¡®Too Big to Jail¡¯ y el TTIP
El libro del joven profesor de Derecho de Virginia, Brandon L. Garrett, me procur¨® dos gozos/alarma que desear¨ªa compartir
?Eran 60 o 10 000 millones?
El Consell hab¨ªa descuidado endosar los 60 millones de euros de subvenci¨®n para el campo. Diez mil millones de pesetas. Cu¨¢ntas arrobas de clemenules se pueden pagar con tama?a subvenci¨®n...
Capitalismo subvencionado
La granja comienza a revolverse y la rebeli¨®n puede estar m¨¢s cercana de lo que piensan quienes siempre se han cre¨ªdo impunes
Olvidada corrupci¨®n
Saturada la concurrencia ante su alud cotidiano, es como si quisi¨¦ramos alejarla de nosotros de un manotazo, como se libra uno, sin alcanzar jam¨¢s el objetivo, de la mosca impertinente
La Contrarreforma...local
Quieren una ciudadan¨ªa anestesiada, que acepte instituciones locales no ya tuteladas sino designadas como hicieran sus ancestros
La marea negra y el Tratado indio
La marea negra ha llegado a los esca?os del Parlamento Europeo, y que nadie se llame a enga?o: la marea es la expresi¨®n de los objetivos neocon que tanto entusiasmo despiertan ahora en analistas
Por qu¨¦ votar¨¦ el 25 de mayo
La democratizaci¨®n de las instituciones europeas depende de la voluntad expresa de los electores
Sin la venia y sin la venda
"Andan empecinados en decir las cosas por su nombre y anteponer la verdad a cualquier conveniencia"
Culpables, resignados, indignados
Los voceros callaron durante la bonanza y se volvieron apocal¨ªpticos cuando mud¨® la situaci¨®n
Im¨¢genes
"Casi medio siglo despu¨¦s la misma est¨²pida insania, ahora y entonces contra un enemigo inerme a la vez que entusiasta del presente y del futuro"
?Una sociedad corrupta?
Periferias del pulpo
La hora de las ciudades no ha llegado todav¨ªa
Devastaci¨®n
La amistad
La empresa de la libertad
Adolfo Rinc¨®n de Arellano, ex alcalde de Valencia
Gobern¨® la ciudad desde 1958 hasta 1969
Una nueva centralidad
Cosecha estival
Ahora, Estatut
Israel-Palestina, del 'nunca' al 'es posible'
El autor destaca la importancia del reciente viaje del presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, a Israel y Palestina, y defiende la perspectiva, al fin, de un proceso de paz en una zona de conflicto permanente