar, nos daremos cuenta de que las personas a las que hemos dejado de ver son, principalmente, aquellas con las que nos relacion¨¢bamos en un segundo plano (colegas con los que coincid¨ªamos en eventos espor¨¢dicos) y no a quienes ve¨ªamos con asiduidad. Paco lo ha hecho: ¡°Esta situaci¨®n me ha venido de lujo para eliminar esos ¡®a ver cu¨¢ndo quedamos¡¯ o ¡®tenemos que quedar¡¯ que te dec¨ªan algunos compa?eros del trabajo [?bendito? teletrabajo] y amigos plastas¡¡±, cuenta sin miramientos. El psic¨®logo a?ade que lo que nos hace estar satisfechos ahora ¡°es la presencia y la dedicaci¨®n. Eso, ahora, es lo m¨¢s importante¡±.
Su visi¨®n coincide con la de la tesis que hace Kat Vellos en su libro We Should Get Together: The Secret to Cultivating Better Friendships (Deber¨ªamos quedar: el secreto para cultivar mejores amistades), donde habla de lo que llama las ¡°semillas de la conexi¨®n¡±, que son la proximidad, la frecuencia, la compatibilidad y el compromiso, y que sirven para enfocar la mira y afinar con la lista definitiva de buenos amigos. Muy similar tambi¨¦n a la de Pablo Berrocal, catedr¨¢tico de Psicolog¨ªa y director del Laboratorio de Emociones de la Universidad de M¨¢laga, quien considera que una amistad aut¨¦ntica debe tener cuatro caracter¨ªsticas: confianza, sinceridad, fidelidad y reciprocidad. Son requisitos m¨ªnimos que se han desvanecido en muchas relaciones como le ha pasado a Alejandro, que al volver se ha dado cuenta de que puede que no sea tan importante para algunas personas. Cuando se pierde alguno de estos pilares, toca decir ¡°adi¨®s, amigo¡±.
Si hay conflicto, la soluci¨®n puede ser la distancia
Pero la pandemia no solo ha hecho que dejemos de ver a algunas personas, tambi¨¦n ha hecho que nos peleemos con otras. Todos estamos m¨¢s ansiosos y estresados, y hasta la manera de ponerse la mascarilla puede detonar un conflicto. ¡°Se est¨¢ produciendo una polarizaci¨®n en las opiniones que provoca un deterioro de la relaci¨®n", dice Blanco. Cuando esto ocurre, su consejo es ¡°mantener distancias hasta que la crispaci¨®n amaine¡±. Ya bastante tenemos con todo lo que conlleva la pandemia para cargarnos de m¨¢s. "Peque?as situaciones estresantes pueden suponernos ahora grandes alteraciones y filtrar tambi¨¦n en este tipo de relaciones puede tener un efecto beneficioso en nuestra salud¡±, a?ade.
Si aun as¨ª queremos solucionarlo, ?c¨®mo hacerlo cuando tomarse un caf¨¦ de la paz no es tan sencillo? ?Basta con una videollamada? ¡°Depende de la gravedad del da?o. La vida no es tan perfecta ni satisfactoria como un cap¨ªtulo de una serie, y una videollamada puede no ser suficiente. Habr¨¢ que dedicarle tiempo y varias videollamadas para poder hablar del tema si las partes no se sienten c¨®modas¡±, afirma Blanco. El mensaje de fondo que estaremos transmitiendo al amigo con el que hemos tarifado es que, aunque no resolvamos el problema en la primera llamada, nos esforzamos por restablecer el v¨ªnculo y por invocar que las aguas vuelvan a su cauce. ¡°Ver las intenciones y el reconocimiento del da?o ocasionado en la relaci¨®n es lo que hace que las cosas se solucionen¡±, contin¨²a el experto.
Y a los que elegimos, darles mimo
Para aquellos amigos que han pasado la criba, toca buscar espacios para interactuar sin distracciones y que favorezcan una charla distendida, mirarnos m¨¢s a los ojos cuando hablemos, cuidar de nuestra postura corporal respecto a la persona con la que conversamos. Y como no debemos tener contacto f¨ªsico, hay que comunicar m¨¢s con las palabras. ¡°No estamos acostumbrados a decir te quiero, te he echado de menos, cu¨¢nto quer¨ªa tu compa?¨ªa; ahora es importante prestar atenci¨®n a estos componentes¡±, explica Blanco, quien recuerda que expresar este tipo de emociones cuesta a¨²n m¨¢s entre hombres.
Mantener y cuidar buenas amistades, por pocas que sea, no solo es divertido. "Tambi¨¦n pueden mejorar nuestra salud y aumentar nuestra capacidad de soportar el dolor [...]. Para ayudar a tener una vida plena, saludable y larga los doctores deber¨ªan recetar pasar tiempo con los amigos¡±, expone Vellos en su libro. As¨ª que ante los obst¨¢culos que suponen los tiempos que corren, toca ponerle ingenio para cuidar las buenas amistades. "Hay que buscar nuevas maneras de relacionarnos y seguir invirtiendo tiempo en comunicarnos, por ejemplo a trav¨¦s de un chat mientras vemos series, quedando en plataformas para hacer actividades online conjuntamente, disfrutando de fiestas de disfraces o juegos de mesa online o quedando para tomarnos un verm¨² por videollamada... Se trata de utilizar todo tipo de intercambios para un mantenimiento de la intimidad¡±, concluye el psic¨®logo.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.