Twitter en la era Musk: servicios de pago y ?la vuelta de Donald Trump?

Cuando Musk decidi¨® comprar Twitter, no ten¨ªa un plan de negocio, solo algunas ideas sobre c¨®mo deber¨ªa funcionar. Ideas las tiene todo el mundo, pero ¨¦l adem¨¢s ten¨ªa dinero para comprarla. La operaci¨®n era m¨¢s bien el capricho de un multimillonario hiperactivo en la red social. Eso explica que tras pens¨¢rselo dos veces empezase a buscar excusas para echarse atr¨¢s. Viendo que no ten¨ªa muchas opciones de librarse del acuerdo que firm¨®, ahora ha decidido seguir adelante. Si no hay nuevas sorpresas, en poco tiempo ser¨¢ el due?o de Twitter. Llegar¨¢ tras haber atacado a la compa?¨ªa y sus ejecutivos con sa?a y despu¨¦s de dejar algunas pistas en documentos judiciales y declaraciones p¨²blicas sobre lo que piensa hacer con la red social. En su cabeza est¨¢ establecer un modelo de suscripci¨®n de pago o eliminar vetos permanentes como el de Donald Trump. Su ¨²ltima declaraci¨®n, algo enigm¨¢tica, apunta a una especie de aplicaci¨®n integral.

¡°La compra de Twitter es un acelerador para crear X, la aplicaci¨®n para todo¡±, ha sido el primer tuit del magnate sobre su segundo giro de 180 grados por el que vuelve al punto de partida, comprar la red social por 44.000 millones de d¨®lares. Musk no ha dado m¨¢s explicaciones, pero en el pasado ha mostrado su admiraci¨®n por la aplicaci¨®n china WeChat, que evolucion¨® desde un servicio de mensajer¨ªa a una plataforma multinacional con medios de pago, comercio electr¨®nico, salud, gesti¨®n de suscripciones y todo tipo de servicios, casi imprescindible para la vida diaria en China.

Adem¨¢s, durante las presentaciones para lograr sumar inversores a su oferta y financiaci¨®n de los bancos, Musk ya hab¨ªa anticipado que quer¨ªa tener 104 millones de suscriptores de pago de la misteriosa aplicaci¨®n X para 2028. Tambi¨¦n aspira a multiplicar el n¨²mero de usuarios en general de la red social. Desde los 217 millones de finales de 2021 a 600 millones en 2025 y 931 millones en 2028. Todo un reto, tras el cual Musk se?alaba que se plantear¨ªa sacar Twitter a Bolsa de nuevo.

El exc¨¦ntrico y pol¨¦mico multimillonario es un emprendedor nato, que fund¨® Paypal, la empresa de coches el¨¦ctricos Tesla y la aeroespacial SpaceX. Ahora, dentro de Tesla, se ha embarcado en un proyecto de crear robots humanoides a gran escala que pondr¨¢ inicialmente a trabajar en sus f¨¢bricas, aunque el desarrollo est¨¢ todav¨ªa muy verde y por ahora lo que ha mostrado es un aparato m¨¢s bien torp¨®n y de funcionalidad muy limitada. Refundar Twitter con algo nuevo seguramente le atraiga m¨¢s que simplemente hacer meros retoques.

Sea lo que sea ¡°X, la aplicaci¨®n para todo¡±, de momento lo que tiene como tarea m¨¢s inmediata es tomar el tim¨®n de Twitter, una empresa que se ha desgastado en la batalla con el que ahora ser¨¢ su nuevo due?o. La salida de empleados en busca de otras oportunidades se ha acelerado y los que quedan temen que la cultura de trabajo de la compa?¨ªa cambie, as¨ª que aguardan con inquietud la llegada de Musk, pendiente a¨²n de que se llegue a un pacto y se evite el juicio en el Tribunal de Delaware donde la empresa demand¨® al hombre m¨¢s rico del mundo. Desde el nuevo anuncio de Musk, los abogados de una y otra parte han estado negociando a toda prisa para cerrar la operaci¨®n o un nuevo acuerdo que Twitter quiere que est¨¦ completamente blindado. De momento, la juez segu¨ªa este mi¨¦rcoles con las diligencias del caso y la vista puesta en el juicio fijado para el 17 de octubre.

El objetivo proclamado desde el principio por Musk era librar a la red social del spam y los bots que le molestaban como usuario. Dec¨ªa que habr¨ªa que hacer la purga sin que la compa?¨ªa cotizase porque iba a hacer ¡°que los n¨²meros parezcan terribles¡±. Por eso resultaba tan poco cre¨ªble la excusa de que quer¨ªa romper el acuerdo porque hab¨ªa descubierto que hab¨ªa muchas cuentas falsas o inactivas. Al argumentar sobre la importancia de los usuarios en su contrademanda ante el juzgado de Delaware que analizaba el caso, Musk dej¨® caer que conocer el n¨²mero real de usuarios era fundamental para establecer un modelo de negocio de suscripci¨®n.

¡°Musk cree que el modelo de ingresos de Twitter basado en la publicidad est¨¢ anticuado¡±, dec¨ªan los abogados en su escrito. ¡°Antes del acuerdo de fusi¨®n, cre¨ªa que podr¨ªa liberar el verdadero potencial de Twitter cambiando el modelo de solo publicidad (en el segundo trimestre de 2022, la publicidad representaba m¨¢s del 90% de los ingresos) a otras formas de ingresos, como un modelo h¨ªbrido de suscripci¨®n para los usuarios verificados y la habilitaci¨®n de pagos y herramientas de monetizaci¨®n de los creadores¡±, a?ad¨ªa. Y en otra parte: ¡°Musk entend¨ªa que cada mDAU (usuarios activos diarios monetizables) representaba un usuario activo de Twitter al que se pod¨ªa convencer de pagar una cuota mensual nominal por el servicio¡±.

Twitter ya tiene en algunos pa¨ªses un servicio de suscripci¨®n (Twitter Blue) con algunas funcionalidades extra y la posibilidad de personalizar m¨¢s la experiencia de usuario, pero Musk nunca ha sido muy entusiasta de ese modelo.

La vuelta de Trump

El empresario tambi¨¦n ha dicho que permitir¨ªa a Trump volver a la red social, donde era un usuario hiperactivo. Fue vetado tras el asalto al Capitolio del 6 de enero de 2021, pues la red interpret¨® que los bulos y proclamas que lanzaba incitaban a la violencia. Desde entonces, Trump se ha instalado en Truth Social, su r¨¦plica de Twitter, y no est¨¢ claro si volver¨¢ o no a la original. Entre Musk y Trump ha habido tambi¨¦n alg¨²n pique verbal. Trump se burl¨® del empresario y de sus ¡°cohetes a ninguna parte¡± y el magnate replic¨® al expresidente que era momento de que ¡°navegase hacia el atardecer¡±.

En todo caso, cabe pensar en la vuelta a Twitter de muchos de los que fueron suspendidos de forma permanente. Dada su resistencia a la moderaci¨®n de contenidos y su discurso en pro de una libertad de expresi¨®n casi sin l¨ªmites (que no practica dentro de sus empresas), el riesgo de que la plataforma se convierta en instrumento de propaganda y manipulaci¨®n electoral resurge.

En los mensajes que han trascendido durante el proceso judicial, el magnate solo se mostraba dispuesto a censurar a ¡°aquellos que expl¨ªcitamente aboguen por la violencia¡±. Eso puede dar cabida a te¨®ricos de la conspiraci¨®n, propagadores de bulos y discursos de odio. Los troles tendr¨¢n las puertas abiertas. ¡°Twitter se ha convertido en una especie de plaza p¨²blica de hecho, por lo que es de verdad importante que la gente crea y perciba que puede hablar libremente dentro de los l¨ªmites de la ley¡±, explic¨® en abril, justo al lanzar su oferta.

Musk tambi¨¦n hab¨ªa proclamado su deseo de un bot¨®n para editar y corregir los mensajes. La compa?¨ªa ha empezado a probarlo antes de su llegada, de momento solo para usar durante los 30 minutos posteriores al mensaje original y un n¨²mero limitado de veces, dejando el historial de edici¨®n disponible. La herramienta est¨¢ pensada para corregir erratas y a?adir alg¨²n olvido. Habr¨¢ que ver si a Musk le parece suficiente.

El magnate tambi¨¦n hab¨ªa respondido a un largo hilo de Twitter se?alando la necesidad de mensajes m¨¢s largos. Que eso vaya a aplicarse ya es otra cosa. Otra idea que ha repetido, esta vez de forma m¨¢s consistente y meditada, es su voluntad de que el algoritmo transparente y de c¨®digo abierto.

Indemnizaciones millonarias

Despu¨¦s de la discusi¨®n p¨²blica en la red social en la que Musk acab¨® replic¨¢ndole con el emoji de una caca sonriente y de todo el enfrentamiento de los ¨²ltimos meses, seguramente el consejero delegado de Twitter, Parag Agrawal, se haga pocas ilusiones de seguir dirigiendo la compa?¨ªa. Tras criticar abiertamente a los actuales directivos de la empresa, Musk ha insinuado en varias ocasiones que ¨¦l personalmente se pondr¨¢ al frente de las operaciones.

Agrawal, sin embargo, no se ir¨¢ con las manos vac¨ªas. El folleto de la fusi¨®n desvel¨® que tendr¨ªa derecho a un paraca¨ªdas de oro, como se le llama a esas indemnizaciones, de 60 millones de d¨®lares. Tambi¨¦n est¨¢n blindados el director financiero, Ned Segal, con 46,4 millones de d¨®lares; Vijaya Gadde, responsable legal (a la que Musk ha acusado de tener un sesgo izquierdista), con 21 millones, y Sarah Personette, directora de clientes, con otros 20 millones.