Colonial saca pecho en Francia

Dieciocho a?os y dieciocho edificios, casi 175 millones de facturaci¨®n, una ocupaci¨®n cercana al 100%¡­ El negocio de Colonial en Francia puede resumirse con cifras curiosas, contundentes e incluso redondas. Y, sin embargo, ninguna cifra es capaz de expresar por s¨ª sola todo lo que Par¨ªs representa para la hist¨®rica inmobiliaria barcelonesa, con un agitado recorrido en lo que va de siglo en el que no han faltado cambios en la propiedad de la empresa, problemas con los acreedores que la acercaron a la bancarrota y, m¨¢s recientemente, una exitosa reconversi¨®n en socimi (sociedad cotizada de inversi¨®n inmobiliaria) que la aup¨® al Ibex 35 y a convertirse, por volumen de activos, en la mayor inmobiliaria de la Bolsa espa?ola. En esa trayectoria, la internacionalizaci¨®n tambi¨¦n supuso un hito fundamental en el que hay que retroceder hasta 2004, el a?o en que Colonial desembarc¨® en el pa¨ªs vecino con una compra de relumbr¨®n: nada menos que la centenaria Soci¨¦t¨¦ Fonci¨¨re Lyonnaise (SFL).

SFL naci¨® a finales del siglo XIX, cuando ten¨ªa inmuebles en la Costa Azul, B¨¦lgica e incluso Italia. Pero antes de la Segunda Guerra Mundial se deshizo de todos sus activos no parisienses. Y eso es b¨¢sicamente lo que compr¨® Colonial ya en el siglo XXI: una firma con tradici¨®n francesa y bien conocida en el mundo inmobiliario de su capital. ¡°Par¨ªs es el principal mercado de Europa¡±, resume el consejero delegado de Colonial (y presidente ejecutivo de SFL), Pere Vi?olas, ¡°un mercado muy resiliente, en particular a las coyunturas negativas, y lo llevamos en nuestro ADN¡±.

La potencia de la metr¨®polis francesa, a la que tras el Brexit nadie puede disputar el trono de mayor mercado de oficinas de la Uni¨®n Europea, pesa (para bien) en los n¨²meros de la inmobiliaria espa?ola, especializada en el alquiler de espacios de trabajo. Si los edificios de Colonial en Barcelona, Madrid y Par¨ªs tienen un valor de 13.334 millones, de acuerdo con las ¨²ltimas estimaciones de la compa?¨ªa, sus 18 activos parisienses (16 en funcionamiento y 2 en proyecto) aportan unos 7.600 millones, un 57% del total. El porcentaje se mantiene en el negocio corriente: de los 173 millones facturados en el primer semestre de este a?o, un 57% lleg¨® desde Francia, seg¨²n las cuentas depositadas ante el regulador burs¨¢til.

La inmobiliaria, por tanto, no pierde de vista Par¨ªs, un mercado donde las superficies (y las rentas) son superiores a las que se piden en las dos mayores ciudades espa?olas. En C¨¦zanne Saint-Honor¨¦, dos bloques conectados por el subsuelo a ambos lados de una calle peatonal que tambi¨¦n pertenece a la compa?¨ªa y a escasos metros de los Campos El¨ªseos, el metro cuadrado se ha llegado a pagar a casi 80 euros mensuales. Es m¨¢s del doble que en la mejor zona de Madrid.

Pero las apuestas que se hacen para estar all¨ª tambi¨¦n tienen que ser mayores: en febrero de este a?o, Colonial compraba el s¨¦ptimo edificio de oficinas m¨¢s grande de la capital francesa, en el 91 del Boulevard Pasteur, por 484 millones. El consejero delegado reconoce que el deterioro ¡°de las expectativas macroecon¨®micas¡± est¨¢ llevando a cualquier inversor a posiciones ¡°m¨¢s prudentes¡±. Pero lo cierto es que desde la recuperaci¨®n de la pandemia, la compa?¨ªa ha invertido con fuerza y SFL ha tenido un papel protagonista. En los ¨²ltimos a?os se han renovado (reposicionado, en la jerga del sector) o estrenado seis edificios en Par¨ªs. El ¨²ltimo, Biome, se inaugur¨® el pasado jueves y sirvi¨® a la compa?¨ªa para invitar a un grupo de medios espa?oles, entre ellos EL PA?S, a conocer su patrimonio parisiense.

As¨ª es Biome

Biome es un edificio de los a?os sesenta que ha sido remodelado integralmente para alcanzar los est¨¢ndares de sostenibilidad m¨¢s elevados, y tambi¨¦n para ganar superficie. El coste ha ascendido a 283 millones, de los que 165 correspondieron a la compra del inmueble en 2017. La fachada de vidrio y los nuevos a?adidos, como pasarelas flotantes o cubiertas verdes, encajar¨ªan en cualquier distrito de negocios de cualquier ciudad del mundo. Pero las vistas a la Torre Eiffel recuerdan que est¨¢ en la ic¨®nica Par¨ªs. En un radio de menos de siete kil¨®metros, SFL posee casi 430.000 metros cuadrados y su ocupaci¨®n roza el 100%.

El nuevo edificio, que ha abierto las puertas completamente alquilado, se une a una cartera que cuenta con inmuebles hist¨®ricos, como el Washington Plaza, construido en los a?os treinta por la poderosa petrolera Shell Company, o el Louvre Saint-Honor¨¦, una de las joyas de la firma, con casi 50.000 metros cuadrados a los que solo la exclusiva calle de Rivoli separa de la pinacoteca m¨¢s visitada del mundo. La planta baja y el subsuelo se preparan ahora para acoger los fondos de la Fundaci¨®n Cartier. El proyecto lo firma el arquitecto Jean Nouvel, oficial de la Legi¨®n de Honor francesa y casi tan c¨¦lebre en el hex¨¢gono como fuera de ¨¦l.

SFL fue en su d¨ªa una apuesta del dirigente de la inmobiliaria Juan Jos¨¦ Brugera (actualmente, presidente no ejecutivo), con el que entonces era m¨¢ximo accionista, La Caixa. Luego la entidad propiciar¨ªa la venta de la firma a Luis Portillo, uno de los empresarios que hab¨ªan hecho fortuna en el ladrillo a principios de siglo gracias a su inmobiliaria Inmocaral. Y entonces el sector salt¨® por los aires. Colonial acabar¨ªa en manos de los acreedores, y los bancos llamaron de nuevo a Brugera para iniciar una etapa en la que se sumar¨ªa Vi?olas. Parte de la resistencia de la compa?¨ªa en aquella ¨¦poca se atribuye internamente a SFL. El negocio de Par¨ªs ayud¨® a sostener las cuentas y aport¨® liquidez vendiendo importantes paquetes de acciones.

El a?o pasado se cerr¨® del todo esa herida con una opa que ha permitido pasar del 81% de participaci¨®n en SFL a m¨¢s de un 98%. Colonial, cuyo mayor accionista, con alrededor de un 19%, es el fondo soberano catar¨ª QIA, mantiene intacta su doble esencia franco-espa?ola. El consejero delegado, de hecho, ve la presencia en ambos pa¨ªses como ¡°una buena combinaci¨®n¡±. Espa?a es un mercado ¡°m¨¢s vol¨¢til¡±, con posibilidad de mayores ganancias cuando las cosas van bien, pero tambi¨¦n de p¨¦rdidas: en lo que va de a?o, la acci¨®n se ha dejado m¨¢s de un 40% en el Ibex. Algo recuerda a 2007, cuando en una situaci¨®n similar la direcci¨®n de la inmobiliaria amag¨® con llevarse la cotizaci¨®n a la Bolsa parisiense (donde SFL mantiene un peque?o porcentaje). Pero Vi?olas descarta paralelismos con la Gran Recesi¨®n y recuerda las buenas cifras del primer semestre, con casi 105.000 metros contratados, un 75% m¨¢s que el a?o anterior. Porque Par¨ªs, insiste el ejecutivo, ¡°es m¨¢s estable para lo bueno y para lo malo¡±. Y representa, en una palabra, ¡°solidez¡±.

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