Pol¨ªticas de la identidad
La categor¨ªa ¡°ind¨ªgena¡± no es identitaria, sino pol¨ªtica. Yo no me enter¨¦ de que era ind¨ªgena hasta que llegu¨¦ a la ciudad
En un debate interesante sobre los derroteros que las luchas de los pueblos ind¨ªgenas estaban tomando, me sorprendi¨® un comentario que descalificaba mis opiniones clasific¨¢ndolas como propias de las pol¨ªticas de la identidad que, en palabras de mi interlocutor, estaban haciendo ¡°mucho da?o¡± al mundo actual. No supe responder adecuadamente porque no entend¨ªa bien a qu¨¦ se refer¨ªa. Pronto supe que llamaban pol¨ªticas identitarias a las luchas que combaten opresiones por g¨¦nero, raza o pertenencia ¨¦tnica, por mencionar algunos.
Vengo de un proceso en el que hemos insistido en que ¡°ind¨ªgena¡± no es una categor¨ªa identitaria sino pol¨ªtica, as¨ª que me sorprendi¨® much¨ªsimo que ahora se clasificara esta lucha como fen¨®meno identitario. Lo segundo m¨¢s sorprendente es que estas cr¨ªticas proven¨ªan no s¨®lo de amplios sectores de la derecha, sino tambi¨¦n de la izquierda. Por un lado, la derecha acusa a las pol¨ªticas de la identidad de ser usadas por la izquierda para ganar elecciones e imponer el ¡°marxismo cultural¡± al tiempo que atenta contra la familia tradicional y el nacionalismo; por otro lado, existen voces que reclaman a los partidos de izquierda haber tomado la defensa de las pol¨ªticas de la identidad en detrimento de la lucha m¨¢s importante, que, a su juicio, es la lucha de clases; en este tenor, las voces desde la izquierda que acusan al movimiento feminista o al movimiento de los pueblos ind¨ªgenas de fragmentar a la clase obrera se est¨¢n multiplicando. Resulta curioso pues que, desde la derecha y desde la izquierda, en una coincidencia poco esperada, se use ¡°pol¨ªticas de la identidad¡± para descalificar una serie de movimientos de larga data y de muy diversa ¨ªndole.
La palabra identidad es una de esas que, de tan utilizadas, ha ido diluyendo su significado. La identidad necesita del contraste y del reconocimiento colectivo al mismo tiempo y es un proceso que va m¨¢s all¨¢ de los movimientos sociales aunque est¨¦ en relaci¨®n. En ese sentido, los movimientos de derecha tambi¨¦n necesitan de discursos identitarios para sostener posturas nacionalistas con las que llaman a frenar la migraci¨®n, la misma pertenencia a movimientos de derecha genera una identidad por contraste con respecto de la izquierda, y este contraste es fundamental para la construcci¨®n de las identidades pol¨ªticas en los Estados-naci¨®n modernos. Por otro lado, la llamada conciencia de clase genera tambi¨¦n procesos identitarios de pertenencia as¨ª como la misma militancia en movimientos de izquierda que necesita de s¨ªmbolos, himnos y otros muchos marcadores identitarios. Si llamamos pol¨ªtica de la identidad a toda pol¨ªtica que genere contrastes y pertenencias identitarias, la misma construcci¨®n del espectro derecha e izquierda lo ser¨ªa tambi¨¦n y la frase ¡°pol¨ªtica de la identidad¡± perder¨ªa todo poder descriptivo.
Me parece peligroso que la lucha de los pueblos ind¨ªgenas quede categorizada bajo la etiqueta de ¡°pol¨ªticas de la identidad¡±, pues le niega su potencia pol¨ªtica. La categor¨ªa ind¨ªgena no es identitaria, yo misma no me enter¨¦ de que era ind¨ªgena hasta que llegu¨¦ a la ciudad, es decir, aunque pertenezco a un pueblo ind¨ªgena esto no signific¨® que lo experimentara identitariamente. ?Qu¨¦ me puede unir a todos los pueblos ind¨ªgenas del mundo? No una misma identidad, ciertamente, nos une el hecho de haber sufrido colonizaci¨®n y haber quedado encapsulados dentro de los Estados-naci¨®n modernos. La categor¨ªa ind¨ªgena es entonces profundamente sociopol¨ªtica y nuestra lucha tambi¨¦n lo es. La identidad se cuece m¨¢s all¨¢.
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