La elecci¨®n de 36 gobernadores en EE UU, una votaci¨®n ¡®menor¡¯ pero muy disputada

A cara de perro. La elecci¨®n de los gobernadores de 36 Estados de EE UU, de los 50 que componen el pa¨ªs, puede deparar m¨¢s de un rev¨¦s a los dem¨®cratas en las elecciones de este martes. Las espadas est¨¢n en alto y hasta el presidente, Joe Biden, ha debido bajar a la arena para respaldar a su candidata Katy Hochul, que aspira a revalidar en las urnas su mandato como gobernadora de Nueva York, y a quien ha acompa?ado este domingo en un mitin en Westchester, en el Estado de Nueva York. Un Estado tradicionalmente fiel a los dem¨®cratas, pero donde los republicanos han dado zancadas en intenci¨®n de voto en las ¨²ltimas semanas.

Si no fuera por el relevante papel que desempe?an los gobernadores, esta ser¨ªa una votaci¨®n menor comparada con las legislativas. Pero el escenario en que se cruzan el esprint republicano y el nervioso intento de remontada de los dem¨®cratas define bien el drama de este 8 de noviembre: frente a la batalla de las ideas y los derechos planteada por los dem¨®cratas, los republicanos han ganado terreno con banderas m¨¢s prosaicas, como el estado de la econom¨ªa, la inflaci¨®n o la criminalidad. Algo de lo que los dem¨®cratas se han dado cuenta tarde, d¨ªas antes del desenlace, y que han intentado revertir con la artiller¨ªa pesada de Biden o los expresidentes Bill Clinton y Barack Obama, tambi¨¦n en campa?a.

Los gobernadores elegidos podr¨ªan resultar decisivos a la hora de determinar si el aborto sigue siendo legal en sus Estados, tras el fallo del Tribunal Supremo que revoc¨® en junio el derecho; tambi¨¦n en otros asuntos, como los derechos LGTBIQ, la educaci¨®n y el futuro del sistema electoral, es decir, de las presidenciales de 2024 para empezar. No parece importar que la mayor¨ªa de los aspirantes republicanos secunden la teor¨ªa de Donald Trump del fraude en las urnas en 2020: colocar a uno de los suyos como gobernador af¨ªn es un objetivo primordial para los partidos.

Nueva York es uno de los Estados m¨¢s disputados entre rojos (el color con que se identifica a los republicanos) y azules (dem¨®cratas). En cuatro de ellos, de un total de 12 especialmente enconados, se votar¨¢ pr¨¢cticamente a cara o cruz: Arizona, Nevada, Georgia y Pensilvania.

Nueva York, primac¨ªa dem¨®crata en cuesti¨®n

Un ejemplo de intento de remontada preventiva por los dem¨®cratas es el Estado de Nueva York. En los ¨²ltimos meses, Hochul ha promovido medidas para blindar el derecho al aborto y ofrecer el Estado como refugio a mujeres que no puedan abortar en los suyos por las prohibiciones derivadas del fallo del Supremo. Tambi¨¦n introdujo iniciativas de control de armas, tras la liberalizaci¨®n de su uso por el Alto Tribunal con otra sentencia hist¨®rica. Del futuro gobernador depender¨¢ tambi¨¦n la gesti¨®n de la deficitaria agencia metropolitana de transporte (MTA, en sus siglas inglesas), el m¨²sculo que mueve la Gran Manzana.

Pero las medidas relativas al aborto y las armas pueden correr peligro si, como indican las encuestas, el candidato republicano Lee Zeldin, cuatro puntos por detr¨¢s en los sondeos, fuera elegido gobernador. Hochul se ha apuntado esta semana el apoyo de poderosas comunidades jas¨ªdicas (jud¨ªos ultraortodoxos), que votan en bloque y a las que ambos candidatos han cortejado con denuedo.

Arizona, claro empate

Arizona es el Estado m¨¢s re?ido de todos en lo que se refiere a la elecci¨®n de gobernadora. En femenino, porque las candidatas son Katie Hobbs, dem¨®crata y secretaria de Estado desde 2019, y Kari Lake, antigua estrella televisiva y republicana del ala m¨¢s trumpista, si es que hay grados en la adhesi¨®n a un l¨ªder cuya autoridad en el partido se ha extendido durante la campa?a como una mancha de aceite. Una encuesta de Siena College para The New York Times publicada esta semana prev¨¦ un empate, con el 48% de apoyos cada una. Estrella emergente de los republicanos, la antigua presentadora de televisi¨®n, ne¨®fita en pol¨ªtica, ha acorralado a Hobbs, que en 2020 defendi¨® los resultados de las presidenciales en el Estado frente a la infundada reclamaci¨®n de Trump de haber sido v¨ªctima de un fraude. Lake ha recibido el respaldo expl¨ªcito del magnate y hecho suya su reivindicaci¨®n, prometiendo que prohibir¨¢ el voto por correo ¡ªdonde seg¨²n Trump se concentra el fraude electoral¨D si es elegida.

En el desempate resultar¨¢n determinantes los hispanos, que suponen el 25% de los votantes del Estado. Entre sus prioridades figuran la inflaci¨®n y el coste de la vida, la criminalidad y la violencia armada, el trabajo y los servicios de salud, por este orden, seg¨²n el estudio An¨¢lisis del voto hispano de la consultora LSG. Es decir, las bazas jugadas por los republicanos. El informe subraya un dato general en todos los Estados: casi 3 de cada 4 hispanos est¨¢n insatisfechos con la direcci¨®n del pa¨ªs y m¨¢s del 50% desaprueba la gesti¨®n de Biden. El discurso m¨¢s conceptual de derechos y libertades del presidente ha calado relativamente en votantes con preocupaciones cotidianas m¨¢s perentorias, como el coste de la cesta de la compra y la gasolina, o el aumento de la violencia armada en sus vecindarios.

Georgia, ventaja roja

Mal pintan las cosas para los dem¨®cratas en Georgia y Nevada, donde los candidatos republicanos les aventajan en seis y cuatro puntos. Georgia reviste especial importancia, por la investigaci¨®n a¨²n abierta sobre las maniobras de Trump para revertir los resultados de las elecciones de 2020 y cantar fraudulenta victoria. Los candidatos son dos pol¨ªticos con experiencia, el actual gobernador y candidato republicano, Brian Kemp, y su oponente dem¨®crata, Stacey Abrams. Si pese a los pron¨®sticos, Abrams resultara elegida, ser¨ªa la primera gobernadora negra del pa¨ªs. Kemp, por su parte, ha superado todas las zancadillas y descalificaciones de Trump, a cuyos deseos de pucherazo no se pleg¨® en 2020, y al que pese a todo se ha abstenido de criticar en campa?a.

Abrams fue determinante en la victoria de Biden en el Estado en 2020, ara?ando votos puerta por puerta, pero la firmeza de Kemp frente a Trump, que intent¨® descabalgarle en las primarias, es un importante activo. Kemp, de hecho, es de los pocos republicanos de la antigua escuela, horrorizados ante los modos trumpistas. Una franca minor¨ªa frente a la avasalladora presencia del magnate en el partido.

Nevada, un ¡®sheriff¡¯ en cabeza

El dem¨®crata Steve Sisolak aspira a ser reelegido gobernador de Nevada, pero no lo tiene f¨¢cil, pese a sus promesas de garantizar el derecho al aborto en el Estado, uno de los mantras de la campa?a dem¨®crata. La bandera de la ley y el orden, adem¨¢s de un recorte del gasto p¨²blico, ha aupado a la cima de las encuestas al ne¨®fito Joe Lombardo, un republicano con credenciales de firmeza ante el crimen tan probadas como el hecho de ser sheriff en ejercicio y haber sido soldado. Los hispanos, que representan el 21% de los votantes registrados, resultar¨¢n tambi¨¦n determinantes.

Pensilvania, bal¨®n de ox¨ªgeno para los dem¨®cratas

Pensilvania es el ¨²nico alivio, desde el punto de vista de las encuestas, para los dem¨®cratas. Su candidato, Josh Shapiro, actual fiscal general del Estado, aventaja en 13 puntos al senador republicano Doug Mastriano, otro trumpista defensor de la teor¨ªa del fraude electoral en 2020, seg¨²n el sondeo de Siena College. Mastriano es un ultra entre los ultras: estuvo presente en el Capitolio durante el asalto de una horda trumpista el 6 de enero de 2021. El futuro gobernador elegir¨¢ al m¨¢ximo responsable electoral del Estado, que supervisar¨¢ las presidenciales de 2024, y tendr¨¢ el poder de bloquear o facilitar la actividad del Capitolio estatal, dominado por los republicanos, que pretenden restringir el acceso al aborto.

M¨ªchigan y Nuevo M¨¦xico, la baza del aborto

Otras gobernaciones en juego, como la de Florida, pueden marcar el rumbo de la pol¨ªtica nacional de cara a 2024, en un momento en el que Trump da casi por seguro que concurrir¨¢ y Biden apunta su intenci¨®n de hacerlo pese a su edad y sus frecuentes lapsus. El gobernador republicano Ron DeSantis, que apoy¨® en campa?a a su hom¨®logo Zeldin en Nueva York, aspira a ser reelegido como probable primer paso hacia la Casa Blanca. En Texas, uno de los Estados donde el debate sobre las armas es m¨¢s apasionado ¨Den especial tras la matanza del colegio de Uvalde¨D, el dem¨®crata Beto O¡¯Rourke, en su d¨ªa estrella emergente y no del todo declinante del partido, vuelve a probar suerte frente al probable ganador, el republicano Gregg Abbot, de mano especialmente dura contra la inmigraci¨®n: lleva meses fletando autobuses llenos de indocumentados con destino a Nueva York y Washington. Inmigraci¨®n y armas han monopolizado los discursos de la campa?a.

En M¨ªchigan, la dem¨®crata Gretchen Whitmer, una de las primeras v¨ªctimas de la creciente violencia pol¨ªtica por un intento de secuestro por parte de ultras republicanos, ha peleado por el derecho al aborto contra su rival Tudor Dixon, entregado trumpista, que pretende prohibirlo por completo si es elegido, incluso para las v¨ªctimas de violaci¨®n o incesto. Es uno de los Estados, con Nuevo M¨¦xico, donde la baza del aborto s¨ª ha destacado entre otros reclamos de campa?a.

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