El Constitucional afronta una primera bater¨ªa de recusaciones contra su nueva mayor¨ªa progresista
Vox cuestiona la imparcialidad del presidente y tres magistrados del ¨®rgano de garant¨ªas
Poco m¨¢s de una semana despu¨¦s de su renovaci¨®n, el Tribunal Constitucional afronta una bater¨ªa de recusaciones que, si llegan a prosperar, podr¨ªan dejarlo inoperante por una falta de qu¨®rum. La primera petici¨®n realizada este mi¨¦rcoles, de que la nueva magistrada Laura D¨ªez quede apartada de los recursos relativos a la cuota del 25% de clases en castellano en las escuelas de Catalu?a, ya ha prosperado. Y la propia D¨ªez ha decidido abstenerse. Ahora es el turno de Vox, que recus¨® el jueves a cuatro miembros del tribunal alegando su aparente falta de imparcialidad. Se trata del presidente del ¨®rgano, C¨¢ndido Conde-Pumpido, y de los magistrados Juan Carlos Campo, Mar¨ªa Luisa Segoviano, y la propia Laura D¨ªez, que pertenecen todos al sector progresista.
Si la petici¨®n de Vox sale adelante, dejar¨ªa al pleno del Constitucional reducido a siete magistrados, por debajo del n¨²mero necesario para adoptar resoluciones, que se sit¨²a en ocho. Y aunque hay pocas posibilidades de que las recusaciones se admitan, en el tribunal existe un clima de preocupaci¨®n ante la posibilidad de que se est¨¦ al comienzo de una ofensiva de las fuerzas conservadoras para diezmar el ¨®rgano de garant¨ªas e impedir que la nueva mayor¨ªa progresista empiece a dictar sentencias. El objetivo de dicha mayor¨ªa era y sigue siendo que se noten pronto los efectos de los relevos, y que el tribunal pueda ponerse al d¨ªa con rapidez. No obstante, el pr¨®logo de dicha labor ser¨¢ la resoluci¨®n de las recusaciones presentadas por el partido ultra.
Antes de las recusaciones de Vox contra el presidente y tres magistrados del tribunal, la Asamblea de la Escuela Biling¨¹e ya cuestion¨® a D¨ªez. Esta catedr¨¢tica de Derecho Constitucional y exasesora del Gobierno de Pedro S¨¢nchez no va a tomar parte en la deliberaci¨®n y resoluci¨®n del recurso presentado por PP y Cs contra la ley y el decreto ley impulsados por la Generalitat de Catalu?a para que no se aplique la sentencia que establece el uso del castellano en las escuelas catalanas en un 25% de las materias.
La preocupaci¨®n provocada por estas recusaciones tiene que ver con que el Constitucional est¨¢ viviendo jornadas de reacomodaci¨®n en esta nueva etapa que comienza. El ¨®rgano de garant¨ªas ha quedado compuesto por una mayor¨ªa progresista de siete magistrados que ha copado los principales cargos y una s¨®lida posici¨®n en las cuatro Secciones y las dos Salas en que se subdivide. Ello ha generado un evidente malestar en la minor¨ªa conservadora, que ahora cuenta con s¨®lo cuatro magistrados. Por tanto, se esperaba el inicio de una ofensiva por parte de la derecha pol¨ªtica, y la iniciativa de Vox ha dado el primero paso.
El arma de las recusaciones es un instrumento ¨²til para cuestionar al tribunal, aunque luego queden en nada. Las de Vox se formulan en t¨¦rminos muy amplios, pero, aun as¨ª, se teme que sean solo el inicio. En primer lugar, se pide apartar a Conde-Pumpido del recurso contra la reforma penal de la sedici¨®n y la malversaci¨®n del Ejecutivo central porque el ahora presidente del tribunal fue fiscal general del Estado con un Gobierno del PSOE. Aunque tambi¨¦n se aluden algunos hechos subjetivos, como haber sido calificado en diversos medios de comunicaci¨®n como ¡°el candidato de La Moncloa¡±, atribuy¨¦ndole una ¡°especial relaci¨®n con el partido de Gobierno¡±, en alusi¨®n a los socialistas.
La recusaci¨®n de Juan Carlos Campo abre un fil¨®n hipot¨¦ticamente m¨¢s amplio. Vox le cuestiona ¡°haber ocupado cargo p¨²blico, empleo o profesi¨®n habiendo participado directa o indirectamente en el asunto objeto del pleito, debido a su condici¨®n de exministro de Justicia¡±. En el tribunal se teme que haber ocupado este cargo impida a Campo participar en varios recursos de leyes que se debatieron en el Consejo de Ministros mientras ¨¦l formaba parte del mismo. Por ejemplo, en el pr¨®ximo pleno se deliberar¨¢ sobre la reforma educativa que impuls¨® su excompa?era en el Gobierno, Isabel Cel¨¢a. Pero los recursos en los que m¨¢s puede cuestionarse su intervenci¨®n son, obviamente, aquellos relacionados con el departamento de Justicia, del que fue titular.
De momento, Vox no ha situado el list¨®n muy alto con los argumentos que escogidos para presentar sus recusaciones. La que presentan contra la magistrada Mar¨ªa Luisa Segoviano se basa solo en unas declaraciones realizadas en un medio de comunicaci¨®n, en las que afirmaba que las apelaciones relacionadas con el derecho de autodeterminaci¨®n habr¨ªa que estudiarlas con detenimiento, ya que este es un asunto complejo.
En cuanto a Laura D¨ªez, tambi¨¦n recusada por participar en el recurso contra la reforma penal, se le pide que se abstenga ¨²nicamente porque intervino en el dictamen del Consell de Garant¨ªes Estatut¨¤ries que aval¨® la constitucionalidad de la legislaci¨®n de la Generalitat. Ello implica que la magistrada hab¨ªa formado criterio sobre las cuestiones que ahora van a debatirse en el tribunal. Este asunto supuso la presentaci¨®n de recursos por parte del PP y Cs, y una cuesti¨®n de inconstitucionalidad por parte del Tribunal Superior de Justicia de Catalu?a (TSJC).
El ponente de esta sentencia, derivada de una consulta del TSJC al Constitucional sobre sus dudas acerca de la legalidad de la actual normativa catalana, es el magistrado conservador Enrique Arnaldo. En el orden del d¨ªa del pleno de la semana que viene ya figura una deliberaci¨®n sobre este asunto, en el que se va a decidir si se admite o no la personaci¨®n de ?mnium Cultural. De ah¨ª la r¨¢pida abstenci¨®n de Laura D¨ªez, que no tomar¨¢ parte en este punto de dicha sesi¨®n plenaria. Y m¨¢s adelante formalizar¨¢ tambi¨¦n su retirada con respecto a las mencionadas dos normas de la Generalitat, en las que era ponente, al haber asumido todos los asuntos que ten¨ªa asignados su antecesor, Antonio Narv¨¢ez, uno de los relevados en la reciente renovaci¨®n del tribunal.
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