Qu¨¦ ocurre en la sanidad madrile?a: caos en urgencias, dos huelgas de m¨¦dicos, dimisiones y una protesta masiva
El sector presenta graves carencias, m¨¢s all¨¢ de la reapertura de este servicio cerrado durante la pandemia, pese a que Ayuso insista en reducir el problema laboral y social a un conflicto pol¨ªtico azuzado por la izquierda
Tras la masiva protesta en defensa de la sanidad p¨²blica del domingo en la capital, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel D¨ªaz Ayuso, acus¨® el lunes a la izquierda de ¡°incendiar Madrid¡± con el fin de ganar las elecciones de mayo y volvi¨® a reducir un complejo problema laboral y social a un mero conflicto pol¨ªtico. Pero ?qu¨¦ pasa realmente en la sanidad madrile?a? ?De qu¨¦ se quejan los que salieron a la calle en esta reedici¨®n de las mareas blancas contra los recortes sanitarios de finales de 2012? ?Qu¨¦ ha ocurrido con el plan de reapertura de las urgencias extrahospitalarias, que sigue sumido en el caos casi un mes despu¨¦s y que ya va por la en¨¦sima rectificaci¨®n? ?Qu¨¦ reclaman los m¨¦dicos y por qu¨¦ hay dos huelgas en el sector?
Las urgencias extrahospitalarias
El origen del conflicto est¨¢ en el plan para la reapertura del servicio de urgencias extrahospitalarias, cerradas el 22 de marzo de 2020, una semana despu¨¦s de que se decretara el estado de alarma por la covid-19. La clausura, que no se decret¨® en ninguna otra comunidad, afect¨® a 37 Servicios de Urgencias de Atenci¨®n Primaria (SUAP) de la capital y de grandes municipios del cintur¨®n, que atend¨ªan por las noches y fines de semana. En cambio, los 41 Servicios de Atenci¨®n Rural (SAR) siguieron abiertos. En estos dos a?os y medio, la saturaci¨®n de las urgencias hospitalarias se ha agravado y se han sucedido las protestas de trabajadores y ciudadanos.
En junio, el Gobierno regional anunci¨® el cierre definitivo de los 37 SUAP. En su lugar, abrir¨ªan 17 puntos de atenci¨®n continuada (PAC), 10 con m¨¦dicos y 7 solo con enfermeras. El consejero de Sanidad, Enrique Ruiz Escudero, habl¨® de ¡°reorganizaci¨®n¡±, pero para los sindicatos era un paso m¨¢s en el desmantelamiento de la atenci¨®n primaria. Ayuso defendi¨® la medida en la Asamblea, pero 10 d¨ªas despu¨¦s y ante las protestas vecinales, rectific¨® y asegur¨® que abrir¨ªan todos los SUAP y con m¨¦dicos. El 20 de octubre, la Comunidad anunci¨® el plan definitivo: 80 puntos ¨D41 SAR, 37 SUAP y dos centros en El Molar y Alcal¨¢ de Henares¨D, que pasar¨ªan a llamarse centros sanitarios 24 horas.
El problema radicaba en que antes de la pandemia entre los SUAP y los SAR sumaban 360 m¨¦dicos, pero el nuevo plan los reduc¨ªa a 210: los que ya trabajaban en los SAR m¨¢s voluntarios para cubrir huecos. Imposible, concluyeron los sindicatos. Y as¨ª ha sido. Los 80 centros 24 horas deb¨ªan abrir el 27 de octubre y menos de 24 horas antes los profesionales no sab¨ªan a cu¨¢l deb¨ªan acudir ni a qu¨¦ hora, notificaci¨®n que muchos recibieron de madrugada. Se dio de baja m¨¢s de un 40% de todo el personal y el 60% de los m¨¦dicos. Unos 30 facultativos renunciaron al puesto. En muchos centros no hab¨ªa ¨Dni hay casi un mes despu¨¦s¨D m¨¦dico, mientras que otros, sin ning¨²n sanitario, no abrieron ni abren todav¨ªa. Por ejemplo, en la noche de Halloween 26 funcionaron sin m¨¦dico y 12 estuvieron cerrados. El domingo, d¨ªa de la manifestaci¨®n, 6 estuvieron cerrados y en 37 faltaba personal.
En el primer d¨ªa de huelga en contra del plan, el d¨ªa 7, convocada por el sindicato m¨¦dico Amyts, Ayuso anunci¨® una tercera rectificaci¨®n, que introdujo las pol¨¦micas videoconsultas para paliar la falta de m¨¦dicos. Sanidad manten¨ªa los 80 centros 24 horas, pero los divid¨ªa en 46 puntos presenciales con m¨¦dico y enfermero, y 34 con dos enfermeras y teleconferencia con un facultativo. El rechazo de los profesionales vuelve a ser total, mientras el desconcierto en los centros de salud donde se implantar¨¢ la videollamada es absoluto. Y el d¨ªa 11, lleg¨® la cuarta rectificaci¨®n del plan inicial: apertura de 49 centros 24 horas con equipo completo y de otros 29 sin facultativo presencial, de los cuales unos 11 o 12 ser¨¢n de cuidados (sin m¨¦dico y sin videoconsulta). La respuesta del sindicato m¨¦dico Amyts a este informe fue la petici¨®n de dimisi¨®n de Escudero, y el rechazo del modelo.
?Es el ¨²nico problema?
El conflicto ha estallado por las urgencias, pero sus ra¨ªces son m¨²ltiples y profundas. Aunque Madrid es la comunidad m¨¢s rica de Espa?a, es la que menor porcentaje de inversi¨®n destina a sanidad, en contra de lo que afirma el Gobierno regional. Esta partida supuso en 2021 el 31,58% del Presupuesto madrile?o, cifra que lleva cayendo desde 2005. Est¨¢ a la cola, solo superada por Baleares, en m¨¦dicos de familia por 1.000 habitantes y, mientras el conjunto del sistema ha aumentado su oferta de plazas de primaria en un 36%, en Madrid ha disminuido un 2% desde 2018, seg¨²n los datos ofrecidos por la ministra de Sanidad, Carolina Darias.
Adem¨¢s, los MIR no quieren trabajar en la Comunidad: en los ¨²ltimos dos a?os terminaron la residencia 443 especialistas en Medicina Familiar y Comunitaria y, de ellos, solo 37 se quedaron en Madrid; y en el caso de los pediatras, solo 6 de 155. Seg¨²n los convocantes de la marcha, esta carencia de m¨¦dicos hace que en Madrid haya 600.000 personas sin m¨¦dico asignado y 212.000 ni?os sin pediatra.
Ante unas citas para ver al especialista para el dos mil nunca agravadas por la covid ¨Dla espera media en d¨ªas (53) coloca a Madrid en la mitad de la tabla y el porcentaje de quienes aguardan m¨¢s de 60 d¨ªas sit¨²a a la regi¨®n en antepen¨²ltimo lugar¨D, el 38% de los madrile?os tiene una p¨®liza privada, el mayor porcentaje de un pa¨ªs en el que la media est¨¢ en el 25%. La situaci¨®n tambi¨¦n est¨¢ saturando los hospitales privados, con escenas de masificaci¨®n que recuerdan a los p¨²blicos.
Dos huelgas convocadas por Amyts (y dos m¨¢s de sindicatos minoritarios)
El rechazo al plan de reapertura de las urgencias extrahospitalarias con 150 m¨¦dicos menos fue frontal, y los sindicatos llamaron a la huelga indefinida a partir del 25 de octubre. La v¨ªspera, la Comunidad consigui¨® 48 horas de tregua y los sindicatos accedieron a consultar las condiciones pactadas con los afectados. Al final, solo el sindicato de m¨¦dicos (Amyts) decidi¨® no suscribir el plan, que s¨ª firmaron los otros cuatro sindicatos de la mesa sectorial, Satse, CC OO, CSIT UP y UGT, que consideraban que hab¨ªan conseguido mejoras en las condiciones laborales, aunque no aumentar los efectivos. La huelga se desactiv¨®, pero Amyts lanz¨® otra convocatoria de paros indefinidos, que comenz¨® el lunes 7 de noviembre con unos servicios m¨ªnimos del 100%. Tres d¨ªas antes de iniciarse la huelga, los sindicatos firmantes rompieron unilateralmente el acuerdo en vista del caos con el que hab¨ªa comenzado el plan.
Adem¨¢s, del 4 al 6 de noviembre los sindicatos SummAT y Mats llevaron a cabo una huelga de tres d¨ªas, a la que estaban llamados el Summa 112, los SAR y los SUAP. Tambi¨¦n ha habido otra huelga del 11 al 13 de noviembre, convocada por cinco sindicatos minoritarios ¨DSummAT, Mats, CSIF, Afem y AME¨D. Y, al d¨ªa siguiente del inicio de los paros en urgencias, Amyts llam¨® a los 5.000 facultativos de Atenci¨®n Primaria y Pediatr¨ªa a la huelga, tambi¨¦n indefinida, a partir del d¨ªa 21. La situaci¨®n de este sector, sostiene el sindicato, es insostenible debido a la fuerte carga asistencial que soporta: mientras los organismos internacionales recomiendan que cada facultativo atienda a unas 20 o 25 personas al d¨ªa, en Madrid tienen 50 o 60, lo que ha provocado que el 92% de los m¨¦dicos de cabecera hayan sufrido o sufran agotamiento emocional. La carencia de pediatras es alarmante: Madrid necesitar¨ªa entre 900 y 1.200, pero solo hay 720.
Dimisiones en la Consejer¨ªa
Ocho d¨ªas antes del inicio de la huelga, la gerente de Atenci¨®n Primaria, Sonia Mart¨ªnez Machuca, dej¨® el cargo ¡°por motivos m¨¦dicos y personales¡±, seg¨²n un portavoz del Gobierno regional. Ayuso la reemplaz¨® con una doctora vinculada a la sanidad privada, Almudena Quintana. De julio a noviembre, ha habido seis salidas, ocho cambios de funciones y siete nombramientos en la Consejer¨ªa de Sanidad. Y contin¨²a el goteo: la noche del d¨ªa 3, todos los miembros de la direcci¨®n asistencial sudeste ¨Duna de las siete que hay¨D registraron su dimisi¨®n en bloque debido al desastre en las urgencias ambulatorias. La gerente adjunta de Asistencia Sanitaria de Atenci¨®n Primaria, Nuria Fern¨¢ndez de Cano, tambi¨¦n dimiti¨® ese d¨ªa ante la ¡°imposibilidad de seguir ejecutando las instrucciones que se reciben por parte de la gerencia¡±. Y el d¨ªa 7, el Gobierno regional destituy¨® a Pedro Jos¨¦ Su¨¢rez S¨¢nchez, gerente adjunto de Gesti¨®n y Servicios Generales en la Gerencia Asistencial de Atenci¨®n Primaria.
Ayuso culpa a la oposici¨®n
El consejero de Sanidad y diferentes representantes de la Comunidad, incluida la presidenta, evitan asumir responsabilidades en lo ocurrido, repiten la idea de que los m¨¦dicos est¨¢n organiz¨¢ndose para boicotear el plan, reiteran que investigar¨¢n una a una las bajas solicitadas y culpan a la oposici¨®n y a los sindicatos. ¡°Es evidente que hay una inmensa mayor¨ªa de los profesionales sanitarios que quieren seguir trabajando con total normalidad y que hay una parte pol¨ªtica que intenta boicotearlo todo. [Esta parte pol¨ªtica] no quiere que la sanidad p¨²blica avance¡±, dijo Ayuso el d¨ªa 2. Al d¨ªa siguiente, habl¨® de ¡°terror sindical¡± y ¡°terror pol¨ªtico¡±. ¡°La l¨ªder de M¨¢s Madrid [M¨®nica Garc¨ªa], con su sindicato Amyts, lo que quiere hacer es reventar el sistema p¨²blico y la sanidad madrile?a¡±, ahond¨® el d¨ªa 9. En cada comparecencia, Ayuso minimiza el problema y lleg¨® a preguntarse en la Asamblea si la falta de ¡°34 m¨¦dicos dan para una huelga, un boicot y manifestaciones¡±. Cero autocr¨ªtica.
El papel de la oposici¨®n
La oposici¨®n de izquierdas ha hecho bandera de esta causa, pero todos los grupos pol¨ªticos, incluido Vox, reprochan a la presidenta que ponga a los profesionales sanitarios en la diana y critican el plan de urgencias por precipitado y poco realista. M¨¢s Madrid es el grupo que m¨¢s iniciativas ha puesto en marcha para frenar el plan: el d¨ªa 3 lo denunci¨® ante la Direcci¨®n General de Inspecci¨®n, Ordenaci¨®n y Estrategia Hospitalaria y el d¨ªa 7, llev¨® el caso al Defensor del Pueblo.
Manifestaci¨®n
El conflicto desemboc¨® el domingo 13 en la primera gran protesta contra Ayuso desde que lleg¨® al poder. Cientos de miles de personas ¨Dla Delegaci¨®n del Gobierno los cifr¨® en 200.000, cifra que los convocantes elevaron a 670.000¨D salieron a la calle en defensa de la sanidad p¨²blica, convocadas no por ning¨²n partido o sindicato, sino por colectivos vecinales. La marcha, seg¨²n los sindicatos, estuvo a la altura de las mayores movilizaciones durante la marea blanca que inund¨® Madrid hace una d¨¦cada contra las privatizaciones y los recortes del Gobierno de Ignacio Gonz¨¢lez. Al d¨ªa siguiente, la presidenta mantuvo su discurso, sin un atisbo de autocr¨ªtica: acus¨® a la izquierda de ¡°incendiar¡± Madrid y de instrumentalizar la sanidad para llegar al poder ¡°con juego sucio¡±.
Negociaci¨®n
Ocho d¨ªas despu¨¦s del inicio de la huelga y dos despu¨¦s de la protesta en las calles, Sanidad y Amyts se han reunido para tratar de acercar posturas y poner fin a la huelga indefinida. La cita ha acabado sin acuerdo, aunque se han acercado las posturas. El Gobierno regional ya prepara el en¨¦simo plan de urgencias extrahospitalarias, en el que acepta que de los 80 puntos que presentaron no todos actuar¨¢n como un centro de urgencias; y que el sindicato elaborar¨¢ ahora una contraoferta para presentar ¡°lo antes posible¡± porque ¡°los profesionales est¨¢n sufriendo¡±.
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