Formas de llamar un crimen
Es llamativo que a estas alturas del partido se est¨¦ debatiendo en Colombia sobre la justificaci¨®n de una pr¨¢ctica tan injustificable como el secuestro
Es llamativo que a estas alturas del partido se est¨¦ debatiendo en Colombia sobre la justificaci¨®n de una pr¨¢ctica tan injustificable como el secuestro
El punto final a la carrera de Mario Vargas Llosa me ha emocionado por lo que signific¨® para mi experiencia de latinoamericano y para mi vocaci¨®n de novelista. Sus obras forman parte de mis recuerdos tanto como mis propias vivencias
¡®?Qu¨¦ pas¨® con Seki Sano?¡¯ no es solamente un libro, sino la puesta en escena de la escritura de un libro; y no s¨®lo sigue el destino de sus personajes, sino que nos permite seguir el proceso mental del hombre que est¨¢ escribiendo
La traducci¨®n ampl¨ªa nuestro sentido de lo que son los seres humanos, de lo que dicen y piensan y sienten; tambi¨¦n, de lo que el lenguaje le hace al mundo
Cuando un crimen tan p¨²blico pasa tantos a?os bajo la luz de tantos reflectores sin que sepamos nada nuevo, adquiere la categor¨ªa de mito, y ya no importa que se sepa o no la verdad
Una de las cosas que concitaban el consenso en la regi¨®n era el repudio de las dictaduras militares, en particular las de Pinochet y Videla. Pero algo empieza a cambiar en esas certezas y se empieza a justificar lo injustificable
Al contrario de lo que dicta la historia, el poder pol¨ªtico est¨¢ mejor en manos de las mujeres. Pero no s¨®lo el pol¨ªtico: tambi¨¦n el econ¨®mico puede ser parte de esta conversaci¨®n
El candidato a presidente de Argentina es un caso cl¨¢sico de inseguridad patol¨®gica, de herida narcisista, de masculinidad acomplejada. Parecer¨ªa una telenovela barata hasta que uno se da cuenta del inmenso da?o que puede hacer, si es que no lo ha hecho ya
Carlos Fernando Gal¨¢n y Rodrigo Lara compitiendo por la Alcald¨ªa de Bogot¨¢, as¨ª como varios congresistas, nos recuerdan que la nuestra es una pol¨ªtica de supervivientes. O de hu¨¦rfanos, si se prefiere, y tendr¨ªamos que pararnos dos segundos a pensar qu¨¦ dice esto de nosotros
No hay peor escenario para la democracia colombiana que una llegada al poder de nuestra derecha radical. En cierto sentido, la victoria de Gal¨¢n puede ser un ant¨ªdoto contra esa perspectiva indeseable
Su legado m¨¢s duradero fue inyectar en una democracia m¨¢s o menos estable el virus de la corrupci¨®n, e incluso trastornar para siempre el sistema de valores de toda la sociedad colombiana
Ahora la extra?eza le ha tocado a Argentina, un pa¨ªs que nunca ha sido lo que es Milei; y yo espero, por el bien de Am¨¦rica Latina, que se reencuentre a s¨ª mismo
Hay muchas formas de comentar el ataque perpetrado por Ham¨¢s, pero una cosa es cierta: esto no lo hab¨ªamos visto nunca y no hay manera de imaginar sus consecuencias
Uprimny es un moderado en Colombia, donde esta caracter¨ªstica se toma est¨²pidamente como tibieza, aun por parte de gente que se cree ilustrada
Javier Mar¨ªas, el rey Xavier I, nunca llev¨® a cabo una ceremonia oficial de nombramiento para su reino l¨²dico, y yo no cometer¨ªa jam¨¢s la vulgaridad de nombrarme a m¨ª mismo. Lo esencial es que el reino contin¨²e
Si los cl¨¢sicos son narraciones viejas que nos hablan misteriosamente de nuestro mundo, ¡®Oppenheimer¡¯ es una de esas novedades que nos ponen cara a cara con el pasado
Para inmenso pasmo de quienes vemos a Chile desde fuera, todav¨ªa hay l¨ªderes pol¨ªticos con innegable influencia que defienden en p¨²blico el legado de Pinochet e incluso lo llaman estadista sin ruborizarse
Trump, lector excelso de su sociedad, descubri¨® que no hay regla que no se pueda violar. S¨®lo hay que hacerlo sin pedir disculpas
En la estela de escritores como Javier Cercas y Umberto Eco, Juan Gabriel V¨¢squez imparti¨® en 2022 cuatro conferencias en Oxford donde abord¨® el papel de la ficci¨®n como herramienta para comprender la realidad. ¡®Babelia¡¯ adelanta un extracto del libro que publica Alfaguara el 7 de septiembre
El documental de Pavel Giroud sobre el proceso del r¨¦gimen cubano contra el escritor es uno de los testimonios m¨¢s inquietantes y conmovedores de un episodio que rompi¨® en dos la historia de la Revoluci¨®n
A caballo entre el desbarajuste de la narcocultura y la violencia que siempre ha generado el narcotr¨¢fico, est¨¢n los sicarios. El asesinato en Ecuador del candidato Fernando Villavicencio vuelve a poner la mirada sobre este fen¨®meno, tan cercano para los colombianos
La diferencia entre los a?os que vienen y los que han pasado es el v¨¦rtigo de saber que ya no hay tiempo para todo. No es distinto, acaso, lo que nos pasa con la gente
En medio de una izquierda y de una derecha que no ven lo que hay, sino lo que les gustar¨ªa ver, una cosa es innegable: la magnitud del caos que rodea al Gobierno de Gustavo Petro. Despertaremos despu¨¦s de meses de discusiones y el desorden seguir¨¢ all¨ª
Estados Unidos llev¨® la libertad de expresi¨®n m¨¢s lejos que ninguna democracia moderna, pero hoy es una sociedad contradictoria, hundida en inveros¨ªmiles guerras culturales, donde florecen distintas maneras de prohibir
Me gusta pensar que lo que rechazaron cientos de miles de espa?oles, por lo menos en parte, fue el intento met¨®dico de envenenar su convivencia y arrastrarlos a visiones extremistas que para muchos resultan ajenas
¡®Las cartas del Boom¡¯ es una recopilaci¨®n sin desperdicio de la correspondencia que se cruzaron los cuatro novelistas m¨¢s notables de esa generaci¨®n, a quienes uni¨® la extra?a circunstancia de ser al mismo tiempo grandes escritores y grandes amigos
Kundera, en ¡®La broma¡¯, comenz¨® a explorar el tema que lo agobiar¨ªa toda la vida: la lucha del ser humano contra las fuerzas que le roban la libertad
A pesar de las calumnias, los escritores colombianos y la fallecida Victoria Amelina estaban en la pizzer¨ªa atacada por Rusia para contar las cosas como son: que una mentira rusa es una mentira y que un crimen de guerra es un crimen de guerra
Nuestra hipocres¨ªa prefiere seguir fingiendo que la corrupci¨®n y la violencia vienen del consumo de drogas, no de las mafias que trafican con ellas
Las vidas como la del filtrador de los papeles del Pent¨¢gono suelen marcar un momento hist¨®rico, y sus hechos tienen influencias ocultas, que van mucho m¨¢s all¨¢ de su radio de acci¨®n
El gran peligro para nuestras democracias presentes son estos caudillos civiles que hace poco navegaban sobre la ola de la decepci¨®n y ahora comienzan a detectar las posibilidades del miedo
El periodismo profesional, que no se hace para excitar emociones, se ha vuelto inc¨®modo para muchos y ha dejado de convocar la solidaridad de nuestras sociedades, por eso es tan f¨¢cil atacarlo. Ese camino solo conduce a la destrucci¨®n de la democracia
¡®El viejo malestar del Nuevo Mundo¡¯ es un ejemplar ex¨®tico o por lo menos inusual en la tradici¨®n colombiana. Mauricio Garc¨ªa Villegas ha encontrado una mezcla precisa y muy personal de filosof¨ªa, sociolog¨ªa, historia y autobiograf¨ªa
El asesinato de cuatro menores de edad a manos de la guerrilla que los hab¨ªa reclutado a la fuerza pone sobre la mesa el recorrido y la estrategia que est¨¢ siguiendo Gustavo Petro para lograr lo que m¨¢s desean los colombianos
En el mundo quebrado de la pol¨ªtica colombiana, con Twitter como territorio predilecto de las tonter¨ªas, la palabra se ha degradado y se puede usar sin rendir cuentas a nadie
No hay un autor m¨¢s determinante que el escritor estadounidense para la generaci¨®n latinoamericana de autores como Gabriel Garc¨ªa M¨¢rquez, Mario Vargas Llosa o Carlos Fuentes y adem¨¢s, a algunos, nos ha ense?ado a leerlos
Hay que agradecer que se publique la novela ¡®En agosto nos vemos¡¯, de Garc¨ªa M¨¢rquez, aunque est¨¦ incompleta, aunque ¨¦l no haya sabido terminarla. Nos corresponde a los lectores saber c¨®mo se lee un libro semejante
La laicidad sigue siendo uno de esos lugares de nuestra democracia colombiana donde hay m¨¢s distancia entre la teor¨ªa y la triste pr¨¢ctica
Por si no fuera suficiente con lo que hizo en su presidencia, los cien minutos de discurso de Donald Trump ante una convenci¨®n conservadora bastan para meterle a cualquiera el miedo en el cuerpo
El historiador alem¨¢n Philipp Blom lleg¨® ayer a Bogot¨¢ para participar en el festival de m¨²sica cl¨¢sica que organiza el Teatro Julio Mario Santo Domingo