Los expertos piden un gran pacto pol¨ªtico para impulsar el ¡®plan Calvi?o¡¯
El consejo de sabios de Econom¨ªa pone el acento en la b¨²squeda de consensos
Cuatro millones de parados, una industria declinante y una deuda p¨²blica que supera la riqueza que produce Espa?a en un a?o. Los males de la econom¨ªa espa?ola, condensados en esos tres datos, est¨¢n diagnosticados desde hace d¨¦cadas. El consejo de sabios de Nadia Calvi?o cree que el plan de recuperaci¨®n reci¨¦n remitido a Bruselas es una mirada a largo plazo para apoyar la salida de la crisis e intentar el mil veces prometido cambio de modelo productivo. Pero los grandes saltos modernizadores no se hacen sin consenso: 15 de los 17 expertos, consultados por EL PA?S, reclaman un pacto pol¨ªtico para impulsar el plan.
El Plan de Estabilizaci¨®n que sac¨® a Espa?a del siglo XIX en 1959 ten¨ªa tres estupendas p¨¢ginas; en plena dictadura, los espa?oles abrazaron ese escueto proyecto, destinado a sacar al pa¨ªs de la autarqu¨ªa. La entrada en la UE, a mediados de los ochenta, se resolvi¨® con 685 folios de BOE que traspon¨ªan de un plumazo toda la legislaci¨®n comunitaria: la ciudadan¨ªa respondi¨® al consenso pol¨ªtico general y a?os despu¨¦s hizo suyo algo tan retorcido como el concepto de ¡°convergencia nominal¡±; los espa?oles asumieron que demasiada inflaci¨®n y demasiado d¨¦ficit les pod¨ªan dejar fuera de Europa, la ¨²ltima utop¨ªa factible.
El nuevo plan de recuperaci¨®n, llamado a protagonizar la tercera gran etapa de modernizaci¨®n en 60 a?os, tiene la friolera de 2.000 p¨¢ginas: el mundo de hoy es m¨¢s complejo que el de 1986 y el de 1959. Ese esquema, seg¨²n el an¨¢lisis compartido por los expertos de Calvi?o, permite responder al tremendo impacto de la pandemia y pone las luces largas en un pa¨ªs que suele pecar de cortoplacismo. Pero queda lo m¨¢s delicado: los expertos exigen a Gobierno y oposici¨®n que la pol¨ªtica no sea un freno para desarrollar el potencial de ese ambicioso plan. Y subrayan que solo funcionar¨¢ si el pa¨ªs lo hace suyo de arriba abajo: de las empresas a los sindicatos, del establishment a las familias. ¡°La pol¨ªtica espa?ola lleva demasiado tiempo causando m¨¢s problemas de los que deber¨ªa: ser¨ªa una decepci¨®n que en este ahora o nunca la pol¨ªtica volviera a ser un lastre¡±, resume la soci¨®loga Bel¨¦n Barreiro.
Lo bueno
El plan presenta dos centenares de proyectos y reformas para gastar 140.000 millones. ¡°Es un resumen de lo que ha parido la academia en los ¨²ltimos 15 a?os y maneja el arte de lo pol¨ªticamente posible¡±, apunta el economista ?ngel Ubide como panor¨¢mica general. ¡°Esta es una crisis con muy mala pinta y el plan es una especie de despertador, un revulsivo para hacer las reformas que necesitamos, por primera vez con dinero para compensar a los perdedores de esas reformas¡±, afirma Emilio Ontiveros, de la consultora AFI.
Hace 10 a?os, Europa exig¨ªa recortes; ahora el objetivo es cambiar el perfil de la econom¨ªa espa?ola. Jos¨¦ Juan Ruiz, del Real Instituto Elcano, lo define como ¡°un trabajo t¨¦cnico, diplom¨¢tico y pol¨ªtico de gran nivel en el que est¨¢ lo que ten¨ªa que estar, y en el que puede que lo mejor es lo que se ha evitado que est¨¦¡±. ¡°Por primera vez en mucho tiempo hay una gu¨ªa, una visi¨®n de hacia d¨®nde queremos avanzar, un buen an¨¢lisis de lo que nos pasa y de lo que necesitamos¡±, dice el consultor Jos¨¦ Mois¨¦s Mart¨ªn Carretero. Tambi¨¦n por primera vez ¡°tenemos la oportunidad de pensar, con la intenci¨®n de resolver, los grandes problemas de la econom¨ªa espa?ola¡±, afirma Matilde Mas, del IVIE. ¡°Es una apuesta por un proyecto de pa¨ªs¡±, a?ade Natalia Fabra, de la Carlos III.
Las dudas
Los expertos piden un pacto de Estado para ejecutarlo a la m¨¢xima velocidad y sin sobresaltos. Pero las 15 fuentes consultadas sospechan que la pol¨ªtica espa?ola no est¨¢ para esos trotes. ¡°A Espa?a le falta optimismo y relato, y eso lo hace todo m¨¢s dif¨ªcil¡±, opina Ruiz.
¡°Nos jugamos transformar la econom¨ªa o quedarnos como est¨¢bamos: cualquier partido que aspire a gobernar deber¨ªa estar empujando¡±, critica Fabra. Alicia Garc¨ªa Herrero, de Natixis, pide expl¨ªcitamente ¡°un pacto de Estado¡±, y Raymond Torres, de Funcas, reclama al Ejecutivo ¡°que se abra a negociar¡± y al PP, ¡°que no se instale en una negativa recalcitrante¡±. Para Ignacio Conde-Ruiz, de la Complutense, ¡°deber¨ªamos ponernos de acuerdo en cuatro cosas imprescindibles, y todas est¨¢n en el plan. Fallar ahora es perder un tren que no volver¨¢ a pasar. La pol¨ªtica deber¨ªa restar incertidumbre, no a?adir problemas a la lasa?a de complejidades que debemos afrontar¡±.
Lo malo
La ejecuci¨®n es lo que m¨¢s dudas genera: ¡°?Est¨¢ la Administraci¨®n preparada para gestionar en tiempo y forma ese volumen de fondos?¡±, se pregunta Sara de la Rica, de Iseak. El economista Federico Steinberg apunta tambi¨¦n que el plan ¡°es un examen definitivo a la capacidad de la Administraci¨®n¡±. A Diego Puga le preocupa que la necesidad de forjar consensos diluya ¡°la ambici¨®n reformista, en especial para corregir las desigualdades intergeneracionales¡±. Mart¨ªn Carretero critica que el Ejecutivo no haya incorporado m¨¢s a las autonom¨ªas: ¡°Falta di¨¢logo con las comunidades, con los partidos, con la sociedad civil¡ Y ah¨ª ha sobrado tacticismo y cortoplacismo en La Moncloa¡±. Sin embargo, Isabel ?lvarez todav¨ªa ve margen para la participaci¨®n desde abajo a trav¨¦s de consultas p¨²blicas: ¡°Un buen n¨²mero de propuestas est¨¢n muy desarrolladas, pero alguna no lo est¨¢ tanto¡±.
Coda: timing, transparencia y S¨¢nchez Albornoz
La pol¨ªtica econ¨®mica espa?ola no es solo ese plan: tiene dos palancas adicionales, los Presupuestos y los fondos estructurales, para subsanar los problemas que vayan apareciendo. Pero algunos expertos se lamentan de los posibles problemas de calendario. Raymond Torres lanza un dardo cargado de veneno: ¡°El timing del plan no es el mejor¡±. ¡°Los fondos deb¨ªan haberse adelantado a un primer trimestre malo, pero van a llegar cuando la econom¨ªa ya est¨¦ rebotando: mal hecho. Y las reformas m¨¢s dif¨ªciles habr¨¢ que cerrarlas cuando la legislatura est¨¦ expirando. Buena parte de ese calendario minado es culpa de Bruselas, pero da que pensar que Espa?a encare todas las crisis a contrapi¨¦¡±.
La transparencia tampoco ha sido la mejor virtud de Econom¨ªa y La Moncloa mientras el plan se fraguaba, pero los asesores externos de Calvi?o aplauden el resultado final. ¡°Incluso lo que se ha evitado que est¨¦, el detalle sobre las reformas principales ¡ªlaboral, pensiones y fiscal¡ª, es un acierto porque quedan abiertas al consenso con los agentes sociales y de los pactos en el Parlamento¡±, desliza Ruiz.
El clima pol¨ªtico de los pr¨®ximos tiempos depender¨¢ de esa negociaci¨®n: la econom¨ªa espa?ola est¨¢ sobrediagnosticada y todo el mundo parece saber qu¨¦ hacer, pero nadie ha conseguido ponerle el cascabel a ese gato. Claudio S¨¢nchez Albornoz dec¨ªa en 1960 que Espa?a era tan dual como un siglo antes: 60 a?os despu¨¦s, ese tal¨®n de Aquiles (con la enorme brecha entre contratos fijos y temporales) sigue ah¨ª. ¡°La calidad de las reformas m¨¢s pol¨¦micas depender¨¢ de nuestro talento pol¨ªtico, pero el plan incluye esta vez un equilibrio interesante entre reformas e inversiones, algo que no hemos visto antes. Los t¨¦cnicos han hecho un trabajo impresionante. Ahora le toca a la pol¨ªtica estar a la altura¡±, concluye Barreiro.
110 inversiones y 102 reformas
El plan Calvi?o pasa por una modernizaci¨®n de la econom¨ªa que se apoya en cuatro ejes: transici¨®n ecol¨®gica, digitalizaci¨®n, igualdad y cohesi¨®n social y territorial, agrupados en 110 inversiones y 102 reformas. Las proyecciones oficiales apuntan a que el chute inversor a?adir¨¢ al PIB dos puntos porcentuales cada a?o de ejecuci¨®n del programa y que se crear¨¢n 800.000 puestos de trabajo adicionales hasta 2024. Pero no todo es tan amable. Las reformas m¨¢s controvertidas est¨¢n por llegar: la laboral est¨¢ avanzada y est¨¢ previsto que se apruebe este mismo a?o. Pero lo m¨¢s complicado se abordar¨¢ m¨¢s adelante. Los cambios en pensiones se cerrar¨¢n a caballo entre 2021 y 2022, y las subidas de impuestos ¡ªque han levantado polvareda en los ¨²ltimos d¨ªas¡ª quedan para el pr¨®ximo curso.
El calendario pol¨ªtico espa?ol y el europeo tienen mucho que decir. En Europa hay que renegociar el Pacto de Estabilidad y el BCE tiene que aclarar su posici¨®n a partir de marzo de 2021. La pol¨ªtica nacional es a¨²n menos predecible, aunque tras la derrota sin paliativos en Madrid, PSOE y Podemos tienen m¨¢s incentivos que nunca para agotar la legislatura. El camino, sin embargo, ser¨¢ sinuoso: los agentes sociales tienen mucho que decir en las reformas laboral y de pensiones, pero Pedro S¨¢nchez deber¨¢ lidiar tambi¨¦n con diferencias en el Consejo de Ministros, entre las vicepresidentas Nadia Calvi?o y Yolanda D¨ªaz.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.