Escribe en EL PA?S columnas y an¨¢lisis sobre pol¨ªtica, especialmente internacional. Ha escrito, entre otros, ¡®El a?o de la Revoluci¨®n' (Taurus), sobre las revueltas ¨¢rabes, ¡®La gran verg¨¹enza. Ascenso y ca¨ªda del mito de Jordi Pujol¡¯ (Pen¨ªnsula) y un dietario pand¨¦mico y confinado con el t¨ªtulo de ¡®Les ciutats interiors¡¯ (Galaxia Gutemberg).
Incluso en el caso de que la amenaza at¨®mica rusa no llegara a hacerse realidad contra Ucrania, es extremadamente preocupante el retroceso efectivo que ya representa esta guerra para la pol¨ªtica contra la proliferaci¨®n
En estos juegos de im¨¢genes se fraguan los genocidios. Porque Rusia se cree en peligro, hay que destruir a Ucrania
Estados Unidos regresa a su peor pasado en derechos y en medio ambiente gracias a los jueces nombrados por Trump
Hasta la cumbre de Madrid, los europeos no hab¨ªan conseguido hablarle al l¨ªder ruso con una sola voz y sin vacilaciones en el idioma de la fuerza
Los europeos quisieran jugar en primera divisi¨®n y por libre pero sin pagar las facturas, tanto en inversiones militares como en renuncias de soberan¨ªa en favor de una defensa colectiva
El periodista de EL PA?S, Llu¨ªs Bassets, analiza la relevancia de las cumbres entre los l¨ªderes de los dos pa¨ªses a lo largo de los a?os
Una de las repercusiones de la guerra en Ucrania puede ser una err¨®nea instrumentalizaci¨®n del idioma de Chejov y Pushkin
Putin encabeza la mayor reacci¨®n autoritaria y conservadora que hemos visto en Europa en el siglo XXI
En el Gobierno de Zelenski radica la responsabilidad para cambiar las fronteras y obtener suficientes garant¨ªas de seguridad frente a la agresividad rusa
Es en la retaguardia donde las guerras se cobran las v¨ªctimas m¨¢s altas. Vlad¨ªmir Putin y Xi Jinping tambi¨¦n se juegan su futuro
Putin pretende que los aliados hagan entrar en raz¨®n a Zelenski, pero la responsabilidad y el derecho a tomar tal decisi¨®n corresponden solo al Gobierno de Kiev
La transici¨®n catalana, anunciada por Artur Mas hace una d¨¦cada, ha sido una r¨¢pida y alocada marcha hacia ninguna parte
Putin cuenta a¨²n con dos poderosas bazas para inclinar la balanza en su guerra larga y ancha. Ambas electorales, en EEUU y gracias a la firme alianza del republicanismo secuestrado por Trump
Si Argelia recupera viejos reflejos de la guerra fr¨ªa y se suma a la guerra de Putin contra Europa, Marruecos utiliza id¨¦nticas armas para arrimar el ascua a la sardina de su contencioso territorial con Argelia en el S¨¢hara Occidental
En su reaparici¨®n p¨²blica, Angela Merkel encarna un sentimiento alem¨¢n de profundas y contradictorias ra¨ªces hist¨®ricas
Putin act¨²a de rompehielos, pero Xi Jinping es quien se ha propuesto construir un nuevo orden internacional autoritario
Si los cr¨ªmenes de Putin, sus secuaces y su soldadesca quedaran sin castigo, quedar¨ªa establecido un penoso antecedente y ser¨ªa un potente est¨ªmulo para que otros perpetraran cr¨ªmenes similares
La CUP y Junts se han integrado sin problemas en la Comisi¨®n de Secretos Oficiales, la m¨¢s delicada del Congreso de los Diputados, y su comportamiento ha sido tan constitucional como el de los otros diputados
No corresponde a los aliados decidir cu¨¢nto y cu¨¢ndo ceder en una negociaci¨®n de paz, si acaso hay que ceder algo
Es dif¨ªcil que potencias expansionistas y autoritarias que cuentan con el arma nuclear no est¨¦n tentadas por la ley del m¨¢s fuerte ni exijan luego que nadie se inmiscuya en sus asuntos
La intoxicaci¨®n informativa de la guerra h¨ªbrida intoxica tambi¨¦n a quien usa tales armas, hasta perder el sentido de la realidad
La pr¨®xima incorporaci¨®n de Suecia y Finlandia confirma lo que ya se sab¨ªa: la defensa europea es la Alianza, sobre todo en momentos tan peligrosos como los actuales. La autonom¨ªa estrat¨¦gica queda en segundo plano
Esperar que Putin ayudara a Catalu?a a independizarse es la ¨²ltima, definitiva y m¨¢s pat¨¦tica ocurrencia que pudiera surgir de una mente pol¨ªtica que se pretende democr¨¢tica
Putin suma las derrotas militares a las pol¨ªticas, fruto de una incompetencia que est¨¢ sorprendiendo a todos
Putin no ha abandonado su pretensi¨®n de conquistar toda Ucrania y colocar un Gobierno t¨ªtere en Kiev. De momento se concentra en un objetivo m¨¢s modesto
El descompromiso de Washington con la justicia humanitaria internacional es su mayor debilidad frente a Mosc¨²
La incompetencia militar rusa no explica tan solo las barbaridades de sus soldados en su trato con la poblaci¨®n civil, sino tambi¨¦n el persistente recurso a la acci¨®n de los bombardeos
El espionaje a los l¨ªderes independentistas es una an¨¦cdota dentro de la historia de espionaje universal protagonizada por Pegasus
Precipitarse a pedir dimisiones o a romper mayor¨ªas parlamentarias de izquierdas es una temeridad
Como Roosevelt en 1941 para vencer a Hitler, Biden ha lanzado un enorme paquete de ayudas a Ucrania para vencer a Putin
Para ganar hacen falta determinaci¨®n ¡ªUcrania la tiene toda¡ª y armas ¡ªUcrania no tiene y depende de las que le manden los aliados¡ª
El Kremlin exige a los ucranios lo que los ucranios no deben ni pueden ceder, a riesgo de dejar de ser ucranios y de tener un pa¨ªs
El choque que se prepara tiene todas las caracter¨ªsticas de un duelo cl¨¢sico. Y solo tendr¨¢ un desenlace claro si una de las dos partes es capaz de arrollar, liquidar o rendir a la otra
La patria comunista fue un imperio totalitario, aunque muchos no lo quisieran reconocer entonces y algunos ni siquiera quieran reconocerlo ahora
Vlad¨ªmir Putin ya es el mayor criminal del siglo XXI, ¨¦mulo de las barbaridades genocidas de Hitler y Stalin en el siglo XX
El prop¨®sito del presidente ruso se limita ahora a hacerse con la regi¨®n de Donb¨¢s, hasta hoy solo parcialmente en sus manos. Tiene mejores cartas para el nuevo envite, pero no es seguro que se salga con la suya
Putin quiere ocupar un territorio donde declarar cumplidos los objetivos y proclamarse vencedor de su ofensiva
Nada es igual entre la guerra de Bush en Irak y la de Putin en Ucrania, pero el eco es tr¨¢gico y profundamente significativo
Las victorias electorales de Viktor Orb¨¢n en Hungr¨ªa y de Aleksandar Vucic en Serbia suponen una ligera bocanada de ox¨ªgeno para el presidente ruso
No es aqu¨ª, sino en Ucrania, donde nos jugamos la existencia, tal como dijo literalmente Ponsat¨ª. Como europeos y como catalanes