Estudiar la lepra en armadillos para evitar que retorne con m¨¢s fuerza en los humanos
Una investigaci¨®n realizada en Ecuador encontr¨® que, en una muestra de 48 animales, el 18% ten¨ªa la bacteria que causa esta enfermedad. Mientras que en Estados Unidos se ha confirmado la transmisi¨®n de armadillo a humano
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Pensar en la lepra nos suele llevar a un mundo antiguo en el que, quienes la padec¨ªan, no ten¨ªan m¨¢s remedio que ser condenados al ostracismo. Castigada con un enorme estigma al ser mezclada con temas m¨ªticos y b¨ªblicos, lo com¨²n es concluir que la lepra se trata de algo del pasado. Sin embargo, es un tema de salud p¨²blica y ambiental al que hay que seguir con lupa. A pesar de que su prevalencia mundial ha disminuido de cinco millones de casos en la d¨¦cada de 1980 a alrededor de 200.000 en 2016 ¡ª gracias a la existencia de una multiterapia de medicamentos ¡ª a¨²n hay pa¨ªses donde se concentran el 80% de los casos vigentes: India, Brasil e Indonesia. En cada uno de estos, para 2019, la Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS) report¨® m¨¢s de 10.000 nuevos contagios.
Aunque es una de las enfermedades infecciosas m¨¢s antiguas sobre las que hay registros hist¨®ricos, a¨²n no hay certeza sobre las minucias de c¨®mo se transmite, m¨¢s all¨¢ de que se requiere un contacto estrecho y prolongado con una persona afectada. Y desde que en 2011 se confirm¨® que un grupo de personas en Estados Unidos hab¨ªa contra¨ªdo lepra a trav¨¦s de los armadillos, se abri¨® un nuevo campo de estudio para entender c¨®mo estos animales pueden ser reservorios de la enfermedad.
¡°La bacteria que provoca la lepra no es una que se pueda cultivar en un laboratorio¡±, comenta Daniel Romero-?lvarez, epidemi¨®logo y ec¨®logo de enfermedades infecciosas de la Carrera de Ciencias Biom¨¦dicas de la Universidad Internacional SEK, Quito, Ecuador. Por eso, de alguna manera, el armadillo se convirti¨® en un conejillo de indias para entender mejor la transmisi¨®n de la enfermedad.
Romero-?lvarez, junto a un equipo de varias universidades, public¨® recientemente un estudio en la revista Emerging Infectious Diseases, en el que encontr¨® que, en una muestra de 48 armadillos de nueve bandas (Dasypus novemcinctus), en el 18,7% se pod¨ªa detectar la Mycobacterium leprae, bacteria que causa la lepra. ¡°La idea err¨®nea de que es una enfermedad que ya desapareci¨® hace que se estudie poco. Y este es quiz¨¢ el primer intento de ver si est¨¢ presente en los armadillos de Ecuador¡±, agrega. En el pa¨ªs, la lepra no es una amenaza de salud p¨²blica, ya que hay menos de un nuevo caso por cada 10.000 habitantes. En 2022, solo se registraron 41 recientes casos de lepra en humanos.
Pero tener un escenario sobre lo que sucede con los armadillos implic¨® un trabajo colectivo. El grupo se comunic¨® con cazadores locales que los consumen o usan sus caparazones para hacer charangos, y les pidi¨® que les donaran parte del tejido. As¨ª consiguieron las muestras de 45 individuos. Adem¨¢s, tomaron otros tres tejidos de armadillo que estaban conservados en jarras de etanol en el Instituto Nacional de Biodiversidad de Quito.
¡°Analizamos en total 84 tejidos¡±, dice Romero-?lvarez. Y aclara que las conclusiones del estudio no implican que los nueve armadillos que ten¨ªan la Mycobacterium leprae necesariamente estuvieran enfermos de lepra. ¡°Pueden estar infectados, pero no presentar s¨ªntomas o desarrollar la enfermedad¡±, asegura. Lo importante, recuerda, es empezar a analizar c¨®mo los armadillos son reservorios de esta enfermedad antes de que represente un problema agudo para los humanos.
Son varios los estudios que se han dado en esa v¨ªa. En 2018, la revista Plos Neglected Tropical Diseases public¨® una investigaci¨®n en la que se report¨® que de 16 armadillos analizados en Belterra, ciudad al oeste del estado de Par¨¢, en Brasil, el 62% ten¨ªa rastros de la bacteria que causa lepra. Brasil es el ¨²nico pa¨ªs del mundo que no ha alcanzado la meta de solo tener un nuevo caso de lepra por cada 10.000 habitantes y, como lo dice la investigaci¨®n, ¡°las regiones de Par¨¢ y Amazonas tienen las tasas de detecci¨®n m¨¢s altas de lepra, a pesar de tener una de las densidades poblacionales m¨¢s bajas¡±.
En M¨¦xico, pese a su proximidad con el territorio estadounidense donde se ha reportado la transmisi¨®n de lepra de armadillo a humano (principalmente Texas, Luisiana y Florida), solo se ha registrado un caso de un armadillo infectado desde 1984, seg¨²n afirma un estudio publicado en 2022.
Por eso, Romero-?lvarez cree que es importante que este campo de investigaci¨®n se haga m¨¢s fuerte. ¡°El 70% de las enfermedades infecciosas vienen de los animales no humanos¡±, insiste. Y en la medida que m¨¢s se deforeste y m¨¢s pierdan su h¨¢bitat natural, los animales tendr¨¢n m¨¢s contacto con los asentamientos humanos, d¨¢ndole la oportunidad a infecciones, virus y bacterias de encontrar un nuevo blanco.
¡°Lo que queremos lograr es impulsar la prevenci¨®n primaria de enfermedades infecciosas, estudi¨¢ndolas en la vida salvaje¡±, cuenta. Tratando de entender su comportamiento antes de que salten a los humanos o, como podr¨ªa ser el caso de la lepra, regresen a ellos. Y es que la salud actual est¨¢ enmarcada en lo que a finales del siglo 19 el pat¨®logo alem¨¢n Rudolf Virchow llam¨® Una sola salud o One Health. Un movimiento que ahora cobra m¨¢s relevancia que nunca, pues entiende que la salud y el bienestar humano no pueden abordarse de forma aislada, sino que que deben considerarse en el contexto del equilibrio entre todos los seres vivos y el entorno natural.
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