Contra el porno electoral
La presentadora Kay Burley y el alcalde laborista de Manchester, Andy Burnham, prorrumpieron en gemidos org¨¢smicos con el anuncio de los 410 esca?os de los laboristas
Pepa Bueno, de frente y sin complejos
La directora de EL PA?S protagoniza la ¨²ltima entrega del programa documental ¡®En primicia¡¯
La tragedia de la Francia resentida
El lepenismo lleva 30 a?os dirigiendo el odio hacia las ¨¦lites pol¨ªticas, sociales y culturales del pa¨ªs
Le¨®n y la Espa?a plural
Cuando se invoca la pluralidad de Espa?a, rara vez se piensa en Castilla y Le¨®n
Argui?ano, los genitales y las redes del visillo
Si su carrera no le habilita para decir lo que le d¨¦ la gana, ?qui¨¦n diablos est¨¢ a salvo?
Eutanasia: un derecho que no se cumple
Tres a?os despu¨¦s de la aprobaci¨®n de la ley, administraciones y objetores se empe?an en bloquear su aplicaci¨®n
Aquellos b¨¢rbaros y brutales a?os ochenta
¡®Eric¡¯ sucede en 1985 en un Nueva York hecho trizas, y el protagonista es un titiritero inspirado en Jim Henson, creador de un programa ¨¦mulo de ¡®Barrio S¨¦samo¡¯
Aquella Espa?a en que los trenes llegaban a su hora
Quienes cogemos el AVE como otros cogen el metro sabemos que Renfe declina hacia la cutrez con tanta lentitud como determinaci¨®n
Radio Nacional, triste y a la deriva
La emisora no puede funcionar por inercia. Para mantenerse en tiempos de ¡®podcasts¡¯ y revoluci¨®n medi¨¢tica, necesita un capit¨¢n
Alvise y el voto energ¨²meno
Millones de europeos han sido convencidos de que la democracia que derrot¨® a los totalitarismos no solo no soluciona nada, sino que es la fuente de sus problemas
¡®Aruseros¡¯ contra la vida lenta
El programa apoya la t¨¦cnica de venta del ascensor: si no me convences en lo que dura un viaje de un piso a otro, no me interesa
A Taylor Swift no le duele Espa?a
Los amigos del de la motosierra, con sus muros y sus moros, parecen entender mejor Europa que quien no entiende por qu¨¦ la cantante llena dos Bernab¨¦us
Shonda no se acuerda de ¡®Anatom¨ªa de Grey¡¯
A nadie le importa ya la serie, pero tengo una noticia para los olvidadizos y los ingratos: el hospital sigue abierto, tiene nuevos m¨¦dicos en pr¨¢cticas y est¨¢n igual de cachondos
Curso de italiano para pont¨ªfices
La homofobia del papa Francisco es lib¨¦rrima y torrencial y no siente la menor necesidad de reprimirla o ablandarla. Son sus admiradores de fuera de la Iglesia quienes tienen un problema
HBO ha muerto, ?viva HBO!
Con su coartada de tele por pago, rompi¨® la gazmo?er¨ªa de las cadenas en abierto y trat¨® al espectador como adulto
Aplausos para quienes han ayudado a Vox
Santiago Abascal no gana por sus m¨¦ritos, sino por la torpeza e incomparecencia de quienes podr¨ªan haberle frustrado
El peligroso arte de presumir de facha
Iker Jim¨¦nez lleva a?os moldeando un g¨®lem que ya no controla, y pronto se ver¨¢ ante el dilema de todo hacedor de g¨®lems: o reniega de ¨¦l o se funde en su barro
Ad¨®nde ir¨¢n los votos que no damos
La abstenci¨®n es solo la letra peque?a de los resultados, pero cuando m¨¢s del 40% del censo se encoge de hombros, el problema no es de los pasotas
La pol¨ªtica espa?ola no da para comedias
Se me ocurren dos explicaciones: desinter¨¦s de los productores, que piensan que al p¨²blico esto no le interesa, o miedo a las reacciones de los pol¨ªticos aludidos
Faltan pol¨ªticos valientes que hablen de la inmigraci¨®n (y no contra ella)
Echo de menos una oposici¨®n vehemente e informada contra ese miedo a los extranjeros. Echo de menos datos contra los bulos
Una oraci¨®n por Larry David
Con la jubilaci¨®n de David no perdemos solo un pu?ado de risotadas, sino un estilo, una actitud, una manera de ser
La democracia debe ser turbulenta
Siempre habr¨¢ chalados que irrumpan en la plaza y en el juzgado dando berridos, pero ese es un precio desagradable que tendremos que pagar para que existan cr¨ªticas y disensos
El derecho al honor del criminal
¡®El cuerpo en llamas¡¯ se emiti¨®, fue un bombazo y todos aplaudimos a ?rsula Corber¨®, que estuvo sensacional. Ahora, unos meses despu¨¦s, la Audiencia de Barcelona dice que el juzgado debi¨® admitir la demanda
Los videojuegos, al rescate de la religi¨®n
Me parece bien que mi hijo viva de espaldas a Cristo, pero no puedo tolerar que viva de espaldas al Cristo de Vel¨¢zquez
La zona gris del periodismo
Lo interesante de ¡®La gran exclusiva¡¯ (Netflix) es que cuestiona un prejuicio maniqueo sobre el periodismo e invita a pensar con un poquito de complejidad
Elogio y misterio del policial brit¨¢nico
La gran inc¨®gnita de este tipo de series no son los cr¨ªmenes que resuelven, sino c¨®mo logran que cada nueva producci¨®n de un g¨¦nero tan manoseado y explotado parezca nueva y audaz
Sin arena en las playas se acaba el mundo
La erosi¨®n del litoral espa?ol es una tragedia ca?¨ª y un s¨ªmbolo que anuncia el fin de una ¨¦poca, la m¨¢s pr¨®spera y despendolada de la historia del pa¨ªs
Mam¨¢ Broncano y pap¨¢ Motos
Por mucho que queramos ser como esos padres que dicen que quieren a sus hijos por igual, el gusto es complejo y contradictorio. Se puede ser de Broncano y de Motos, como se puede detestar a Broncano y a Motos a la vez
La mansedumbre simp¨¢tica de Pere Aragon¨¨s
El mandatario catal¨¢n lleva intentando que el mundo se entere de que es presidente desde el d¨ªa en que jur¨® el cargo. Y no hay manera
?Para qu¨¦ sirve una radiotelevisi¨®n p¨²blica?
La cuesti¨®n no es el contrato de Broncano ni qui¨¦n tiene raz¨®n en el consejo ni qu¨¦ sesgo ideol¨®gico nos convence m¨¢s. Urge un debate sobre qu¨¦ queremos los espa?oles que sea RTVE
Leyes de memoria hist¨®rica y concordia por narices
Como todas las palabras bibelot, la concordia no solo es un significante vac¨ªo, sino que siempre llega tarde y subraya lo innecesario
Una guerra civil con otra guerra se quita
La ficci¨®n de la tele fantasea hace a?os con que las costuras de Estados Unidos saltan. En ella, la guerra civil del siglo XIX est¨¢ oculta. Pueden verse sus efectos, pero no la guerra, como si el viento se la hubiese llevado. Hasta ahora
Como Mulder en ¡®Expediente X¡¯, mucha gente quiere creer en algo
Los conventos se vac¨ªan de vocaciones, y las parroquias, de feligreses, pero la espiritualidad gana prestigio y relevancia: vivimos una ¨¦poca f¨¦rtil en milenarismos, gur¨²s y emociones trascendentes que den sentido al aceler¨®n cotidiano
El d¨ªa en que la pol¨ªtica espa?ola normaliz¨® el racismo
La credibilidad del PP como alternativa centrista estar¨¢ por los suelos mientras d¨¦ cobijo, altavoz y poder a personajes como el vicepresidente de Arag¨®n, de Vox
Ni espacio ni tiempo ni intimidad
Con Kate Middleton, el desquicie de los tabloides, la fiereza de las tertulias y los tuiteros nos atemperan el republicanismo y sacan el mon¨¢rquico que nunca sospechamos que viv¨ªa en nosotros
Cuando despert¨¦, Puigdemont se re¨ªa
Casi siempre que sue?o de pol¨ªtica son pesadillas, pero esta semana, al darle vueltas a la inminencia de las elecciones catalanas, tuve un sue?o bonito
Una buena chapuza de las de antes
Los presentadores virtuales, como Alba Renai en Mediaset, ser¨¢n incapaces de los chistes malos de Mat¨ªas Prats o las burradas de Mercedes Mil¨¢: me entristece la utop¨ªa perfeccionista que plantea la IA
¡®20 d¨ªas en Mari¨²pol¡¯: no todo vale en la guerra
Ll¨¢menme antiguo, pero a¨²n creo en el derecho de cada persona a decidir si prefiere ser s¨ªmbolo del horror o llorar a solas
El nacionalismo irland¨¦s de ¡®Star Trek¡¯
La nueva primera ministra de Irlanda del Norte, del Sinn F¨¦in, ha prometido un refer¨¦ndum de unificaci¨®n, y la escena de un episodio antiguo de la longeva serie le ha venido al pelo para su campa?a
Yolanda D¨ªaz, ministra del tiempo
La reordenaci¨®n de los horarios en Espa?a es un frente de lucha program¨¢tico, y ya era hora de traerlo al debate