La pandemia provoca la mayor subida del gasto p¨²blico en democracia

La pandemia ha provocado el mayor incremento del gasto p¨²blico en democracia. En 2020, los desembolsos de las administraciones crecieron en m¨¢s de 50.000 millones de euros, seg¨²n c¨¢lculos de EL PA?S. La cifra total supera por primera vez los 570.000 millones, batiendo la barrera del 50% del PIB al tener que intervenir el Estado para evitar un derrumbe mayor de la econom¨ªa. Gracias a los ERTE y a que las empresas aguantaron el empleo, la ca¨ªda de las rentas familiares fue mucho menor que la de la actividad econ¨®mica: en torno al -4% frente al -10,8%. La necesidad de contratar personal y material para combatir la pandemia tambi¨¦n explica este r¨¦cord.

Ni siquiera en 2009 aument¨® tanto el gasto, cuando el Ejecutivo de Zapatero y los gobiernos regionales trataron de contener la crisis con una expansi¨®n fiscal. Ni en millones de euros, ni en porcentaje de PIB. Entonces se puso en marcha el nuevo sistema de financiaci¨®n auton¨®mico, que dio m¨¢s ingresos a las comunidades, y el Plan E, que ascendi¨® a unos 13.000 millones. El gasto subi¨® en 34.500 millones de euros. En 2008 incluso hab¨ªa crecido m¨¢s, en unos 37.600 millones, con las primeras medidas anticrisis. Y en 2006 y 2007 la cantidad tambi¨¦n se dispar¨® en cifras cercanas, aupada por los ingresos de la burbuja inmobiliaria.

Seg¨²n los c¨¢lculos del historiador econ¨®mico Francisco Com¨ªn, no ha existido un aumento comparable del gasto p¨²blico sobre PIB desde 1938, en plena Guerra Civil.

El a?o pasado, el Gobierno declar¨® el estado de alarma por la pandemia, y desde entonces despleg¨® numerosas medidas para sostener las rentas y reforzar los servicios b¨¢sicos. Diego Mart¨ªnez L¨®pez, docente en la Universidad Pablo Olavide de Sevilla, afirma: ¡°Era lo que hab¨ªa que hacer: lanzar la bomba del gasto. Y se ha hecho relativamente bien en comparaci¨®n con experiencias anteriores, como el Plan E; se ha focalizado en el mantenimiento de las rentas¡±.

ERTE, kurzarbeit, furlough, ch?mage partiel, cassa integrazione... Todos los gobiernos europeos han desarrollado frente a la pandemia esquemas de protecci¨®n temporal del empleo. En esta ocasi¨®n no es como en 2008, cuando hab¨ªa un sector de la construcci¨®n inflado y cuyo empleo ten¨ªa que ajustarse porque era insostenible. Esta vez el plan se ha basado en que la pandemia era un golpe temporal, y hab¨ªa que sortearlo protegiendo las rentas de los trabajadores hasta la vuelta a la normalidad. El turismo volver¨ªa una vez pasado el virus. As¨ª que en toda Europa se ha copiado el kurzarbeit, el modelo que permiti¨® a Alemania capear con ¨¦xito la anterior crisis financiera.

De hecho, una parte relevante del aumento de gasto del a?o pasado, en torno a unos 30.000 millones, han ido a estos ERTE ¡ªdel que llegaron a beneficiarse unos 3,5 millones de trabajadores¡ª, la ayuda extraordinaria para aut¨®nomos y la ampliaci¨®n de la cobertura del desempleo. Adem¨¢s, la pandemia provoc¨® un alza de unos 1.500 millones de euros en la partida de incapacidad temporal. Y en 2020 se empez¨® a implementar el ingreso m¨ªnimo vital, que al cierre del a?o ya supon¨ªa un desembolso superior a los 500 millones de euros.

Por otra parte, el incremento de la r¨²brica de las pensiones se acercar¨¢ a los 4.000 millones de euros, debido a la revalorizaci¨®n de las prestaciones del 0,9%, el aumento del n¨²mero de perceptores y la entrada de jubilados con mejores carreras de cotizaci¨®n y, por tanto, prestaciones m¨¢s altas. No obstante, este repunte ha sido menor de lo que ser¨ªa normal por las mayores defunciones y porque temporalmente se redujo el n¨²mero de peticiones al haber cerrado oficinas. Tambi¨¦n se mejoraron los salarios de los funcionarios un 2%, con un coste para las arcas p¨²blicas de unos 3.000 millones de euros.

Y los gobiernos auton¨®micos recibieron del Estado 16.000 millones del fondo covid-19, puesto en marcha para apuntalar la sanidad y la educaci¨®n y mitigar la ca¨ªda de ingresos. Y obtuvieron otros 600 millones para servicios sociales y prestaciones sanitarias y de farmacia. Con estos recursos, las comunidades han elevado el gasto en personal sanitario, que sube un 8% hasta noviembre. Seg¨²n Mart¨ªnez L¨®pez, la partida sanitaria probablemente se va a mantener en niveles altos porque hay un acuerdo generalizado en la sociedad sobre que hab¨ªa que reforzarla. ¡°Existe una justificaci¨®n anterior que se ha puesto de manifiesto durante la pandemia¡±, se?ala.

El coste de la Sareb

A todo esto hay que sumar el coste del banco malo. Se calcula que a cierre de 2020 la Sareb acumula una p¨¦rdida patrimonial latente de unos 10.000 millones, que el Gobierno tendr¨¢ que imputar en el d¨¦ficit del a?o pasado como un gasto porque Eurostat as¨ª lo reclama. Se espera que este desembolso cuente como una ayuda financiera al margen que no se repetir¨¢.

Pese a que el Gobierno ha concedido pocas ayudas directas a empresas, Espa?a ha sufrido uno de los mayores aumentos de gasto y d¨¦ficit de la zona euro. Y ello se debe en gran medida a que se han utilizado m¨¢s los ERTE porque existe una mayor proporci¨®n de sectores afectados por las restricciones a la movilidad.

¡°Buena parte de este incremento del gasto se traduce en d¨¦ficit y deuda, pero hay una segunda derivada: qu¨¦ parte tiene componente estructural y qu¨¦ parte es coyuntural¡±, dice Mart¨ªnez L¨®pez. Y a?ade: ¡°En la medida que haya sido coyuntural, ese gasto desaparece. Pero hay inc¨®gnitas, como los ERTE: si alguno deriva en ERE se convierte en estructural. Entonces habr¨¢ que abordarlo como un componente m¨¢s de ese d¨¦ficit estructural que viene acompa?ando a la econom¨ªa espa?ola desde hace d¨¦cadas¡±.

Espa?a ya se encontraba en una situaci¨®n bastante delicada antes de la covid. En 2019, a pesar del crecimiento registrado, el d¨¦ficit p¨²blico aument¨® por primera vez en siete a?os, bordeando el 3% que hace que Bruselas ponga bajo vigilancia estricta a un pa¨ªs. Y organismos como la Comisi¨®n Europea o el Banco de Espa?a consideran que, tras la pandemia, el desfase estructural de las cuentas habr¨¢ engordado a¨²n m¨¢s. Por esta raz¨®n, el Banco de Espa?a y la Autoridad Fiscal recomiendan que se apruebe cuanto antes un plan a medio plazo para sanear las finanzas p¨²blicas.

Un incremento propio de periodos de turbulencias

El porcentaje de gasto p¨²blico sobre PIB se dispar¨® en 2020 desde el 42% al entorno del 51%. ¡°Solo en per¨ªodos con guerras o turbulencias econ¨®micas, pol¨ªticas y sociales se han alcanzado tasas de crecimiento superiores del gasto p¨²blico en relaci¨®n al PIB¡±, explica Francisco Com¨ªn. La crisis del euro oblig¨® a contener esta ratio. Y ni durante la democracia ni con el franquismo se registraron ritmos de incremento superiores. Habr¨ªa que retroceder a la Guerra Civil para hallar alzas mayores. Tambi¨¦n en el periodo de la Primera Guerra Mundial y la posguerra debido a la inestabilidad pol¨ªtica y social y la guerra de Marruecos. Y en los a?os turbulentos del siglo XIX: en el Bienio Progresista, la Revoluci¨®n de 1868 y la Guerra de Cuba.

Este aumento del gasto provoca a su vez que el endeudamiento de las Administraciones P¨²blicas se coloque en un 120% del PIB, unos niveles que no se tocaban desde la guerra de Cuba y que ahora mismo son gestionables en tanto que los tipos de inter¨¦s son muy bajos. Sin embargo, cualquier turbulencia podr¨ªa volver a meter presi¨®n. Ahora se precisa gastar para facilitar la salida de esta crisis. Pero m¨¢s adelante, como piden el Banco de Espa?a y la Autoridad Fiscal, habr¨¢ que reconducir las cuentas p¨²blicas para no sufrir nuevas dificultades.

Como se?ala Javier Andr¨¦s, catedr¨¢tico de An¨¢lisis Econ¨®mico de la Universidad de Valencia, en la crisis anterior se derrumb¨® la construcci¨®n que tanto empleo hab¨ªa generado. Esta vez ha ca¨ªdo el turismo, algo que nadie esperaba. Sin embargo, seg¨²n explica Andr¨¦s, lo que nunca falla es un sector p¨²blico con las finanzas saneadas. La lecci¨®n es que los pa¨ªses con mayor m¨²sculo fiscal capean mejor las recesiones y son capaces de desplegar m¨¢s medidas.

Otro punto importante es cu¨¢nto del aumento del gasto es estructural. Las subidas de pensiones, funcionarios y la renta m¨ªnima engordan el presupuesto de forma permanente. Y ahora, adem¨¢s, el Ejecutivo plantea que los ERTE sean una herramienta estructural. Semejante incremento del gasto se ha podido financiar gracias a la pol¨ªtica de compras de deuda del BCE. Pero este en alg¨²n momento podr¨ªa tener que levantar el pie y frenar su ritmo de adquisiciones, sobre todo cuando haya una recuperaci¨®n m¨¢s robusta en el Norte y repunte all¨ª la inflaci¨®n.