A?o nuevo, problemas viejos para la moda

El lujo se queda sin clientela. Si buscaban un titular/cebo que d¨¦ cuenta de lo que le espera al negocio de la moda en 2025, ah¨ª lo llevan. La cr¨®nica de una debacle anunciada, en realidad, que cualquiera pod¨ªa interpretar los signos pr¨¢cticamente desde principios de 2024, cuando los primeros espadas del sector comenzaron a acusar un descenso de las ventas ¡ªy, por tanto, de los beneficios¡ª que para el ¨²ltimo ejercicio fiscal era un clamor. Entonces se habl¨®, sobre todo, de la desaceleraci¨®n de las econom¨ªas de los principales mercados (el chino y el estadounidense), de la inflaci¨®n e incluso de las pertinentes tensiones geopol¨ªticas que suman inestabilidad e incertidumbre al cuadro. Hasta que, casi a finales de a?o, se admiti¨® por fin que la causa del problema, aunque compleja, resultaba mucho m¨¢s simple: el hast¨ªo y la desafecci¨®n de los compradores por un producto cada vez m¨¢s cuestionado porque su precio (desorbitado) hace tiempo que no se corresponde con su valor.

¡°Desde 2010, a excepci¨®n del momento m¨¢s cr¨ªtico de la pandemia de covid en 2020, las pol¨ªticas continuadas de precios al alza han sido las responsables del grueso de los beneficios econ¨®micos de las marcas de lujo, en especial durante el ¨²ltimo lustro. El abuso de esta pr¨¢ctica ha terminado por cansar a los consumidores, que no entienden por qu¨¦ de repente tienen que pagar mucho m¨¢s por el mismo producto, aunque puedan permit¨ªrselo¡±, concede a EL PA?S Gemma D¡¯Auria, analista s¨¦nior de McKinsey & Co., la consultora que elabora anualmente el informe The State of Fashion para el portal especializado The Business Of Fashion. La prospectiva de la situaci¨®n para este 2025 no es particularmente favorable: el 80% de los directores ejecutivos sondeados teme que las cosas se mantendr¨¢n igual o peor que en 2024 y siete de cada diez refieren la p¨¦rdida de confianza de los compradores como el mayor riesgo para el negocio, por delante de la inflaci¨®n o la inestabilidad de los mercados, con las guerras arancelarias EE UU - Europa - China que se vienen. Ante semejante panorama, la previsi¨®n es que la industria de la moda registrar¨¢ un crecimiento de apenas un solo d¨ªgito.

¡°Lo interesante es que, en medio de tanta turbulencia, aparecen firmas extremadamente resilientes, como Herm¨¨s, que son de las que hay que aprender, ya sea por el compromiso a la hora de mantener la calidad del producto o por ese discurso de marca que sabe conectar emocionalmente con el cliente, de manera que su compra llega a trascender el acto de mero consumo¡±, expone D¡¯Auria. Claro que entonces llega Walmart, la mayor plataforma/almacenes estadounidense, inaugurando el a?o con su versi¨®n casi niquelada del celeb¨¦rrimo Birkin ¡ªel bolso que le da las alegr¨ªas a la casa francesa¡ª a precio imbatible, y los consumidores vuelven a mirar con suspicacia a los adalides de la exclusividad y su man¨ªa por el m¨¢s caro todav¨ªa. Quiz¨¢ por eso se entiende el auge del segmento de marcas de precio medio y de las ense?as m¨¢s t¨¦cnicas que, seg¨²n apunta la consultora de McKinsey, ¡°han sabido construir una s¨®lida comunidad de clientes leales de un tiempo a esta parte y han invertido en creatividad¡±.

El creativo se presenta, precisamente, como el gran desaf¨ªo a afrontar en los pr¨®ximos meses. Para sorpresa de nadie, el guante lo recog¨ªan ya el a?o pasado las cadenas de gran consumo o low cost, lanzadas a una carrera por lo premium y las colecciones de dise?ador. Zara se descolgaba en noviembre con una c¨¢psula firmada por Stefano Pilati y, casi a la vez, H&M anunciaba el fichaje de Glenn Martens para reactivar su proyecto de colaboraciones estelares, que en 2024 celebr¨® su vig¨¦simo aniversario. A comercializar a mediados de a?o, la colecci¨®n pone al belga en el puto de mira: en septiembre dejaba Y/Project, la peque?a firma parisina de culto en la que ha ejercido de director creativo durante m¨¢s de una d¨¦cada y que compaginaba desde 2020 con el mismo cargo en Diesel. Que la marca de denim deluxe pertenezca al grupo OTB ha dado cancha a la especulaci¨®n: Martens ser¨ªa, de hecho, el candidato perfecto para sustituir a John Galliano en Maison Margiela, otro de los activos del conglomerado italiano que capitanea el magnate Renzo Rosso y que el gibraltare?o abandon¨® en diciembre tras 10 a?os.

Sin rumbo fijo, el destino de Galliano es una de las grandes inc¨®gnitas a despejar en los pr¨®ximos meses. Y no va sobrado de opciones, al igual que los hoy ilustres parados Hedi Slimane o Pierpaolo Piccioli, porque las sedes creativas vacantes comienzan a escasear ahora que parece que van encajando todas las fichas tras los muchos rumores que agitaron el patio en 2024. No ser¨¢, desde luego, la que una vez fuera su casa, Dior: sin ser todav¨ªa oficial, Jonathan Anderson parece llamado a suceder a Maria Grazia Chiuri, que se despedir¨ªa de la firma a finales de mayo despu¨¦s de presentar la colecci¨®n crucero 2026 en Roma (la elecci¨®n de la capital italiana para su adi¨®s despu¨¦s de nueve a?os resultar¨ªa cuanto menos simb¨®lica, porque es su ciudad de nacimiento). El puesto del norirland¨¦s en Loewe lo cubrir¨ªa el matrimonio Meier, Luke y Lucie, que dejar¨ªa a su vez v¨ªa libre en Jil Sander. ?Alguien se imagina al Napole¨®n de la moda entregado al minimalismo alem¨¢n? Bueno, si se hizo con la conceptual Margiela para imponer su excesiva impronta, por qu¨¦ no iba a salir airoso en tal caso.

Tampoco tiene ya sitio en Givenchy, su primera plaza internacional, pues Sarah Burton asumi¨® la direcci¨®n creativa en septiembre, siguiendo los pasos de su mentor, Alexander McQueen (al que sucedi¨® en su propia firma tras su prematura muerte, en 2010). El debut de la dise?adora brit¨¢nica se ver¨¢ en marzo, durante los desfiles de las colecciones oto?o/invierno 2025-2026 en Par¨ªs, igual que el de Haider Ackermann en Tom Ford, el de Michael Rider en Celine (veremos si recupera la tilde original en el logo, como luc¨ªa cuando asist¨ªa a la que fuera art¨ªfice de la resurrecci¨®n de la etiqueta francesa, Phoebe Philo, y que Slimane borr¨® sin miramientos) o el de Julian Klausner en Dries Van Noten. Para saber qu¨¦ tratamiento recibir¨¢ Chanel con Matthieu Blazy en el una vez trono de Karl Lagerfeld habr¨¢ que esperar algo m¨¢s: el franco-belga no se estrenar¨¢ hasta el pr¨®ximo septiembre. Louise Trotter, su relevo en la muy medi¨¢tica Bottega Veneta, desfilar¨¢ en Mil¨¢n en marzo. De momento, es la ¨²nica buena noticia este a?o para la moda: se une a Burton y Chemena Kamali (Chlo¨¦) como una de las pocas mujeres con posici¨®n de poder en el negocio.