Marina Marroqu¨ª, experta en violencia machista: ¡°Un maltratador nunca ser¨¢ un buen padre. No olvidemos que los ni?os aprenden observando¡±

La gran mayor¨ªa de los j¨®venes no cuenta sus duras y violentas historias de car¨¢cter sexual a sus familias por miedo a no poder socializar y a defraudarles. Esto es algo que Marina Marroqu¨ª (Elche, 35 a?os), educadora social, especialista en violencia de g¨¦nero y v¨ªctima de la violencia machista, tiene claro y presente a diario en sus eventos y sabe de relatos estremecedores que le cuentan chicos y chicas. Reconocida como una de las 25 mujeres m¨¢s importantes de la historia de la Comunidad Valenciana por las Cortes Valencianas y Premio Meninas 2020 contra la violencia de g¨¦nero, considera que los adultos deber¨ªan ponerse m¨¢s en la piel de sus hijos, escucharlos y comprenderlos. Adem¨¢s, entiende que existe mucho desconocimiento y desinformaci¨®n sobre lo que supone el machismo y la violencia sexual y de g¨¦nero.

La tambi¨¦n autora de Eso no es Amor: 30 retos para trabajar la igualdad (editorial Destino Infantil y Juvenil) y Eso no es sexo: ?Otra educaci¨®n sexual es urgente! (Crossbooks) ofrece formaci¨®n a familias, ni?os y j¨®venes en talleres y conferencias sobre prevenci¨®n y detecci¨®n precoz de la violencia machista y la violencia sexual para despertar la mentalidad cr¨ªtica, adem¨¢s de detectar las se?ales de maltrato.

PREGUNTA. Con su historia personal y la formaci¨®n que da, ?qu¨¦ pretende conseguir entre los j¨®venes? ?Qu¨¦ claves les da para convivir en la igualdad y en el respeto?

RESPUESTA. Mi taller de prevenci¨®n de violencia de g¨¦nero en la adolescencia ha pasado hasta la fecha por m¨¢s de 120.000 chicos y chicas de toda Espa?a. Creo que es importante que entiendan c¨®mo nos educan, que desde el nacimiento nos tratan diferente por ser de sexo masculino o femenino y que la sociedad tambi¨¦n exige cosas diferentes por ese motivo. En los talleres exponemos los falsos mitos del amor rom¨¢ntico y la irrupci¨®n de la pornograf¨ªa. Yo cuento el precio que pagu¨¦ por creerme esas historias, algo que le puede pasar a cualquiera. El machismo genera la trampa perfecta para que las chicas no identifiquemos la violencia de g¨¦nero. Es crucial recordar que uno de cada tres adolescentes sufre violencia de g¨¦nero y si a?adimos la violencia sexual, hablamos de uno de cada dos.

P. ?Piensa que los j¨®venes de hoy entienden realmente lo que significa la igualdad?

R. Aunque cuentan con muchos recursos y herramientas, opino que los adolescentes no entienden qu¨¦ es la igualdad porque no se les ha educado en eso. Se le exige a esta nueva generaci¨®n que sea igualitaria, que destierre el racismo o la LGTBfobia, pero no contamos con una asignatura de Igualdad ni de Educaci¨®n Sexual en colegios e institutos. La familia y la escuela est¨¢n haciendo un gran esfuerzo para que esta sociedad sea mejor. El fallo est¨¢ en que no conocemos la realidad en la que vive la adolescencia y cometemos el error de culparles. Existe una brecha generacional invisible muy peligrosa. Muchas familias a las que doy formaci¨®n ni siquiera saben lo que es un Sugar Daddy [hombre de alto poder adquisitivo que tiene relaciones afectivas con mujeres a las que ofrece estatus social] u OnlyFans [red social de contenido exclusivo para adultos].

P. Ni?os y adolescentes copian y necesitan buenos ejemplos: ?c¨®mo hay que actuar en igualdad desde casa y en la escuela?

R. Desde el momento en que nace tu hijo, la igualdad ha de ser una l¨ªnea educativa porque les hace libres, felices y mejores personas. En cuanto a las ni?as, tras su nacimiento, se les pone pendientes para diferenciarlas y eso ya siembra los cimientos de la desigualdad. Las familias necesitan formaci¨®n e informaci¨®n. Se necesitan cursos para introducir a los ni?os en la sociedad.

P. Sobre los estereotipos de g¨¦nero o la hipersexualizaci¨®n, ?se equivocan los padres cuando se refieren a sus ni?os o ni?as con ciertos calificativos o conceptos?

R. La autoestima se construye principalmente hasta los seis a?os y b¨¢sicamente por las cualidades que se refuerzan desde el entorno m¨¢s cercano. Con un ni?o suele reforzarse lo fuerte, valiente, inteligente y aventurero, que son cualidades internas. Por otro lado, a una ni?a se le dice lo bonita, buena, guapa y dulce que es. El 70% de estos adjetivos solo se refieren a su aspecto f¨ªsico. Las mujeres desarrollamos una autoestima externa, el valor que nos damos depende de lo que nos digan. Si la ni?a se siente bien por decirle guapa y en Instagram tiene cientos de comentarios y Me gusta cuando pone morritos, pero en la foto en la que sale adem¨¢s con un libro y solo su padre o madre le dice ¡°esa es mi chica¡±, el refuerzo positivo est¨¢ en lo primero, en su aspecto.

P. ?Son las redes sociales y los videojuegos el caldo de cultivo de la violencia machista? ?Ser¨ªa necesario censurar cierto contenido o comentarios da?inos?

R. Las primeras im¨¢genes de contenido sexual llegan a los ni?os con ocho a?os y lo consumen de forma habitual a los 12, y no hablamos de un contenido suave o gracioso. La pornograf¨ªa quiere encontrarles y captarles a esa edad y lo hace a trav¨¦s de enlaces, etiquetas o por el chat de la PlayStation. En torno a los 12 a?os lo que conecte con el deseo y la sexualidad ser¨¢ lo que les guste el resto de sus vidas. Si el 88% del porno conlleva violencia f¨ªsica a las mujeres, los j¨®venes necesitar¨¢n violencia en sus relaciones sexuales. De los 8 a los 12 a?os en el cerebro tambi¨¦n se est¨¢ desarrollando la empat¨ªa, pero si est¨¢s expuesto a violencia extrema durante ese desarrollo, eso lo impide. Y alguien que no ha podido desarrollar su empat¨ªa es un psic¨®pata. La familia no debe creer que porque su hijo est¨¢ en su habitaci¨®n est¨¢ seguro, porque no lo est¨¢. Y hay que tener la suficiente informaci¨®n para dar un m¨®vil a un ni?o de 13 a?os. Resulta urgente un cambio de leyes.

P. ?Tienen claro los adolescentes y j¨®venes que existe tambi¨¦n la violencia manifestada en humillaciones o manipulaci¨®n?

R. Se est¨¢ normalizando y aunque las chicas no desean ciertas formas o acciones en una relaci¨®n amorosa, no lo expresan. Ahora es habitual que a esto se le llame relaci¨®n t¨®xica, pero puede resultar una forma sutil para hablar de maltrato. Llamemos a las cosas por su nombre.

P. ?C¨®mo afecta a un ni?o o adolescente ser testigo directo en su casa de violencia de g¨¦nero?

R. Hablamos de perder la infancia porque aprenden r¨¢pido que no pueden comportarse con libertad, ya que eso les traer¨¢ consecuencias (gritos, insultos o golpes). No hay peor precio que ese. Las mujeres no tienen que aguantar por sus hijos, sino salir de ah¨ª por ellos. Un maltratador nunca ser¨¢ un buen padre. No olvidemos que los ni?os aprenden observando.

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