¡°?Vaya mierda de pel¨ªcula!¡±: ¡®El caballero del drag¨®n¡¯, el mayor desastre del cine espa?ol con Harvey Keitel y Miguel Bos¨¦

Cuentan que Klaus Kinski busc¨® pelea con todo el reparto excepto con Miguel Bos¨¦ (porque era ahijado de Picasso) y con Harvey Keitel (porque tem¨ªa sus imponentes b¨ªceps). Que se pas¨® el rodaje gritando ¡°?Vaya mierda de pel¨ªcula!¡±, que no se presentaba cuando tocaba. Y que, con todo, el actor alem¨¢n fue solo uno m¨¢s de los muchos problemas que afront¨® el que muchos consideran uno de los mayores descalabros de la historia del cine espa?ol: un fracaso en taquilla, malas cr¨ªticas, problemas legales, el director endeudado¡­ ¡°Es la primera vez que la ve¨ªa desde que se estren¨® en 1985¡å, contaba el mi¨¦rcoles el director de la pel¨ªcula, Fernando Colomo, tras un pase especial de El caballero del drag¨®n (que puede verse en Movistar Plus+), restaurada por primera vez en calidad 4K, que se pudo ver en la facultad de Ciencias de la Informaci¨®n de la Complutense madrile?a dentro del festival CutreCon, dedicado al cine cutre y trash. ¡°Y la verdad es que estoy satisfecho¡±, dec¨ªa el cineasta. El p¨²blico, que jaleaba cada escena, tambi¨¦n lo estaba.

Pero vayamos por partes. Hablamos de la que, hace ahora 40 a?os, se convirti¨® en la pel¨ªcula m¨¢s cara del cine espa?ol hasta entonces: 250 millones de pesetas (1,5 millones de euros) de presupuesto inicial, que acabaron superando los 300 holgadamente. La trama se desarrollaba en un pueblo de la Europa medieval, en el que los lugare?os creen que ha aparecido un temible ¡°drag¨®n¡±. En realidad, se trataba de una nave espacial cuyo enigm¨¢tico y mudo piloto (Miguel Bos¨¦) se enamoraba de la hija del conde (Mar¨ªa Lamor) y se convert¨ªa en el eje de una curiosa historia que mezclaba fantas¨ªa y ciencia ficci¨®n y que contaba en su reparto con estrellas del calibre de Harvey Keitel, Klaus Kinski o Fernando Rey.

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Tr¨¢iler de 'El caballero del drag¨®n'

¡°Yo no hab¨ªa cumplido los 40 a?os¡±, contaba Colomo en el coloquio, ¡°pero recuerdo la locura que fue el rodaje. Cada secuencia me tra¨ªa recuerdos del rodaje en Olot, en aquel castillo en el quinto co?o¡­ Cada vez que paso por alg¨²n castillo cerca de Madrid me digo: ?por qu¨¦ no lo rodar¨ªamos aqu¨ª?¡±, resoplaba, entre risas, el cineasta, que record¨® todos los males que atormentaron aquel rodaje: las lluvias que lo retrasaron, un extra que casi se ahoga y que luego le chantaje¨® durante a?os para salir en otras pel¨ªculas, los problemas con Kinski, c¨®mo se cayeron del reparto Imanol Arias y Victoria Abril¡­

Lo de Kinski merece punto y aparte. Ya el primer d¨ªa se neg¨® a trabajar si no le pagaban m¨¢s. ¡°Quer¨ªa joder la pel¨ªcula, est¨¢ claro¡±, cuenta Colomo. Fernando Rey le dijo al director: ¡°He trabajado con Charles Bronson, pero a su lado es una hermanita de la caridad¡±. Quiz¨¢ el complicado actor alem¨¢n le escuch¨®, porque en una secuencia de forcejeo le dio a Rey tal golpe que le caus¨® una fisura de costillas. Kinski entr¨® en el proyecto despu¨¦s de que el equipo tanteara a Charlton Heston, Kirk Douglas, Robert Mitchum o Vincent Price. ¡°Intent¨® ahogar a Jos¨¦ Viv¨® [que hac¨ªa de conde] en la escena en que acercaba la cara de ¨¦l a un plato con agua¡±, recordaba el director.

El amor entre Colomo y Kinski se prolong¨® ya para siempre: cuando el alem¨¢n muri¨®, en 1991, Colomo escribi¨® un obituario en este peri¨®dico para la historia: ¡°Era un ni?o mimado, consentido y maleducado. De haber sido una persona mayor, solo le cabr¨ªa el calificativo de hijo de puta¡±. Con Keitel pas¨® lo contrario: Colomo siempre ha destacado su ayuda y apoyo, aunque reconoce que hizo la pel¨ªcula ¡°porque estaba en el momento m¨¢s bajo de su carrera¡±.

Al coloquio tras la pel¨ªcula acudi¨® tambi¨¦n Jos¨¦ Luis Alcaine, director de fotograf¨ªa del filme y leyenda del cine espa?ol con cinco Goyas a sus espaldas. ¡°Me parece una gran astracanada¡±, re¨ªa tras confesarse satisfecho con su trabajo, ¡°y creo que ese tono no se supo captar en su momento¡±. Es verdad que su tono naif no se entendi¨®, que esa ¨¦pica medio infantil con toques a lo Monty Python no cuaj¨®, aunque preconiz¨® un estilo que luego s¨ª triunfar¨ªa con filmes como Legend (1985), Dentro del laberinto (1986) o La princesa prometida (1987).

En Filmaffinity, donde tiene una puntuaci¨®n de 3,3 sobre 10, dicen de ella que es ¡°posiblemente una de las pel¨ªculas m¨¢s chapuceras de aquella d¨¦cada¡±. En IMDB tiene un 4,1 de 10; en el agregador de cr¨ªticas profesionales Rotten Tomatoes, un 21 sobre 100. Alcaine se confesaba especialmente orgulloso de los planos del interior de la nave, ¡°que quer¨ªa recordar al vientre de un animal¡±, pero record¨® las duras jornadas de rodaje: ¡°Al castillo no se pod¨ªa acceder en coche, por lo que el equipo ten¨ªa que subir cargando con el material, y ya llegaban cansados¡±.

¡°El festival tiene un sustrato de cachondeo¡±, cuenta a EL PA?S Carlos Palencia, director de CutreCon, ¡°pero hace tiempo vimos que detr¨¢s de algunas pel¨ªculas hay historias fascinantes. Los directores siempre ayudan: hace un par de a?os vino Antonio Hern¨¢ndez a hablar de El capit¨¢n Trueno, y ahora Colomo se apunt¨® desde el primer d¨ªa¡±. Dar con la cinta tuvo su propia odisea: es la primera vez que se exhibe en 4K (la obra ahora pertenece a Mercury Films, que la ha cedido), y ellos mismos la han fusionado con la pista de audio en ingl¨¦s (la favorita de Colomo). ¡°El caballero del drag¨®n no es una pel¨ªcula cutre como tal, pero s¨ª es fallida. Yo creo que por el tono: no ten¨ªa claro si quer¨ªa ser una comedia, de ciencia ficci¨®n, un videoclip de Mecano...¡±, r¨ªe Palencia.

La pel¨ªcula fue la s¨¦ptima m¨¢s taquillera del a?o en Espa?a. No estaba mal, pero no para el presupuesto que ten¨ªa. ¡°Acab¨¦ arruinado. Tuve un juicio con la distribuidora estadounidense, y lo perd¨ª, por eso se quedaron con la distribuci¨®n internacional¡±, confesaba Colomo, que se qued¨® con una deuda de 50 millones de pesetas tras el filme. Afortunadamente, su siguiente pel¨ªcula, La vida alegre (1987), funcion¨® muy bien en taquilla y se repuso.

Hay cosas que tanto Colomo como Alcaine recuerdan con orgullo. ¡°Nos pasamos en el presupuesto conscientemente¡±, confesaba Colomo. ¡°Pero la pel¨ªcula pas¨® por ser un derroche, y es todo lo contrario. Hubo mucha econom¨ªa de medios, estaba muy trabajada, muy estudiada, con maquetas, storyboard y otros elementos que no hab¨ªa en el cine espa?ol y tuvimos que ir inventando¡±.

El pase de la CutreCon se completa con una exposici¨®n en la planta baja de la facultad, que se puede ver hasta el 28 de febrero, y que incluye precisamente ese storyboard, fotos del momento de la lectura del guion, im¨¢genes del rodaje o titulares de prensa de la ¨¦poca. ¡°No soporto a los turistas¡±, titula una entrevista a Klaus Kinski la publicaci¨®n Los Sitios; Las andanzas de Miguel Bos¨¦, marciano y posmoderno, dec¨ªa Abc. ¡°No conoc¨ªa la pel¨ªcula¡±, sonr¨ªe Sara, estudiante de Periodismo, se?alando uno de los bocetos de la extra?a nave extraterrestre dentro de una vitrina en los pasillos de la facultad. ¡°Pero me han entrado much¨ªsimas ganas de verla. Qu¨¦ curiosidad¡±. Otro de los titulares reza: La lluvia retrasa enormemente el rodaje en el castillo de Recasens. La exposici¨®n, acertadamente, se titula: La ¨¦pica suicida de Fernando Colomo.

El festival CutreCon, que durar¨¢ hasta el domingo, tendr¨¢ lugar entre la Complutense, el Cine Paz y el Cine Palacio de Hielo, y en ¨¦l podr¨¢n verse joyas trash como Mundo Mutante (2024), Sexi¨®n Continua (2024) y Cocaine Crabs From Outer Space (2022). Toda una oda a, como reza el cartel del festival, ¡°los dragones de cartulina y fieltro mal cosidos, los b¨¢rbaros salidos de un gimnasio de barrio y las barbas postizas¡±.

El domingo 22 de diciembre de 1985, en la cr¨ªtica que en estas mismas p¨¢ginas hizo Octavi Mart¨ª, se le¨ªa: ¡°La timidez hace que Colomo no juegue a fondo las bazas del presupuesto (¡­). La falta de convicci¨®n va en detrimento de la acci¨®n y en favor de los peque?os gags¡±, le achacaba el cr¨ªtico, que terminaba: ¡°Lo m¨¢s extra?o, m¨¢s simp¨¢tico, pero tambi¨¦n menos satisfactorio de El caballero del drag¨®n, es que esos 300 millones largos de pesetas se hayan invertido en una entretenida serie B cuando daban, visto el aspecto del filme, para un trabajo m¨¢s ambicioso que est¨¢ al alcance del director, t¨¦cnicos y artistas que intervienen en ¨¦l¡±. Una buena definici¨®n para una pel¨ªcula que, sin embargo, se ha convertido en un filme de culto. Por el bien de todos, que no se entere Klaus Kinski.