Alimentos con calor¨ªas negativas, ?de verdad tienen menos energ¨ªa de la que cuesta digerirlos?

Entre todas las teor¨ªas por las que uno puede interesarse en el momento de ponerse a dieta, la de los alimentos con calor¨ªas negativas es, de lejos, la m¨¢s golosa. Seg¨²n el razonamiento que la sostiene, existen comidas tan poco energ¨¦ticas que el organismo utiliza m¨¢s calor¨ªas en digerirlas y asimilarlas que las que dichos alimentos proporcionan. El resultado es que comer estos productos no solo no aporta ni una calor¨ªa al organismo, sino que hace que las pierda. Parece el mejor camino para perder peso. De hecho, parece demasiado bueno para ser verdad, y por eso un grupo de cient¨ªficos ha decidido comprobar si la teor¨ªa es cierta.

Los supuestos alimentos de calor¨ªas negativas se caracterizan por tener mucha agua y fibra, as¨ª como poco o ning¨²n contenido de grasa. Son viandas como el br¨®coli (que tambi¨¦n tiene su lado oscuro), la lechuga, el pepino, el apio y el pomelo, que incluso podr¨ªa ayudar a dejar de fumar. Los cient¨ªficos no han prestado demasiada atenci¨®n a la teor¨ªa que inspira una dieta perfecta para adelgazar, pero ahora, seg¨²n el nuevo trabajo tienen argumentos para desmentir el sue?o de cualquier persona que se pone a dieta porque, como revelan sus resultados y, en palabras de Calder¨®n de la Barca, "los sue?os, sue?os son".?

La exigua, pero real, energ¨ªa de 3 kilos de apio

Los investigadores no han hecho pasar hambre a ninguna persona, ni han trastocado sus costumbres en el terreno de la nutrici¨®n. En lugar de seres humanos, han estudiado el efecto de estos alimentos en reptiles de la especie Pogona vitticeps, m¨¢s conocidos como dragones barbudos. No es que estos animales se parezcan a las personas, ni en el lugar que ocupan en el ¨¢rbol de la vida ni en sus costumbres a la hora de comer (muchos ni siquiera tienen dientes porque engullen la comida sin masticar). Pero comparten con las personas caracter¨ªsticas interesantes: tienen un tracto gastrointestinal y un proceso digestivo similar al de los mam¨ªferos. Adem¨¢s, no ponen pegas a ciertos alimentos: pueden comer todo el apio que uno les ponga delante, lo que es de mucha utilidad para estudiar la teor¨ªa de las calor¨ªas negativas.

Los cient¨ªficos dieron de comer a un grupo de los barbudos reptiles, originarios de Australia, el 5% de su peso en apio. Luego calcularon las calor¨ªas que hab¨ªan asimilado y hallaron que hab¨ªan retenido el 24% de la energ¨ªa de las comidas en las que estos alimentos fueron los protagonistas. Con todo, los cient¨ªficos dejan claro que no pretenden acabar con la esperanza de quienes recurren a este tipo de productos para hacer dieta. "Aunque este estudio desmiente la validez del apio y otros alimentos conocidos como de calor¨ªas negativas, estas comidas s¨ª contribuyen a generar un balance energ¨¦tico negativo y, por lo tanto, la p¨¦rdida de peso", dice el texto que han dado a conocer en bioRxiv, un repositorio de art¨ªculos cient¨ªficos que no han visto la luz en una revista cient¨ªfica.

El motivo principal es que la energ¨ªa para hacer la digesti¨®n es una m¨ªnima parte de toda la que el cuerpo emplea a lo largo de una jornada, as¨ª que el apio sigue siendo uno de los alimentos m¨¢s ¨²tiles para quien quiere minimizar calor¨ªas. Seg¨²n datos de los investigadores, 3 kilos de apio dar¨ªan la energ¨ªa justa para que una mujer de 60 kilos aguantara 6 horas de inactividad, y una persona tendr¨ªa que comer unos 12,6 kilos de apio para superar las calor¨ªas que gasta en un d¨ªa. Vivir con esa dieta s¨ª ser¨ªa milagroso (aunque hay cosas ricas con las que ponerse morado sin engordar).