¡°No existe el derecho a no sentirse ofendido¡­ y menos mal¡±: cuando el humor espa?ol termin¨® en los tribunales

Parece una premisa de ficci¨®n y lo es, en concreto de la serie Dos a?os y un d¨ªa (Atresplayer Premium), estrenada durante el verano de 2022, pero la noticia de que un c¨®mico se sienta en el banquillo de los acusados por un chiste aparece cada vez con mayor frecuencia en las p¨¢ginas de los peri¨®dicos en Espa?a. Por chistes ideol¨®gicos, referentes a minor¨ªas, a colectivos m¨¢s o menos agrupados en asociaciones y a individuos que creen ver injuriado su nombre. Los que ofenden o molestan a unos no suelen molestar u ofender a otros, hay quien se molesta por todo y hay quien no se molesta por nada. El baremo, pues, no es al peso. ?Cu¨¢l es, entonces? Un repaso a los casos m¨¢s sonados contados por sus protagonistas puede ayudarnos a dibujar el mapa del humor a juicio en Espa?a.

Las acciones legales propiciadas por un tuit son hoy una noticia habitual, pero el humor se sent¨® en el banquillo de los acusados en Espa?a mucho antes de que el p¨¢jaro azul anidara en todas las pantallas. Si tomamos como inicio de los intentos de ponerle coto a la s¨¢tira el inicio de las libertades en Espa?a, tenemos que empezar este repaso por la Transici¨®n. El paquete explosivo que estall¨® el 20 de septiembre de 1977 en manos del conserje del edificio donde se elaboraba la revista sat¨ªrica El Papus (1973-1986), reivindicado por Triple A, fue la primera se?al que demostr¨® que las reglas del juego de la Espa?a democr¨¢tica no iban a ser toleradas por todos.

¡°Muchas publicaciones aperturistas de la ¨¦poca padecieron secuestros, suspensiones, multas y expedientes y, especialmente, la prensa sat¨ªrica, como fueron sobre todo los casos de Hermano Lobo (1972-1976), El Papus (1973-1987) y Por Favor (1974-1978). Incluso La Codorniz (1941-1978), revista humor¨ªstica nacida y tolerada durante la dictadura, tuvo entonces un secuestro gubernativo el 4 de abril de 1975¡å, como bien relata El humor frente al poder. Prensa humor¨ªstica, cultura pol¨ªtica y poderes f¨¢cticos en Espa?a (1927-1987). Las publicaciones humor¨ªsticas del momento deb¨ªan tener mucho cuidado en lo que respectaba a sus retratos del ej¨¦rcito, la Iglesia y la monarqu¨ªa, los tres asuntos que en virtud a la legalidad vigente les pod¨ªan meter en m¨¢s problemas.

Aquella portada de El Jueves

Con la Transici¨®n finalizada, cualquiera podr¨ªa pensar que los reparos a la cr¨ªtica desde el humor a ciertas instituciones estaban superados, pero entonces lleg¨® aquella portada de El Jueves secuestrada legalmente en 2007 y que llev¨® a sus responsables al banquillo. En ella se retrataba al por entonces todav¨ªa pr¨ªncipe de Asturias Felipe de Borb¨®n y su esposa Letizia Ortiz manteniendo relaciones sexuales. El chiste alud¨ªa al cheque beb¨¦ que por aquel entonces aprob¨® el gobierno de Rodr¨ªguez Zapatero: los pr¨ªncipes estaban poni¨¦ndose las pilas para tratar de optar a la ayuda estatal. El juez del Olmo pidi¨® que se secuestrara la portada, algo que a la revista le ocurr¨ªa por tercera vez (las otras dos ocasiones tuvieron lugar en 1977, en su primer n¨²mero y en el s¨¦ptimo). Finalmente, Manel Fontdevila y Guillermo Torres, responsables de la portada, fueron condenados por un delito de injurias al Pr¨ªncipe Heredero, previsto en el art¨ªculo 491.1 del C¨®digo Penal, por el juez Jos¨¦ Mar¨ªa V¨¢zquez Honrubia, quien conden¨® a cada uno de los caricaturistas a pagar una multa de 3.000 euros.

¡°Poco ha cambiado la cosa cuando la portada sigue estando prohibida [solo se permite su reproducci¨®n como elemento informativo] y cuestionar a la Monarqu¨ªa puede seguir dando problemas¡±, reflexiona hoy Fontdevila. ¡°Lo que ocurri¨® entonces sirvi¨® para demostrar que la Monarqu¨ªa es criticable y que hay un problema de libertad de expresi¨®n ah¨ª, pero tambi¨¦n que hay una clase pol¨ªtica, de uno u otro signo, con muy pocas ganas de hacer estos deberes. Entiendo que mis vi?etas son humor, pero tambi¨¦n son opini¨®n, y mi opini¨®n sobre la Casa Real es la que es. Mi profesi¨®n roza lo precario y meterse en juicios, los ganes o los pierdas, es un gasto y de esto se aprovechan partidos y asociaciones con abogados en n¨®mina¡±.

Fontdevila tambi¨¦n distingue entre el humor que cae en desuso porque la norma social lo va abandonando y el que acaba en los tribunales: ¡°El debate sobre los l¨ªmites del humor ha a?adido confusi¨®n a todo. En pocos a?os hay temas que han cambiado mucho a nivel de g¨¦nero, feminismo, homosexualidad... y esto provoca que gran parte del humor que se ha hecho en las ¨²ltimas d¨¦cadas se vea rancio, anticuado y una parte de la profesi¨®n se levante contra la dictadura de lo pol¨ªticamente correcto y la cultura de la cancelaci¨®n cuando no es m¨¢s que un proceso natural. Me sorprende que haya quien reivindique el derecho a hacer chistes de rubias tontas y de mariquitas, como en los setenta, y siga sin ver problem¨¢tico el l¨ªo en que te puedes meter por hacer chistes del Rey, del Ej¨¦rcito o de la Iglesia¡±.

La estocada a Mongolia

Edu Gal¨¢n, cofundador de la revista Mongolia, aborda el asunto desde una perspectiva diferente de la de Fontdevila. Cuando se le pregunta si hay que temer m¨¢s la censura conservadora, que en l¨ªneas generales suele tirar con mayor facilidad del C¨®digo Penal, que la supuesta censura woke promovida por la llamada cultura de la cancelaci¨®n, ¨¦l lo tiene claro: ¡°Ambos son autoritarios, pero los iliberales conservadores, como los Abogados Cristianos, son m¨¢s peligrosos. Eso s¨ª: a m¨ª los meapilas no me asustan, son la misma bazofia que llevo sufriendo desde que nac¨ª, aunque ahora algunos se disfracen de progres. Me asustan m¨¢s los que me increpan desde la izquierda y acusan de violencias u odios que solo existen en su cabeza¡±.

En 2016, el cartel sat¨ªrico de una actuaci¨®n de la revista Mongolia, de la que ¨¦l formaba parte, conten¨ªa la imagen de la cara de Ortega Cano en el cuerpo de un extraterrestre en primer plano, seguido de una nave espacial estrellada con el texto ¡°Viernes de dolores¡­ s¨¢bados de resaca¡±. El extraterrestre sostiene un cartel en el que puede leerse: ¡°Antes riojanos que murcianos¡±. En 2018, el torero los llev¨® a juicio por vulnerar su honor y utilizar su imagen con fin publicitario, y gan¨® en primera instancia. Los editores recurrieron y en 2020 el Supremo confirm¨® la condena a la revista, hasta ahora el ¨²ltimo paso judicial de uno de los casos m¨¢s sonados que han enfrentado al humor con la ley.

Cuando Gal¨¢n recibi¨® la citaci¨®n para declarar como testigo en el juicio su primera reacci¨®n fue de incredulidad: ¡°Pens¨¦ que era absurdo: por supuesto que era con fin publicitario, ?las revistas sat¨ªricas se publicitan satirizando! Y con ¨¢nimo de ridiculizar y se?alar una contradicci¨®n, como cualquier medio sat¨ªrico. Lo penable ser¨ªa que Mongolia hubiese anunciado coches con la cara de Ortega Cano o que le hubi¨¦semos perseguido con una alcachofa diariamente preguntando sobre su vida privada, pero eso ¨¦l jam¨¢s lo denunciar¨¢ porque vive de ello. Ah¨ª le va la penitencia: han condenado al ¨²nico medio que jam¨¢s le ha perseguido de verdad¡±. A comienzos de este mismo mes, la revista recib¨ªa una nueva denuncia, por parte de la asociaci¨®n Abogados Cristianos, por un delito de ofensa a sentimientos religiosos a ra¨ªz de una portada en la que el ni?o Jes¨²s aparec¨ªa, representado en un Bel¨¦n, como un excremento.

La televisi¨®n es un Cristo

No solo la prensa escrita ha pasado por el juzgado. Diciembre de 2004. Javier Krahe es entrevistado en Lo + Plus. De fondo, se utilizan como recurso unas im¨¢genes de un cortometraje rodado por el propio Krahe junto a Enrique Sese?a en 1977 sobre c¨®mo cocinar un Cristo. Las im¨¢genes formaban parte de 10 comentarios, una obra de Krahe y Sese?a, y aparec¨ªan en la pel¨ªcula Esta no es la vida privada de Javier Krahe. El v¨ªdeo del programa acab¨® en la Audiencia Provincial de Madrid, debido a una querella interpuesta por el Centro Jur¨ªdico Tom¨¢s Moro por un supuesto delito de ofensa a los sentimientos religiosos.

Krahe record¨® entonces en EL PA?S que el caso fue archivado en dos ocasiones. ¡°Pero ah¨ª sigue: vivo ocho a?os despu¨¦s. Resucitado por un juez. Es un disparate. ?C¨®mo se demuestra que se han herido unos sentimientos religiosos?¡±, se preguntaba. En esa ocasi¨®n, Krahe fue absuelto gracias a una sentencia que se?alaba que el cantautor no tuvo intenci¨®n de ¡°menoscabar, humillar o herir los sentimientos religiosos¡±.

La ficci¨®n televisiva de corte humor¨ªstico raras veces se ha tenido que enfrentar a la justicia por sus chistes. Tal vez uno de los ejemplos m¨¢s conocidos en su momento fue la demanda de la fundaci¨®n Alpe a Globomedia y a Telecinco por un episodio de A¨ªda titulado El enano oscuro del coraz¨®n. Seg¨²n manifest¨® a Efe el portavoz de la Fundaci¨®n Alpe, Jos¨¦ Ayala, ¡°atenta contra los derechos fundamentales de la persona¡±. Entre las frases textuales que la fundaci¨®n asegur¨® que se escucharon en el cap¨ªtulo figuran: ¡°?Los enanos no son de fiar!¡±; ¡°?T¨² le has visto? ?Si parece un repuesto del futbol¨ªn!¡±, y ¡°Te estoy guardando los fasc¨ªculos de las Casas de Mu?ecas. Lo digo por si tu hijo alguna vez quiere independizarse¡±. No hay menci¨®n alguna a qu¨¦ personajes dicen las frases, ni en qu¨¦ contexto, ni con qu¨¦ intenci¨®n, solo se exponen desde su literalidad.

La demanda de conciliaci¨®n fue presentada en febrero de 2007 en el juzgado de primera instancia de Alcobendas y consideraba a la cadena de televisi¨®n, la productora y el guionista del episodio responsables directos del da?o producido seg¨²n la Fundaci¨®n Alpe. ¡°No se puede tolerar que con la excusa del humor se permita que las personas con acondroplasia sean objeto de bromas¡±. Como compensaci¨®n, la Fundaci¨®n Alpe pidi¨® a Telecinco una solicitud p¨²blica de disculpas y la emisi¨®n de un debate sobre discapacidad y medios de comunicaci¨®n en la hora inmediatamente anterior a la emisi¨®n del cap¨ªtulo correspondiente de la serie A¨ªda. Desde entonces, el cap¨ªtulo no se ha vuelto a emitir.

La familia televisiva que s¨ª ha recibido m¨¢s andanadas judiciales es la de los programas. Una de las m¨¢s virulentas tuvo lugar en los d¨ªas sucesivos al 31 de octubre de 2018, cuando Dani Mateo protagoniz¨® un sketch en el que se sonaba la nariz con la bandera de Espa?a en El intermedio. El programa pidi¨® disculpas d¨ªas despu¨¦s, por boca de El gran Wyoming ¡ªsi ¡°la broma no ha funcionado¡± al generar ¡°crispaci¨®n social en vez de provocar risa¡± es evidente que se trata de un ¡°gag fallido. Por eso, no tenemos problemas en pedir disculpas sinceras a las personas que se hayan sentido ofendidas¡±¡ª, pero poco import¨®. Jaime Rubio Hancock, autor del recientemente publicado El gran libro del humor en Espa?a (Arpa), recuerda que adem¨¢s el sketch era ficci¨®n y Mateo solo simulaba sonarse la nariz: ¡°Es como llevar a juicio a Keanu Reeves por asesinar a tanta gente en las pel¨ªculas de John Wick¡±, se?ala. A?ade que, por ejemplo, un art¨ªculo de opini¨®n en el que se comparara una bandera con un trapo no habr¨ªa acabado en los tribunales: ¡°Se identifica el humor con la burla de manera casi autom¨¢tica, cuando a menudo solo pretende mostrar un comportamiento disparatado y exagerado¡±. A finales de noviembre de 2018, menos de un mes despu¨¦s de aquello, el Juzgado de Instrucci¨®n n¨²mero 47 de Madrid admiti¨® a tr¨¢mite una denuncia contra Mateo, interpuesta por la organizaci¨®n Alternativa Sindical de Polic¨ªa, al que se le atribuy¨® la supuesta comisi¨®n de un delito de ofensas o ultraje a s¨ªmbolos de Espa?a. La causa fue archivada en enero de 2019, tras la petici¨®n de la fiscal¨ªa de sobreseer el caso.

La radio tampoco se salva. Y ha sido noticia por ello este verano. H¨¦ctor de Miguel, m¨¢s conocido como Quequ¨¦, c¨®mico presentador de Hora Ventipico en la cadena SER (espacio sat¨ªrico que se incluye semanalmente en Hora 25) ha recibido cr¨ªticas por sus chistes sobre el Valle de los Ca¨ªdos, en concreto sobre uno en el que propon¨ªa dinamitarlo: ¡°Es una puta mierda. ?Por qu¨¦ no lo volamos todo?¡±. Despu¨¦s de la campa?a de Abogados Cristianos contra el programa Hora Veintipico, Vox ha ido un paso m¨¢s all¨¢ y ha anunciado una querella contra la empresa que ampara, bajo su juicio, comentarios que ¡°atacan y da?an los sentimientos religiosos de muchos ciudadanos¡±, por delito de odio y contra los sentimientos religiosos.

En los dominios del P¨¢jaro Loco

Aunque hoy se han normalizado las acciones legales contra tuits de corte humor¨ªstico, hubo una primera vez. En Espa?a tuvo lugar en 2015 y su protagonista, adem¨¢s de no provenir de la comedia ¡ªhab¨ªa ejercido como guionista de drama desde hac¨ªa m¨¢s de una d¨¦cada y ten¨ªa varios libros en su haber¡ª acababa de ser nombrado concejal de cultura del ayuntamiento de Madrid. Cuatro a?os antes y en el contexto de un debate sobre el humor, Guillermo Zapata tuite¨® varios chistes antisemitas y otros relacionados con v¨ªctimas del terrorismo. El esc¨¢ndalo medi¨¢tico fue tal que apenas 48 horas despu¨¦s dimiti¨® de su cargo. La Asociaci¨®n Dignidad y Justicia solicit¨® para el concejal un a?o y 8 meses de prisi¨®n por el delito de humillaci¨®n a las v¨ªctimas del terrorismo (tipificado en el C¨®digo Penal, art¨ªculos 578 y 579.2). Dos a?os despu¨¦s, la Audiencia Nacional lo absolvi¨®.

¡°Hubo gente que pudo odiarlos de manera instrumental, pero hubo otro mont¨®n de gente a la que le parecieron muy mal, muy crueles y entend¨ªan que hab¨ªa falta de empat¨ªa¡±, recuerda hoy Zapata. ¡°Hay algo de eso que me interesa bastante y que me parece muy leg¨ªtimo en un contexto en el que las redes se est¨¢n convirtiendo en un lugar de dif¨ªcil habitabilidad donde el ataque al otro y la falta de empat¨ªa se estaban convirtiendo en una norma. Yo sent¨ª que de alguna manera hab¨ªa jugado a ese juego, produciendo una imagen del otro sin tenerle en cuenta, como si no estuviera, y creo que esto, por ejemplo en el caso de las v¨ªctimas del terrorismo, es algo que debemos evitar o tratar con un cuidado extremo. No con la ligereza con la que yo lo hice, aunque fuera para defender la libertad de expresi¨®n¡±.

¡°Tambi¨¦n creo que hay una tendencia a resolver estos asuntos por la v¨ªa judicial, una mala herramienta de la que se aprende poco a la hora de pensar c¨®mo abordar la libertad de expresi¨®n en redes¡±, contin¨²a Zapata. ¡°Adem¨¢s, creo que hay una tercera vertiente en este asunto: cuando expresiones de intolerancia o de violencia (de racismo, de homofobia, de racismo, de LGTBIfobia) que han estado soterradas se empiezan a expresar a trav¨¦s de la ofensa, del ataque o del humor de manera directa¡±.

Zapata fue el primero de un cada vez m¨¢s nutrido club al que se fueron sumando an¨®nimos como Casandra Vera, condenada por la Audiencia Nacional y absuelta por el Supremo por unos chistes en Twitter sobre Carrero Blanco, y artistas que se ganan la vida con la comedia como C¨¦sar Strawberry, que no es un c¨®mico stricto sensu, pero s¨ª ha hecho de la s¨¢tira, la parodia y la mordacidad la bandera de muchas de las canciones de Def con Dos, el grupo que lidera. C¨¦sar Strawberry fue condenado a un a?o de c¨¢rcel y seis de inhabilitaci¨®n en enero de 2017 tras ser considerado culpable del delito de enaltecimiento del terrorismo por seis tuits en los que ironizaba con la vuelta de los GRAPO y ETA y sobre la muerte de Carrero Blanco. Tres a?os despu¨¦s, el Tribunal Constitucional anul¨® la sentencia por considerar que vulneraba el derecho del cantante a la libertad de expresi¨®n.

Uno de los casos m¨¢s sorprendentes a esta orilla de Twitter es el de la c¨®mica Raquel Sastre. Cuando ya nos hemos acostumbrado a que se denuncie a c¨®micos por sus propios chistes, resulta que tambi¨¦n se les puede denunciar por chistes que no son suyos. Sastre ha sido absuelta, seg¨²n comunic¨® su abogado David Bravo en Twitter, tras haber recibido hace a?os una querella de 106 folios en la que la demandante la acusaba de haber hecho chistes antisemitas. El documento conten¨ªa chistes que no hab¨ªa hecho Sastre sino una persona an¨®nima, pero que en Twitter figuraban intercalados entre tuits suyos. La causa se archiv¨® el pasado julio cuando se dio con la identidad de la persona que s¨ª hab¨ªa hecho esos chistes.

?Cree Sastre que la amenaza de llevar a los tribunales a c¨®micos por chistes aunque luego los tribunales desestimen, se ha convertido en un arma para obligar a los c¨®micos a autocensurarse? ¡°Creo que una puede ser esa, pero no tiene porque ser la ¨²nica. Por ejemplo, aquel caso del padre de una ni?a con s¨ªndrome de Down que denunci¨® a David Su¨¢rez por aquel chiste, eso no es ni para hacer que se calle ni para probablemente sacar dinero. Muchas veces uno denuncia porque tiene algo que no ha conseguido superar, est¨¢ enfadado con algo y muchas veces un chiste le remueve esa frustraci¨®n que tiene y la canaliza por ah¨ª, intentando castigar a alguien que ha dicho algo que le ha molestado¡±.

David Bravo, abogado de Sastre y especializado, entre otros campos, en libertad de expresi¨®n, considera que hay ¡°determinados grupos de presi¨®n de ciertos ¨¢mbitos religiosos y pol¨ªticos que abusan de la v¨ªa penal para judicializar hechos totalmente ajenos al ¨¢mbito penal. Ese sector es curiosamente el que suele quejarse de la cantidad de ofendidos de ideolog¨ªa progresista que pueblan las redes sociales. La ¨²nica raz¨®n por la que a esos grupos de presi¨®n no se les llama ¡®ofendiditos¡¯ es porque tienen el dinero suficiente como para que se les llame querellantes¡±.

Sastre nombra el caso del c¨®mico David Su¨¢rez, uno de los ¨²ltimos tuiteros a juicio a instancias de la Fiscal¨ªa de Madrid y el Comit¨¦ Espa?ol de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI) por el mensaje ¡°de contenido humillante y vejatorio¡±, seg¨²n el fiscal, que difundi¨® en su cuenta de Twitter el 18 de abril de 2019. Dec¨ªa: ¡°El otro d¨ªa me hicieron la mejor mamada de mi vida. El secreto fue que la chica us¨® muchas babas. Alguna ventaja ten¨ªa que tener el s¨ªndrome de Down¡±.

¡°Mi trabajo consiste en contar chistes sobre cuestiones sensibles que evidentemente no van a gustarle a todo el mundo¡±, explica Su¨¢rez. ¡°As¨ª que esperas que alguna gente se enfade, o que est¨¦ en contra de lo que haces. Incluso entiendes que haya gente dispuesta a denunciarte. Lo que no esperas es descubrir que vives en un pa¨ªs en el que dicha denuncia pueda llegar a prosperar¡±.

La abogada de Su¨¢rez, Isabel Elba, introdujo en su defensa un elemento novedoso: no solo la intenci¨®n del c¨®mico de distinguir entre su persona y el personaje de ficci¨®n que representa sobre el escenario, sino tambi¨¦n la distinci¨®n entre atacar la dignidad, lo cual le parece punible, y atacar los sentimientos, lo cual no le parece punible. Para David Su¨¢rez ¡°la dignidad es un derecho humano. Pero no existe el derecho a no sentirse ofendido. Y menos mal. Adem¨¢s, los sentimientos dependen en gran parte de c¨®mo t¨² recibas las cosas. Si percibes que tus sentimientos han sido da?ados, no es responsabilidad del que ofende, sino tambi¨¦n tuya por dejarte ofender. Vivir en un mundo con libertad de expresi¨®n implica que puedes gozar de libertad para decir lo que quieras, pero tambi¨¦n de la responsabilidad para asumir que existan cosas que choquen con lo que dices. Y eso es sano y est¨¢ bien¡±.

¡°No me arrepiento [de haber publicado ese tuit] porque es mi trabajo. Hay una gran diferencia entre mi yo del escenario y mi yo persona. Y ambos tienen que poder existir. Se trata de jugar a ser el villano en la ficci¨®n. Y eso no tiene nada de malo. Me alegro de haber ganado el juicio, porque imagino, o espero, que sentar¨¢ jurisprudencia para que a ning¨²n otro c¨®mico le pase y que los chistes no sean sospechosos de constituir delito en este pa¨ªs¡±.

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