El momento Magallanes de la UE: en busca del paso verde tras la derrota en la carrera digital
Europa perdi¨® la carrera de la econom¨ªa de datos personales. Ahora impulsa la transici¨®n ecol¨®gica, un p¨¦riplo con sentido moral e industrial pero casi tan dif¨ªcil como la gesta del navegante
Las estrellas de la bandera de la UE parecen estar aline¨¢ndose con vigor en la senda de la revoluci¨®n verde. La Comisi¨®n Europea de Ursula von der Leyen considera el proyecto como la piedra de toque de su mandato y busca movilizar un bill¨®n de euros en una d¨¦cada para impulsarlo. Una parte consistente de la ciudadan¨ªa europea est¨¢ realmente concernida por el cambio clim¨¢tico y, adem¨¢s, hay razonables expectativas de que la transici¨®n hacia una econom¨ªa de emisiones cero puede ¡ªaunque cause da?o a ciertos sectores¡ª abrir enormes oportunidades de futuro para la industria europea. Tras haber perdido la carrera digital y de la econom¨ªa de los datos personales a manos de los titanes de EE UU, Europa tiene la posibilidad de tomar la delantera en otro sector estrat¨¦gico y, a la vez, afianzar su estatura moral en la mirada de muchos.
El paso hacia el futuro verde, sin embargo, est¨¢ repleto de escollos y tormentas que pueden desviar de la meta, empezando por el golpe a sectores tradicionales vinculados a energ¨ªas sucias y siguiendo por cambios de h¨¢bito que no toda la ciudadan¨ªa est¨¢ dispuesta a abrazar. Von der Leyen se refiere a esta transici¨®n como ¡°el momento hombre en la luna europeo¡±. Hay otra analog¨ªa que se ajusta en muchos aspectos ¡ªy ofrece elementos de reflexi¨®n¡ª: la extraordinaria gesta de Magallanes. Siguen algunas consideraciones sobre esa dif¨ªcil b¨²squeda europea de un paso hacia los prometedores mares y tierras verdes.
La visi¨®n. Como destaca Stefan Zweig en su bella reconstrucci¨®n de la historia del navegante, en la base de esa empresa hay una visi¨®n de liderazgo. Magallanes no fue un heroico visionario aislado, fue el producto de Portugal, una peque?a naci¨®n cuyos l¨ªderes tuvieron la claridad estrat¨¦gica de ¡ªa la vista de las opciones del pa¨ªs¡ª apostar por fomentar su capacidad de proyecci¨®n en el mar. El impulso adecuado al desarrollo de habilidades n¨¢uticas y astron¨®micas permiti¨® en las d¨¦cadas posteriores incre¨ªbles haza?as en proporci¨®n con el peso espec¨ªfico de Portugal. Europa parece estar en ese momento de cristalizaci¨®n de la claridad de visi¨®n. Corresponde ahora consolidarla, entre otras cosas convirtiendo en moneda sonante el anunciado bill¨®n, que solo en parte consta de desembolsos garantizados ¡ªen otra se trata de una expectativa de movilizaci¨®n¡ª.
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La perseverancia. Igual que Magallanes, y a diferencia de Neil Armstrong, en el largo periplo hasta encontrar el estrecho tecnol¨®gico, econ¨®mico, social y cultural que conducir¨¢ a las emisiones cero, el liderazgo de la nave verde deber¨¢ embridar el inevitable desencanto de la tropa en los momentos dif¨ªciles. Alemania calcula que 400.000 empleos se perder¨¢n en una d¨¦cada en la transici¨®n hacia los coches el¨¦ctricos. El sector de la miner¨ªa de carb¨®n en Polonia, aunque en declive, sigue empleando a unas 80.000 personas. De forma indirecta, la disrupci¨®n de los ingentes costes asociados ¡ªimpuestos, desv¨ªo de recursos¡ª puede provocar se¨ªsmos sociales, como qued¨® patente con las protestas de los chalecos amarillos en Francia el a?o pasado, cuyo chispazo fue una subida de las tasas a los combustibles de transporte.
La competencia. Tras tener la visi¨®n de fomentar el desarrollo de capacidades necesarias y apoyar aventuras exitosas como las de Vasco da Gama, es notorio que la monarqu¨ªa portuguesa no crey¨® en el proyecto de Magallanes, que realiz¨® su triunfo bajo bandera de la corona castellana. Un importante pro memoria para Europa de los riesgos en el camino, de la posibilidad de que otros aprovechen m¨¢s adelante y con consecuencias trascendentales el trabajo hecho durante d¨¦cadas, por un despiste, por una decisi¨®n miope. Esta alerta tiene especial relevancia debido a un entorno europeo menos favorable a la innovaci¨®n que el de EE UU, que podr¨¢ ejercer una atracci¨®n gravitacional sobre talentos o semillas de ideas labradas en Europa.
El proselitismo. Por ¨²ltimo, al igual que Magallanes, la UE puede intentar a trav¨¦s de su periplo hacer un proselitismo inteligente. El navegante portugu¨¦s fue m¨¢s reacio al uso de la fuerza que otros exploradores/conquistadores frente a las poblaciones que encontr¨®. Un eficaz proselitismo con el ejemplo redundar¨¢ en beneficio del planeta y de la industria europea. Antes habr¨¢ que demostrar perfecta pericia para superar tormentas, estrechos y cantos de sirena.
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