Es profesor titular de Psiquiatr¨ªa en la Universidad de Alcal¨¢ y jefe de secci¨®n en el Hospital Universitario Pr¨ªncipe de Asturias. Es editor jefe de The European Journal of Psychiatry.
La coca¨ªna desata los instintos primarios, de la mano de la verborrea, la grandiosidad y el deseo de dominancia. Prevenir su consumo reducir¨ªa la exposici¨®n a experiencias traum¨¢ticas que son un factor de riesgo de graves trastornos mentales
La anosognosia consiste en no ser consciente de los d¨¦ficits y limitaciones derivados de un trastorno neurol¨®gico, un desaf¨ªo presente en muchos trastornos psiqui¨¢tricos
Todo trauma psicol¨®gico deja huellas, pero el abuso sexual en la infancia especialmente. Cuando ya ha ocurrido, son fundamentales la escucha, la calma, el apoyo y la esperanza
Es habitual calmar el malestar con consumo de alcohol, pero puede ser la puerta de entrada a un abuso con consecuencias enormemente negativas. Es un factor de riesgo evitable de suicidio, violencia, accidentes de tr¨¢fico y claro empeoramiento de la salud f¨ªsica y mental
La crianza segura, los h¨¢bitos de vida saludables, la socializaci¨®n, cultivar la tolerancia a la frustraci¨®n y tener un prop¨®sito vital son muy relevantes para reducir la aparici¨®n de trastornos mentales
Hay que asegurarse de que el diagn¨®stico sea el correcto, evaluar c¨®mo han sido los intentos previos y conocer las distintas intervenciones basadas en la evidencia. Es fundamental la mirada integradora, no exclusivamente farmacol¨®gica
Una situaci¨®n extrema impacta negativamente, pero la definici¨®n de trauma ha cambiado a lo largo del tiempo y ahora manejamos una acepci¨®n que tiene en cuenta la vivencia subjetiva
Los trastornos de ansiedad pueden producir mucho sufrimiento y favorecer la adopci¨®n de medidas contraproducentes. Todas tienen en com¨²n la evitaci¨®n, la huida, el escape
Es necesario diferenciar los trastornos mentales graves del malestar de la vida. Para lo primero, necesitamos medios para tratamientos eficaces. Para lo segundo, integrar perspectivas y un an¨¢lisis amplio de nuestra ¨¦poca
Los estudios han mostrado que los s¨ªntomas tienden a declinar a lo largo del tiempo, pero persisten en el 40% o 50 % de los afectados. Su diagn¨®stico y tratamiento puede ser decisivo
Convivir con una persona con depresi¨®n puede ser una experiencia abrumadora, pero hay acciones que pueden ayudar: generar un clima de seguridad y comprensi¨®n, acceder a informaci¨®n de calidad sobre el trastorno, fomentar el autocuidado y confiar en los profesionales
El ser humano que sufre necesita construir con el terapeuta una nueva historia de s¨ª mismo que le sea ¨²til para afrontar una realidad adversa. El di¨¢logo neurociencia-psicoterapia nos puede ayudar a entender mejor el proceso de la terapia
Las dicotom¨ªas biol¨®gico versus social, naturaleza versus crianza y ciencias versus letras son empobrecedoras y constituyen la principal barrera para el avance en salud mental
Este trastorno del ¨¢nimo no debe confundirse con las variaciones normales del humor, las reacciones emocionales intensas o la inestabilidad de car¨¢cter
El cerebro humano funciona como una m¨¢quina predictiva dise?ada b¨¢sicamente para reducir la incertidumbre del entorno. El estudio de la cognici¨®n social permite comprender el desarrollo de psicopatolog¨ªa
El cambio en la percepci¨®n social sobre la depresi¨®n no se ha producido, ni de lejos, en un grupo de trastornos mentales que afectan al 3 % de la poblaci¨®n: los psic¨®ticos
El autor explica por qu¨¦ la equiparaci¨®n entre el sufrimiento, inherente a la vida humana, y la enfermedad colapsa los servicios de salud mental. En los ¨²ltimos 15 a?os se ha multiplicado la prescripci¨®n de antidepresivos en un 200 %