Estos menores suelen sentirse inc¨®modos ante est¨ªmulos externos, como ruidos, la intensidad de la luz o aglomeraciones de gente. Controlar el uso de pantallas, ayudarles a entender sus emociones y comprender sus rabietas son claves para acompa?arlos
No dejar que los j¨®venes se equivoquen, se responsabilicen de sus tareas o solucionen a sus problemas, as¨ª como mostrar una preocupaci¨®n excesiva por su seguridad o controlar sus relaciones personales, les impide desarrollar su autonom¨ªa y autoconfianza, cultivar su esfuerzo, paciencia y disciplina
Las palabras que eligen los padres para describir a su hijo pueden esconder mensajes ocultos que lleven a da?ar la autoestima del menor o romper el v¨ªnculo de afecto, adem¨¢s de crearle conflictos internos y complejos
Reprimir, ignorar o maquillar los sentimientos que siente un ni?o le puede generar incomprensi¨®n e inseguridad. Ayudarle a reconocer, entender y gestionar sus emociones mejorar¨¢ sus relaciones sociales, su autoestima e independencia
Para los m¨¢s peque?os, volver a la escuela infantil puede suponer un desaf¨ªo, pues tras dos meses de vacaciones se separan de sus figuras de referencia. Se abre un per¨ªodo de adaptaci¨®n que requerir¨¢ atenci¨®n, amor y paciencia por parte de las familias
La mayor¨ªa de los temores infantiles no representan una amenaza real, as¨ª que estos sentimientos se convierten en una oportunidad para hablar de emociones y que los ni?os aprendan a gestionarlas
Aunque son una emoci¨®n natural e inconsciente que puede aparecer por varios motivos, los padres deben prestarles atenci¨®n gestion¨¢ndolos desde la empat¨ªa y la comunicaci¨®n asertiva y ayudando al ni?o a hacerles frente, desarrollando las habilidades emocionales necesarias
La mayor¨ªa de padres y madres reciben este diagn¨®stico con un gran sobresalto. Para la tambi¨¦n experta en talento, la falta de informaci¨®n sobre qu¨¦ supone y los falsos mitos asociados a ¨¦l genera en las familias confusi¨®n y miedo
Educar no es una tarea nada f¨¢cil, conlleva aprender mediante muchas experiencias a trav¨¦s del ensayo y el error. No est¨¢ exenta de conflictos o dificultades, pero tambi¨¦n puede convertirse una tarea fascinante y muy enriquecedora
Educar desde la orden provoca que el menor muestre dificultades para gestionar correctamente sus emociones y para identificar lo que est¨¢ bien o mal. Desde peque?os deben aprender a negociar desde el respeto, a expresar lo que sienten o necesitan sin miedo a ser juzgados
Las familias son un elemento clave en la educaci¨®n digital de los menores. Seis cosas que pueden hacer los padres para que ni?os y adolescentes aprendan a hacer un buen uso de m¨®viles y tabletas
Mientras algunos progenitores lo ven como una forma de reconocer la labor de los docentes, otros no creen que se les tenga que obsequiar por hacer bien su trabajo. Tambi¨¦n est¨¢n aquellos que solo hacen su aportaci¨®n para evitar las cr¨ªticas del resto
Aprender a ser feliz en la crianza conlleva aceptar que las cosas no saldr¨¢n siempre como se desea y que los hijos no necesitan tener unos padres perfectos
En la adolescencia se necesitan estructuras y pautas claras. Las normas deben ser coherentes, l¨®gicas, comprensibles y firmes para que sean efectivas, y estar dictadas desde el consenso y con flexibilidad
Los padres tienen un papel esencial en que sus hijos mantengan un v¨ªnculo sano. Deben observar las relaciones que se establecen entre ellos y potenciar el respeto mutuo, la asertividad y la comunicaci¨®n
El cari?o es totalmente compatible con establecer normas y l¨ªmites claros que ense?en lo que debe o no hacer. La forma en la que queramos a un ni?o o un adolescente ser¨¢ la forma en la que se quiera ¨¦l mismo
Encontrar el estilo educativo con el que se est¨¢ m¨¢s c¨®modo o seguir siempre las mismas normas, independientemente del estado de ¨¢nimo, ayudar¨¢n a lidiar con el d¨ªa a d¨ªa
Los expertos marcan los siete a?os como la edad de inicio de los embustes intencionados. Crear una relaci¨®n s¨®lida y de confianza donde el menor pueda expresar lo que siente o necesita es fundamental
Mostrar atenci¨®n y amor a un menor nada tiene que ver con malcriarle, el ni?o o adolescente necesita consolidar relaciones afectivas s¨®lidas y seguras que le ayuden a desarrollarse
Los padres y madres deben establecer sobre el ni?o unas perspectivas adecuadas que le hagan sentir que conf¨ªan en ¨¦l, que le quieren sin condiciones y que le animan a ser valiente
El joven necesita sentir que sus padres saben lo complicado que es para ¨¦l hacerse mayor, que son conscientes que a¨²n no est¨¢ preparado para actuar y decidir desde la reflexi¨®n y que validan sus emociones
Escribir una lista con objetivos realistas que fomenten el desarrollo personal de ni?os y adolescentes es la mejor opci¨®n para empezar el a?o nuevo con buen pie. Es una manera de que los menores aprendan a esforzarse por lo que desean y a respetar a los que les quieren
Muchas veces los adultos alzan la voz porque sienten que no pueden manejar una situaci¨®n, est¨¢n cansados o saturados. Pero los chillidos pueden deteriorar la relaci¨®n paternofilial y producir en los menores miedo o da?ar su autoestima
Un menor desenga?ado se comporta con ira, impotencia o tristeza. Los padres deben ense?arle que cualquier error es un aprendizaje y a enfrentar con optimismo el fracaso a la vez que evitan la sobreprotecci¨®n
Valorar las acciones y saber lo que cuesta conseguir las cosas fortalece la tenacidad de los menores, les ense?a a ser resilientes, a asumir responsabilidades y a afrontar los problemas con realismo
Aunque al principio pueden resultar tediosas, una vez interiorizadas las tareas del d¨ªa a d¨ªa resultan beneficiosas a nivel psicol¨®gico y tambi¨¦n mejoran la autonom¨ªa y la responsabilidad de los ni?os y la convivencia familiar
Este m¨¦todo requiere esfuerzo, tiempo y dedicaci¨®n y sus efectos son a largo plazo. No se limita solo a la educaci¨®n de los ni?os, tambi¨¦n mejora la convivencia familiar
Que los ni?os discutan no significa que no se quieran, tengan un mal v¨ªnculo afectivo o nunca vayan a llevarse bien. Adultos y menores deben aprender a desdramatizar estas situaciones cuando se produzcan
Las consecuencias de atar en corto a los ni?os es que no reconozcan sus emociones o que les cueste asumir el fracaso. Los progenitores deben fomentar su autonom¨ªa de forma que sean personas capaces
Vivimos en una sociedad extremadamente competitiva donde no hay lugar para los tropiezos, para los segundos puestos. Donde parece que se educa para tener que ganar siempre, para ser los mejores en todo aquello que se hace
En ocasiones, los padres muestran dificultades para entender y acompa?ar a estos chicos adecuadamente, y tienen miedo de que se cierren. Los expertos recomiendan buscar asesoramiento para evitar que la familia sufra una desestabilizaci¨®n
El ¨¦xito va m¨¢s all¨¢ de lo material: se trata de que los ni?os sean capaces de las personas que le quieren, que aprendan a tratar el miedo con respeto, que disfruten de lo cotidiano
No existe ninguna justificaci¨®n nutricional que evidencie que se deba obligar a comer a los menores, pese a que a menudo los padres creen tener la potestad para decidir cu¨¢nto y c¨®mo deben alimentarse
Rellenar los momentos de desidia en verano con dispositivos digitales aleja a los padres de una buena pr¨¢ctica educativa. Que sepan lidiar con esas horas vac¨ªas es tan importante como ofrecerles actividades alternativas
La experiencia explica que en la educaci¨®n no existen atajos o recetas m¨¢gicas que aseguren que se va a hacer siempre bien. Lo que ha funcionado a la perfecci¨®n con el primer hijo de poco sirve con el segundo
El inicio de la juventud es el per¨ªodo evolutivo en el que los hijos empiezan a interpretar el mundo a su manera y donde la falta de recursos hace que ambas partes adopten una comunicaci¨®n violenta en la que se normalizan los gritos o las comparaciones
Las pataletas aparecen entre los 18 meses y los 4 a?os y son una manifestaci¨®n de la inmadurez propia de la edad, de un cerebro que a¨²n no est¨¢ preparado para autocontrolarse