Homeopat¨ªa, el error fatal de Rosa
Con 41 a?os, la economista decidi¨® tratarse un c¨¢ncer con homeopat¨ªa. A los tres a?os muri¨®.
¡°Todos aprendemos de nuestros errores¡±, le dijo Rosa a su onc¨®loga pocas semanas antes de morir. Desde que se not¨® un bulto en el pecho, decidi¨® poner su salud en manos de m¨¦dicos que practican pseudoterapias. Al cabo de un tiempo, el bulto hab¨ªa multiplicado por cuatro su tama?o. En un a?o padec¨ªa dolorosas met¨¢stasis en los huesos. Dos a?os despu¨¦s, mor¨ªa sufriendo nuevos tumores en su deteriorado cuerpo, un declive f¨ªsico que estremece cuando lo describe su hermana: "Si le hubieran contado y mostrado gr¨¢ficamente c¨®mo iba a ser el final, tal como se hace en las cajetillas de tabaco, quiz¨¢s todo habr¨ªa sido diferente".
"Difundimos su historia con la esperanza de que sirva para evitar otras muertes innecesarias", explica la hermana de Rosa
Tambi¨¦n Mario Rodr¨ªguez, que renunci¨® a la quimioterapia, lament¨® poco antes de morir: "Pap¨¢, me he equivocado". Rosa no tuvo una segunda oportunidad, Mario tampoco. Pero quiz¨¢ la sociedad espa?ola est¨¦ a tiempo de aprender de sus errores. Y no solo del de Rosa y Mario. Desgraciadamente, conocemos casos de m¨¢s pacientes que han muerto en circunstancias parecidas, seg¨²n cuentan familiares y m¨¦dicos que se encontraron con tumores desbocados por falta de tratamiento m¨¦dico. Son casos que afectan a familias de distinta capacidad econ¨®mica, con circunstancias vitales muy diversas y que se han dado por toda Espa?a. Nadie es inmune a caer en el enga?o y sus historias lo demuestran, pero se pueden identificar las pautas que les llevaron a ese equ¨ªvoco que cuesta la vida. Y en algunos de estos casos se repite un denominador com¨²n: la homeopat¨ªa. "Difundimos su historia con la esperanza de que sirva para evitar otras muertes innecesarias", explica la hermana de Rosa, que no quiere dar su nombre. Y reclama: "Si la homeopat¨ªa no cura el c¨¢ncer, los m¨¦dicos que ejercen como home¨®patas deber¨ªan estar m¨¢s vigilados por las autoridades".
La tragedia de Rosa Morillo comenz¨® en febrero de 2014, cuando ten¨ªa 41 a?os, tras palparse un bulto de un cent¨ªmetro en el pecho. En la exploraci¨®n m¨¦dica se le recomienda estudiarlo, pero ella opta por buscar una segunda opini¨®n. Economista con brillante expediente y pol¨ªglota de cuatro idiomas, Rosa llevaba "toda la vida" interesada en pseudoterapias como la homeopat¨ªa, e incluso se hab¨ªa formado para practicarlas. Las facturas reflejan que ese mismo mes de febrero visit¨® a una ginec¨®loga, m¨¦dica colegiada, que recomend¨® que no se hiciera nada m¨¢s, solo tratarse con homeopat¨ªa. El tumor creci¨® de forma natural en ese periodo en el que solo se le combati¨® con bolitas de az¨²car y agua, que es lo que constituyen estos falsos remedios. Rosa fue consciente del error cometido en este momento clave y quiso actuar contra la doctora, porque se sent¨ªa v¨ªctima de una negligencia: "Haberle hecho caso me va a costar un pecho", reconoci¨® a su familia. En lugar de atacar el bulto al detectarlo, pas¨® meses sin hacer nada ¨²til para combatirlo.
Un a?o despu¨¦s, el c¨¢ncer se hab¨ªa extendido a la piel, los huesos y la m¨¦dula, porque Rosa s¨ª se extirp¨® el bulto del pecho, pero no se hab¨ªa dado quimioterapia. Sus argumentos contra la quimio surgen de esas publicaciones que ha le¨ªdo y por eso sigue manifestando preferencia por los tratamientos alternativos ("naturales") a las recomendaciones de sus m¨¦dicos del Hospital de La Paz, en Madrid. "La enfermedad hab¨ªa hecho mella en su capacidad para razonar", se?ala su hermana. Los m¨¦dicos del hospital que siguen su evoluci¨®n anotan tambi¨¦n su relaci¨®n con la pseudomedicina: "Inicia seguimiento por onc¨®logo-homeop¨¢tico (Dr. Mart¨ª Bosch)". Rosa ha sabido de la existencia de este m¨¦dico a trav¨¦s de Discovery DSalud, una revista de conspiraciones sanitarias que act¨²a como altavoz y p¨¢ginas amarillas de todo tipo de curanderos y pseudoterapias peligrosas; ella hab¨ªa comprado hasta los libros que editan. En concreto, hab¨ªa visto all¨ª a Alberto Mart¨ª Bosch explicar c¨®mo debe tratarse el c¨¢ncer con dieta, suplementos vitam¨ªnicos y ba?os de sal marina. Se le presenta como onc¨®logo infantil, aunque no est¨¢ colegiado con esa especialidad. Al contactar con su consulta, aseguran que tiene una gran lista de espera, pero que har¨¢ una excepci¨®n con ella, una treta habitual que se repite en otros casos. Las fechas de las recetas que este doctor le prepara a Rosa coinciden con lo que ella comunica en el hospital.
Tras encontrarse un bulto de un cent¨ªmetro en el pecho, visit¨® a una ginec¨®loga, m¨¦dica colegiada, que recomend¨® que no se hiciera nada m¨¢s, solo tratarse con homeopat¨ªa
Entre agosto y noviembre de 2016, este natur¨®pata le receta siete preparados homeop¨¢ticos (para "mama", "ganglios", "piel", "huesos" y "estimulante inmunol¨®gico"), seis preparados fitoterap¨¦uticos y cinco ortomoleculares (vitaminas), m¨¢s "hidroterapia" (ba?arse en agua caliente salada) y "tratamiento con oligoelementos". Entonces llegaron "unos an¨¢lisis de sangre milagrosos en los que el n¨²mero de gl¨®bulos rojos hab¨ªa aumentado supuestamente", seg¨²n relata su hermana. Le dijeron estar sorprendidos con semejante mejora y que pocas veces hab¨ªan visto una recuperaci¨®n as¨ª: ¡°La vie en rouge, escribi¨® mi hermana en su WhatsApp junto con una foto de unas c¨¦lulas color bermell¨®n". Un mes despu¨¦s, los m¨¦dicos de La Paz certifican que en realidad el c¨¢ncer se ha extendido m¨¢s y recomiendan quimioterapia, que Rosa vuelve a rechazar.
En primavera de 2017, la extensi¨®n del c¨¢ncer y el deterioro f¨ªsico es tal que acepta tratarse puntualmente con radioterapia. La situaci¨®n es tan desgarradora que la familia prefiere que no se publiquen los detalles. Rosa fallece en mayo de 2017, tras encadenar pseudomedicinas y tratamientos sin aval cient¨ªfico, aconsejados por dos m¨¦dicos colegiados que recetan homeopat¨ªa a pacientes con tumores. En ese momento, su familia decide denunciar su caso ante la Organizaci¨®n M¨¦dica Colegial. Precisamente este ¨®rgano de representaci¨®n de los m¨¦dicos ha lanzado un Observatorio contra las Pseudociencias donde reciben un goteo diario de denuncias de casos similares.
Lo que le ocurri¨® a Rosa es muy similar a lo relatado por un m¨¦dico de familia de la Osakidetza vitoriana, I?aki Aguirrezabal, que recibi¨® a una paciente de 56 a?os con un tumor que hab¨ªa consumido por completo el pecho. "Todo era tumor, la mama izquierda hab¨ªa desaparecido. Hasta ella me recordaba tiempo despu¨¦s la cara que puse al verlo", cuenta Aguirrezabal. La paciente llevaba dos a?os trat¨¢ndoselo ¨²nicamente con las recomendaciones de su home¨®pata en Francia, al que ya acud¨ªa antes del c¨¢ncer. Como Mario y Rosa, se arrepinti¨® de su decisi¨®n: "Se echaba la culpa de no haber hecho algo antes y haber usado solo homeopat¨ªa", explica el m¨¦dico. "Reconoci¨® que se hab¨ªa equivocado, pero no culpaba a su home¨®pata", lamenta. Como en los otros casos, el arrepentimiento lleg¨® tarde: el tumor del pecho respondi¨® bien a la quimio, pero ten¨ªa met¨¢stasis y falleci¨® pasados unos meses.
Recientemente, un onc¨®logo de un hospital de Girona relataba una tragedia muy similar: una mujer con el pecho "totalmente putrefacto" por haberse desatendido por completo un tumor (solo consum¨ªa pseudoterapias) y que mor¨ªa poco despu¨¦s de acudir a los m¨¦dicos. Un caso que est¨¢ siendo investigado por la Generalitat y el Colegio de M¨¦dicos. El mes pasado, una joven de Hondarribia denunciaba a un curandero al que responsabiliza de la muerte de su madre, que no se trat¨® un c¨¢ncer de ano por seguir las recomendaciones de este falso terapeuta. En muchos de los casos, el entorno de las v¨ªctimas habla de un momento de especial debilidad, tras el diagn¨®stico, en el que el miedo puede arrastrar a estas personas a tomar una mala decisi¨®n.
Un m¨¦dico sin formaci¨®n en oncolog¨ªa le recet¨® numerosos preparados homeop¨¢ticos y asegur¨® que gracias a ello se hab¨ªa mejorado enormemente. Un mes despu¨¦s, se comprob¨® que en realidad el c¨¢ncer se hab¨ªa extendido
La madre del joven Mario Rodr¨ªguez, que muri¨® en 2013 tras abandonar la quimioterapia, tambi¨¦n lleg¨® hasta su curandero por la misma revista de bulos m¨¦dicos, Discovery DSalud. Y su curandero, que en este caso no cuenta con ninguna titulaci¨®n sanitaria, tambi¨¦n le obligaba a seguir un estricto, amplio y detallado tratamiento de vitaminas y otros preparados completamente ineficaces contra la leucemia y que incluso estaban contraindicados con el tratamiento m¨¦dico. Mario estudiaba para f¨ªsico, nada ajeno al m¨¦todo cient¨ªfico, del mismo modo que Rosa era una persona de gran formaci¨®n intelectual. Caer en el enga?o no tiene nada que ver con conocimientos o inteligencia del sujeto.
Al jurista Jos¨¦ Mar¨ªa Ill¨¢n, la prescripci¨®n de homeopat¨ªa estuvo a punto de costarle la vida. Aconsejado por una m¨¦dica colegiada en Murcia, cercana a su familia, Ill¨¢n cambi¨® los medicamentos para vigilar su salud cardiovascular que le hab¨ªa recomendado el m¨¦dico por homeopat¨ªa. "A m¨ª me hac¨ªa una receta una doctora y yo iba a la farmacia a comprarlo. C¨®mo iba a saber que me pod¨ªa costar la vida", explica. En 2011, Ill¨¢n sufri¨® un infarto y, tras recuperarse, se le recetaron unas pastillas que ayudaran a su organismo a mantener la circulaci¨®n en las arterias. Pero al cabo de un mes, comenz¨® a sentirse mal y, tras una revisi¨®n de los cardi¨®logos, le acusaron de no estar tomando la medicaci¨®n porque no era normal un deterioro arterial de esa magnitud en tan poco tiempo. ?l les respondi¨® que s¨ª se estaba medicando, pero no exactamente con la que me recetaron, sino con una alternativa de homeopat¨ªa que le recomend¨® esta doctora. "Usted se est¨¢ suicidando", le dijeron. Ahora sufre numerosas secuelas, ha tenido que ser intervenido recientemente y abandon¨® su profesi¨®n por incapacidad total.
Cu¨¦ntanos tu caso: javier@esmateria.com
Una confusi¨®n peligrosa
La mitad de los espa?oles cree que la homeopat¨ªa funciona, al menos, "algo", seg¨²n la ¨²ltima encuesta la de Fundaci¨®n para la Ciencia y la Tecnolog¨ªa (Fecyt). Como se?ala Jos¨¦ Mar¨ªa Ill¨¢n en el reportaje, si lo recetan m¨¦dicos y lo despachan en farmacias, es natural que los pacientes se confundan sobre su verdadera utilidad. Sobre todo si adem¨¢s las autoridades le otorgan la consideraci¨®n de "medicamento" y no se hace nada por explicar la falta de evidencia de estas pseudomedicinas.
Pero esta confusi¨®n puede ser muy peligrosa, a juzgar por una serie de estudios realizados por investigadores de la Universidad de Yale. Tras analizar la evoluci¨®n de pacientes de c¨¢ncer que usan pseudoterapias, las conclusiones no pueden ser m¨¢s pesimistas: como es natural, optar por pseudociencias en lugar de los tratamientos m¨¦dicos multiplica enormemente las posibilidades de morir. Pero no solo eso, tambi¨¦n aumentan su riesgo de morir los pacientes que optan por ambos tratamientos: el real y el pseudoterap¨¦utico. ?Por qu¨¦? Porque algunos de quienes complementan su cuidado m¨¦dico con las llamadas 'terapias alternativas', como la homeopat¨ªa, terminan abandonando el tratamiento o renunciando a alg¨²n procedimiento, ya sea una operaci¨®n, una serie de quimioterapia, etc. As¨ª, el 34% de quienes las usan renuncian a la quimio frente al 3,2% de quienes no las usan; el 53% no se somete a radioterapia, frente al 2,3%; y el 33,7% no se trata con terapia hormonal, frente al 2,8% de la poblaci¨®n normal. Es decir, que es el uso de estas terapias se asocia de una manera importante con la idea de no cumplir con todas las recomendaciones de los m¨¦dicos que tratan de salvar su vida. Por ello, son los propios investigadores de Yale los que concluyen que el uso de pseudoterapias pone en riesgo la vida de los pacientes de c¨¢ncer.
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