Cristina Mayo
52 a?os / Ejecutiva de servicio de Aena
La ¨²nica vez que Cristina Mayo, ejecutiva de servicio del aeropuerto Adolfo Su¨¢rez Madrid-Barajas, hab¨ªa visto la T4 vac¨ªa fue en su inauguraci¨®n, el 4 de febrero de 2006. ¡°Nunca me imagin¨¦ que iba a volver a verlo as¨ª¡±, dice. 14 a?os despu¨¦s, el lugar est¨¢ casi paralizado por las medidas de las autoridades espa?olas para combatir la Covid-19, pero Mayo est¨¢ convencida de que volver¨¢n los millones ¡°de abrazos, de encuentros, de despedidas¡±. Desde 2004, esta ingeniera aeron¨¢utica madrile?a de 52 a?os toma, mientras cumple su turno, un centenar de decisiones en tiempo real en el aeropuerto, desde auxiliar a una mujer que debe parir en una de las terminales a gestionar la situaci¨®n de un avi¨®n, como el de AirCanada, que el pasado febrero sobrevol¨® Madrid durante cinco horas para volver a aterrizar tras un fallo t¨¦cnico en el despegue. El movimiento en el Aeropuerto se ha reducido casi por completo: desde casi 1.100 despegues o aterrizajes al d¨ªa a poco m¨¢s de 90. ¡°Pero nunca tan poca actividad ha sido tan importante¡±, resalta Mayo, que lleva 23 a?os en Aena y 20 en el Aeropuerto de Madrid.
¡°Somos muy conscientes de la importancia de cada movimiento en el Aeropuerto en estos momentos¡±
El mayor de sus cuatro hermanos, Luis, fue el que abri¨® el camino en el mundo de la ingenier¨ªa aeron¨¢utica. Cristina, la del medio, lo sigui¨®. ¡°Somos tres. Ellos se dedican m¨¢s a las aeronaves, a la parte m¨¢s ingenieril¡±, dice. ¡°?Y no hab¨ªa ninguna tradici¨®n anterior en mi familia!¡±, afirma. En el Aeropuerto de Madrid, Mayo divide sus tareas con cinco ejecutivos de servicio en turnos de 12 horas. ¡°Hacemos un turno diario, descansamos 24 horas, luego, uno de noche y descansamos tres d¨ªas¡±, explica. Sus labores fueron incluidas entre aquellas esenciales durante el estado de alarma decretado por el Gobierno: ellos coordinan la recepci¨®n de aviones con material sanitario, los vuelos de repatriaci¨®n y la llegada de espa?oles que, finalmente, pueden regresar a su hogar. ¡°En nuestra mano est¨¢ definir una situaci¨®n de riesgo en un avi¨®n o en las terminales. Estamos siempre¡±. En el ¨²ltimo mes y medio, el aeropuerto ha registrado operaciones especiales de 52 vuelos cargueros con material sanitario, 79 de repatriaciones de ciudadanos espan?oles en el extranjero y dos con personal militar del eje?rcito espan?ol que regresa al pa¨ªs.
M¨¢s de 61 millones de personas pasaron por las instalaciones del Aeropuerto Adolfo Su¨¢rez Madrid-Barajas en 2019. Las variables que se le presentaban a Mayo en una jornada de trabajo eran casi infinitas. ¡°Nunca sabes qu¨¦ puede suceder. Si habr¨¢ lluvias que demoren los despegues, si habr¨¢ rayos que no permitan repostar combustible, si habr¨¢ una ca¨ªda de tensi¨®n que pare el sistema de tratamiento de equipajes de pasajeros, si se para el tren que va desde la T4 a la T4 Sat¨¦lite. Para cada escenario, tenemos un plan de contingencia¡±, explica. La clave de su tarea es no perder nunca la calma. Las situaciones que llega a resolver son impredecibles.
¡°Nunca tan poca actividad ha sido tan importante¡±
El 23 de marzo el Gobierno cerr¨® las fronteras a¨¦reas y toda la actividad del aeropuerto se desplaz¨® a partir del 1 de abril a la T4. ¡°Te impacta, pero tienes que pensar en positivo. Soy muy optimista¡±, indica Mayo. ¡°Somos muy conscientes de la importancia de cada movimiento en el aeropuerto en estos momentos¡±, reflexiona. ¡°Ahora, m¨¢s que nunca, vemos a las personas¡±. En cada avi¨®n hay una historia de esperanza: el material sanitario adquirido en el extranjero y que debe llegar con urgencia a los hospitales, los espa?oles que quedaron retenidos lejos de casa y que por fin logran regresar. ?Una imagen de estos d¨ªas? ¡°La de unos ni?os que estaban estudiando en Dubl¨ªn y que volvieron a casa con sus familias e intentaban abrazarse, entre guantes y mascarillas, con las decenas de padres que los esperaban en la terminal¡±.