D¨¦jeme ver
A veces, abandonas el probador con la realidad puesta y el vendedor te dice que ajustando un poco los hombros y acortando las mangas podr¨ªa quedarte como un guante.
El motor de los pies
Perro mundo
Cuando Nevenka Fern¨¢ndez denunci¨® el acoso sexual del entonces alcalde de Ponferrada, sufri¨® el aislamiento de la izquierda y los movimientos feministas, seguramente porque era de derechas, guapa e inteligente
El asunto
Ci¨¦rrenles una semana la calefacci¨®n a los subsecretarios, apaguen las calderas del Congreso. A ver de qu¨¦ hablan estos se?ores pasados cuatro d¨ªas
Angustia
Dice que es el resultado del miedo, que le da miedo todo, desde encender la tele a poner la radio, incluso enchufar la cafetera u hojear el peri¨®dico
La lucha final
El cocido
Pero los oprimidos preferimos jugarnos la vida por entidades fant¨¢sticas como Dios o la patria antes que por un pedazo de pan tan real como nuestra hambre
Un brote de autoconsciencia
No llaman
Dijo que mi incredulidad demostraba que era perfecta. ?Perfecta como mujer o como robot?, pregunt¨¦ yo
Vestirse y desnudarse
Vocales
La realidad, quiz¨¢ por influencia de las palabras, se vuelve hemipl¨¦jica
Un punto de locura
Erial
El alma es una canasta de mimbre rellena hasta los bordes de expresiones hechas
Punto de vista
Llanto
El mendigo se dirigi¨® a la se?ora para decirle que no le diera verg¨¹enza mirarle, pues ¨¦l pod¨ªa soportarlo
Por favor, una cerveza
Describir
Lo malo es que, como damos por hecho que las im¨¢genes de la tele bastan, tampoco los dem¨¢s medios se esfuerzan en describir con precisi¨®n notarial lo sucedido
Conducir no significa conducirse
Misa negra
Puigdemont finge un nacionalismo que siente de verdad. Esa y no otra debe de ser la explicaci¨®n al galimat¨ªas
El absurdo avanza
Hay que
Se asoma uno a la ventana, a las radios, a la televisi¨®n, a los peri¨®dicos, a los discursos pol¨ªticos o filos¨®ficos, se asoma uno al Parlamento, a la calle
Una historia del espanto
Caligraf¨ªas
Cuando la fantas¨ªa desaparece, la realidad tiende a ocupar su espacio
Cuatro d¨ªas que cambiaron el mundo
El espanto
En el olvido, tarde o temprano, nos encontramos casi todos los textos como pedazos de autom¨®viles en el desguace.
Redes neuronales
Diversidad
Todas las cadenas son la Cadena y todos los programas son el Programa
Espiritualizar la materia, materializar el esp¨ªritu
El m¨®vil es un objeto dualista en el sentido plat¨®nico del t¨¦rmino, pues est¨¢ dotado de alma y cuerpo
Un mi¨¦rcoles cualquiera
Vanguardia
Vivimos condenados a consumir preguntas esclerotizadas y respuestas sin inter¨¦s
Objetos biol¨®gicos
La dicha
La mayor¨ªa de la gente ha vuelto ayer, aunque la operaci¨®n retorno continuar¨¢ abierta a lo largo del fin de semana.
Mi perro y yo
Es sobrecogedor que en un pa¨ªs donde cientos de personas esperan ser ejecutadas, se indulte anualmente a un pavo en la Casa Blanca
Prestaciones in¨¦ditas
Los restos del naufragio
El fondo y la forma
Un regalo de la evoluci¨®n
Una polic¨ªaca en la Transici¨®n
Un mayordomo, arist¨®cratas, sadomasoquismo y un canario. Los tintes novelescos del crimen de los marqueses de Urquijo, cometido el 1 de agosto de 1980