Inmigrantes mexicanos: Estado fallido

M¨¢s all¨¢ de los marcos te¨®ricos y acad¨¦micos, siempre imprescindibles y obligados, las realidades, con frecuencia, pesan m¨¢s que las teor¨ªas. Los conceptos de Estado fallido para los te¨®ricos del mundo son adecuados. Las ideas y vivencias para quienes viven alejados de discusiones universitarias, pol¨ªticas o las emanadas de acuerdos internacionales tienen un valor sui g¨¦neris, ver¨ªdico.

En M¨¦xico, a vuelapluma, hay quienes pensamos que un Estado fallido podr¨ªa definirse de formas diversas: una de ellas es cuando cuatro de los cinco expresidentes vivos, o medio vivos, huyeron de su pa¨ªs. Lo de ¡°medio vivos¡± se resume en una pregunta obvia: ?a qu¨¦ se dedican? Salvo Zedillo, quien abandon¨® su patria tras afirmar durante su mandato ¡°qu¨¦ en este pa¨ªs no hay lugar para los esc¨¦pticos¡± y ahora labora en la Universidad de Yale, el tr¨ªo, Salinas de Gortari, Calder¨®n y Pe?a Nieto viven en Europa y poco o nada figuran en la arena pol¨ªtica o acad¨¦mica, aunque, de cuando en cuando, el exsocio de Garc¨ªa Luna ¨C¨CCalder¨®n¨C¨C lanza diatribas contra L¨®pez Obrador. Solo la dupla Vicente y Martha Fox se qued¨® en su terru?o¡­ (los puntos suspensivos pertenecen al lector).

Estado fallido real, no te¨®rico, puede, a la vez, referirse a las naciones donde pobreza y hambre representan una gran proporci¨®n de la poblaci¨®n; puede vincularse con las opiniones de los j¨®venes que no pueden trabajar despu¨¦s de obtener t¨ªtulos universitarios, o bien, sobrevivir en labores informales como semaforistas; en el rubro semaforistas nuestro pa¨ªs es l¨ªder; otro acercamiento, tambi¨¦n tristemente mexicano, es el de las madres buscadoras de sus seres queridos, la mayor¨ªa de las veces, sin apoyo gubernamental; la del narco Estado, la m¨¢s real, no requiere explicaci¨®n. Muestra de lo ¨²ltimo es la revelaci¨®n de El Mayo Zambada y sus v¨ªnculos con el gobernador de Sinaloa, Rub¨¦n Rocha Moya. M¨¦xico como M¨¦xico.

Las carreteras mexicanas son un ejemplo de Estado fallido, tal y como escrib¨ª en estas p¨¢ginas: ¡°Estado fallido es un pa¨ªs en donde circular por las carreteras es peligroso, ya sea por ser v¨ªctima de asaltos, por correr el peligro de ser asesinado en alg¨²n punto del viaje, o por convertirse en desaparecido¡±. A la definici¨®n previa agrego una adenda: secuestro de migrantes y trasiego de drogas y de armas. En lo que resta del texto escribo sobre migrantes: otra muestra de Estado fallido a la mexicana.

No hay ni censo ni habr¨¢ cifras ¡°oficiales¡± de migrantes; en M¨¦xico la palabra oficial se utiliza de acuerdo al lenguaje de L¨®pez Obrador y de su imperio, Morena. El Gobierno no sabe ni quiere investigar el n¨²mero de connacionales que intenta cruzar la frontera. No le conviene. Hacerlo ser¨ªa impopular. Mejor la pol¨ªtica morenista del avestruz: obsequiar dinero en vez de generar empleos dignos, de calidad, bien remunerados y as¨ª impedir la fuga como ¨²ltimo recurso de sus gobernados. Tampoco se sabe cu¨¢ntos migrantes logran cruzar la frontera y cu¨¢ntos mueren en el intento.

Mientras tanto, somos testigos de un fen¨®meno inverso, crudo y real: aproximadamente 600 connacionales han cruzado la frontera por la violencia en Chiapas. Nada kafkiana ni bretoniana dicha migraci¨®n: Chiapas es uno de los estados m¨¢s violentos de nuestro territorio. Dentro de una mir¨ªada, un ejemplo reciente en el norte del pa¨ªs: el 18 de agosto, en Tubutama, Sonora, ¡°un ataque¡± acab¨® con la vida de un ni?o y dej¨® 8 lesionados.

La ¨®pera prima de Fernanda Valadez, Sin se?as particulares (2020), multipremiada en M¨¦xico y en el extranjero, retrata con sutil, elegante y dolorosa crudeza la violencia en el camino hacia los Estados Unidos de los mexicanos que desean (necesitan) escapar de M¨¦xico para mejorar su calidad de vida y la de los suyos. El filme muestra los testimonios con sobriedad, sin cursiler¨ªa, el sufrimiento de madres y familiares de desaparecidos. El coraz¨®n de Sin se?as particulares es otra forma de definir el Estado fallido.

La pel¨ªcula es vigente y seguir¨¢ si¨¦ndolo por muchos a?os, quiz¨¢s siempre. La cuasi nula esperanza de no enviar mexicanos migrantes al matadero, a manos de los narcos mexicanos de la frontera, es una esperanza guajira; esa idea se lograr¨ªa si alguno de los gobiernos, de las siglas viejas y nuevas, se entere y tome acciones sobre los sucesos fronterizos. Otra idea, ?por qu¨¦ no?, es crear un grupo de pol¨ªticos migrantes disfrazados de sus connacionales y usen los mismos medios de transporte que los migrantes obligados e intenten cruzar la frontera.

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