Gustave Flaubert

Amb Sant Agust¨ª esclata un g¨¨nere literari que, per molts segles, ser¨¤ escrit sota el domini de la primera persona

Buena parte de nuestra felicidad proviene de saber hacer de nuestra soledad un espacio de libertad

Josep M. Argem¨ª se serveix del cl¨¤ssic periple a la recerca d¡¯alguna cosa per narrar, de biaix i a contrapel, ¡®Viatge al fons del jard¨ª¡¯, una ci¨¨ncia-ficci¨® dels sentits

Est¨¢ llegando el tiempo en que, en lugar de personas, entre las p¨¢ginas virtuales de la literatura deambulen algoritmos administrados y ordenados por m¨¢quinas

Abundan los estilos impostados y rebuscados, tanto como la pobreza verbal, sobre todo en los j¨®venes. El lenguaje tiene que ser eficaz, adecuado para lo que se cuenta

Las dos mujeres asesinadas en Madrid representan un mundo en el que los amores pueden habitar en Facebook, en la imaginaci¨®n¡­ y en Bizum

Edicions de 1984 celebra els quaranta anys de la seva fundaci¨® amb la traducci¨® de ¡®Guerra i pau¡¯ en dos volums, a c¨¤rrec de Judit D¨ªaz Barneda

Cre¨ªamos que la novela rom¨¢ntica hab¨ªa entrado en una imparable decadencia tras la muerte de Cor¨ªn Tellado y Barbara Cartland, pero una nueva generaci¨®n de autoras ha venido a renovar el estilo

Ignoro si este escritor superdotado es consciente del magisterio que sus libros, tanto novelas como ensayos, han ejercido sobre varias generaciones de novelistas

El punto final a la carrera de Mario Vargas Llosa me ha emocionado por lo que signific¨® para mi experiencia de latinoamericano y para mi vocaci¨®n de novelista. Sus obras forman parte de mis recuerdos tanto como mis propias vivencias

La novel¡¤la ¡®Bouvard i P¨¦cuchet¡¯ va estar al cap de l¡¯escriptor des dels setze anys, per¨° la va deixar inacabada

La diferencia entre los a?os que vienen y los que han pasado es el v¨¦rtigo de saber que ya no hay tiempo para todo. No es distinto, acaso, lo que nos pasa con la gente

Sent¨ªa una admiraci¨®n infinita por Cervantes, pensaba que los novelistas s¨®lo debemos rendir cuentas ante ¨¦l

Geoff Dyer habla de ¡°la ¨²ltima palabra¡± como de aquello que cambia tu manera de ver el mundo y, en su caso, con ¡®Stalker¡¯ de Andr¨¦i Tarkovski descubri¨® lo que da s¨ª un viaje con destino a una habitaci¨®n

La impertin¨¨ncia de l¡¯actriu hauria de ser motiu de reflexi¨® davant una societat ap¨¤tica i conformada

Imagino a un personaje de una novela de Patricia Highsmith asomado a una grieta de su libro tomando nota de mis posturas, de mis gestos

Har¨¢ falta un prodigio de imaginaci¨®n para hallar pol¨ªticas y narrativas que disuelvan el recelo hacia la UE incrustado en la sociedad francesa

Henry James va ser un novel¡¤lista que no creia que s¡¯hagu¨¦s d¡¯escriure cap llibre si no era per millorar la categoria espiritual, intel¡¤lectual i moral dels seus lectors, que no ¨¦s demanar poc

¡®Salamb¨®' me expuls¨® otra vez. Cada uno de nosotros no est¨¢ hecho para algunos libros, aunque haya le¨ªdo mucho y se sienta imbatible. Tampoco estamos hechos para ciertos deportes

El desasosiego de la belleza que persigui¨® el escritor franc¨¦s ya da sus frutos en las p¨¢ginas de ¡®Por los campos y por las playas¡¯, que recoge un viaje juvenil por Normand¨ªa y Breta?a

Gustave Flaubert cre¨® la novela moderna con ¡®Madame Bovary¡¯, un esquema en el que todo es posible y coherente, probablemente inconsciente de la revoluci¨®n que provocar¨ªa el narrador invisible y total

El autor de ¡®Madame Bovary¡¯ diagnostic¨® a su generaci¨®n como la que hab¨ªa llegado ¡°demasiado pronto y demasiado tarde¡±

Sabemos que es casi imposible que un escritor que no tenga algo de sacerdote y de asceta sea un escritor de verdad

Llu¨ªs Maria Tod¨® escriu sobre Stendhal, Flaubert i Proust amb criteri i amor a la vida i a la bona literatura

La correcci¨®n pol¨ªtica condiciona el cat¨¢logo de muchos sellos, que tratan de encauzar la ficci¨®n con criterios morales ajenos a la literatura

Ja ho va dir Flaubert: hi ha els que tenen, els que no i els que miren de tenir